Partida Rol por web

Nevermore: Entre muñecas y granjas

Segundo Arco: Demencia

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16/03/2022, 13:09
Cornelius Fernsby

Como una tabla salvadora, la imagen de su amada apareció ante él para tenderle una mano. Con una sonrisa embobada, Cornelius se aferró a ella para subir las escaleras mientras tiraba del brazo de su compañero, sin darse ni cuenta de lo que estaba haciendo. El inspector solo veía el hermoso rostro que lo esperaba anhelante y él solo quería reunirse con ella... una vez más.

Era un hermoso y vívido sueño del que no quería despertar. Su mente, trastocada tras todos los sucesos vividos y el descubrimiento del cadáver putrefacto del dueño de la granja, intentaba aislarse de todo lo terrible para centrarse en lo que de verdad quería: Reunirse con su adorada a la cual el destino había vuelto a traer junto a él.

Ni siquiera escuchaba las palabras entrecortadas del guardabosques. Para Cornelius lo único que había en aquel lugar era un campo lleno de margaritas, un cielo azul y la sonrisa más brillante que el mismo sol que los alumbraba. Para él esa era la realidad y lo demás carecía de importancia.

Pero un trueno muy cercano lo hizo volver a la realidad. Sintió las frías gotas de lluvia caer sobre él despejándolo y eso sirvió para que, aunque fuera durante un instante, reconocer el lugar donde se encontraba y el terrible motivo de hallarse allí.

Frustrado por haber perdido de nuevo a su amada se giró con la rabia pintada en la cara para enfrentarse a su compañero pero un nuevo trueno lo sacó por completo de su ensoñación. Desconcertado, reconoció a Dexter y escuchó sus palabras, sintiendo como la realidad era mucho más cruel que sus fantasías.

Tienes razón... Vamos —dijo, sacando la pistola y aferrándola con fuerza entre sus dedos—. Acabemos con esto de una vez.

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16/03/2022, 19:22
Blanche Williams

No podía creer lo que acababan de pasar, o quizás sí. Solo estaba tratando de ignorar el terror de escapar de una muerte segura por fuego, una de las peores que existían. Asintió a Gregory ante sus palabras entendiendo, cualquier persona lógica hubiera enviado a otros con Russel u otra persona de su profesión si hubieran contado todo aquello. Ella quería seguir creyendo que el té que habían tomado estaba drogado y estaban teniendo histeria colectiva, o eso se iba a decir al irse si se salvaban de todo eso.

Estoy feliz de no ser la única que vio esa cosa — respondió por lo bajo con un suspiro, por lo menos se estaban volviendo locos colectivamente.

Evitó bufar ante su nueva idea, sus instintos le rogaban que solo se largaran, dejaran todo así, la casa se iba a quemar en cualquier momento si el fuego que habían visto era real y ellos no tendrían ninguna prueba real de que había sucedido, pero sus compañeros no iban a dejar que todo se acabara tan rápido y su parte más curiosa y también la más terca, quería descubrir todo el caso antes de irse.

Sí vamos, por lo menos poner más puertas entre nosotros y esa cosa nos dará más tiempo — porque podía escuchar los golpes y mientras más lejos mejor. Así que con esas palabras siguió al doctor al almacén. —Pero no podemos tardar, hay que buscar al resto, esta casa se va a venir abajo en cualquier momento.

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18/03/2022, 01:54
Narrador

Tanto Blanche como Gregory estaban de acuerdo en que la situación que estaban viviendo era una completa locura, digna de cualquier alienista respetable como lo era el propio Russell y sin embargo, allí estaban ambos, mirando como lo imposible se convertía en una realidad dentro de esa granja que era mas como el infierno para esos instantes. La puerta que daba a la tesorería prontó volvió a sonar, pequeños golpes se escuchaban cada tanto y aunque lo mejor sin duda era pensar que todo esto era debido a la imaginación, una parte de ellos estaba allí diciendo que todo era tan real como aquel fuego que habían visto caer gracias al candelabro y que en esos momentos, un poco de humo se comenzaba a extender por debajo de aquella puerta, indicando que todo había sido real y que posiblemente un incendio se iba a comenzar a propagar.

Sin embargo ambos presentes estuvieron de acuerdo en que avanzar era la única opción que tenían, esperando que al unir todas las piezas que esa granja ocultaba podrían de alguna forma estar a salvo de los horrores que ya habían visto. El médico del grupo fue el primero en avanzar hacía el almacén que también quedaba en ese segundo salón dentro de la casa de los Learmonth, sin embargo justo al dar el primer paso, un grito crudo y seco resonó desde la puerta que daba a la tesorería, causando que ambos se sobresaltaran de golpe y que gracias a esto, no pudieran evitar la siguiente desgracia que tendrían que pasar en esa granja del demonio...

Con un ruido sordo, las débiles y podridas tablas que conformaban el piso de aquella casa terminaron de ceder con el peso de Gregory tan prontó como había intentado acceder al almacén. Causando que el hombre cayera de golpe por la apertura que se había formado, justo delante de Blanche quién se había logrado salvar solo por un paso.

