Partida Rol por web

He aquí, guerreros elegidos de Odín, la historia de vuestra estirpe y de vuestro Clan. He aquí lo que fue, tal y como lo cantan los skaelds; lo que es tal y como lo veis. Lo que será es vuestra responsabilidad.

Un guerrero se acerca al fuego del skalli, y se acomoda donde puede ver a todos los presentes. Es pelirrojo y bastante fuerte, y habla con una profunda y rica voz.

-Acercaos, que os voy a contar la historia de nuestro Clan. Aquella que nuestros antepasados aprendieron de la boca de sus abuelos. Niños, aprended bien de donde venís, porque en ello radica vuestra fuerza.

HISTORIA ANTIGUA DEL CLAN

Cuentan los ancianos y las leyendas, que el propio Odín otorgó poder a nuestros antepasados, elevándolos por encima del resto de los mortales. Invistió a Ragnar Odinssonr como líder de los hombres, como señor de las bestias y de la tierra. Nuestro Señor Ragnar ayudó a Odin en sus luchas agradeciendo con sangre el favor y los honores prestados. Durante una cruenta batalla contra los trols ganó el inmenso honor de desposarse con la mujer más bella de toda la creación. La propia Frigg la eligió por orden de Odín. De ellos descendemos todos, valientes hombres y mujeres.

Ragnar tuvo prolífica descendencia, llena de bravos varones y bellas mujeres. Su hermano de sangre, Alrik, protegió y ayudó al Clan mientras Ragnar guerreaba al lado de Odín.

Una tormentosa noche, un anciano tuerto llamó a la puerta del skalli, en el cual se encontraba Alrik. Viendo el desastroso aspecto que llevaba, le echó de allí, porque una de las mujeres del Clan, una anciana de la que se decía que era adivina, llamada Unn, predijo su muerte por culpa de un anciano tuerto. Al ser echado de tal manera del refugio, el anciano reveló su verdadero aspecto, mostrando a un iracundo Odín profundamente ofendido porque alguien de su sangre no le reconozca. Enfurecido, le maldijo con proteger el puente que llevaba al poblado, matando a todo aquel que lo intentase cruzar, hasta que un guerrero enmascarado le desafiase a duelo. Los años pasaron, y Alrik cumplía su tarea encomendada por Odín.

Una noche igual a la que Odín llego al skalli, un guerrero enmascarado apareció en el puente. Llevaba la armadura y el hacha llena de sangre negra, y su rostro estaba oculto tras un yelmo que emulaba el rostro de un djevel. Con graves palabras increpó a Alrik. Este, sin mediar palabra, tomó su espada "Slange" y arremetió contra el enmascarado. El combate fue cruento y duro, y s edice que duró eones. Finalmente, el hacha del enmascarado mordió la carne de Alrik. Desangrandose, cayó en los brazos del enmascarado, que miró cómo moría el asesino de tanta gente. Cuando exhaló su último suspiro, el enmascarado se quitó el yelmo, revelando su identidad.
-Ha det, bróðir.
Llevándose la mano al costado, Ragnar palpó la pequeña herida que le había causado Alrik. La ponzoña que siempre acompañó a Slange ya se hacía con su cuerpo y le arrancaba el alma. Con lágrimas en los ojos por la muerte de su amigo, cayó al suelo, junto a aquel a quien tanto amó.

Odín le alzó y se le llevó a Valhalla con todos los honores que un gran guerrero y jefe. Allí reposa eternamente en espera de sus bravos guerreros para volver a luchar al lado de Odin otra vez más.