Partida Rol por web

La nave se eleva en el aire y comienza a moverse.

La dirección que toma se os es desconocida y, por lo que parece, el agente no tiene demasiadas ganas de hablar.

Cuando se sienta Nohana se quita los zapatos, los tacones eran incómodos y además no eran sus zapatos por lo que se los quita y pone los pies en el frio y metálico suelo de la nave mientras mira para el techo, estaba un poco cansada, así que como parecía que nadie quería hablar decide apoyar la cabeza y cerrar los ojos, con un poco de suerte el viaje seria largo y podría quedarse dormida y descansar un poco de la tensión, porque ella la tensión de ese tipo de situaciones no era algo que estuviera acostumbrada, además que aun arrastraba el cansancio de los días del "campamento de SHIELD"

- Vamos a hacer una parada...

Escucháis que dice por los auriculares cuando el avión comienza a descender. 

Al tocar tierra y abrir la compuerta, antes de que os de tiempo a nada, sube al avión un joven.

Es un chico de unos veintipocos años, con gafas y una tablet en la mano. Va vestido con vaqueros, camisa y unas deportivas. Si es un agente, no lo parece.

El muchacho pasa por vuestro lado y os hace una indicación con la cabeza de saludo, tras lo cual pasa a la cabina. La compuerta se cierra y el avión se eleva.

- Bien... - Escucháis decir al agente. - ¿qué ha pasado?

Nohana que estaba medio adormilada no presta demasiada atención a lo que sucede en la parada, solo se despierta un poco más cuando el hombre les pregunta, ella estira un poco el cuello que lo tenía un poco agarrotado por estar en esa postura tan incómoda y dice:

- Pues que se fastidio la cosa, así de simple. Yo estaba en una especie de biblioteca hablando con un tipo que no era el organizador de la fiesta pero parece que lo conocía, la verdad que no era desagradable, todo cambio cuando nos encontramos con Ryu y dijo que éramos un matrimonio, claro no concordaban las versiones y aunque les explique que lo que estamos es comprometidos no sirvió

La chica saca el móvil y lo deja en el asiento mientras dice:

- Saque algunas fotillos y demás de la zona no sé si servirán

Mantenida mi posición sentado esperando, al final el avión o ese aparato pareció detenerse y en la nave entro un tipo, no lo conocía. Tras unas palabras con el otro agente, pareció preguntar que ocurría, que había pasado. Antes de decir nada Nohana ya hablo, diciendo lo sucedido.

Exacto, ella tiene razón yo rompí su coartada por así decir. Por mi parte hice una grabación de la sala donde estuvimos mientras estaba en el sitio. Dije sin añadir más, no era necesario, decir algo más sería una estupidez. Saque el móvil y lo deje en el asiento de al lado y mantuve mi postura esperando el supuesto castigo que me esperaba.

Si esperaban que buscara alguna justificación o algo que quitara responsabilidad a mis actos, se equivocaban, asumiría mi castigo sin lloriqueos.

- Ya he visto las fotos y la grabación.

Escucháis una segunda voz que suponéis que es del chico que ha entrado.

- Bonitas, aunque el encuadre y la luz se pueden mejorar, así como el sonido... 

La voz del chico te resulta tremendamente familiar...

Mi mirada se clava en el bocazas, le reconocí era el maman que me había vacilado por teléfono.

Bueno ese es tu trabajo, así que ya sabes que hacer. Aunque creo que me suena tu voz, si mal no recuerdo, hablamos hace un rato y te mostraste bastante elocuente ¿Pero recuerdas que te dije no? Comente mirando al chico, clavando mi mirada en él, sopesando si sería bueno romperle algunos huesos o no. El chico no parecía ser un gran combatiente y atacar a alguien más débil que yo no era una cosa que hiciera salvo por extrema necesidad. Pero era complicado aplacar mis ganas de hacerlo y de paso así bajar la frustración por mi actuación en la misión. Apreté uno de mis puños quedando la mano blanca.

Mas te vale no mostrarte tan elocuente ahora, mas que nada porque no te salva no estar tras un telefono.

La voz de aquel tipo en un primer momento le sorprendió porque no se lo esperaba, después suspira mientras le escucha para responderle, pero su compañero Ryu se adelanta, parecía molesto con aquel chico de gafas, parecía que algo había sucedido entro los dos hombres que al parecer hablaron por teléfono antes, cuando Ryu termina Nohana habla:

- Bueno, relajémonos, la próxima vez las fotos las hacemos mejor haciéndonos un selfie a ver si así la encuadramos mejor o usando un palo selfie

- Lo recuerdo perfectamente... 

Escucháis que contesta el chico y, a continuación, por los auriculares escucháis lo que parece una grabación.

- Hola señor Mushigara...  ¿En qué puedo ayudarle? 

- Buenas noches, necesito un nombre de quien me invito a la fiesta, para mantener mi coartada. Además os enviare un video que grabe de la sala, para que lo vayáis analizando.

- Agente... Su misión es obtener toda la información disponible de la fiesta... ¿No cree que conseguir los nombres de los anfitriones es parte de esa información que tienen que conseguir? Y si quiere sacar alguna información de ese video, si lo quiere para usarla en la velada, tendrá que analizarlo usted mismo... ¿Más preguntas? 

- Gilipollas cuando acabe aquí te rajare el puto cuello, después de divertirme contigo.

Después de esto se detiene la gravación.

- ¿Ve? - Escucháis que dice el chico. - Tengo una memoria prodigiosa.

- Señorita Kitajima, Señor Mushigara. - Escucháis que dice Phetifer. - Este es el Agente Max Hierick, el especialista del equipo en informática y tecnología. Si yo fuera ustedes, me intentaría llevar bien con él. Aunque solo es un consejo...

Se bien lo que dije no me hace falta esa memoria tuya. Pero recordare que no hiciste una mierda para ayudar. Comente sentándome de nuevo y manteniendo a duras penas la calma. Por lo visto lo que era más bien, era un jodido bocazas, si sería un trabajador mío seria ajusticiado como debía, pero claro esto no era una familia Yakuza, solo una agencia gubernamental.

Nohana se echa hacia atrás mientras dice:

- Bueno, como no me interesa esta discusión creo que voy a recostarme un poco, estos días de entrenamiento en el campamento han sido demasiado para mi

Se echa un poco hacia atrás mientras cierra los ojos, para decir:

- Por cierto, a donde vamos ahora?

- Nos vamos a Londres.

Y sin más, la nave comienza a acelerar.

FIN DEL CAPÍTULO 1.