Partida Rol por web

Todo el mundo parece estar preparándose para la tormenta. La verdad, es que aunque las tormentas pueden ser habituales en este clima, Maru está acostumbrado a que cuando cae la mayor simplemente hay que cambiarse a la barra de dentro del hotel, y subir más el volumen de la música para tapar los truenos. Los clientes se lo pasan de cine en la sala de baile, tanto como en la terraza.

Una cosa estaba clara, nadie iba a usar los barcos hasta pasada la tormenta. El lujoso yate, dado que no iba a ser usado, podría servir de escondite si lo necesitaba... nadie le buscaría ahí dentro, y sólo necesitaba marcharse antes de que sus dueños volvieran a reclamarlo. Puede que hasta encontrara algo de comida.

-¡Eh muchacho! - Le dice a uno de los tripulantes que están preparando el barco. - ¿Sabes dónde está Conrad? 

Si el barco de Conrad está aquí, entiende que no haya aparecido al recado del ruso. Ahora falta saber dónde está el capitán. A Maru le pareció raro ver el barco sin Conrad, no podía estar muy lejos.

La idea de Maru era contactar con Conrad lo antes posible, pero si no era posible habría que buscar otra salida... y las opciones empezaban a acabarse.

Kimo asintió cuando René dijo que pasaría a ver a Leinani y Mae. La acompañó hasta una de las puertas y la abrió con una llave que guardaba en el bolsillo, como parte de su llavero. 

La enfermería en realidad no era tal. Se trataba de un despacho con dos camas a un lado, una mesita con un botiquín y una mesa de escritorio apoyada contra la pared opuesta. Leinani y Mae estaban en ese momento sentadas en las camas. Mae tenía una venda en la cabeza y algunas manchas de sangre en la ropa. En aquel momento la enfermería parecía estar haciendo también de calabozo improvisado. 

Leinani se alegró de ver a René asomarse por la puerta. 

-Toca a la puerta cuando hayas acabado - le dijo el jefe de policía antes de cerrar de nuevo - Puedes quedarte el tiempo que necesites. Habrá alguien toda la noche - después se dirigió a Maeva y Leinani - ¿Tenéis todo lo que necesitáis? ¿Os puedo traer algo? - No parecía comportarse de forma hostil hacia ellas. Al menos no como habían hecho el alcalde y los policías en la playa. 

Al parecer Conrad se había marchado unos veinte minutos antes. Había sido quizá algo de mala suerte que no se cruzasen allí directamente. El viejo capitán se había encaminado al Shark Pub para beber tras lo que parecía haber sido un día bastante complicado. 

Maru conocía el Shark Pub, era el lugar de reunión más popular de Palmerston. En realidad uno de los pocos bares del atolón. Si no estabas en el hotel, ibas al Shark Pub. El lugar no estaba lejos. Maru tendría que cruzar el pueblo, y tardaría unos 10 o 15 minutos caminando, si decidía ir hasta allí. 

Rene sonrió al entrar en la enfermería cuando vio a las chicas. Sintió alivio al notar que no estaban maltratadas.

Cuando Kimo se fue, ella se acomodó en una silla, dispuesta a hablar tranquilamente con ellas.