Partida Rol por web

-Digamos que siempre me han atraídos la historia colonial de nuestro país y, ahora que vivo en Riverdale, también la historia de este pueblo -declaré, con una sonrisa-. No te preocupes si no sabes responder a mi pregunta. Supongo que encontraré la respuesta, de un modo u otro. Por cierto, ¿se sabe algo sobre Jim Tristan?

-Descuida, hasta yo comprendo eso de bajo perfil, no es que de por si tuviera uno muy alto sabes- me rasque la cabeza algo nervioso, entendía que esto se había convertido en algo raro y bastante peligroso y lo que menos quería es salir lastimado o que lastimarán a mis padres por mi culpa.

Con mucho cuidado guarde la película en la mochila así como la extraña piedra, tal vez hubiera sido mejor preguntar que eran pero a este punto sería mejor solo confiar en el chico y no tratar de saber más -Oye viejo, gracias y perdón por comportarme como idiota, solo que no estaba acostumbrado a esto,  ya sabes solo soy el loco de los videojuegos, de todas maneras gracias- estreche el puño con el chico, para luego salir ya era tarde y habia tenido mucho por un día, quería llegar a casa, aunque no sabía si podría dormir.

Ahora va a resultar que tengo poderes...

No tengo noticia de que tenga ningún don, con lo que no hay mucha dureza que alegar - respondo con un encogimiento de hombros - al menos no más que la que podría alegar cualquiera que haya vivido en el siglo XXI.

Me giro hacia las demás.

¿Me estáis diciendo que soy una especie de bruja o algo así?

La señora que tenias delante comenzo a caminar a tu alredodr trazando circulos, extrañamente su voz sonaba con las voces de varias personas a la vez. no solo de ella y no solo de un punto.

No eres una especie de... Eres una hermana nuestra. Una bruja como tu misma dijiste aunque ese termino estaria errado a la hora de describirnos.

Melodi dio un giro al volante del auto, haciendo que este comenzara a girar hacia la derecha, las sombras dentro del auto habian hecho que verle la cara a la chica fuera muy complicado en aquel momento. Y aquella vision sombria se complementaba con el cambio en el tono de voz de la rubia, claramente aquel no era su tema de conversacion favorito - Realmente no mucho, solamente que lo tendran en arresto domiciliario hasta que cumpla la mayoria de edad para jusgarlo.

El camino a casa de Dante comenzo un poco solitario, puesto que durante dos kilometros estuvo solo en las calles de riverdale. una vez llego al centro del pueblo el chico comenzo a ver gente caminando o cerrando sus negocios, Las luces del pueblo lo dotaban de un aire de mistisismo mientras los pensamientos de aquellos ultimos dias comenzaban a poblarle la cabeza, Brujas sociedades secretas, misterios y secretos. aquello estaba muy lejos de la vida normal de estudiante de secundaria que el estaba acostumbrado. Derepente dio un respringo al ver un gato negro. aunque esta vez el animal no lo envolvio en ningun hechizo. ni siquiera le presto atencion

-Qué cosas... -dije, desviando la mirada y mostrando un tono de amargura-. Jim Tristan me llevó en su coche hasta el instituto esa misma mañana. Y por la noche intentó matarme... ¿Qué puede pasársele por la cabeza a una persona para que pueda cambiar el modo de ver la vida en apenas unas horas?

Permanecí en silencio el resto del viaje, pensando en la forma de abordar la investigación sobre los Nueve Círculos. Me pregunté si Carah y Ulysses habrían descubierto algo en las últimas horas.

-Debo calmarme- me recuperé de la impresión del ver al felino, vaya tonto estaba haciendo. todo esto me estaba ganando debía de actuar normal, al menos lo mas normal posible, para llegar a casa faltaba poco, unas calles mas y todo normal, aun así estaba en el centro, quizás lo mas conveniente era hablar con mi madre, tomé el móvil y marque su numero con total tranquilidad, esperando que me contestará.

-Mamá ¿aun estas en la clínica, podría irme contigo a casa?- le pregunte.

Mis disculpas, nadie me ha pasado el glosario de términos - respondo, desafiante, ya que por muchos abrazos y hermanas que me dirijan sigue siendo evidente que me han traído aquí en contra de mi voluntad, por mucha voluntad de hacer algo bueno por mí que tuvieran. Eso es algo que no puedo olvidar y que me evita poder confiar del todo en ellas - Pero, por favor, prosiga con la explicación. ¿Qué somos?