Partida Rol por web

OH DIOSA SARENRAE, ÁNGEL BRONCINEO DEL SOL.

ENGENRADA POR ITHYS EN EL PRINCIPIO DE LOS TIEMPOS.

FERVIENTE LUCHADORA DE LA JUSTICIA. DERROTANDO AL PRÍNCIPE DEL CAOS ASMODEO.

DADNOS FUERZAS Y GUIADNOS CON SU HEROÍSMO PARA ACABAR CON LA AFRENTA DE ABSALOM.

QUE EL FILO DE SU JUSTICIA EXTERMINE TODO MAL.

Lorenzus rezó con toda su alma para que la Diosa lo guiara.

Usopp cierra parcialmente las heridas de Vuldruk, mientras Arlanzor ayuda a colocar la balista de manera precisa, y una llama surge de las manos de Lorenzus tras su plegaria, empezando a destruir el ritual inscrito mediante runas en el suelo.

De manera aparentemente caprichosa, esa llama se eleva y rodea la balista, así como el arma de Vuldruk.**

Rosario y Arlanzor disparan, practicamente a la vez que el otro grupo de pathfinders en la otra balista.*

Vuldruk falla de nuevo

En un último aliento, preparan la gran ballesta y la encaran al demonio... para su frustración el primer intento encalla el arma, pero enseguida se reacen y con una determinación propia de unos veteranos, Rosario y Arlanzor se miran y disparan gritando al unísono...

-¡¡¡ABSALOM!!!

El proyectil de vuestra balista alcanza en el pecho al demonio, que se tambalea sorprendido.

El demonio junto a Vuldruk mata al último paladín y le hiere nuevamente con su garra.

Aviso del supervisor

La maligna glabrezu Katazuul, atravesada por cuadrillos de balista y chamuscada por multitud de conjuros, se desploma mientras su portal chisporrotea y se cierra. Instantes más tarde, un cuerno de bronce resuena en una fanfarria triunfal para anunciar que el ejército de carne demoníaca ha sido puesto en fuga. El recorrido de vuelta a Absalom es alegre, aunque corren rumores por las calles acerca de quiénes eran realmente los invasores, qué querían y por qué unos espías muertos vivientes volvieron a la vida poco después de aparecer balizas sobre el Dominio Celeste. A pesar de la rampante especulación sobre las posibles implicaciones de la Gran Logia en la invasión, los ciudadanos en su conjunto reconocen el heroísmo con el que los agentes pathfinder evitaron personalmente el desastre y cabalgaron a la vanguardia de las victoriosas fuerzas de la ciudad. El primarca de Absalom, lord Gyr (a quienes pocos recuerdan haber visto durante el ataque), guarda silencio sobre el asunto, aunque el Señor del Asedio Wynsal Nacido de las Estrellas pronuncia inmediatamente un discurso reconociendo el papel clave de la Sociedad en proteger la Ciudad del Centro del Mundo.

En la Gran Logia, Ollystra Zadrian aporta más noticias acerca de la victoria. "Poco después de que tomáramos al asalto el castillo de asedio y matáramos a Katazuul, la armada de Absalom llegó procedente de Escadar y procedió a hundir lo que quedaba de la armada muerta viviente. ¡Una vez más, Absalom ha prevalecido frente a la adversidad!". Alzando su acorazado puño en señal de celebración, Zadrian grita: "¡Por Absalom! ¡Absalom! ¡Absalom!".