El médico cayó como un costal, de cara a lo que parecía ser una pequeña cueva, lo suficientemente pequeña como para haberse formado relativamente poco debido al deterioro y erosión del tiempo (Mucho mas considerando el nulo mantenimiento que tenía aquel lugar) Y si bien el golpe no había sido tan grande, el verdadero mal vino cuando la entrada accidental del señor Palmer alborotó a lo que sin duda era el mayor nido de tarantulás que cualquiera podría ver en su vida, lo que parecía ser cientos de ellas comenzarón a correr unas sobre otras, moviendose de tal forma que parecían ser un tapete con vida propia desde la posición de la detective, la cual por supuesto tendría que actuar rápido en ayudar a salir de allí a su compañero. 

Sin duda aquella casa ocultaba toda clase de peligros, los cuales parecían querer terminar de romper la mente de todos los que se encontraban allí metidos.

Notas de juego

Actualización lista <33.

Si quieren que Gregory salga de allí tendrán que realizar una tirada de resistencía con una dificultad global de 13+ 

Por lo que tendrían que sacar un 6 y un 7 o superior de forma individual para lograr el objetivo. Tiradas individuales sencillas pero Blanche, tendrás que depender del dado de poe al que se enfrentara Gregory también ;))

Mucha suerte a ambos <33

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18/03/2022, 02:33
Narrador


Blanche seguramente no podría entender el golpe psicológico que aquellas arañas causaban en el médico del grupo, y es que la fobia que este tenía ya la había enfrentado una vez mientras estaba en el pantano buscando a la desaparecida Pennelope Learmonth, sin embargo esta vez era completamente diferente para el señor Palmer... al caer dentro de aquella cueva, había escuchado claramente como su pecho impactaba contra algunas de estas horribles tarántulas, dejando un gelatinoso puré debajo de él y manchando con este sus prendas y sus manos las cuales no podían evitar aplastar algunas arañas mientras se levantaba por instinto propio.

Por si esto fuera poco, aquellas múltiples patas peludas y esqueléticas comenzaban a recorrer su cuerpo y pronto, el hombre pudo sentir como estaba completamente invadido por este nido tan asqueroso de arácnidos. Por simple instinto la primera reacción que tendría era por supuesto ponerse de pie y buscar sacudirse todas y cada una de estas arañas como fuera posible, pero prontó algo cambió... Tal vez debido al shock tan grande que todo esto suponía para él, por supuesto la situación logró superar la cordura del médico, quién a pesar de estar soportando de buena forma todas las situaciones dentro de esa granja, en esos momentos su mente se negó a cooperar, cerrandose por completo ante la situación presentada.

"Eres el elegido Palmer..." Un susurró llegó a sus oídos de un momento a otro, dentro de aquella micro-cueva no había nadie mas que él pero su mente ya estaba cerrada a cooperar en querer encontrar una lógica "Es tu destino ¿Que no lo ves? Por eso estamos aquí... contigo y tu estas aquí con nosotras" Y entonces Gregory lo vió; Era una de esas tarántulas, la cual se había quedado aferrada a su hombro ¿Acababa de hablar? ¿Le había dicho en verdad eso? El señor Palmer no podía distinguir mas entre lo que era real y falso en esos momentos, no en esos momentos en el cual su mente se había bloqueado y entregado a la locura que aquella granja buscaba contagiar en todos.

"Vamos Palmer... Guíanos, te ayudaremos, quieres ver a tu esposa ¿No? ¿A Thomas?" La araña parecía seguir hablando con el hombre, indicandole que ahora tenía un ejercito a su mando y tal vez, solo tal vez... Su peor miedo se convertiría en la única salida para él de todo ese infierno.

- Tiradas (1)

Motivo: Dado de Poe

Tirada: 1d6

Resultado: 6 [6]

Notas de juego

Pues ante todo pronóstico ¡Cayó el 6! Y me quedé como tonta te lo prometo xDDDDD. Pues nada puedes disfrutar tu nuevo rasgo como: "El señor de las arañas" 

Que te diviertas <333

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18/03/2022, 03:18
Narrador

Ambos hombres se encontraban en esos momentos una lucha interna dentro de sus respectivas mentes, tratando de enterrar la demencia que estaban sintiendo y hacer que la realidad y la luz predominará en ellos. Tanto el guardabosques como el inspector de policía estaban teniendo dificultades para concentrarse gracias a las pequeñas alucinaciones que sus mentes les hacían ver, sin embargo ambos estaban decididos a terminar de una vez con aquella pesadilla y salir de allí, después de todo la ayuda ya estaba en camino y solo era cuestión de aguantar lo suficiente para que los refuerzos llegarán y si era necesario acabar con la que parecía ser la causa de todo el mal que había dentro de la granja; Jettie Learmonth, la cual seguramente no se las pondría tan fácil después de haber leído el contenido del diario de aquel pobre vigilante.

La entrada más cercana que tenían ambos hombres desde el lugar en donde se encontraban era la entrada trasera, aquella que se encontraba en el segundo salón que tenía aquella casa, por la cual el guardabosques ya había salido una vez en compañía de él médico del grupo. Sin embargo pronto una serie de eventos volverían a suceder justo delante de sus narices, ayudándoles de cierta manera a distraer sus mentes en el problema actual y que no divagaran tanto; cierto rastro de humo comenzaba a aparecer en el aire, viniendo del interior del segundo salón precisamente y el cual dejaba en evidencia que estaba sucediendo un pequeño incendio ¿Sus compañeros?

