El ambiente era demencial y, lamentablemente, me había dejado llevar por él. Aspiré hondo varias veces para recuperar el control y esperar una reacción semejante de los demás. ¿Los espectros existen o ha sido una alucinación colectiva?
Bueno, ánimo a todos, a ver si recuperamos el ritmo.
-Malkovich, los fantasmas y los vampiros no existen, eso solo son cuentos para niños. Se deja caer en el sillón y pone los pies en el alto sobre la mesa para mostrar el nulo respeto que siente hacia los ricos. El barro de las botas de Emma se desliza a cuentagotas por sus suelas manchando poco a poco el mantel inmaculado. -Demasiado supersticiosos.
Al paso de las horas el ánimo de los invitados empezaba a decaer. Una reacción bastante extraña ya que en las anteriores noches se habian mantenido muy despiertos. ¿La explicación? al haber muerto uno de los vampiros el efecto de la hipnosis no era tan alto sobre ellos...
Vamos a darle un poco de dramatismo al asunto. ¿Te animas a contarnos una historia de miedo como las que te contaba tu niñera india?. Hay que pasar el rato de alguna forma xD
Ve que Emma empieza a comportarse como si de una ricachona se tratara y pone los pies encima de la mesa mientras lo mancha todo - A mi me da igual... lo limpiará Gertrudis- Una vez se friega los ojos ve que los fantasmas no están... "Quizá solamente fueron mis ganas de volverla a ver..."
Estamos todos tensos y cansados. Tampoco yo estoy de humor, pero esta espera me intranquiliza y quiero ocupar el tiempo. - Puesto que estamos condenados a esperar, les narraré una historia que me contó mi niñera india, Priya, y que seguro que será de su agrado, señora Bradley. En un país de India vivía un soberano que combatía el aburrimiento con las travesuras y ocurrencias de su bufón enano. Durante años había conseguido satisfacer a su señor, pero éste, ávido de nuevas experiencias, adquirió una enana a fin de divertirse. El soberano organizó una fiesta a la que invitó a lo más granado de la nobleza local y durante la fiesta disfrazaron a la enana, a la que el rey y su séquito más próximo sometieron a las más diversas humillaciones. Herido en su amor propio, el bufón, que se había enamorado de su compañera, decidió vengarse del rey. Mas para un simple bufón era muy difícil inferir daño a un señor poderosos, razón por la cual recurrió a la astucia. Cuando el soberano comenzó a aburrirse de nuevo, el bufón le sugirió organizar una broma pesada con la que divertirse. El rey, deseoso de combatir el tedio, asintió satisfecho y organizó una nueva fiesta a la que acudieron muchos nobles, sorprendidos de no hallar al rey ni a su séquito. El bufón había preparado unos disfraces de gorila con que vistió al rey y su séquito para que sorprendieran a los invitados. Estos se pusieron los disfraces y el bufón se aseguró de que, sobre todo la máscara, quedara tan pegada al resto que no pudiera separarse sin ayuda de terceros. Cuando los "gorilas" irrumpieron en el salón, era tal el grado de realismo de los disfraces, que las mujeres comenzaron a huir y los hombres se amilanaron. El rey estaba encantado, por lo que continuó acechando a los invitados, imitando los movimientos del gorila. Pero, en un momento dado, los caballeros presentes hicieron acopio de valor y comenzaron a empujar y agredir a los gorilas. El rey quiso poner fin a la broma, pero las máscaras estaban tan pegadas que no podía quitársela y sus gritos y los del séquito se confundían con sonidos guturales como los de los gorilas. Además, recibía tales golpes que no podía pensar ni actuar con claridad. El bufón aprovechó la ocasión y sugirió a los invitados que ataran a los gorilas, como hicieron. Cuando terminaron, el bufón, con su compañera enana, estaba encaramado a una ventana y sujetaba una antorcha que arrojó a los gorilas. El disfraz estaba hecho de piel, que ardió de inmediato y tan rápido que los invitados no pudieron hacer nada cuando descubrieron quiénes eran los gorilas. El bufón tuvo aún ocasión de increpar a los gorilas y dar por cumplido su juramento de que un rey tan malvado jamás haría daño de nuevo a un ser indefenso, antes de descolgarse por la ventana hacia el exterior con su compañera, y huir del país sin que hasta la fecha se haya vuelvo a saber de ellos.