El Maestro de las Espadas Marcos Farabellus sólo parece haberse preocupado más desde que empezó el asedio, y confirma lo que muchos agentes habían descubierto ya. "Basándonos en muchos informes de pathfinders, tenemos razones para creer que el ataque ha sido un esfuerzo concertado de varios enemigos de la Sociedad Pathfinder. Ahora sabemos que la bajá Muhlia AlJakri (antaño una respetada líder de muchos pathfinders) fue quien utilizó el libro de claves del Escalón Negro para convocar a los saboteadores muertos vivientes. También tenemos razones para creer que el gran maestre Antorcha está también implicado, por lo menos hasta el punto de que fueron sicarios suyos los que pretendieron usurpar a Gulgamodh y utilizarlo contra Absalom. Finalmente averiguamos que los demonios del castillo de asedio eran vasallos de un poderoso señor demoníaco que no es extraño para la Sociedad, y no es difícil deducir que el ex capitán de expedición Thurl tuvo que ver en la creación del ejército de carne demoníaca. Hoy hemos salido victoriosos y os aseguro, que averiguaremos los verdaderos motivos de esos villanos y que les detendremos".

-ABSALOM! -gritó Stryga mientras miraba como su amiga disparaba la enorme ballesta.

Un gigantesco chasquido hizo temblar el aire cuando el enorme proyectil salió disparado por encima de todos. Tanta lucha y tanto sufrimiento se concentraban en aquel meteo y medio de madera que volaba hacia el corazón de la bestia.

-ABSALOOOOOM!!!!- volvió a gritar a pleno pulmon, borracha de patriotismo y épica.

El regreso, entre vítores, fue dulce y amargo a la vez, pues había quedado demostrado que el complot había sido urdido desde dentro de la sociedad pero Striga no se quedaba con eso, sino con los excelentes compañeros, amigos incluso, que había conocido en el fragor de la batalla y dio gracias a Desna por haberla acompañado en todo momento. Striga sintió que sus ojos se humedecían y puso sus manos sobre los hombros de los otros guerreros sagrados que la habían acompañado, Lorenzus, Rosario y Grunyar y dedicó una alabanza a cada uno de sus dioses.

Lorenzus deapertó del trance Religioso por los vitores de Striga. Habían vencido a la hueste demoníaca y el pueblo los aclamaba como héroes.

ABSALOOOOOOM!! El paladín se fundió con los gritos de victoria de la clérigo de Desna, aún sin creerse del todo la importante victoria por la que lucharon con dientes y uñas todos sus compañeros.

Con lágrimas en los ojos, Lorenzus agradeció la buena labor en equipo con unas sinceras palabras.

Ha sido un honor cumplir con nuestro deber como Pathfinders a lado de todos ustedes. Esta gesta la podremos contar a toda nuestra descendencia, cuando nuestro brazo ya no tenga fuerza y tengamos aun la suficiente memoria para inspirar a nuevos reclutas para la Sociedad. Hoy fuimos verdaderos HÉROES, fuimos los "SALVADORES DE ABSALOM"!!!

​Lorenzus se volvió a arrodillar junto a Striga para unirse a sus plegarias. Y dar gracias a todo los Dioses.

Arlanzor cayó de rodillas exhausto por la interminable lucha que llevaba en su cuerpo durante toda esa jornada. Al fin los enemigos de Absalon habían sido derrotados.

Varios de sus compañeros gritaron vítores al lograr la hazaña y el guerrero no fue menos y se unió a ellos

-¡¡¡POR ABSALON!!! -grito levantando su arma por encima de la cabeza como símbolo de triunfo.

En su cara aparecía una amplia sonrisa que coincidía con el estado anímo general. Habían tenido bajas,por supuesto, pero habían logrado devolver la libertad a su ciudad.

Al cabo de unos meses, la situación en Absalom se normaliza.

La sociedad Pathfinder es vista como salvadora ... pero también como causante debido a la traición de antiguos miembros.

Al parecer, la celebración de la festividad de la Pasión del Primer Asedio en un par de meses será la oportunidad de olvidarse de lo ocurrido.

Algunos de vosotros vais realizando tareas menores pero necesarias en la recuperación de objetos perdidos, valiosos para la Sociedad; mientras muchos libertos han decidido unirse a los Pathfinders, en reconocimiento por su heroica participación.

Sin embargo, mientras la vida sigue, numerosos enemigos siguen acechando a la sociedad ...

... pero eso es una historia que merece ser contada en otro momento.

FIN

(Continuará ...)