Partida Rol por web

Mi hermana Ruma era una mujer fuerte y una consumada guerrera, quizás no era la mejor luchadora de la galaxia (los inquisidores me habían probado eso hace un tiempo) pero era la mejor de nuestro grupo y en verdad no deseaba quedarme atrás, esa era la razón por la cual me había comunicado con Owen para pedirle que me ayudara con mi entrenamiento con el sable de luz – gracias Owen, lamento molestarte con mi petición tan egoísta – nunca hablaba alto, siempre tenía un tono audible pero rozando en lo susurrable. Tome mi sable de luz y configure todo para practica - ¿estas listo? – no sería una amenaza verdadera pero podía intentar luchar.

Owens tal vez no era el mejor peleador de la nave, pero era quien se la pasaba molestando a Ruma llamando la gorda.

naaaa no hay problema.

siempre está dispuesto a hacer algo de ejercicio debido a que reparar la nave viene con un gran esfuerzo físico muchas veces,  tomo su sable de luz y lo configuro para practicar con Arsaa.

lista o no aquí! Voy!

Owen era una persona amable pero no dudo en atacar, su enfoque era agresivo o mejor dicho era directo lo que demostraba esa forma suya de siempre tomar los problemas de frente sin retroceder… casi era envidiable como parecía no tener miedo de nada.

Levante el sable que tenía para bloquear su ataque de la mejor manera posible pero su potencia me había hecho trastabillar un poco y tuve que aportar mi rodilla derecha en el suelo para mantenerme “parada”, lo empuje un poco con mi sable y luego intente golpearlo pero la verdad es que fue patético ya que tropecé y casi cai.

Owens aprendió de ruma a no desperdiciar oportunidades, ese momento de torpeza fue aprovechado al máximo por Owens para hacerla retroceder con pura fuerza bruta y varios golpes de su espada contra la de ella.

vamos Arsaa deja salir tu instinto para este combate 

owens  balanceaba su sable de luz en su mano para tratar de confundir la con su próximo ataque, el cual apuntaría a sus piernas como un tipo de barrido.

Entendía lo que mi buen amigo decía pero era algo bastante difícil para mi persona dejarme llevar por mis instintos y sobre todo si eran de combate pues la verdad es que no tenía madera de guerrera o algo parecido, mi mundo siempre fue estudiar los misterios de la fuerza pero eso ahora era algo difícil y entendía que en estos momentos estábamos necesitando gente capaz de luchar con el sable de luz, a veces me hubiera gustado ser como Mace Windu o Anakin Skywalker.

- Lo intentare – me volvi a poner en posición de combate esperando poder asestar algún golpe a mi compañero de entrenamiento.

La gran diferencia entre ambos era notable para Owens, no importaba como aarsa atacará el respondía de inmediato de forma agresiva haciendo la retroceder.

deja de pensar tanto, deja que tú cuerpo te guíe.

para el era fácil decirlo, estaba en cierta forma, y practicaba más que ella el uso de la esgrima.

Ante las palabras de Owen solo asentí, estaba segura que dentro del grupo era una de las personas con más cercanía a la Fuerza pero al centrarme tanto en ese había dejado de lado todo lo que tenía que ver con el sable de luz o el combate en sí y quizás ahora estaba viendo como eso me estaba jugando en contra, ahora era más probable que me cortara con mi propia arma que dañar al rival que podría estar enfrentándome – Lo intentare – era más fácil decirlo que hacerlo pero lo lograría tarde o temprano, esperaba.

Tomando algo de aire miro a Owen - ¿como lo haces? no es nada facil - 

Owens suspiraba al ver que Arsaa no logro golpear lo, pero no estaba seguro que hacía mal pues el no era un maestro jedi.

supongo que todo el trabajo en la nave me da un buen físico, pero también podría ser suerte, no todos los jedis peleaban igual quizás debas buscar tu propio estilo no?

owens creía que era suficiente entrenamiento por ahora, si seguía pegándole seguro la volvería acomplejada.

Owen bajo su arma e intento hacerme sentir mejor y le estaba agradecido pero no era necesario que mintiera o diera escusas ya que era obvio que mis habilidades con el sable de luz estaban lejos de ser como las de el – No te preocupes Owen, nunca fui buena usando el sable de luz por lo que tampoco espero ser capaz de vencerte o dañarte en la primera ronda o algo parecido… podría llevarme años siquiera estar a tu nivel – él era un guerrero consumado y para igualarlo seguramente debería de aprender a luchar con otro estilo de pelea que no fuera el Shi-Cho - ¿buscamos algo de agua? – no parecía agotado pero yo si.

