Partida Rol por web

Los devoradores en la niebla

Escena 2: El Electra

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25/07/2016, 19:36
Irina Krilov

El mejunje de sangre y savia preparado por mí para que nos sirva de aviso sigue igual, sin cambios. Lo interpreto como una buena señal.

- Creo que la clave no es exáctamente la noche, si no esa niebla... pero cierto es que tampoco me apetece ir a oscuras a investigar nada. Estoy de acuerdo en esperar a que haya luz de día suficiente. Por cierto, si observan algún cambio en eso - señalo la pasta de savia y sangre - díganmelo de inmediato.

Asiento a la propuesta de Leroy de seguir él con la guardia, e intento volver a dormir.

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27/07/2016, 12:07
Director

El resto de la noche culmina sin incidentes. Todos habéis hecho guardia durante unas horas, pero habéis conseguido descansar. La mañana amanece con una temperatura agradable y alguna nube que vaga solitaria el cielo. Las aves pían aquí y allá.

- He pensado que podríamos seguir el mismo sentido que cuando vinimos de la playa hasta el avión, de esa manera no tendremos que volver atrás y cruzar la zanja de nuevo - observa Leroy.

- Vaaale, me parece buena idea - contesta Felix. - Tú puedes ir delante abriendo paso, y yo en la retaguardia con el revólver.

Leroy dirige su mirada a Ezekiel.

- Profesor, si es tan amable, necesitaré el machete para ir abriendo paso - dice Leroy sosteniendo la mirada, pero de manera educada.

Felix le hace un gesto a Irina para que camine delante de él, al mismo tiempo que él se encargará de su protección.

Notas de juego

Como todos habéis descansado, podéis restaurar los puntos de 3 Habilidades Generales que no sean Salud, Cordura o Estabilidad. Decid cuáles, y yo os lo cambio.

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27/07/2016, 15:28
Profesor Ezekiel Brush

-Claro, por supuesto. Al fin y al cabo, ésto es una selva.. o lo parece -añadí, entregándole el machete a Leroy.

Me armé como pude con todo lo que fui capaz de llevar encima. Teníamos lanzas, el machete, el revólver.. No estábamos mal provistos. En ese sentido, estaba contento.

También bien aprovisionados y descansados, cosa importante. El ánimo se me volvió positivo.

-Ojalá demos con esos desgraciados, y no nos vean. Ardo en deseos de saber qué se traen entre manos.

Notas de juego

Que yo vea, psicoanálisis es lo único que no tengo a tope, así que esa sólo (al no contar las que excluíste)

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27/07/2016, 15:47
Director

Notas de juego

Ok, Profesor. Ya está. Por cierto, os he hecho recuperar a todos un par de puntos de Salud por el reposo del último día y noche.

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28/07/2016, 01:20
Irina Krilov

- De acuerdo. Yo cogeré una de las lanzas, para tener algo a mano por si acaso. También me llevaré la pasta que hice anoche*. Nos servirá de aviso.

Me pongo en la posición de la fila que me indican, y comienzo la marcha con el resto.

Notas de juego

*He supuesto que la dejé en algún tipo de recipiente que se pueda portar. Si no es así, rectifico la frase.

- Yo quiero recuperar los puntos en atletismo, si fuera posible.

 

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28/07/2016, 16:40
Director

Iniciáis una caminata a través de la jungla al ritmo que Leroy marca abriéndose paso entre la espesa vegetación. El machete le es de gran ayuda, puesto que la extraña textura de la naturaleza de la isla hace que sean en cierta manera débiles. Felix va en la retaguardia, revolver en mano. El camino, de varias horas de duración, se os hace pesado. De vez en cuando, Felix pide que el grupo se detenga porque le parece escuchar algo, aunque al final siempre acaba con un "Deben ser imaginaciones mías, sigamos". Lo cierto es que la jungla está bastante tranquila. Al igual que Felix, creéis escuchar movimiento ocasionalmente, pero nunca llegáis a estar seguros. ¿Serán imaginaciones como las de Felix?

La excursión os pone nerviosos. Esta vez no es por la oscuridad, sombras extrañas en el límite del ángulo de visión ni nada parecido. Hace un calor abrasador y todo está salpicado por luz, pero la selva parece muy tranquila. Aparte de algunas aves e insectos, apenas se escucha nada, pero no os quitáis la sensación de estar vigilados. Y así, durante un par de horas con esa sensación de alerta, acabáis agotados.

Al cabo de esas dos horas, el aroma de la sal se hace notorio. Llegáis a otro extremo de la isla. Las olas bañan la costa. A la izquierda hay un acantilado de unos veinte o treinta metros, así que no podríais haber llegado andando por ese lado de la playa, sino atravesando el interior, como habéis hecho. En las rocas de abajo, las olas del pacífico mueven con cada golpe los restos de un barco. En realidad, es medio barco. La otra mitad no está. Los restos de madera están encallados y con enormes destrozos. En el lateral viene el nombre de la embarcación, pero en un alfabeto que no entendéis.

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28/07/2016, 16:59
Director

No sabes leer japonés, pero gracias a tus conocimientos de Antropología reconoces la palabra que está escrita en el casco de la embarcación: Bishamon. Era un dios japonés de la felicidad y la guerra.

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28/07/2016, 17:01
Director

Por tus conocimientos de Pilotaje, calculas que el barco era capaz de transportar originalmente entre ocho y quince tripulantes. Es probable que la otra mitad se hundiese debido al impacto con las rocas.

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29/07/2016, 13:14
Director

Notas de juego

Cierro esta escena, y seguimos en la Escena 3.