Por otro lado, a los pocos minutos de ver el rastro de humo, un fuerte sonido de maderos rompiendose se escuchó por toda la propiedad, posiblemente indicando que aquella casa tan maltrecha y dañada por el paso del tiempo y el nulo mantenimiento por fin estaba cediendo al destino que era obvio que tendría tarde o temprano.

Por supuesto lo importante de todo era que aquel ruido habia indicado que alguién había tenido un accidente, por lo que si ambos hombres querían asistir a quien fuera que estuviera en problemas dentro de aquella casa del demonio, entrar por la puerta trasera era la mejor opción considerando que todo venía de ese lado de la propiedad. Por supuesto tal vez Jettie misma estaba causando todo eso por lo que seguramente tendrían que ir con cuidado, lo que estaba claro era que sin dudas tenían que reclamar aquella casa para poder aguardar a que sus refuerzos llegarán, pues la rádio y única comunicación con el jefe Green la habían perdido debajo de aquél granero, por supuesto esperar debajo de aquella tormenta no era una opción viable.

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18/03/2022, 03:47
Jettie Learmonth

-Señor Russell por favor... Cuando culpa a los demás de pecados compartidos, lo hace aun peor- La mujer habló de forma seria y directa, clavando aquellos ojos felinos en el hombre que tenía delante y hablando como si ella fuera alguna especie de fuerza superior, sin embargo la pregunta que el alienista soltó al último causó que Jettie sonriera con cierto orgullo, una sonrisa igual de imposible como las otras que ya había hecho anteriormente. Y estaba a punto de responder, cuando un sonido sordo y fuerte causó que la mujer se sobresaltara casi tanto como el propio alienista quien estaba aun tratando de luchar con el golpe psicológico que había estado recibiendo. El golpe parecía venir del segundo salón en donde había dejado a sus compañeros, causando que la mujer frunciera el ceño y una vez mas, el señor Russell sería el afectado de algo que no estaba en su poder, pues de golpe Jettie se dirigió a él claramente llena de una seria molestia.

-Parece que siguen cometiéndose errores señor Russell... ¿Con que confianza puedo encomendarle algo tan divino si parece que estaba ganando tiempo solamente? Aunque claro, ya lo sabía- Soltó una carcajada de forma demencial, mirando casi de forma destructiva al hombre que se hallaba allí delante de ella, antes de pasar su mirada a las muñecas que también estaban allí presentes -Veamos si esta tan decidido a la causa como hace unos segundos... Señor Russell, muestre a sus compañeros el camino a la inmortalidad ¿Quiere? Vaya o tal vez tenga que brindarle ese maravilloso don a usted... ¿Niñas?- Y con esto la mujer soltó una mirada amenazante al hombre, tomando de debajo del sofá en el que estaba sentada una arma que sin duda al mas entero de los hombres podría causarle una mala pasada, y mas aún porque Russell aun estaba herido gracias a Roland Learmonth:


 


Posterior a esto, Jettie procedió a levantarse de su asiento, mirando sin expresión alguna al hombre mas allá de esos ojos felinos que seguían clavados en él ¿Estaba yendo enserio aquella mujer? ¿Estaba pidiendo que matara a sus propios compañeros? Justo como habían matado a Pennelope seguramente, la cual parecía vivir ahora en aquella muñeca. Por supuesto todo sería mas fácil si el alienista no se hubiera desubicado gracias al shock de las muñecas, Jettie parecía tener mas influencía en él y estaba claro que lo estaba usando a su favor en esos instantes.

Sin embargo estaba claro que sea lo que fuera, reunirse con sus compañeros era la mejor opción pues la mujer se había convertido en una clara amenaza, una que era sin duda mas peligrosa que el propio señor Learmonth pues a comparación de él, Jettie estaba en sus plenas capacidades, decidida por medio de una deidad que parecía ser tan real como el aire que respiraban en llevar a cabo su desquiciado plan de inmortalidad.

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18/03/2022, 17:56
George Russell

Error, no es un pecado compartido porque jamás atentaría contra la vida de una persona. Sé quién soy al menos, puedo tener una oscuridad que está por encima de mi, pero tampoco soy una asesino ni un impulsivo que no sabe resolver una situación si no es con un arma—aclaró ofuscado—. Tanto que observa, mi querida Jetti, debería afinar la vista. 

Eso sí que lo había mosqueado, no toleró que lo culpen por un error ajeno, incluso cuando tenía todo para perder ahora mismo con esas tetricas muñecas y las palabras de aquella mujer. Incluso se mantuvo inquieto, sobresaltado, aunque seguía metiendo en el mismo saco a él mismo. 

—No tengo nada que ver—dijo decidido y negó con la cabeza—. No voy a matar a nadie, estoy decidido a no hacerlo. 

Y no cogió el hacha, si que se levantó y comenzó a caminar dando pasos hacia atrás para no perder la mirada de la mujer. Podía dejarlo vulnerable, manipularlo, pero jamás cogería un arma. Así que se plantó en esa negativa mientras continuó avanzando. 

