Partida Rol por web

Los tres, John, XtreM y Felipe, os habéis despertado en vuestros camastros maniatados. Vuestros cuerpos no reaccionan y uno de los técnicos había escuchado los balbuceos de John.

No parecía que el ex-policía le tocara pasarlo bien con el taser que tenia el técnico en la mano.

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Cuando Eliot entra por la puerta, los dos trabajadores de la corporación están riendo mientras John se convulsiona en su camastro debido a las descargas que le proporcionan.

Ambos se quedan mirando el aspecto maltrecho de Eliot que parece haber recibido una fea herida que deja un pequeño rastro de sangre. Pero su aspecto ha cambiado mas allá de la herida de la ultima vez que lo habían visto.

Ahora lucia un chaleco, casco y armas que había quitado de las manos frías de los guardas de la corporación.

Buenos días, princesas. - dijo Eliot a sus tres compañeros mientras apuntaba con una de las ametralladoras a los dos trabajadores.

Veamos, podéis acabar simplemente inconscientes o con un empacho de plomo, queda a vuestra decisión. - mueve ligeramente la punta del arma en dirección a las camillas. - Vais a soltarlos y poneros de rodillas con las manos en la nuca.

Los técnicos siguen las instrucciones de Eliot y desatan al resto antes de ponerse de rodillas con cara de acojone total.

Jhon intenta recuperarse y ponerse en pie en cuanto se ve libre. Mirando con rabia a sus torturadores...ahora os voy a decir por donde os podeis meter el puto taser...

Venga, venga, daos prisa. - indicó Eliot a sus compañeros. - A ver si os creéis que he sido un puto ninja para llegar hasta aquí.

Creo que todos sabéis usar un jodido arma de fuego, ¿no? - preguntó repartiendo armas. - Porque soy como el puto Santa Claus en Navidad.

Pero qué es esto, sorpresa tras sorpresa. Ver a Eliot aparecer totalmente armado y vivo es una novedad.

Nos vamos liberando de nuestras ataduras y de nuestro entumecimiento mental.

- Jo tio, creía que no volvería a verte más. Una de esas pistolas me vendría bien. Cojo tambien el táser que usaban nuestros anfitriones y luego los registro recorriendo con las manos toda su ropa para acabar atándolos como estábamos nosotros.

- ¿Qué demonios hay por aquí?, ¿alguna salida con un coche esperando en la puerta?.

Sí y dos azafatas para cada uno, una morena y otra rubia, ya sabes, para poder elegir. - responde Eliot a Felipe sin ningún asomo de humor en su voz.

Estaban a puntito de meterme en una especie de quirofano, supongo que para que me volviese a echar otra siesta. - explica - Así que noquead de una vez a esos dos y mirad si por aquí hay algo útil.

¡Rápido! - urgió mientras vigilaba tanto el pasillo como a los dos técnicos.

agarro la ametralladora y doy un culatazo en la cabeza a cada uno de los dos "amigos" para desearles un feliza sueñecito.

Jhon noquea a ambos técnicos, mientras, Eliot escucha el paso de botas corriendo por el pasillo en vuestra dirección.

Jhon recoge el Taser de los tecnicos que estan ko y se coloca con la ametralladora en una posicion ventajosa apuntando....

Vamos, princesas, que no tenemos todo el día. - urgió Eliot mientras se ajustaba el chaleco y las gafas protectoras y salía al pasillo apuntando con el rifle.

Esto no son los marines, así que u os dais prisa o sí dejaremos a un hombre atrás.

Doy un vistazo rápido por la habitación por si se viese algo útil, armas, algún cuchillo o visturí, herramientas de algún tipo o algún teléfono o similar.

Algo de sudor recorre mi frente, casi era menos acuciante cuando nos estaba persiguiendo alguien. Aquí estábamos encerrados en una ratonera esperando encontrar un trocito de queso mientras alguien se divertía observando nuestros intentos. Pero por ahora seguimos dando guerra y seguiremos dando.

Eliot se va, el resto os quedáis aquí.

Cojo las tijeras y las escondo, la verdad es que no hay gran cosa útil, pero tampoco es el lugar para encontrar un arsenal.

Salgo tras Eliot corriendo esperando encontrar el camino a alguna parte lejos de aquí.