Versión libre de "Hop Frog" de Edgar Allan Poe y tochopost.
Malkovich se puso a explicar una historia "¿A que venia esta idiotez?... Son tal para cual la Bruja(cocinera) y Malkovich" me alejo mientras explica y me voy a sentar en un sillón, pensativo me quedo mirando mi copa de Jack Daniels y intento saborearla... quizá no vuelvo a saborear ninguna más... -Menuda mierda...- Se me escapa mientras miro mi vaso, aunque no creo que nadie me haya escuchado.
Hago oídos sordos al señor Siral. - Espero que los haya entretenido. ¿Por qué no se animan y cuentan alguna historia?
-No nos animamos porque no somos tan infantiles como tu, ¿No lo ves?... explicar historias, ni que estuvieramos de campamentos...- Lincoln se pone la mano en la cara y reza porque no explique ni una mas.
-Me ha gustado la historia, el bufón puso en su sitio a su rey. En este comedor también hay gorilas. Rie por lo bajo, ja ja ja.
-Ahora que hemos tenido este problema con los fantasmas... tengo una historia que contaros... sobretodo a ti cocinera, que no crees en ellos... me la contó un compañero mientras estábamos en una furgoneta esperando antes de empezar un ro... un trabajo, cosas mías- me pongo la mano cerrada en la boca -Ejem- Me quito la mano y apagando las luces empiezo:
-Nunca debes ponerte frente al espejo y repetir nueve veces seguidas el nombre de Verónica. Sé que quizás hayas oído esta historia...Quizás pienses que es mentira y no me creas...está bien, no pasa nada, pero por favor NO TE BURLES DE ELLA ya que puede caer sobre ti una maldición terrible. -
-Veronica era una chica de 14 años que haciendo espiritismo en una casa abandonada no siguió las reglas de los fantasmas, se burló durante toda la invocación y una silla que había en la habitación cobró vida y la golpeó mortalmente en la cabeza. Pero la venganza de los espíritus no acabó aquí: Verónica aun no descansa en paz. Su espíritu está condenado eternamente y ahora es ella la que quiere vengarse de todo aquel que no sabe respetar el Mas Allá.-
María era una chica que conoció la leyenda en su universidad. Era mayorcita para creer en esas estupideces, pensaba ella y se reía. Sus amigos la picaron, ya que si no tan valiente que era no tendría problemas en hacerlo. Fue a un baño, acompañada de una compañera y lo hizo. No pasó nada y el grupo, entre risas, lo olvidó enseguida.
-Pero María no pudo olvidarlo. Al hacerlo sintió un escalofrío indescriptible...y su pesadilla comenzó esa misma noche. Tumbada en la cama, despertó por un sonido raro. Era un susurro indescifrable que oía cerca de la nuca. Además sentía como si alguien respirara en su cuello. Asustada, se levantó y encendió la luz. Nada había a su lado. Pero no pudo dormir en toda la noche. -
-Al día siguiente, no se atrevió a contárselo a nadie de la universidad aunque aún seguía aterrorizada por lo que le había sucedido la noche anterior. En mitad de la clase tuvo que salir al servicio. Cuando entró al baño, hacía mucho frío y una capa de vaho cubría el espejo. María lo limpió con la mano y vió horrorizada que tras ella había una chica con una expresión de odio y sangre en la cabeza. Cuando se volvió a mirar, ya no había nadie. Rió nerviosamente, pensando que todo era fruto de su imaginación, los nervios y el cansancio. Sin embargo, al volverse hacia el espejo vió algo que la dejo blanca. En el vaho había frase escrita: "No debiste invitarme a volver".-
-María no pudo soportarlo. Encerrada en un manicomio, sólo decía que el fantasma de Verónica la seguía atormentando. No pudo soportarlo y acabó suicidándose.-
-Yo lo pensaría dos veces antes de meterme con el Más Allá-
Sonrío toda la historia mientras miro las caras de los demás huéspedes... "ojalá Gertrudis se haya suicidado al escucharla..."