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21/03/2022, 10:30
Dexter Collins

La lluvia comenzó a caer directamente sobre el cuerpo del guardabosques, empapando de nuevo toda la ropa. Por suerte, aquellas gotas de agua las recibió diferente, como si aquella tormenta ahora purificara su cuerpo. Gracias a ella, algo de barro y restos de sangre de su ropa comenzaron a resbalar, quedando algo más presentable y sintiendo que dejaba parte de lo vivido anteriormente bajo esa lluvia.

Pero esa sensación de falso bienestar duro poco.

Delante de ellos, en el interior de la granja, parecía que un fuego comenzaba a nacer. La sensación de tensión y nerviosismo volvió a crecer en Dexter, que rápidamente miró a Cornelius.

— Es esa puerta — señaló la puerta por la que una vez salió junto a Gregory. — Eso es comienzo de un incendio, ¿verdad? — preguntó sabiendo perfectamente la respuesta. — La puerta da a un pequeño comedor, deberíamos… — y en ese momento el ruido de la madera romperse inundó el lugar. — Joder, alguien o algo a caído… Debemos apresurarnos antes que el fuego devore todo y ver si nuestros compañeros están bien — y raudo comenzó a correr dirección a la puerta, con la intención de entrar a la casa, esperando a que Cornelius le siguiera.
 

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22/03/2022, 16:46
Doctor Gregory Palmer

Me podía esperar cualquier cosa, menos que el suelo se quebrase y cayese a lo que parecía un nuevo sótano. Mi golpe fue amortiguado por algo que sonó muy mal... muy... viscoso. Y de golpe empecé a sentirlas... aquellas pequeñas cosas de ocho partas y seis ojos comenzaron a cubrirme por todos lados. Me quedé paralizado del terror que me suponía aquello.

Si las arañas me asustaban, las tarántulas más y debía tener decenas encima. Intenté sacudirlas, algunas las aplasté con mis pies pataleando como un crío, pero cuando me vi envuelto por ellas, cuando sentí sus picaduras me quedé inmóvil. No sabía si por el veneno o por el terror.

En ese momento me di cuenta de que no era un sótano, sino una cueva, pero no podía moverme, ni gritar. Estaba completamente paralizado. Oí alguien susurrarme, alguien que no estaba allí pues solo habían tarántulas y yo. Y entonces la vi... había subido a mi hombro y me susurraba con su profunda voz al tiempo que me miraba con todos sus ojos y me vi reflejado en ellos a pesar de su pequeño tamaño.

- Sí, quiero ver a mi familia, quiero ver a mi hijo, quiero abrazar a mi mujer y salir de este maldito infierno. - Respondí a aquella tarántula casi llorando y lo curioso era que ya no la tenía miedo. - Os guiaré, os sacaré de vuestro encierro y vosotras del mío... luego seréis libres de buscar un nuevo hogar y yo encontraré la manera de volver a casa. - Le dije a aquel insecto.

- ¿Ves que fácil es entendernos, Palmer? - Me respondió entonces. - Vamos, ponte en pie. Nosotras no podemos sacarte de aquí, eso tendrás que hacerlo tú con la ayuda de la humana. - Me susurró. - Somos legión pero no podemos subirte, eso es cosa tuya y de ella.

Y me puse en pie y miré a Blanche, algo había cambiado en  mi mirada. Sobre mi hombro había una tarántula a la cual hablaba. - Sí, general, ese será tu nombre ahora. La general de mi ejército. Estarás siempre conmigo para que puedas ordenar y aconsejarme que hacer. Mi hombro será tu hogar durante el tiempo que estemos juntos en esto. - Y miré a Blanche. - ¡Señorita Williams! ¡Ayúdeme a salir! - Dije tendiendo mi mano hacia arriba. A pesar de mi altura salté pero no llegué al borde.

- ¡Quizás haya una silla o algo por ahí que me ayude a salir de aquí! - Blanche aún no podía verlo bien, pero la tarántula de mi hombro, estaba muerta y pegada a mi ropa, aunque para mí vivía, me hablaba y la respondía. Ahora teníamos un arma más para usar contra aquella diabólica muñeca y su madre: las tarántulas que nos salvarían a todos de aquel horrible lugar. Solo debía salir de allí y encargarme de aquella repelente niña y de su loca madre con mi pequeño ejército de peludas amigas.

- Palmer... que no nos haga daño... o se lo haremos a ella...

- ¡Las tarántulas! ¡Déjelas estar señorita Williams! ¡Están con nosotros! - Exclamé desde abajo consciente de que no oiría los susurros de General desde aquella distancia. - ¡No se preocupe por ellas! ¡Solo de sacarme de aquí! ¡Puedo controlarlas pero si las hace daño, no podré hacer nada!

- Tiradas (1)

Motivo: Resistencia

Tirada: 2d6

Dificultad: 13+

Resultado: 8 (Fracaso) [5, 3]

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24/03/2022, 02:36
Narrador

A pesar de qué el alienista se había mantenido firme en sus palabras al no aceptar seguir las órdenes que le había dado aquella mujer, el señor Russell no pude evitar sentir un cierto nerviosismo y sudor frío crecer poco a poco en él. Jettie Learmonth se estaba acercando cada vez más a él y sin decir ninguna palabra pues las decisiónes ya habían sido tomadas en esos momentos y estaba más que claro; aquella mujer se había convertido ahora sí en un enemigo no sólo para él sino también para sus compañeros, por supuesto sus motivos aún se encontraban un tanto borrosos para el hombre allí presente ¿Quería matarles y convertirlos en muñecos? O solamente se trataba de eliminar a aquellas personas que no había contemplado la mujer en su plan, sea como fuera en esos momentos no importaba pues en realidad era que todo aquello era una simple y bizarra locura.

