Partida Rol por web

Holy shit!, pienso mientras contemplo estupefacto las escena. ¿Dónde me he metido?. Desde que llegué a París, huyendo del horror de la guerra de Vietnam, siempre me había movido en ambientes en los que primaba el amor, la tolerancia, el respeto, la no violencia... y actualmente me encontraba enfrascado en una asamblea que rezumaba mal karma por sus poros.

Danny y Renée habían sido muy amables conmigo al invitarme a participar en el evento. Les conocía por medio de mi compañera de piso, una chica muy activa en el movimiento estudiantil. Me habían caído bien, y por eso acepté la invitación. Pero una vez que he empezado a conocer a los/as asistentes... empiezo a arrepentirme de haber venido.

Mientras que la humanidad está al borde de entrar en la Era de Acuario, nosotros estamos aquí, en esta fría y lúgubre sala, discutiendo sobre mezquindades y sembrando el odio entre hermanos. Necesito evadirme, no soporto tanta hostilidad, así que me voy a tomar el último ácido que me queda, a ver si la asamblea se hace más llevadera. Peace, brothers!

Empezaba a relajarse, toda esa tensión con la mina y el pelo príncipe empezaba a disiparse gracias a ese amigo negro. -Si tío, un poco suave pero sabe de madre. Y la música, pues a tener razón. Ya me siento mas relajao y todo.-La voz también se le suavizo, como la música.

-Mira ese tío tiene priva.-Señalo al ruso.-¿Crees que querrá compartirla con nosotros?-Hizo un ademan a Dimitri para que se diera por aludido, pero a saber si atendería a su llamada. Después llego la tormenta.

-Mira tío. Tu haces con tu mierda de vida lo que quieras y te justificas como te de la gana, lo que esta claro es que si has ido allí a sido porque te ha dado la gana y para ganar prestigio, sino como coño estarías ahora aquí. Por tu puto nombre tío. No me vengas con consignas, te he dicho que eso no funciona. Y que sepas que yo tengo una carrera hecha. Me licencie en España donde no es fácil luchar por tus libertades de estudiante y contra los franquistas. Por lo que también soy bilingüe listillo. Si te crees que estoy aquí por enchufismo es que no tienes nada que hacer aquí. Pero pregúntale a Dani si tengo o no galones para estar aquí.-Obvio la pregunta de la uniceja, la respuesta a Lincon le había ocupado todo pensamiento.

-Creo yo que tendremos que esperar a Dani y su amiga. Ellos son los cabellizas después de todo.-Se adjudico la respuesta a la pregunta de Landazuri.-Por cierto tío, ¿Puedes explicarnos exactamente que eso?-La curiosidad podía con Fabian.

-Ei amigo. Toca algo alegre.-Le dio un codazo amistoso a Andrew.

Danny volvió de preparar los dormitorios  y se movió entre los asistentes. Sonrío. El lógico desconcierto inicial fijo que habría sembrado algún arrepentimiento entre los que habían acudido a la Asamblea. Mejor. Así tendrían que replantearse seriamente quiénes eran y a qué habían venido. Sin duda no se podía llegar a ninguna certeza. 

La heterogeneidad era maravillosa. "Un obrero con muchas caras diferentes", había sido siempre su lema. Esa mezcla tan distinta también se reflejaba en el rostro de la gente e impedido, de momento que la gente se conociera más. 

Pero cada uno de los asistentes había reaccionado ante los eventos. Tratando de calmar o de avivar la llama. Recogiéndose en silencio o compartiendo sus pertenencias.

Había habido dos focos claros de atención: 

El extravagante señor Landazuri y sus inventos y el carácter de Fabian, que siempre parecía amplificar sus propios pensamientos. Salvo el incidente de los empujones no le preocupaba que fuera tan incendiario. Demostraba que tenía sangre en las venas, como Lincoln, Pierre, Gaelle o Marie. Seguro que Reneé sabría manejarlo.

Además, lo que había ocurrido le había hecho entender que la idea de tener un Portavoz era la acertada. Dudando si ese concepto chocaría con una democracia horizontal, se había convencido de que era necesario tener un coordinador. No necesariamente tenía que ser él. Lo hablarían por la mañana y determinarían cómo se elegiría y la duración del cargo. 

Dio un trago a la botella de Dimitri y compartió algo de lo que estaban fumando al lado de la guitarra, relajado y tranquilo, para luego añadir

- Hoy nos despegaremos de cada historia personal que entró por esa puerta, haciendo un sitio al otro y dejando que caiga la noche en buena compañía. Algo de alcohol y drogas para quien lo necesite  y mucha música y conversación para todos.

- Gaelle, querida, gracias por ayudarme a preparar la comida. 
No te preocupes por el niño. La censura es más peligrosa que la nicotina. ¿Ves? Su inteligencia le cuida mejor que tú o que yo o esos padres accidentales que la genética le haya dado. Todo fluye si las preocupaciones se dejan a un lado...

