~~Nacido en la ciudad de México Julio pasó la mayor parte de su vida en ese país, siendo criado en uno de los barrios más peligrosos del área metropolitana, el municipio de Ecatepec, un lugar en el que la violencia, el narcotráfico, la guerra de pandillas y todo tipo de actividades delictivas gobiernan el día a día sin dar tregua a las personas que allí viven, sin embargo, de alguna manera, el se las arregló para alejarse de ese mundo de malas influencias y se refugió en la única salvación real de las personas que allí viven, la educación, aunque también aprendió los movimientos de la droga y los maleantes, pues nadie que viva allí es ajeno a ese tipo de actividades, pero con todo y eso, logró terminar la universidad con la carrera de químico farmacobiólogo, para después estudiar la especialidad de ciencias forenses.
Así, cuando salió de la escuela y tras haber conseguido trabajo en la policía Federal de la república como períto químico forense, y, desde allí, comenzó a escalar en posiciones hasta que, a los 23 consiguió ingresar a la Interpol como investigador, organización en la cual tuvo su primera misión internacional, la cual tuvo lugar en Madrid investigando el tráfico de drogas, aunque, también trabaja por separado en un caso un poco más personal, la desaparición de una de sus amigas y colegas desde hace algunos meses en la misma ciudad.
Por desgracia, cuando encontró a Makoto, la esperanza escapó de su corazón, había sido víctima de lo cruel que era el mundo en el que estaban inmersos, víctima de la venganza de la mafia Italiana, y aunque logró dar con los culpables, Adriano y Alessio Corleone, la justicia no pudo llegar a ellos debido a la influencia, el poder y la corrupción que imperaban en el seno de la institución internacional en la que trabajaba, eso le enfureció más, mucho más que el destino que su amiga, confidente y compañera había sufrido, y apenas tuvo los medios para conseguirlo, se vengó por propia mano de Adriano y Alessio, cuyas cabezas fueron encontradas empaladas en las rejas de la entrada de la mansión Corleone unos meses después, y aunque las sospechas recayeron sobre el, había cubierto muy bien su rastro, aún así, por este acto ahora la familia Corleone y todos sus allegados tienen su mira sobre Julio, cosa que sabe bastante bien y no le amedrenta incluso, lo motiva a buscar la justicia por su propia mano sobre otros casos inconclusos o dudosos a los que por su posición tiene un acceso privilegiado.
Bienvenido a tu escena introductoria.
Todo lo que he tachado es porque lo vamos a desarrollar dentro de la partida.
Llevas varios meses adscrito a la delegación de la Interpol en Madrid sita en la Jefatura de la Policía Nacional en la calle Méndez Álvaro. Como muestra de colaboración entre agencias te han asignado a un oficial de policía como enlace con el que trabajas; su nombre es Archibald Marshall, ciudadano estadounidense nacionalizado español e intuyes que tras él se esconde una curiosa historia cuando menos. También compartís el despacho con Makoto Liuchen, una oficial de policía china, adscrita a vuestro departamento de manera provisional para ayudaros en la lucha contra las mafias chinas de drogas, prostitución y delitos variados.
A pesar de tu obsesión por las mujeres guapas, pues Makoto lo es, ella despertó en ti sentimientos diferentes y se convirtió en una especie de hermana pequeña para ti. No ocurrió lo mismo con Archibald pues rápidamente se atrayeron el uno al otro e iniciaron una relación romántica. La consecuencia es que en los últimos meses los tres habéis estrechado los lazos que os unen...
A día de hoy vais tras la pista de los hermanos Chen, apodados el gordo y el flaco, sospechosos de introducir subrepticiamente en el país a jóvenes chinas para prostituirlas. Para recabar pistas, Makoto consiguió infiltrarse en la organización hace apenas una semana.
Madrid, 6 de julio de 2015, por la noche...
Recibes un mensaje de voz por WhatsApp de Makoto: Estoy jodida, me han descubierto. No saben que llevo móvil. Ayuda...
También te envía la localización por GPS, está en el polígono industrial de San José de Valderas... Sin pensarlo apuras tu copa de un trago, agarras tu teléfono móvil y marcas el número de tu compañero, Archibald.
En apenas una hora estáis en las inmediaciones de la nave industrial donde se supone que está Makoto, o al menos, estaba. Dentro del coche, apagado, observáis la zona y advertís que tras la alambrada de metal que protege el recinto de vez en cuando aparece un civil que, obviamente, ejerce las funciones de vigilante pero no parece chino.
Son casi las 3 de la mañana cuando notáis movimiento, un hombre se acerca a la nave a pie desde la dirección opuesta a la que estáis...
Muy tarde para un paseo nocturno, era un motivo más para estar especialmente alerta y oculto, lo principal era averiguar a donde se dirigía ese sujeto, por lo que me oculté para pasar algo más desapercibido y comencé a observarle desde el interior del vehículo, lo primero que debíamos revisar, el aspecto general de una persona revelaba mucho de el, su forma de vestir, su manera de caminar, si llevaba o no joyería encima, todo eso nos podía dar pistas importantes sobre su identidad o al menos su facción y estatus socio económico, incluso su nacionalidad