Los ojos del alienista pudieron observar como la mujer de la casa sujetaba con mayor firmeza el arma que le había ofrecido, indicando un claro gesto de amenaza hacia su propia persona, estaba claro que sí él no la utilizaba ella si lo haría, si el hombre no se movía de allí muy probablemente terminaría siendo atacado, afortunadamente no estaba muy lejos del pasillo que daba al segundo salón en dónde sus compañeros se habían quedado, así como las escaleras que llegaban al segundo piso de la casa y en dónde nadie había explorado aún.

Por supuesto tampoco se podía obviar el hecho de que las muñecas que había visto anteriormente aún se encontraban allí, desafiando cualquier explicación lógica que pudiera existir para negar todo lo que había visto. Ahora que se encontraba parado, ambas muñecas estaban dándole la espalda justo delante de él, sin embargo la sorpresa fue que poco a poco pudo distinguir cómo sus cabezas se iban girando, de manera bizarra y tétrica hasta alcanzar un giro perfecto de 180 grados, en cuanto aquellos ojos cristalinos y vidriosos se clavaron en la propia mirada del hombre, el sudor y sentimiento agobiante que estaba sintiendo se intensificaron muchísimo más y por supuesto todos sus instintos de sobrevivencia salieron a gritar que tenía que salir de allí lo antes posible.

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24/03/2022, 02:59
The doll...

Tanto la muñeca de Pennelope Learmonth como aquella que tenía una semejanza impresionante a la madre del alienista, comenzaron a soltar una delicada y muy bizarra risa en cuanto sus ojos se encontraron con los del hombre que tenían ahora frente a ellas. Aquellas risas infantiles poco a poco fueron adquiriendo más volumen como si estuvieran materializándose en la realidad del momento.

Por supuesto este sería un golpe más contra la serena y habilidosa mente del alienista, la cual para esos momentos ya no podía encontrar explicación lógica a todo eso y más bien se estaba rindiendo ante el hecho de que aquellas muñecas si eran reales y estaban allí riéndose y casi burlándose de la situación del hombre. No tardo mucho para que las risas inundaran todo el salón y con esto los propios oídos de Russell... volviendo aquella situación en una desesperante para cualquier persona que estuviera allí.

-Escapa... escapa... escapa ¡Corre Russell!-  aquellas palabras resonaron desde ambas muñecas, causando que cualquiera que escuchara estas voces infantiles sintiera esa sensación de hormigueo en su espalda tan característica.

Ya fuera que de alguna forma casi imposible aquellas figuras de porcelana del demonio estuvieran ayudándole al decirle que escapara de ese lugar, o por el contrario buscarán hacer más divertido el juego a la señora Learmonth. Lo cierto era que hacerles caso era la mejor opción si quería escapar del ataque inminente que tendría en nada, pues aquella mujer, caminando a paso tranquilo estaba cada vez mas cerca de arrinconarlo contra la pared.

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24/03/2022, 04:08
Blanche Williams

Como si no fuera suficiente que estuvieran intentando escapar de una muñeca poseída y un incendio a punto de expandirse, en un parpadeo, estaban corriendo y en el otro estaba viendo a Gregory caer por un hueco luego de escuchar el chirrido y el escándalo de las tablas al romperse de la nada. Aquello realmente parecía premeditado, como si hubieran estado esperando que sucediera en el peor momento.

Se agachó de inmediato intentando ver al hombre, no es que lo lograra demasiado desde su posición —¡Palmer! ¿Me oye? ¿Está bien? — le gritó, viéndolo moverse abajo, pero no entendiendo lo que decía ¿Con quién estaba hablando? Suspiró, comenzando a mirar alrededor para ver si había alguna forma de sacarlo de allí, por lo que comenzó a alejarse un poco del hueco con cuidado, cuando el doctor le gritó de vuelta, haciéndola saltar y voltear a él, viéndolo por fin.

Aunque… ¿Tenía una araña en el hombro?

Iba a gritarle que tuviera cuidado, además de que realmente estaba sintiendo el asco solo de verla, pero como si le leyera la mente, el hombre comenzó a gritarle que ignorara al insecto. Lo miró como si estuviera loco, pero no era el momento, con no tocarla tenía, supuso.

No vio nada en ese lugar que pudiera funcionar, así que supuso que con jalarlo podían intentar, si no, ya vería qué más hacer. —A ver, agárrese fuerte — ya se veía cayendo también. Respiró profundo, se agachó bien y estiró los brazos agarrándose con el doctor. Una vez que ambos estuvieron bien agarrados, comenzó a jalarlos. No sabía si era el miedo, la adrenalina, las ganas de irse de allí o todo junto, pero pudo comenzar a jalar al hombre, a sacarlo del hueco. Se fue echando para atrás mientras lo atraía hacía sí, mientras poco a poco el doctor iba regresando a donde debía. Bueno, Blanche no era una debilucha, así que estaba feliz de poder ser de ayuda.