Tras pasearse y sonreír a Archie, Dimitri, Andrew y Jacques, que ya habían empezado con la fiesta y la música se dirigió a Fabian y le miró a los ojos para decirle

- Eres un hombre bello... y no te han dado amor suficiente

Y acto seguido le apretó contra su pecho, que más que un abrazo era hundirle literalmente la cabeza entre sus tetas mientras se mecía gritando para los demás

- ¡Cada uno tenemos un Vietnam en nuestro interior. No dejemos que el odio y el miedo se instalen en nuestros corazones. ¡Amad! ¡Amad! 

Porque la Era de Acuario está aquí

Entonces Renee cogíó algunas manos, besó la herida de la frente de Alain y acarició con infinita fascinación la ceja de Marie Sourcil para empezar a cantar. 

La noche fue cayendo mientras un sopor de marihuana, alcohol y sueño se fue extendiendo por la estancia. En la habitación contigua, en unas destartaladas literas que con la decoración y el ambiente se habían transformado en la más confortable suite de un hotel, los asistentes fueron quedándose dormidos... 

Gäelle sonrío a Renée sin duda era un espíritu libre, uno de esos espíritus a los que había seguido. Llenos de paz y sabiduría. Casi todo el odio que sintió por Fabián había desaparecido con las palabras de Renée, incluso le arrancó una risotada al ver como le daba el amor que le faltaba al pobre. Igual es culpa mía... sin duda ha debido sufrir mucho para ser como es. pensaba Gäelle quien comenzó a sentir lástima por Fabian y no odio. Luego se unió a los coros cuando Renée comenzó a cantar, tratando en no destacar mucho, ya que su voz era angelical y tierna. Gäelle se sentó junto Jacques Bourgeois e invitó a sentarse cerca a Dimitri, el primero le suscitaba curiosidad Sería tan interesante como Renée? se preguntaba la srita. Bonhard, el segundo le parecía que necesitaba ayuda para integrarse, estaba como estático y sintiéndose que no encajaba... Ivette, acompáñanos! dijo Gäelle sin olvidar el bonito gesto que tuvo. En mitad de los cantos dedicó una sonrisa a "Linc", había sido un buen hombre y la había protegido. Sin duda Gäelle no podía estar más feiz en aquel sitio. Comenzaba a respirar ese ambiente mágico y creativo en el que se estaba incubando algo grande.

Embelesada por la energía que desprende Reneé, me uno a su canto sin que me diese cuenta siquiera; la invitación de Gäelle me anima aún más. El olor a hierba que se respira en el ambiente, junto con la atmósfera de relajación que se había propiciado desde la intervención de Reneé me dejan un poco embriagada, pero feliz.

Me acerco a Alain, que parecía un poco retraído. Le quito el cigarro y le doy una calada antes de volverlo a depositar entre sus labios, mientras lo llevo de la mano al grupo en el que estaban todos reunidos.

En el momento en el que empezó a cantar Reneé Lincoln no pudo evitar pasar de la bronca con Fabian y centrarse en ese canto, se dió cuenta de la sonrisa que le dedicó Gäelle y se la devolvio con cariño, se separó del grupo, pues no iba a cantarla pero le gustaba ver a la gente tan animada.

Una vez mas lejos se acercó a la otra persona que no le parecía tan extraña, el señor Ulf -Bonito bastón- Le preguntó, era extraño y quería saber mas sobre él -¿De dónde es usted, no parece francés?- El porte de ese hombre no era normal y su musculatura tampoco, esperaba no haberle molestado por la pregunta directa, pues la curiosidad iba a matarle un día seguro.

- Gracias, un recuerdo de la guerra. - Dijo mientras le mostraba el bastón a Lincoln. - Yo no soy francés, no. Soy sueco. - Dijo mientras se levantaba para estrechar la mano - Me llamo Ulf, ¿tu eres Lincoln, no? Reportero de guerra en Vietnam por lo que he oído. - Dijo mirando hacía Fabian. - ¿Como están las cosas ahí? ¿Es la guerra tan inútil y estúpida como parece?

Este parece de los míos, pensó mientras hablaban, la verdad ante todo.

-Es una auténtica pérdida de vidas, inútilmente- Dijo sonriendo mientras le estrechaba la mano "Parecía que no se equivocaba, este hombre no era un inútil como otros" Sonrió al mirar el bastón -Así que de la guerra, me lo imaginaba, ¿Dónde combatió?- "No se si lo ha dicho antes, estaba centrado en Gäelle y en Fabian por entonces."

- Ayudé a los catalanes durante la guerra civil española y justo después fui a Finlandia para echar a los invasores rusos. Ahí fue donde me hirieron. - Dijo mientras se agarraba el muslo izquierdo. - Las guerras de cuando yo era joven parece que tenían un bando bueno y otro malo. Ahora parece que volvemos a ser bestias salvajes corrompidas por la avaricia. - Dijo Ulf con una expresión seria en su rostro. Respira hondo viejo. Se dijo mientras intentaba relajarse un poco. - Bueno, usted tampoco parece francés. ¿Americano quizás?

