Partida Rol por web

Kael se cruzó de brazos escuchando las palabras de su compañero y viendo la reacción de la persona que supuéstamente les había salvado. Posteriormente se acercó a Ben para comprobar su estado, parecía bastante malherido pero a simple vista tampoco podía averiguar su verdadero estado. -Mi compañero tiene razón, es importante lo que hemos venido a hacer aquí. Si puede llevarnos hasta la nave se lo agradeceríamos. 

Yo intente hablar pero de mi boca solo podían salir unos pequeños gemidos, intente moverme pero no era capaz, al final me canse y opte por descansar.

El hombre desconocido suspiró levemente

- Sabía que tarde o temprano algo así sucedería - comentó mientras sonreía al comprobar que Ben había despertado. Después, mientras preparaba en un cuenco de roca un preparado basado en hierbas comenzó a hablar

- Por desgracia vuestra nave está destruida, todo lo que queda es chatarra y me hubiera encantado ser lo suficientemente inteligente como para repararla, pero eso no está en mis manos - después guardó un poco de silencio mientras terminaba con el cuenco para después acercárselo a Ben

- Creo que yo soy a quién buscáis, soy sensible a la Fuerza y he de reconocer que os he sentido a vosotros también, de ahí que os haya ayudado, me inspiráis confianza - comentó con la mirada perdida a la vez que le daba el contenido del cuenco a Ben

- Tómalo despacio, esto deberá ayudarte a no sentir tanto dolor, sé que sabe asqueroso pero lo importante es recuperarse - después miró a Norskk y a Kael, fue ahí cuando ya pudisteis notar que él también era uno como vosotros, pero de alguna manera había logrado camuflar su condición.

A Norssk le brillaron los ojos durante un momento. Ya tenían parte del trabajo hecho. La manera de hacerlo había sido algo desafortunada, sí, pero al menos no todo estaba perdido. Se preguntaba en su fuero interno cómo habría hecho para camuflar su condición, pero había muchos aspectos de la Fuerza que él y sus compañeros, jóvenes aún, no conocían.

-Eres tú el usuario de la Fuerza entoncess... Pues...- Se giró para ver la cara de sus compañeros un momento. -Pues sólo noss queda preguntarte si estás interesado en recibir instrucción donde nosotross, con Skywalker.

En realidad, pensó Norssk, también les quedaba averiguar cómo volverían a Yavin 4, pero lo primero era averiguar si el viaje y la pérdida de la nave había sido en vano o no.

-No podemos obligarte, no obstante tienes un don que debe ser utilizado para favorecer el bien. Queremos que lo pienses detenidamente, mientras tanto nosotros pensaremos como podemos volver A Kael más le preocupaba el hecho de poder volver que el de llevarse al habitante de Felucia con ellos. Echó de menos su sable láser al tantear su cinto y ver que allí faltaban multitud de cosas. 

Ben trago lo que el desconocido le dio le dieron ganas de vomitar, pero se contuvo y noto que se encontraba algo mejor, aunque decidio seguir recuperando fuerzas.

El desconocido se fijó en el esto de Kael

- No os preocupéis por vuestras pertenencias, pude rescatarlas del lugar del siniestro, se encuentran en la galería de al lado amontonadas pero en buen estado - comentó mientras retiraba el cuenco de las cercanías de Ben y asentía

- Mi sitio está aquí, decidí voluntariamente alejarme de toda civilización, hallar la paz y encontrar el silencio que ningún otro lugar puede darte, algún día lo comprenderéis - sonrió

- ¿Os puedo hacer una pregunta? - miró a todos.

Norssk entendía a medias al hombre. Entendía que deseara vivir tranquilo. No entendía que no quisiera explotar las posibilidades que le abría la Fuerza. Aunque, ¿quién dice que no las haya desarrollado por su cuenta?

-Despuéss de todo lo que has hecho por nosotross, qué menos, ¿verdad?-  Le respondió mirando en última instancia a sus compañeros, para estar seguro de que estaban de acuerdo.

-Claro, pregunte. -Dijo kael algo más alegre al escuchar que sus pertenencias estaban a salvo.

-Claro. Dijo Ben con una voz apagada y casi sin fuerzas. 

El hombre sonrió, pareció gustarle que lo tuvierais en cuenta y no despreciarais su pregunta

- Me gustaría saber algo... ¿qué esperáis de vosotros mismos? ¿tenéis algún sueño o ambición? -

Norssk entrecerró los ojos, deteniéndose un momento a organizar sus pensamientos. Se rascó la cabeza y desvió la mirada hacia abajo, como avergonzado.