- Tiradas (1)

Motivo: Resistencia

Tirada: 2d6

Resultado: 10(+2)=12 [5, 5]

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24/03/2022, 13:03
Cornelius Fernsby

Tal como se había imaginado, el inspector se sintió renacer bajo la fuerte lluvia, regresando de golpe a la realidad. Se quedó durante unos instantes con la cara vuelta al cielo empapándose por completo, dejando que las gotas se mezclaran con las lágrimas que, sin que él se diera cuenta, habían comenzado a resbalar por sus mejillas.

Pero no había tiempo para recrearse ni en el dolor ni en la calma; ante todo tenían que buscar a sus compañeros y acabar con aquella pesadilla de una vez por todas. Cornelius se puso en camino junto al guardabosques hacia el edificio principal. Al principio con dificultad debido al barro que le aprisionaba los zapatos, pero cuando vio el humo y escuchó los crujidos amenazantes de la madera, apuró el paso dirigiéndose directamente a la puerta que le señalaba Dexter.

Parece como si toda la casa quisiera enterrar y borrar lo que sea que esté sucediendo dentro —dijo el inspector, quizás con una entonación que no presagiaba nada bueno. Si su compañero buscaba cierto alivio a su pesar, desde luego no lo iba a encontrar en Cornelius.

Con un destello de lucidez en su cabeza, el inspector echó a correr detrás de Dexter hacia la puerta, consciente de lo urgente de la situación y sabiendo que era cuestión de vida o muerte que encontraran al resto y acabaran de una vez por todas con esa demoníaca mujer.

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25/03/2022, 05:57
Narrador

Tanto el guardabosques cómo el inspector de policía decidieron que lo mejor sería apresurarse hacia el interior de la casa de los Learmonth, estaba claro para ambos que en esos momentos algo estaba sucediendo de gravedad en aquel lugar pues el humo seguía saliendo. En cuanto ambos hombres entraron en lo que era el segundo salón de aquella casa, no tardaron mucho en ver a dos de sus compañeros en ese lugar; se trataba de nada mas y nada menos que del médico del grupo, Gregory junto con Blanche, esta última parecía un tanto agitada y tan solo bastaba con echar una rápida mirada para saber la razón de esto y es que una de las habitaciones de lo que parecía ser un almacén, había cedido completamente dejando un agujero bastante importante, en el cual muy seguramente habían caído al menos uno de sus dos compañeros.

El presunto incendio que también habían logrado distinguir desde fuera de la casa, procedía exactamente de la otra  habitación que estaba en ese mismo salón, Dexter seguramente podría recordar que se trataba de una tesorería, la cual parecía que apenas estaba comenzando el incendio pues las llamas no se podían distinguir salvo un ligero humo por debajo de la puerta. Sin embargo los detalles no eran realmente importantes, sino la apariencia de uno de sus compañeros en esos precisos instantes, una para nada normal...

Si se observaba con mayor detenimiento, el médico del grupo parecía tener una araña sobre su hombro, la cual en realidad estaba muerta y ligeramente aplastada contra esta zona del cuerpo del señor Palmer, sin embargo este parecía estar completamente complacido con esto pues se le miraba con un buen semblante.

Si se prestaba la suficiente atención en aquel hueco que había en lo que antes había sido un almacén, se podía observar un nido gigantesco y bastante bizarro de tarántulas, las cuales estaban corriendo de un lado para otro como si hubieran sido alteradas y con justa razón, pues dada la escena que tenían delante de ellos, se podía concluir fácilmente que había sido Gregory mismo quién había caído dentro de aquella cueva y Blanche por otro lado parecía un tanto agitada como si hubiera jalado del hombre en algún momento, posiblemente para sacarlo de allí ¿Que es lo que había pasado? Al menos ahora estaban en compañía de sus demás colegas y tan solo faltaba el alienista del grupo, quién no se veía acompañándoles por ningún lado.

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25/03/2022, 06:27
Narrador

La detective del grupo había demostrado con gran habilidad una fuerza muy superior a la mayoría de mujeres, seguramente gracias a su entrenamiento y experiencia en un campo, que aunque no era muy explorado por otras mujeres quedó en claro qué se podía llegar a la talla. Y aunque Blanche se había encontrado con una sorpresa bastante tétrica e inesperada con esa araña que se encontraba en el hombro del señor Palmer, al menos ambos habían logrado superar otro obstáculo más.

Sin embargo, estaba claro qué algo le había sucedido al médico al momento de haber caído dentro de aquel nido de arañas pues sus palabras así como sus expresiones para con las tarántulas, no eran nada normal al menos para alguien que trataba de mantenerse aún lo suficientemente cuerda como lo era Blanche, la cual no era una experta en la materia cómo lo podría ser por ejemplo el señor Russell, pero era seguro que alguna especie de locura le había dado al hombre al haber tenido un encuentro tan fuerte con tantos insectos al mismo tiempo y de aquella forma que sin duda había sido asquerosa y bizarra a partes iguales.

