La historia se desarrolla en un mundo donde la magia es una fuerza poderosa que es temida y respetada en igual medida. Un grupo de magos contratados por los gobernantes trabajan juntos para mantener la paz y el orden en el reino. Son conocidos como los Agentes de la Magia y están capacitados para resolver problemas y perseguir a aquellos que perturban la paz, sean magos o no.

Cuando una serie de rebeliones y disturbios comienzan a surgir en todo el reino, los Agentes de la Magia son llamados para investigar y tomar medidas. Pronto descubren que los magos rebeldes están liderando estas revueltas, aprovechando el descontento de los ciudadanos comunes para apoyar su causa.

En un mundo donde la magia es una fuerza omnipresente, un grupo de poderosos magos ha tomado el control del gobierno. Han establecido un sistema de jerarquía en el que los magos más poderosos tienen el mayor control y poder sobre la sociedad, mientras que los menos dotados son marginados y oprimidos.

La población, tanto mágica como mundana, vive bajo el yugo del reinado de los magos. Éstos utilizan su poder para mantener la magia bajo control, pero también para someter a la sociedad. Las libertades y derechos de los ciudadanos están limitados, y cualquier intento de resistencia es aplastado con mano dura.

El clima frío y los paisajes nevados de Elurtua han moldeado la estética de Beltzashuria y la vida cotidiana de sus habitantes. Los colores predominantes en la vestimenta y la arquitectura son tonos fríos y metálicos, como el azul, el plateado y el blanco, que reflejan la belleza y la majestuosidad del entorno gélido.

La ciudad de Beltzashuria, una metrópolis majestuosa situada en lo alto de las montañas nevadas, ascendiendo entre sus picos con altas torres y extensas casas señoriales en sus valles. Beltzashuria es conocida por su arquitectura gótica y sus calles empedradas que se entrelazan entre bastiones de roca y metal. A pesar del clima duro y las dificultades que conlleva vivir en una región tan fría, los habitantes de Elurtua son resilientes y fuertes. Han aprendido a sobrevivir y prosperar en este entorno hostil.

La cultura de Beltzashuria es sofisticada y altamente educada. Los habitantes de esta región valoran el conocimiento y la erudición, y se enorgullecen de su intelecto. La Archimaga Shar Shuvuu proviene de una familia de renombrados eruditos y académicos que han sido respetados durante generaciones en esta ciudad. Los sabios y los maestros son venerados en la sociedad de Beltzashuria, y se les consulta regularmente para resolver disputas y buscar sabiduría. Las bibliotecas y las universidades son centros de aprendizaje destacados, y los conocimientos antiguos se preservan cuidadosamente en libros y pergaminos que datan de épocas ancestrales.

La sociedad de Beltzashuria está organizada en torno a un sistema de gobierno democrático, donde los ciudadanos tienen la oportunidad de expresar sus opiniones y votar en decisiones importantes que afectan a la comunidad. Los líderes son elegidos por su sabiduría y habilidades de liderazgo, y el bienestar del pueblo es siempre una prioridad en la toma de decisiones.

En Beltzashuria, la magia mental es considerada un arte esencial. Los habitantes de esta región han desarrollado una gran habilidad para el control y la manipulación de la mente. Las artes y la música tienen un lugar prominente en la vida de los habitantes de Elurtua. La ciudad de Beltzashuria alberga teatros y salas de conciertos impresionantes, donde se presentan obras y conciertos que muestran la destreza artística de sus ciudadanos. Los instrumentos musicales utilizados en esta región suelen estar hechos con materiales locales, como la madera de los árboles de los bosques cercanos o el hueso de los animales salvajes, lo que les confiere un sonido único y distintivo.

Las festividades en Elurtua son grandiosas y llenas de alegría, a pesar del frío que azota la región. Los festivales de invierno son especialmente destacados, con celebraciones que incluyen danzas, cantos y desfiles de luces brillantes que iluminan la noche oscura.

Una exuberante tierra selvática ubicada en el corazón de un vasto y misterioso bosque tropical.

La cultura de Oihana está profundamente arraigada en el respeto y la conexión con la naturaleza. Los habitantes de esta región tienen un fuerte vínculo con el reino animal y vegetal, y ven a todas las criaturas vivientes como seres sagrados dignos de protección y cuidado. La comunicación con los espíritus de la naturaleza es una parte esencial de su vida cotidiana, y se considera una bendición poder convocar y trabajar en armonía con ellos.