-Yo... sólo esspero poder aprovechar bien lo que se me ofrece, y aportar mi granito de arena a la paz en la galaxia. Somos guardianess de la paz.- Añadió, como si pensara necesaria una explicación.

Su mirada se dirigió a sus compañeros. Tenía curiosidad por conocer sus pretensiones de futuro.

-Yo espero lo mismo que mi compañero. Tenemos un don que debemos aprovechar sabiamente. Kael, extrañado, le respondió, pero aun así seguí resultándose incómodo aquella situación, aquel hombre, todo parecía demasiada casualidad. La nave no se estrelló sola, le ayudaron.

-Creo que si tienes un don especial, es una pena desperdiciarlo, y no ayudar con el a todo el mundo,¿Por cierto me podéis contar que ha pasado?. Ben estaba intentando recuperar fuerzas, aun le costaba algo hablar.

El hombre no tardó en responder

- Escuché un fuerte estruendo en el cielo, cuando salí vi vuestra nave que descendía a gran velocidad, tuve que resguardarme por miedo a que el impacto fuese en esta cueva, sin embargo la vegetación amortiguó parte del golpe - explicó

- Cuando fui a ver si había supervivientes os encontré a vosotros tres, tan solo el Trandoshano estaba aún consciente pero cayó a los pocos segundos, os traje uno a uno a la cueva y recuperé vuestras pertenencias, el resto simplemente fue usar mis medios para tratar vuestras heridas... el resto ya lo conocéis - después el hombre puso un rostro más serio

- Necesito que me hagáis un favor chicos... sé que es mucho pedir, pero no reveléis a nadie mi posición, precisamente huí de la civilización para sentirme en armonía conmigo mismo, dejar de escuchar las voces, sentirme liberado... no quiero saber nada ni de ciudades, ni de la Fuerza... -

Norssk frunció el ceño. Por una parte, los maestros podrían considerar que se había desperdiciado una nave en perfectas condiciones para no obtener nada a cambio, y que la misión que les habían encomendado había sido un fracaso. Por otra parte, los jedi suelen mostrarse respetuosos ante los puntos de vista de cada persona, aunque haya algunos que no compartan...

-Bueno, parecess muy decidido. Creo que, si ya sabes lo que tieness, es decisión tuya y no nuestra tomar el adiestramiento. Yo lo resspeto, y te estoy agradecido por habernoss cuidado todo este tiempo. Y quizá haya una manera de que quedemos en paz, en vez de considerar essto un favor que te hacemoss. ¿Nos... ayudarías a encontrar un transporte?

Norssk no perdía la esperanza. Quizá este hombre no tuviera uno, y el pueblo cien kilómetros más allá puede que tampoco, pero si el planeta era conocido y aparecía en cartas de navegación y similares, alguien debía viajar a él eventualmente.

Kael se sorprendió de la respuesta, un viaje para nada y probablemente una negatividad por parte de los maestros al no conseguir la misión. Dió un paso al frente el joven jedi e intentó convencerle. -Mire, ya se que quiere aislarse aquí el resto de su vida, pero tiene suerte de que hayamos sido nosotros quien le encontráramos antes. Si le dejamos aquí corre el peligro de ser encontrado por personas menos diplomáticas que nosotros, y entonces se arrepentirá. Tiene un don que debe ser usado, que debe ser aprovechado para expandir la paz por galaxia. Si le dejamos aquí finalmente le encontrarán, quiera o no. Debe tomar una decisión sabia amigo mío. 

Ben noto el tono un poco alterado de Kael y comento.

-Nadie aquí le va a obligar hacer nada que no quiera pero nos encantaría que nos acompañara y en caso de que no le guste, le acompañaríamos de vuelta.

El hombre sonrió

- Desde luego me gusta veros con tantos ánimo, lo que hace que me duela más rechazaros la oferta, pero no os sintáis ofendidos, estoy seguro que otro en mi lugar hubiera aceptado con los ojos cerrados ante tan buenos propósitos como los vuestros, de eso no me cabe duda, pero lo mío es una decisión que llevo respetando desde hace años y no seréis vosotros los que me hagáis cambiar de opinión, sin embargo quizás si que pueda ayudaros, ¿creéis que podéis acompañarme a dar un pequeño paseo? - el hombre se levantó y os miró mientras señalaba el exterior de la cueva

Norssk inclinó ligeramente la cabeza.

-Claro, nos vendrá bien el aire puro.

Mientras esperaba a que sus compañeros se decidieran, intentó indagar sobre el tema del adiestramiento.

-¿Cuál es la razón por la que no quieress acompañarnos? Si estás ya tan convencido, debe ser una razón muy fuerte...