Para sorpresa de ambos, el ruido de la puerta que daba hacia el exterior sonó con fuerza justo a un lado de ellos, dejando ver a un maltrecho Dexter a la vista de ambos, el cual no venía solo pues milagrosamente el señor Cornelius estaba a su lado, igual o más maltratado que el robusto guardabosques y es que el inspector de policía parecía tener pequeñas heridas por todo su cuerpo como si lo hubieran arrastrado de un lado a otro, el revólver del hombre se encontraba de fuera y sujetado firmemente en su mano, indicando que muy seguramente se habían percatado y alertado del ruido de las maderas rompiéndose cuando cedio el viejo suelo, o tal vez incluso del humo que ya empezaba a asomarse por debajo de la puerta que daba la tesorería.

Al menos ahora se encontraban con sus compañeros de vuelta y tan solo hacía falta el alienista del grupo quién muy seguramente seguiría en su conversación con la mujer loca de aquella casa, o tal vez aún en búsqueda de ella, lo único que estaba claro era qué tenían que moverse si es que querían alejarse de un posible incendio en esa sección de la casa.

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25/03/2022, 06:47
Narrador

Ahora que los cuatro estaban de nuevo reunidos en aquel lugar, estaba claro que podrían avanzar mucho mejor y por supuesto compartir aquellos descubrimientos que habían ido encontrando a lo largo de su recorrido por sobrevivir a aquella maldita granja en medio de la nada, la cual sin duda alguna era la representación misma del infierno por todo lo que habían pasado ya. Por supuesto las apariencias de todos los presentes dejaban muchísimas incógnitas y preguntas, por lo que era fundamental que compartieran la información qué tenían cada uno de ellos sin descuidar qué estaban en una posición bastante vulnerable. Pues por un lado, qué el suelo tan decrépito que estaba bajo sus pies hubiera cedido de una vez por todas podría significar qué el agujero solamente fuera abriéndose más y más, especialmente por el incendio qué podía aumentar de un momento a otro dentro de la tesorería.

Los cuatro presentes pronto pudieron escuchar que justamente la puerta que daba a la tesorería comenzaba a sonar como si alguien estuviera golpeando con bastante furia, así como una pequeña risa infantil comenzaba a sonar e incrementarse viniendo de aquel lugar, misma risa con la cual todos los que estaban allí presentes habían sufrido ya en alguna ocasión anterior ¿Qué acaso esa muñeca nunca se rendiría en sus intentos de sumirlos mas en un pozo de desesperación y locura?

Por supuesto también estaba el tema de aquella araña que el médico del grupo tenía sobre su hombro, sin duda todos parecían haber sufrido las consecuencias de aquella granja y sus múltiples trampas que tan solo buscaban destruirlos lentamente, tanto física como mentalmente. Ahora que todos estaban allí reunidos podrían decidir hacia dónde dirigirse, que por supuesto quedarse en aquel salón en el que se encontraban no era una opción viable considerando que todo lo que les estaba rodeando en esos momentos eran malas noticias y peligros latentes.

Notas de juego

Lista sus actualizaciónes! Espero que disfruten!

Que ya casi estan todos juntos de nuevo después de pasar casi todo este arco separados xDD

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27/03/2022, 21:17
Doctor Gregory Palmer

- Gracias por sacarnos. - Le dije a Blanche por mí y por General, que permanecía en mi hombro.

- Me gusta, es buena chica. - Me dijo la tarántula.

- Sí que lo es, sin ella no lo conseguiremos. - Respondí al General. La bauticé así porque era quien dirigía a mi ejército de arañas. En ese momento la puerta del exterior se abrió y entraron Dexter y Cornelius. A pesar de alegrarme de verlos mi rosto no pareció demostrarlo. Ahora me sentía superior con aquellas tarántulas bajo mi mando.

- Tranquila General, son amigos también. - Le dije a la tarántula aplastada y muerta en mi  hombro y luego miré a los hombres. - Me alegro de que estén de vuelta. ¿Algún herido? Creo que mi maletín se quedó por aquí arriba antes de caer... el suelo está carcomido, la habitación contigua está ardiendo. La muñeca... lanzó un candelabro al suelo y con la cantidad de papel que hay allí y el suelo carcomido... el fuego no tardará en extenderse. Debemos salir de aquí. - Les dije a todos y se volvieron a escuchar los golpes en la puerta.

- No sabemos quien es, pero después de lo vivido allí, si no sabe usar un tirador y con esos gritos, creo que lo mejor es que se quede allí. No suena nada bien.

- Es la muerte, Palmer. Está detrás de la puerta deseando cruzarla y atraparos. - Me dijo la tarántula.

Nuevamente la miré a sus seis vivaces ojos. - No permitiré que te hagan daño, ni a ti, ni a los tuyos y tampoco a los míos. Saldremos de aquí, os dejaré libres en el bosque como os dije y volveremos los demás  casa. Que el fuego devore las almas corruptas y consuma el mal que habita en este lugar. - Miré al grupo.

- Recuerden: las tarántulas son nuestras aliadas. General les dará las órdenes oportunas. No nos harán nada, salvo que alguien las ataque, entonces no podré pararlas. Ya saben... ojo por ojo. Así que cuidado por donde pisan... y será mejor que nos movamos mientras nos cuentan que ha ocurrido ahí fuera.

