Partida Rol por web

- ¡Amigos! Sed bienvenidos. Por favor, acercáos a la mesa. Ardo en deseos de saber que tal ha ido vuestra búsqueda. - Os comenta mientras os invita a acercaros a su mesa de trabajo. Con una leve sonrisa y ganas de ver si habéis conseguido su reliquia robada.

Mientras iban de camino a la casa del elfo, SHAUN MICHAELS ha hecho una mini-parada en uno de los comercios. Algunos de los aldeanos, sin duda alguna, estarán flipando en colores. Si. Con todas las letras, flipando en colores. Al fin y al cabo, los aventureros no son algo que te encuentres todos los dias

¿Pero unos aventureros CARGANDO UN HUARGO MUERTO?
Fijo que de lejos, algun miope se ha asustado creyendo que venia un huargo bien vivo.

Y encima, cuando un aventurero (Un clérigo de una deidad poco conocida, de hecho) Se acerca a un mercader y le dice
"Deme dos platanitos, por favor."

El pobre comerciante no olvidará jamás a ese aventurero, manchado de sangre, cargando un huargo, acompañado de dos bellezas, y que le pide dos platanos. Bueno, al final le comprará un racimo entero, pero vaya...

A poco de llegar, SHAUN MICHAELS no ha olvidado, y en cuanto se cruza con Sebastián, el simpático monito que (De algun modo) sabe expresarse con carteles, se acerca a él y le da unos frutos del banano

"Que no nos hemos olvidado de ti, hombre. Y del lio que nos ahorraste la otra vez" le dice premiandole con los jugosos y dulces frutos del bananero.

"Señor Owen. Es posible... sólo posible, que lo hayamos conseguido" SHAUN MICHAELS describe una reliquia, pero que no es como la que tiene. Sólo si dice que no es, le entregaré la que hemos arrebatado a Pelajegris.

"Y... ¿Podría recomendarnos un peletero? Ya ve que hemos traido al ladrón. O lo que queda de él" digo haciendo un gesto con la cabeza, para que mire por la ventana y vea a Sebastián, haciendo monadas, comiendo bananas, y vigilando a Pelajegris.

- Me temo que no es como la describes, noble Shaun. Mi talismán era algo diferente... Como el que os mostré en la sala contigüa el día que llegásteis. - El anciano queda cabizbajo, entendiendo que no habéis encontrado su talismán.

- Es una pena que no haya aparecido... ¿Un peletero? Si, si. De hecho, tengo un artesano en casa que se dedica a elaborar y remendar las alfombras y tapices del palacete. Sebastián os llevará con él, si queréis, pero... Me temo que no podré pagaros ya que el talismán que describes no coincide con el que me robaron...

"Perfecto, en ese caso ESTE es el Talismán" dice sacando el que realmente es "Se trata de una costumbre de los Valashinai, disculpeme. Tras algunos años entre ellos, terminaron pegandome su manera de hablar"

Dicho esto, le presenta el talismán que él dijo. La joya exacta que sacamos de la sala de Pelajegris.

El barón se levanta de su silla entre lágrimas. No puede creer que hayáis conseguido recuperar su reliquia familiar robada días atrás. La recoge de vuestras manos y guarda silencio unos segundos, para luego poner sobre su mesa una bolsa pesada que saca de un cajón.

- Muchísimas gracias por traerla de vuelta. Aquí tenéis lo acordado. 1.000 monedas de oro para los valientes que trajeran de vuelta el talismán. Ahora, Sebastián os acompañará a la salida, nobles guerreros, o a ver al artesano, si así lo queréis. Gracias otra vez...

Son sus últimas palabras, mientras acaricia el talismán con una de sus manos.

Tras recibir la recompensa y despedirse del hombre con aspecto de malvado, así como de Sebastián el simpático monito, SHAUN MICHAELS va feliz, casi cantando de suma felicidad

"Bueno, entre lo que hemos recogido aqui y allá, se dirige al resto del grupo "Bueno gentes, parece que somos un buen equipo, quizá podamos seguir viviendo algunas mas aventuras. Al fin y al cabo ¿A quien no le gusta la idea de..."

Luego ve como algunos del grupo se piran, otros se tiran a un pozo, alguno mordisquea donde pone "Hierba tóxica, no comer"... Parece que no todos podrán continuar el viaje y la aventura.

Como sea, SHAUN MICHAELS no piensa terminar aquí. Aun hay mucho que avanzar. Y el taimado Ainrep, el malvado asesino y brujo, aun debe de ser llevado a la justicia. SHAUN MICHAELS mira el símbolo sagrado de Feronia, y tambien una extraña placa de bronce incrustada en una lámina de cuero. Como si fuera una insignia de alguna orden.

"Por la ley y por el orden" murmura. Luego se dirige a un sitio en particular: Al herrero de Kaban. Hay algunas cosas que le gustaría poder comprar.

La primera, un "Breastplate" una armadura para protegerse mejor de mordiscos (Ahi van las 200 Pó de la recompensa)
La segunda, que un peletero trabaje en Pelajegris, para convertirlo en una capa de lobo de lo más chulesco posible. Si tambien puede sacar unas botas, un gorro o unos brazales, pues mejor.
La tercera, engrasar las manos y alcoholizar las gargantas de bardos locales, por si el nombre o el símbolo de Ainrep el Cruel les suena.

Tras el trabajo bien realizado, Shaun deja la piel del huargo con el artesano peletero que le ofreció el conde, para que pueda confeccionarle una capa o lo que pueda con dicha piel. Después, todos deciden irse a tomar algo a la taberna del pueblo.

Allí, tras la primera copa, el bárbaro decidió marcharse a buscar cosas mejores que machacar, el paladín dijo que dejaba los designios de su fe, al haberse dado cuenta de lo miedoso que era. Por su parte, la bruja desapareció con un pergamino de transporte, sin despedirse. Por último, Diana se fué a tratar de robar algunos bolsillos, aunque ella si se despidió con un beso en la mejilla del clérigo.

Tras un par de horas de bebida, Shaun se sentía algo mareado. Ya no había tanta gente en la taberna. Al darse la vuelta, porque alguien llamó su atención, sintió un golpetazo en la noca. Lo último que vió fueron estrellitas y luego, oscuridad.

CONTINUARÁ...