Partida Rol por web

El ruido de los chapoteos ha llegado a vuestros predecesores. Veis como el elfo, os mira sin dejar de avanzar, y con una sonrisa en los labios le comenta algo a la humana.

-A pesar del agua y del suelo embarrado Hans sigue con intención de ir al Aldorft -Joder mierda soy un hombre de secano este tipo de terreno no es lo mío -En fin nadie dijo que el viaje fuera a ser fácil 

Bueno da igual solo tenemos que salir de aquí. Conteste no de muy buen humor, además no dejaría que ese maldito elfo seguía avanzando, yo también lo haría sin duda alguna. Aparte el objetivo era salir para continuar el camino hasta Altdorf, ese era mi objetivo, además de llevar al humano hasta allí y al otro hermano.

EH VOSOTROS! SACAD ESA CARRETA DEL CALLEJON, ESTA OBSTRUYENDO EL PASO.

Oís como un hombre ataviado con una túnica azul y unos pantalosnes rojos os grita desde uno de los balcones. Parece tener más de treinta años y la complexión robusta de un guerrero.

También veis que se dirije a los 5 en general.

Si mirais en la dirección en la que os señala el hombre, veis como en un callejón opuesto a vuestra Posada, hay un carro que arrastrado por la corriente se ha cruzado en un callejón bloqueando una puerta. El carro es bastante grande y parece ser el típico carro que usan los granjeros para transportar mercancias, heno........

"¿Ese estúpido me ha tomado por su mula?" me pregunte cuando el tipo nos increpo para que quitáramos una carro, obvie sus palabras para tratar salir de aquel sitio Altdorf me esperaba.

Si quieres hacerlo manda a otro yo no soy tu sirviente. Bufe al tipo del balcón, no estaba de humor y menos para aguantar a un tipejo como ese con esa educación. Continúe con paso firme tratando salir de aquel dichoso pueblo.

Mientras seguís avanzando, veis como el elfo se dirige hacia la carreta mientras le dice a su compañera de viaje:

-La verdad es que no se quién es ese Noble, pero creo que no sería mala idea ayudar a estas gentes a salir del aprieto. Igual nos premian por la ayuda prestada.

-Hey hermano le susurro a Thorik, detesto reconocerlo pero el maldito orejas picudas tiene razón, parece un noble humano, si le ayudamos puede que consigamos una buena recompensa para poder continuar nuestro viaje...

Escupí a un par de metros, no me produje en palabras, pero gire para ir hacia la maldita carreta. Más vale que ese humano nos de algo que merezca la pena sino colocare esa maldita carreta yo mismo de nuevo donde está. El agua, el maldito elfo y el noble humano habían agriado mi humor, aunque tampoco era muy difícil conseguir eso. Comencé andar hacia el lugar de la carreta, esperaba que no costase mucho sacar esa carreta, a últimas la haría astillas con mi hacha.

-Vamos a ver, no tenemos prisas, si os parece ayudamos al noble con el carro, es alguien con influencia quizás sea la puerta hacia algo mas interesante, no tenemos nada que perder