El Archimago Azriel creció en un poblado de Oihana, donde aprendió los rituales y secretos de invocación de criaturas mágicas desde temprana edad.

Las edificaciones están hechas de materiales naturales, como madera y piedra, y se integran perfectamente en el entorno selvático. Los colores vibrantes de las vestimentas y los diseños están inspirados en las criaturas y plantas del bosque tropical. La vida cotidiana en Oihana está marcada por la armonía con la flora y fauna circundante. Los aldeanos practican técnicas agrícolas sostenibles y respetuosas, cultivando sus alimentos sin dañar el entorno natural.

En el corazón de Oihana se encuentra un majestuoso árbol ancestral conocido como Ama, que se eleva hacia el cielo con sus imponentes ramas que se entrelazan en una sinfonía de hojas verdes. Los habitantes consideran este árbol sagrado y creen que es la fuente de la vida y la sabiduría que fluye a través de su tierra selvática. Se reúnen periódicamente a su alrededor para realizar rituales de agradecimiento y celebración, conectándose con la esencia de la naturaleza y buscando la guía de los espíritus que residen en su interior.

Los habitantes de Verdonia son conocidos por su sabiduría en el uso de las hierbas medicinales y el conocimiento de las propiedades curativas de las plantas del bosque. Los sanadores y chamanes juegan un papel vital en la sociedad.

Los festivales en Oihana son una mezcla de celebraciones espirituales y eventos alegres que honran la riqueza de su entorno selvático. Durante la Argien Ilargia, las luciérnagas y las plantas luminiscentes del bosque se unen para crear un espectáculo de luz y color que deja maravillados a todos los presentes. En la Fiesta de los Espíritus, los aldeanos agradecen a los espíritus de la naturaleza por su protección y guía a lo largo del año.

La música y la danza son una parte integral de la cultura de Oihana. Los tambores hechos con troncos huecos y cuerdas de lianas, junto con flautas talladas en madera, llenan el aire con melodías que celebran la vida y la armonía con la naturaleza. Las danzas evocan a los animales del bosque y a las criaturas míticas, contando historias que han sido transmitidas de generación en generación.

La convivencia con las criaturas del bosque es esencial para los habitantes de Oihana. Hay leyendas de criaturas mágicas que deambulan por la espesura, como los centauros guardianes y los dragones luminosos que surcan el cielo en noches estrelladas. Los aldeanos respetan y protegen a estas criaturas, sabiendo que la conexión con ellas es una parte esencial de su identidad y el equilibrio con el mundo natural.

La región de Aerion, un fascinante archipiélago flotante en un continente suspendido en el cielo. La cultura de Aerion se caracteriza por su estrecha relación con la luz y la energía elemental que los rodea.

Los habitantes de Aerion son conocidos como los Luminarios, y su estilo de vida se basa en la armonía con los elementos del cielo. Viven en ciudades construidas en plataformas y estructuras flotantes, suspendidas en el aire gracias a una combinación de poderes mágicos y tecnología avanzada.

La magia de la luz es el núcleo de la cultura de Aerion, y los Luminarios dominan el arte de la iluminación y la curación a través de energías luminosas. Liara es considerada una de las Iluminadas más poderosas y veneradas de Aerion. Su capacidad para canalizar y controlar la luz le permite sanar heridas y enfermedades, así como generar potentes destellos luminosos para deslumbrar y calcinar a sus oponentes.

Los Luminarios se visten con túnicas de colores claros y brillantes, adornadas con joyas y tejidos luminiscentes que capturan la esencia del cielo y la luz. Sus ciudades flotantes están iluminadas por cristales luminosos que reflejan los colores del arcoíris, creando un espectáculo mágico y fascinante.

La vida en Aerion se centra en la conexión con el viento y el cielo. Los Luminarios se desplazan entre las islas flotantes utilizando alas y planeadores mágicos, y celebran festivales aéreos en honor a los elementos del viento y la luz.

La educación en Aerion es sagrada y se centra en el aprendizaje de las artes mágicas y la comprensión de la naturaleza de los elementos celestiales. Los jóvenes Luminarios son instruidos en el arte de la luz y la sanación, así como en el manejo responsable de la magia para mantener el equilibrio en su mundo volador.