Owens miraba preocupado a Arsaa y ese sentimiento de inferioridad que estaba mostrando, no sabía cómo animarla para que no bajara en su entrenamiento.

creo que aún no encuentras un estilo de duelo que se acomode a ti, recuerda Arsaa no todos los jedis luchaban igual, y en cuanto a tu propuesta del agua, por supuesto! Hay que mantenerse hidratado todo el tiempo.

con esas palabras le daba un par de palmadas en la espalda.

Comprendía las palabras de Owen ya que cada Jedi tenía sus propia forma de pelear utilizando alguna de las siete formas de combate ¿Cuál sería la mía? Era algo difícil de decir ya que siempre me dedique a aprender sobre la fuerza y sus misterios – estoy seguro que lo hare, ahora… vamos a la parte superior a tomar algo – hidratarse era algo importante - ¿Cómo van los entrenamiento con mi hermana – ella siempre deseaba entrenar.

Owen acompañaba sin ningún problema a Arsaa a buscar algo que beber, entrenar con ella es más tranquilo que con su hermana, y podía relajarse más.

el entrenamiento con tu hermana? Bastante bien solo debo insultar la un poco y correr más que ella y en cuanto a combate... Pues no hay mucho que decir, sigue teniendo la ventaja sobre mi.

cómo olvidar la paliza que le dió en venganza por haberla llamado gorda, pero Owen no se arrepiente.

Era obvio que mi hermana tenía un entrenamiento mucho más satisfactorio ¿Cómo no tenerlo? Era una persona casi dedicada al entrenamiento físico y al combate algo que yo apenas había tocado en toda mi vida ¿podría un día igualarme a ella? En verdad lo dudaba completamente – bueno, ella siempre fue buena para el trabajo físico por lo que no me sorprende… solo espero que tras esos entrenamientos puedas caminar, me imagino que no es suave cuando alguien le insulta – la golpizas que pegaba sin duda eran bastante memorables.

Owens dió una pequeña carcajada ante ese comentario.

tu hermana tiene una debilidad, llámala gorda y aunque golpee con fuerza se distrae mucho.

su técnica era apenas un cincuenta porciento efectiva, porque esa misma rabia de ruma la volvía más agresiva en el combate.

​​​​​​​no sabe manejar bien su control cuando se involucra su peso 

Solo pude suspirar ante las palabras de Owen ¿el peso? ¿Eso le molestaba a su hermana? Eso era algo superficial ¿y dejarse llevar por la ira? Quizás debía de darle una charla sobre la importancia de mantener el autocontrol en estos momentos de necesidad – Bueno… no todos son perfectos – era lo único que se me ocurría para defenderle - ¿y cómo saliste de esa práctica? ¿Tuvieron que repararte? – ya me lo imaginaba con una mano menos.

no, pero la debilidad de tu hermana es demasiado fácil de usar en su contra, la tuve contra las cuerdas un momento durante el duelo.

cuando le pregunto cómo había salido de ese combate, que si lo repararon, Arsaa puede ver qué Owens mueve un poco el hombro porque le quedó doliendo por los golpes de ruma.

Adolorido pero bien 

El enojo era una de las principales cosas que un Jedi debía de evitar pues si bien podía dar sensación de fuerza al principio era la puerta a un espiral de decadencia emocional que podría llevar a uno al lado oscuro – Quizás debería ser algo que deba practicar, el autocontrol es importante – dejarse llevar por las emociones sean buenas o malas era extremadamente peligroso – bueno, al menos ella dio buen combate… espero poder estar a su nivel el algún momento o por lo menos parecer que doy pelea – hoy sin duda fue algo vergonzoso

autocontrol? Pues si le serviría está engordando mucho últimamente.

Owens había pasado ya mucho tiempo fuera de la orden y sus enseñanzas, ya había olvidado muchas de ellas y solo le importaba seguir con vida a este punto.

práctica y quizás un día puedas dar pelea, y lo necesitarás para evitar que ruma siga subiendo de peso.

No pude evitar reírme un poco del chiste de Owen y en verdad esperaba que mi hermana no nos escuchara o estaríamos corriendo por toda la nave esquivando los puños de acero de Ruma – cuidado que no te escuche – quise parecer seria pero era obvio que me había llegado a tentar – bueno… iré a descansar y luego meditar, nos vemos luego – me dolían los músculos semejante humillada que owen me había pegado.

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