-¡Ja! pamplinas, esas historias no asustan a nadie. Lo que verdaderamente causa estupor es ver a una persona agonizar hasta exhalar su último aliento. Bebe de su copa y se moja los labios con Jack. Los tiene un poco cortados por el frío. Recuerdo cuando vi mi primer cadáver; mi abuela. Fue una experiencia muy traumática pero gracias a eso deje de tenerle miedo a la muerte. Como para creer en fantasías de fantasmas, brujas o vampiros. La muerte forma parte del ciclo de la vida, es cuestión de tiempo que el filo de su guadaña caiga sobre nuestros cuellos. Brindo por eso hasta vosotros sufriréis el mismo desenlace a pesar de ser multimillonarios. Salud!. Vuelve a pegar un trago. La cocinera está empezando a ponerse roja como un tomate.
Se supone que estamos en época invernal. Dentro de poco será Navidad.
La espera en el comedor se hace interminable. Termino de cenar me tomo el postre y escucho atenta las historias que cuentan los invitados. -Discrepo con Emma. Suceden fenómenos paranormales que no pueden explicarse cientificamente. Quiero contarles una sobre un hotel maldito como este.
Hace 200 o 300 años en una mansión cerca del río Mississippi, vivía una familia muy adinerada descendientes de un fundador de la región. Un día la señora de la casa, invitó a unas amigas a merendar en su preciosa casa. Una de las criadas, quiso escuchar lo que decian y puso la oreja en la pared de la habitación donde se encontraban las señoras.
El señor de la casa la vió y la cogió con rábia y desprecio por el brazo hasta llegar a la cocina. Llamó a tres criados más y entre ellos inmobilizaron a la pobre mujer. El señor cogió un cuchillo y lenta y dolorosamente le cortó la oreja. Sus palabras fueron: " Eso solo te lo hago para que aprendas a ser menos cotilla, si lo vuelves a hacer ya sabes lo que te haré"
La mujer aún sangrando se encerró en el sótano y se puso a llorar desconsoladamente. Muy enfadada y dolida, quiso hacer venganza. Compó unas setas venenosas en el mercado y las colocó dentro de una tarta que luego sus amos comieron. La señora y una de sus dos hijas murieron en el acto. El señor y la otra pequeña, como no comieron demasiado no se envenenaron. Al cabo de unos días el señor con la ayuda de siete sirvientes cogieron a la "asesina" la ataron con unas cuerdas y la colgaron del árbol más grande del jardín. Años después la casa se convirtió en un hotel y muchas personas que se hospedaron allí aseguran haver visto a una niña pequeña sentada en un sofá llorando desconsoladamente. Otros afirman haberse sentado en el banco de debajo del árbol donde colgaron a la criada y ver a una mujer de color que les empuja y les hace caer del banco con una fuerza y un odio increíbles.
Muchos empleados del hotel también han notado presencias "fantasmales" en muchas de las salas y hasta un técnico paranormal que se hospedó en una de las habitaciones hizo unas fotografías del tejado de la casa donde se pueden ver una niña y una mujer sentadas allí con la mirada perdida. El hotel está abierto y todo el que quiera lo puede visitar.
Supongo que será la congoja y la preocupación, pero no puedo evitar sentir curiosidad por la señora Bradley. - Por sus palabras percibo que ha debido tener una infancia muy desdichada. Como imagina, no ha sido mi caso, aunque he tenido oportunidad, por trabajo, de entrar en contacto con muchas personas cuya vida es trágica. Créame que lo siento - Le ofrezco la mano - y que lamento que la hayamos podido importunar - miro al señor Siral.
