Partida Rol por web

—¡Kafar y Nefti!— dijo Clarissa preocupada. —¡Son del consorcio del Áspid! Ya se la jugaron a la Sociedad en Taldor consiguiendo la Campana de la Obediencia*. ¡Y aquí nos la vuelven a jugar! ¿Y qué hace ese Sabio de Diamante, quién es? 

^{_{*Como se vio en Avengers 745 Pathfinder Society, scenario ??? (No os lo espoileo, aunque creo que alguno lo habéis jugado).}}

La verdad es que todo se volvió un poco extraño cuando Clarissa llamó a Amenopheus. Aunque parecia que para algunos sí que tenía sentido.
Muchas cosas sobre los sabios de las gemas, sobre sabios muertos y vivos. Pero eso poco le importaba al explorador. A excepción de la última parte. La del ladrón y lo del consorcio del Aspid.

Vaya. Algo me dice que ya tenemos un nuevo destino.

No le preocupaba demasiado. Era un miembro de la Sociedad e iba donde le mandaban. Pero sí que le parecia extraño algunas cosas.

Y ese ladrón cómo conocia este sitio. Entiendo que el grupo de antes son los tipos que nos advirtió Torch, pero si en verdad vino alguién antes seguro que tuvo que indicarselo ese bastardo. Quizás podríamos ir a hacerle una visita y que nos de más información sobre quién fue.

Si son como decís necesitaréis toda la ayuda posible para recuperarlas...

¿Estáis dispuestos a perseguir a este Kafar, recuperar las joyas robadas y encontrar al Sabio de Diamante y descubrir lo que busca?

- Presiento que sus intenciones son oscuras. Contad con mi espada. Me gustaría en que acaba todo esto y ayudar a los Sabios, valiosos aliados del conocimiento y la sociedad.

- No se yo estoy un poco tocado de lo aquí ocurrido...igual debería dejarlo a tiempo.

Lorik sonrió, no le importaban en absoluto las joyas ni las gemias ni los sabios. Pero alli donde pudiera haber retos, él se lanzaba de cabeza.

El único problema eran los malditos espectros, las trampas...

- Supongo que esta vez nos enfrentamos a enemigos de carne y hueso, ¿no es asi? Contad conmigo.

—No podemos dejar que el Áspid se haga con esas gemas. Las usarán para el caos, sólo unos eruditos apropiados pueden usar esos tesoros. Ya que hemos perdido la gema rubí... debemos intentar recuperar las gemas de topacio y esmeralda...

Y si no voy con estos pazguatos, acabarán muertos o peor. 

—Aunque este erudito fallecido— señaló al sarcófago y a la gema rubí —hablaba de cómo recuperar las gemas... ¿No sería posible...?

Sea...

El espíritu de la erudita brilla con una luz carmesí que os envuelve a todos con un poder mágico que lleva siglos acumulándose en esa gema destrozada. Al desvanecerse, todos sentís el poder del rubí corriendo por vuestras venas...

Amenopheus os mira con cierta sensación de orgullo mientras os examina, al miraros se sorprende pero parece que algo no le cuadra.

Detecto que vuestra presencia en esta tumba ha dejado marcas de maldición en alguno de vosotros... Puedo ayudaros a quitar una de las maldiciones antes de que os lleve conmigo de vuelta a Eto.

—Compañeros, creo que lo justo es que ahora nos quite una maldición Amenopheus y luego hacer un fondo todos juntos para comprar pergaminos contra maldiciones.

- Me parece bien. 

Tras librar a Arak de la peor maldición, Amenopheus os reúne y conjura una magia poderosa para llevaros de vuelta a Eto.

Los Pilares del Sol es una zona ciertamente peligrosa, necesitaréis reaprovisionaros. Además, dado que el destino de la orden de los sabios está en juego. Creo que iré con vosotros...

CLARISSA DIGIEVOLUCIONA EN MITHYC CLARISSA

Clarissa se sentía imbuida de poder, aunque tendría que quitarse aquella maldición, producto de la incompetencia de sus compañeros. 

Si nos acompaña Amenopheus... todo saldrá al revés, pero no puedo hacer otra cosa que asentir...

Al llegar a Eto, una carta esperaba a Clarissa, al ver el sello, la mujer frunció el ceño y la abrió rasgando el sobre.

No tan estimada Clarisa.

No me costó mucho livrarme del grupo de matones que enviaste para secuestrarme y llevarme a la Jungla Mwangi, a las dos horas de camino ya les había convencido de que yo hera una ancestral princesa Atzlante y me llevavan a sacrificar a un oscuro dios mono, que tú eras una falsa clériga de Abadar y en realidad adorabas a Baphomet. Me soltaron y fueron al templo de Sothis a denunciarte, con variedad de pruebas (me kedaron muy vien).

Por mi parte, gracias a mi abilidad, porte, compostura y novleza, la Sociedad me ha mandado a las misiones más importantes, he recuperado personalmente tres piezas (de las cuatro) de la Llave Estelar, recibiendo innumerables parabienes de los Capitanes y hasta de un miembro del Decemvirato. Junto con nuevos y nobles y ricos y atractivos compañeros con los que boy. ¿Te mandaron a tí a recuperar la cuarta que estava en Osirión? ¿No verdad? Prefirieron a ese tipo de brillante armadura que le gustan los cavallos, al calvo de Asir (que majo es) y la tal Celestina.

Luego, nos hemos dedicado a recuperar ancestrales objetos osirianos rovados de Sothis hace siglos, nuestros esfuerzos fueron exitosos, pero debo abisarte. Ese jefe tuyo, Ameno-el-feo, le pillamos realizando un himpío ritual para ayudar a un pelijroso nigromante que quería romper todas las lelles de Hosirión. Se teleportó antes de que pudiéramos piyarle y aora nos disen que todo fue bisual, que no tenemos pruevas, por más que las adibinaciones de Calistria y de Farasma (echas por Healman Savesyou*) confirmaran la identidad del "Tontaina de Zafiro".

Luego, en las celebración para agasajarme, conocí al Príncipe Rubí y a su esposa-concubina-espíritu del fuego o lo que sea. Me gustan los matrimonios interraciales. Me felicitó por mis azañas y yo le convencí para que se uniera a la Corte Soberana. ¡Un día completo! Le dije que eras un fracaso como clériga de Abadar y que deberían hecharte. Dijo que se lo pensaría. 

Abrazos y besos

Tu sobrina.

Clarissa cayó al suelo desmayada tras leer el texto.