Partida Rol por web

Me incorporo, con un mejor tono de piel, pero todavía un poco pálido.

Bueno, creo que puedo continuar, me encuentro algo mejor. Gracias Miguel.

Sigo a Miguel.

Finalmente llegó ese "click" tan ansiado.

La puerta se abrió y entrasteis en una gran sala, un rápido vistazo os sirvió para saber que era la lavandería del complejo, todo estaba lleno de toallas y sábanas dobladas, aquel sitio estaba muy bien ordenado, parecía tranquilo, seguro.

Había un gran baúl al fondo de la habitación, junto a las lavadoras. En un rincón apartado había una pequeña mesa donde descansaba una antigua máquina de escribir con un papel encajado en su rodillo.

Rebuscando en la lavandería, encontrasteis un pequeño cultivo de plantas cuya tonalidad azul os recordó que eran conocidas por sus propiedades purgantes de cara a intoxicaciones y envenenamientos.

Además, encontráis en la máquina de escribir una hoja con texto escrito en su interior:

Al entrar estaba todo demasiado tranquilo, parece que aquí si podremos descansar, además encontramos una hierba medicinal que podemos aplicar a Michael en el caso de que lo necesite, por lo que se la cedo - Aplicatelo si lo necesitas Michael -  que parece que su estado no ha sido recompuesto tras aplicar el spray de primeros auxilios. 

-¿Zombies? ¿En serio? - pensé en voz alta, conocía rumores sobre la corporación Umbrella, rumores de experimentos ilegales, pero ésto sale de la realidad, y luego estaba aquel bicho que se descolgó en las duchas, aquello no era un zombie - ¿Hasta donde estaban llegando aquellos experimentos? - me pregunté.

- Estamos bien jodidos tío, deberíamos seguir la incursión, encontrar aquellas instalaciones subterraneas y tal vez el capitán no nos eche la bronca otra vez, ¿No crees?, aunque ésto se nos escapa un poco de las manos - comento a Warren - Continuemos un poco más por el otro área, tal vez encontremos a alguien por allí, si todo ésto es verdad, la zona de los presos estará repleta de ésas cosas y nos vendría bien algo de ayuda - indico a Warren mientras agarro de nuevo el pomo para salir de la habitación y continuar.

Al entregarme la planta Miguel decido tomármela.

Bueno esta planta es medicinal, a ver si me encuentro mejor dentro de un rato. Despues de tomar esto, espero.

Voy con Miguel.

En cuanto la puerta (8) se abrió ante ustedes apareció una habitación no demasiado amplia pero con una iluminación bastante escasa. Lo que primero os llamó la atención es que todo estaba recubierto de telarañas: el suelo, las paredes, el mobiliario. De hecho, dicho mobiliario fue fácilmente reconocible para ustedes; era una especie de taller, seguramente allí los presos dedicaban horas para canalizar su represión en forma de chapuzas metálicas que quizás podrían servirle a alguien. El lugar a simple vista no tenía nada de especial, pero requeriría un examen más exhaustivo para intentar encontrar alguna pista o detalle de interés.

Para vosotros era todo un enigma el saber qué había pasado allí más que nada porque si fuese el descuido el detonante de aquel panorama se debería haber repetido también en el resto de salas. Con un rápido vistazo detectasteis algo que resultaba curioso, se trataba de una máquina de escribir también recubierta de telarañas que tenía aún un folio puesto tras el rodillo, tenía algo escrito pero desde vuestra posición y con aquella pegajosa hebra por doquier era bastante complicado tener una idea clara.

Miguel creo que deberíamos seguir, este cuarto parece que no se ha usado en mucho tiempo.

Pateo el suelo retirando, algunas de las telarañas del suelo y levantando polvo.

Está lleno de mierda. Vayamos a la siguiente sala.

Me voy hacia la sala [3].

Al entrar en aquella habitación [8], una sensación extraña recorrió mi cuerpo, como cuando encontramos toda aquella comida entre muertos, no era solo mugre acumulada, tanta telaraña resultaba extraño, pues tan solo ésta habitación se encontraba en ése estado.

- ¿Has visto éso Michael?, aquella máquina de escribir podría tener alguna información interesante como la que nos encontramos en la lavandería - comento a mi compañero - Aunque veo arriesgado adentrarnos, será mejor continuar como dices - así que siguiendo a mi compañero, vuelvo a salir da la habitación para continuar la incursión.