Además de la magia de la luz, los Luminarios también tienen una conexión especial con los seres elementales del cielo. Los grifos majestuosos y los pájaros luminosos son considerados aliados y amigos cercanos. Los grifos, en particular, son compañeros de confianza para los Luminarios, ya que les ayudan en sus viajes entre las islas y son guardianes leales de sus ciudades flotantes.

La sociedad de Aerion se rige por un sistema de igualdad y respeto mutuo. Los Luminarios valoran la sabiduría y la empatía, y la toma de decisiones se basa en el consenso y la búsqueda del bienestar de todos. El Consejo Mágico, donde Liara desempeña un papel esencial, es una asamblea de líderes sabios y poderosos que se reúnen para discutir asuntos importantes y resolver disputas, siempre en busca del equilibrio y la armonía en el archipiélago flotante.

La cultura de Pyrovia se caracteriza por su fuerza y tenacidad en armonía con los elementos desérticos. Sus habitantes conocidos como los Ignis, son un pueblo resistente que ha aprendido a sobrevivir y prosperar en un entorno extremo. Su vida cotidiana está estrechamente entrelazada con la manipulación y el control de los elementos del fuego y la tierra.

La sociedad en Pyrovia valora la fuerza y la disciplina. Los Ignis son expertos en técnicas de supervivencia y combate, y se entrenan desde temprana edad para dominar tanto las habilidades mágicas como las habilidades físicas necesarias para enfrentar los desafíos del desierto.

Los Ignis de Pyrovia visten túnicas y atuendos resistentes al fuego y al calor, en tonos cálidos como el naranja y el rojo. Las viviendas en Pyrovia están construidas con materiales resistentes al fuego y se caracterizan por su diseño funcional y adaptabilidad al clima desértico.

En medio del desierto, existen oasis mágicos y enigmáticos que son fuentes de vida y misterio en Pyrovia. Estos oasis son puntos de encuentro para los Ignis, donde se reúnen para descansar, reponerse y compartir historias y conocimientos transmitidos de generación en generación. Los oasis también son lugares de reflexión y meditación, donde los Ignis se conectan con los elementos y buscan la orientación de sus dioses.

El comercio en Pyrovia se basa en la extracción y la producción de recursos naturales, como piedras preciosas, minerales y metales. Los Ignis son hábiles comerciantes y artesanos, y son conocidos por sus habilidades para trabajar con metales fundidos y gemas preciosas. Su comercio se extiende más allá de las fronteras del desierto, estableciendo relaciones comerciales con otras regiones y etnias, lo que les permite obtener alimentos y otros recursos que escasean en su árido territorio.

A pesar de su naturaleza fuerte y resistente, los Ignis también valoran la sabiduría y el conocimiento. La educación es altamente apreciada en la sociedad de Pyrovia, y los sabios y eruditos son respetados y considerados como guías para el desarrollo intelectual y espiritual. Las bibliotecas y centros de aprendizaje son lugares sagrados, donde los Ignis pueden profundizar en la historia de su pueblo y adquirir nuevos conocimientos que puedan fortalecer a su sociedad.

En el archipiélago de Moya, las islas son vivientes, unas criaturas gigantescas llamadas leviatanes, que se asemejan a tortugas con caparazones convertidos en ecosistemas completos. Los leviatanes son considerados sagrados y se les trata con el mayor respeto. Las islas errantes son un espectáculo asombroso y mágico. Cada leviatán es una maravilla de la naturaleza, un ecosistema en sí mismo con exuberantes bosques, cascadas cristalinas y playas de arena dorada. Los leviatanes se desplazan lentamente por el océano, llevando consigo una variedad de criaturas marinas y aves que han hecho de sus caparazones su hogar. Cada isla tiene su propia flora y fauna únicas, y sus caparazones proporcionan refugio y recursos para las comunidades de Moya.

Así pues, en esta región la vida está entrelazada con el mar y los leviatanes. Los habitantes de las islas dependen de la pesca y el comercio marítimo para sobrevivir y prosperar. Sus ropas están tejidas con materiales naturales que provienen de las criaturas marinas, y su arquitectura refleja una estrecha relación con la naturaleza, construyendo casas y estructuras que se mimetizan con el paisaje acuático.

Alrededor de cada leviatán, se desarrollan comunidades flotantes donde los habitantes construyen sus casas y edificaciones en plataformas sostenidas por magia y tecnología avanzada. Los océanos son profundos y rebosantes de vida.