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28/03/2022, 11:28
Dexter Collins

Dexter entró junto a Cornelius al segundo salón, el mismo que había dejado atrás junto a Gregory. Al ver allí a Blanche y al doctor, el guardabosques esbozó una pequeña sonrisa que rápidamente se transformó en una mueca extraña de describir.
La escena era de lo más extraña ante los ojos de Dexter, pero ya nada le extrañaba aquella noche. Había vivido tantas cosas que aquello se sumaba a la gran lista de cosas que martilleaban su cabeza.

Levantó la mano, señalando a la araña que Gregory llevaba chafada y muerta en el hombro. Justo cuando iba a preguntar, el doctor comenzó a hablar y explicar lo sucedido.

— Cornelius está herido — dijo escuetamente para seguir escuchando a Gregory.

Miró el origen del fuego y los golpes que se escuchaban tras la puerta. Su bello se volvió a erizar, como tantas veces aquella noche, advirtiéndole del peligro.

Negó con la cabeza ante la aclaración de Gregory y las arañas. No era nadie para debatir al doctor, y menos aquella noche la cual él mismo había visto y vivido miles de locuras inexplicables y tan reales como aquellas arañas. Ya fuera esa propia locura que ya había consumido la mente de Dexter la que hizo que toda aquella escena no le pareciera tan extraña.

— Tenemos que encontrar a George y salir de esta mierda de granja antes que sea devorada por el fuego — dijo apresurado. — Es esa puta, la señora Learmonth, la artífice de toda esta locura — no añadió nada más de lo descubierto por Dexter y Cornelius en aquel diario y el cuerpo del señor Learmonth muerto durante días en aquel sótano demencial. Se pasó la mano por la cara al recordar todo aquello. Tras tragar saliva siguió hablando — Hemos podido contactar con el jefe Green por radio, están de camino. Tenemos que encontrar a George y esperar a ser evacuados. ¿Lo han visto?
 

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28/03/2022, 14:03
Cornelius Fernsby

Los pasos de Cornelius se fueron ralentizando a medida que se acercaba a la casa. El ímpitu inicial fue poco a poco desapareciendo ante la visión del humo que presagiaba el incendio en la casa. Pero las llamas aún no eran visibles lo que hizo que el inspector entrara en la casa junto al guardabosques.

Suspiró con alivio al ver al menos a dos de sus compañeros con vida, al menos el doctor y la joven Blanceh. Pero al fijarse en el doctor... Una mueca de asco apareció en la cara de Cornelius mientras daba un paso hacia atrás. Fueron solo unos segundos de vacilación que tardaron poco en pasar. Después de todo lo vivido ¿qué importaba una araña muerta en el hombro de alguien?

Lo que sí le preocupaba era el humo y el crujir de la madera. No quería estar presente cuando las llamas aparecieran, eso era algo que dudaba poder soportar.

Estoy bien... No se preocupen por mí —negó con la cabeza mientras no dejaba de mirar de reojo y con recelo hacia la puerta donde se escuchaban golpes y, lo peor de todo, de donde se escapaba el humo—. ¿Dónde está el señor Russell?

Cada vez se estaba poniendo más nervioso. Tanto que ni siquiera parecía estar prestando atención a lo que decían sus compañeros; lo único que quería era salir de allí cuanto antes y, a poder ser, antes de que las llamas hieran acto de presencia.

Eso, eso... La señora Learmonth debe arder en el infierno —dijo, asintiendo a las palabra que Dexter pronunciaba y que él llegaba a entender—. Debemos salir de aquí... Esperemos la ayuda fuera...

Cornelius musitó las últimas palabras casi sollozando mientras miraba con desesperación a su alrededor. Su mente, que había amainado su locura gracias a la lluvia, volvía a enturbiarse.

¡¿Dónde está Russell?! —gritó, incapaz ya de controlarse.

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29/03/2022, 12:48
George Russell

Estaba claro que dentro de aquel horrendo escenario, las posibilidades de supervivencia eran escasas y George no era tan idiota como para explorar más esta oscuridad que amenazó con comérselo a él. Por esa razón es que mientras aquella mujer lo miraba y las muñecas hacían ese tétrico movimiento de cabeza, él no cesó en su retirada que ya había comenzado dando pasos hacia atrás en busca de una salida conveniente. 

Además esas palabras lo alentaron, no tenía planes de salir corriendo como un loco sin nada con qué defenderse. Pero dadas las circunstancias y sin darle la espalda a Jetti tanto como a las muñecas, es que abandonó ese sector de la casa a sabiendas de que esto se pondrá peor el destino sería hacia la salida del mismo hogar. Lo podía sentir, incluso cuando su mente estaba en vilo, allí a punto de caer en el abismo irreversible de la locura. 

Notas de juego

Un detalle, mi personaje está huyendo de ellas porque puse que camina hacia atrás con el hacha en la mano (en tu post dice que la tiene Jetti). Significa que no se va a quedar, solo que no salió corriendo por patas. XD

Master: En realidad Jettie es la que tuvo la Hacha, osea la tomó pero no se la dio a George, era para ella <3 Creo que se me fue explicarlo mejor, pido perdón.