Sonrío a la señora Swanson -Buena historia, enserio muy buena-
Escucho la "triste" historia de la cocinera... "Me sabe mal pero... bueno, todos hemos tenido nuestros problemas" Mientras pienso esto Malkovich, con su frasecita, me mira insinuando que me he pasado con ella -A mi no me mire - No puedo decir nada mejor "... quizá me he pasado"
-Imaginas bien Malkovich, nací en el seno de una familia humilde. Mi padre se tuvo que matar a trabajar como un burro para poder enviarme a la escuela. Mi madre se quedó paralítica después de tener un mal parto. Eramos 4 bocas que alimentar, mi hermana la mayor cuidaba de todos. Fueron años dificiles, me evadía de la realidad cocinando platos para mi familia, no habia mucho que comer pero me las ingeniaba para buscar nuevos sabores. Ver a mis hermanos felices era la mejor gratificación. Luego al crecer tuve la suerte de tener un benefactor y fui escalando posiciones poco a poco todo a base de esfuerzo y trabajo duro.
Emma aprieta la mano de Malkovich agradecida por su consideración. Se ruboriza un poco aunque él no lo nota porque esta roja por el whisky. -No se preocupe (vuelve a tratarlo de usted), Lincoln no es más irrespetuoso que los otros ricos o gente ordinaria con la que tengo que tratar a diario.
Lincoln se queda boquiabierto mirando a la pareja feliz - Dios...- cierra la boca y sonríe mientras se gira a Swanson -Disculpe- Le digo amablemente, ya que por lo visto esta noche será eterna al menos hablaré con alguien, A longhorn le hice un feo muy gordo no querrá ni verme, Abend la odio completamente... "rubia creida...", Evangeline no da señales de vida... y dgamos que la condesa y el petrolero estan ocupados así que mejor hablo con alguien con la que no he tenido mucho contacto.-Se que no hemos hablado casi y seguramente tendrá una mala imagen de mi pero, ¿Podría contarme algo de usted? No quiero parecer osado ni nada por el estilo, solo es por pasar el rato, si quiere.-
Escucho con atención al resto, sus palabras, sus historias. Nadie me ha prestado atención, aunque lo agradezco. Tengo mucho en que pensar y la "fiesta", por llamarla de alguna forma, no ha ayudado mucho a decir verdad. Se ha desvirtuado tanto que desconozco en que punto nos encontramos. Tengo la cabeza en otro sitio y no quiero interrumpir la conversación de nadie. Por esa razón permanezco sentado y bebiendo sorbo a sorbo, disfrutando de mi copa de Jack.
Me agrada la reacción de la señora Bradley. - Por favor, llámeme John y tutéeme. Me sorprende la entereza con la que está encarando la situación que vivimos. Hasta ahora habíamos tratado con Gertrudis, pero veo que la cocina alberga misterios agradables - le guiño un ojo.
- El amor está en el aire... - hablo, o mejor dicho, canturreo más para mi misma. Tomo nota mental de las historias, imaginándolas como serían adaptadas al teatro. Si salimos de aqui creo que hasta me voy a hacer guionista.
Pensando en la probable nueva vocación de mi vida me acerco más al señor Novotny.
- Beber en semejante cantidad no le hace bien a nadie - pongo una mano encima de su copa - creame, habla la voz de la experiencia.
Le dedico otra mirada distraída a la señora Bradley, quien acaba de ganarse el título a la cocinera más notable con la que me haya cruzado. Vuelto a girar hacia el señor Novotny y le sonrío de la forma más cálida que conozco.
Por desgracia Malkovich ya no podrá cortejar a Emma por más que quiera. Linc se ha quedado esperando a que alguna mujer le haga caso (como siempre), Swanson no se ha dignado a dirigirle la palabra y para postre su estimada Evangeline ha coqueteado con Novotny delante de sus narices. La condesa y Morley no han pasado a mayores, mucho ruido y pocas nueces. El resto de invitados han bebido Jack con normalidad, hemos presenciado a los fantasmas burlones de los difuntos, algunos se han escandalizado otros se han preguntado wtf con el baile, hemos contado historias de miedo... Todo parece indicar que la locura se ha instalado en el Red Victorian. Definitivamente los huéspedes están perdiendo la poca cordura que les queda. FIN DE LA QUINTA NOCHE.