Los pescadores se embarcan para capturar peces y mariscos que son una fuente esencial de alimento para las comunidades. Los navegantes conocen los ciclos y movimientos de los leviatanes, aprovechando sus trayectorias para planificar rutas seguras y aprovechar las corrientes marinas.

La magia chamánica es una parte integral de la vida en Moya. Los chamanes son considerados guías espirituales y líderes comunitarios, responsables de mantener la armonía con los leviatanes y los espíritus marinos. Utilizan la magia de la naturaleza para sanar a los heridos, calmar tormentas y mantener el equilibrio ecológico en las islas flotantes.

Los festivales y ceremonias en honor a los leviatanes son ocasiones sagradas y alegres, donde las comunidades se unen para celebrar la vida y la belleza del océano. Danzas rituales y música tradicional resuenan en las plataformas flotantes mientras se agradece a los leviatanes por su generosidad y protección.

Plebeyos

En la parte más baja y nombrosa de la pirámide social nos encontramos al pueblo llano, todos aquellos ciudadanos que carecen de la bendición de la magia. El vulgo es de los estamentos con menos derechos y libertades (si no contamos a los forasteros y delincuentes), y desempeñan todo tipo de oficios tanto en grandes urbes como en dispersas villas. 

Su vida no suele ser nada cómoda, así que suelen estar en el punto de mira de los Revolucionarios quienes los seducen con promesas de prosperidad y libertad para sus familias a cambio de su lucha contra el gobierno.

Servidumbre

Los magos y magas suelen dedicar su tiempo a asuntos importantes, bien se trate de sus estudios o el gobierno de un territorio. Tanto es así que requieren los servicios y atenciones de fieles siervos no dotados encargados de satisfacer sus necesidades.

Conocidos como Gorgs estos no-magos se benefician de convivir o servir a la nobleza, viviendo usualmente mejor que la mayoría de populacho. El aura amenazante de su amo/a también se les contagia, llegando a despertar tanto las envidias como el temor de los que antaño fueron sus congéneres. No en balde, dada su cercanía al mago deben demostrar su valía y sobre todo lealtad pues cuentan con una situación privilegiada para traicionarlo.

Estos siervos desempeñan todo tipo de tareas y cuanto más poder ostenta el noble, más séquito requiere. Desde salvalibros que custodian sus secretos a criados o guardaespaldas entrenados para protegerlos en sus viajes. Los más dignos de confianza llegan a ser recompensados con artefactos mágicos y los menos... a veces terminan formando parte de los experimentos del mago. 

Agentes de la Magia

Ascendiendo a la clase dominante en primer lugar y con más contacto con la vida cotidiana del pueblo nos encontramos al brazo armado del Consejo. Estos magos y magas dedican su vida a lidiar con los problemas de naturaleza arcana o que afectan directamente al buen gobierno de la nobleza (no se ensucian las manos con asuntos menores como un asesinato entre plebeyos).

Su palabra es la voz del Consejo y sus acciones su voluntad. Se encuentran revestidos de la autoridad suficiente para que desobedecer sus órdenes sea considerado un insulto y atacarlos, un delito punible con la muerte. Aún así, con el clima de agitación creado por los Revolucionarios, su seguridad no puede darse por supuesta y en la actualidad suelen viajar juntos varios camaradas o contar con una guardia de gorgs a su servicio.

La otra Nobleza

Como ya se ha dicho, muchas veces las personas dotadas de magia dedican su vida al estudio arcano o al gobierno de sus tierras, sin la necesidad de lidiar en persona con los problemas. Otra forma de verlo es entender que su posición en el mundo depende de una competencia oculta con el resto de nobles que al igual que ellos, envidian y temen el poder. Así dedican gran parte de sus esfuerzos a acumular influencia, magia o cualquier forma de dominio que les asegure la oligarquía.

En la cúspide de las intrigas y alianzas se encuentra el Consejo. Un grupo selecto de cinco magos y magas que dirigen las regiones alineadas (voluntaria o forzosamente). Se rumorea que no han sido abatidos por dominar secretos prohibidos de la Magia, pero quizás solo forme parte de una campaña para enaltecer su leyenda e inspirar temor a quien esté tentado de usurpar su puesto. Después de todo, si son tan poderosos ¿cómo es que un grupo de caóticos Rebeldes les causan tantos quebraderos de cabeza?