-Buen ojo jaja, Americano de pies a cabeza- Sonrió mirándole la pierna -Ya veo, un defensor o heroe depende como lo mire ¿no?- Le parecía un buen hombre y bastante mas culto e inteligente que la mayoría de los que estaban allí, pocas personas merecían la pena de los asistentes... pero aún así era su trabajo y debía mantenerse en el lugar, echaba de menos a sus compañeros del ejercito con los ue había establecido lazos de amistad importantes... pensaba en ellos y esperaba que no les hubiera pasado nada... "En cuando salga de aquí les escribiré a ver que tal les va" Su mirada volvió a los cánticos y a Gäelle, parecía mucho mas alegre que hace un rato y eso le gustaba, no pudo evitar mostrar una sonrisa en su cara hacia ella -¿Le gusta esta musica? Señor... Ulf, dejeme adivinar... es mas del estilo clásico, es decir, música clásica... ¿Me equivoco?-

Ni uno ni el otro. Fui a ayudar y a aprender. Solo así podía informar a la gente de mi país de como es el mundo de verdad. - Dijo mientras dirigían su atención hacia la música. Lincoln parecía contento de ver a Gaëlle. Jovenes... Pensó Ulf mientras sonreía. 

- ¿A quien no? - Contestó a Lincoln sonriendo - Yo crecí en la calle, ahí no había música clásica. A mi me gusta la música folk: humilde, sencilla y verdadera. - Dijo con orgullo. - Por cierto, no me hables de usted ni de señor. ¿O es que acaso crees que soy un pobre anciano? - Dijo entre risas. Entonces devolviendo la atención a la música. - ¿A ti que te llama mas la atención? ¿La música o la joven a la que tan noblemente ha defendido? - Preguntó a Lincoln amistósamente mientras le daba un ligero golpe en la espalda.

-No te creas Renee yo e tenido lo.... ¡MFNS!-No pudo terminar la frase de respuesta antes de que la mujer de generoso pecho lo compartiera con él. En esa situación agradable, sumando la música y la droga, se dejo llevar por la simpatía que irradiaba.

Una vez liberado, sin pedirlo, de su abrazo, le dedico un piropo.-Ojala mas mujeres fueran como tu, chica.
-Dale a esa guitarra pinpinocho, que no se diga.-Le dijo al músico, a su manera, con una sonrisa mellada.

Por fin con algo de alcohol entre sus manos y por su gaznate, agradeció a Dani por estar ahí y se mantenía sentado, fumando de liados y otras veces de ducados.

-Hombre mira, al menos lo que dice tiene sentido.-Comento a quien quisiera escucharlo, cuando hablaban sobre las absurdas guerras, unos borrones mas allá.

Andrew mira fascinado a Renée. Pocas mujeres como aquella había en esa reunión. Una pena, porque era justo lo que le faltaba. Ése era el verdadero espíritu de los sesenta, la actitud que él defendía en sus canciones.

- Y que lo digas compadre. - dice a la frase de Fabian. - Pasa la botella que tengo la boca seca.

Bebe un trago sin dejar de mirar a la mujer. Como utilizara la boca igual de bien para todo...

- No me lo vas a decir dos veces. - con una sonrisa coge su guitarra y tras dudar un momento comienza a tocar los acordes que acompañan a esa canción. Incluso se permite hacerle los coros en el estribillo.

El ambiente de la "asamblea" cada vez me resulta más desagradable. Joder, creía que había venido a una reunión política y lo que encuentro es un grupo de hippies borrachos y drogadictos con pájaros en la cabeza. La única intervención interesante fue la de la mujer obrera que habló al principio.

En fin, sigo fumando hasta que Yvette me toma de la mano y me lleva al grupo que canta. Era lo que me faltaba, pero... es Yvette y por mucho que me resista, no puedo negarme a nada que me proponga. Quizá deba relajarme, pero no parece muy apropiado que en estos momentos de entusiasmo revolucionario un militante se dedique a emborracharse y bailar. No... pero está Yvette... Y solo verla y sentir como me toma de la mano me desarma. Lo asumo y me dejo llevar.

Me esta entrando mucho sueño,

-¿Alguno lleva reloj?

https://www.sortea2.com/versorteo/partida-de-lobos-mayo_99294"

Algunos se van directamente al cuarto de literas. Otros quedan dormidos sobre los colchones hasta que Reneé suavemente les despierta y les recuerda que tienen que ir todos al mismo sitio para compartir un único sueño que flote durante la noche sobre todas sus cabezas. 

Mañana todos despertarán. Pero algo terrible habrá sucedido. Algo que dará un nuevo rumbo a la Asamblea y un nuevo significado al papel que cada uno desempeñará en aquel mayo francés. 

Atención, como hay gente que hoy tal vez tenga tiempo libre de más, abro la nueva escena  para que pueda ser leída y así ir adelantando. Pero no se podrá escribir en ella ni participar hasta las 23:59 de la noche de hoy Viernes. 

Así calmamos a los que estáis acostumbrados a poder postear sea noche o día y comentar todo, y a la vez damos tiempo a los que se agobian con que la gente sea tan activa.