Partida Rol por web

 McAillen. Directora del colegio de magia y hechicería Hogwarts. Se habla que es descendiente de los Dumbledore. Es una mujer sabia, justa, poderosa y amable.

 Lizardnose. Reptiliano encargado de cuidar los alrededores de Hogwarts y a sus alumnos, sobre todo si se va a realizar alguna incursión al bosque.

Se habla de que Hagrid, el anterior a su puesto, tuvo un rollo con alguna especie de reptil...

 Jennifer. Nieta de McAillan y profesora de Encantamientos. Es muy buena en su trabajo, y como es muy "ba-da-boom" no hay quien se pierda una de sus clases.

 Thia Yomu. Es la profesora de Pociones. Cualquiera diría que nació con la cocina en las venas, pues cada una de sus clases parece una competición de recetas diferentes. Suele ponerse a mezclar los ingredientes con rapidez y profesionalidad, lo que hace que cueste mucho seguir su ritmo y la mayoría de las veces termine explotando algo (mayormente por culpa de Will).

 Logan Cyrus. Si se puede decir de alguien que da "mal rollo" pero atrae a la vez, ese sería Logan. Un hombre de unos 35 años, corpulento y de mirada fría. Es el profesor de Defensa contra las Artes Oscuras, aunque hay quien dice que debería ser profesor de Artes Oscuras, si esta asignatura se siguiera impartiendo...

 Ivy Posix. Una mujer tranquila y pacífica. Siempre es amable con todos sus alumnos, aunque falten a alguna de sus clases de Transformaciones. Lo más extraño es cuando uno entra a sus clases y solo se encuentra a una lechuza común, con los tonos pelirrojos más llamativos y poco naturales y sus grandes ojos marrones como si evaluasen a cada uno de los que allí están.

 Pascal. Duende de agua, procedente de la laguna de Hogwarts. Da sus clases de Herbología lo mejor que puede, aunque suele irse por las ramas y centrarse en las algas. Hay a quien le resulta demasiado irritable su aguda voz.

 Will. Gran amigo. Inconscientemente, le ayudó a superar el varapalo de que sus compañeros pasaran del amor al odio en un parpadeo. Pasó parte del tercer curso intentando llevar la relación a otro nivel. Unas veces de formas indirectas, otras de forma muy directa, como aquella vez que, estando solo al lado de lago, en una playita muy discreta, Jaqueline se quedó prácticamente desnuda (a falta de ciertas prendas que se dejó con el fin de estar más provocativa) Mientras el muchacho admiraba una variante de a saber que ser acuático que vivía en el lago. Desde ese momento, quedó claro que no había manera. Aun así, mantuvo esa buena y sana amistad. Muchas veces le acompañaba en sus periplos al bosque, pues bien sabía que, si iba solo, podría tardar días en volver. Disfruta mucho bromeando sobre su capacidad intelectual. Muchas veces cogía una piedra, la que tuviera la forma más graciosa, y fingía que esta era Will.

Es un muchacho de gran corazón, un tanto cabezahueca y amante de los animales. No se entera de las indirectas, pero si se le dice las cosas directamente tal vez las procese.

 Lyra. Curiosa muchacha. Según escuchó Jack, su familia había estado en Gryffindor durante toda su historia. A saber por qué, ella acabó en Hufflepuff. Lo más curioso de ella es su ausencia de miedo ante dragones u otras criaturas, cualidad que le llevó a ser bastante cercana a Will. En un primer momento, Jack la vio como a una rival. Hubo algo de tensión unilateral hasta que se percató de que la muchacha no tenía ningún interés en él. Desde ese momento, la relación mejoró. Lyra también era compañera de periplos de Will y Jack, por lo que pudo ver de primera mano los inútiles intentos de Jack por cortejarlo. Curiosamente, aunque Jack lo dio por imposible, Lyra aún sigue intentando juntarlos.

 Cleo. Joven Hufflepuff de primer curso. Es vecina y compañera de juegos de Jack aunque desconoce su condición de bruja. Más de una vez le ha tocado cuidar de la pequeña Cleo en ausencia de sus padres.

Una joven de cabello rubio alocado y chispeantes ojos azules. Muy curiosa y culo inquieto.

 Cassandra. Qué decir. Fue una de esas que pasó de amor al odio. Pasó de ser su mejor amiga, quien siempre estaba con ella. Lo hacían todo juntas, y esta, además, sentía gran admiración por Jack. El perderla a ella fue sin duda lo más doloroso de todo. Cuando la vio por primera vez al inicio del segundo curso, y respondió a sus efusivos saludos con una fría mirada de indiferencia, supo que algo no iba bien. Cuando se enteró del porqué, simplemente se rindió. No trató de recuperarla. Desde entonces, se ignoran mutuamente siempre que pueden. Y cuando coinciden en alguna práctica en grupo, siempre saltan chispas.

Cassandra trata de provocarla o al menos de hacerle la vida imposible siempre que puede.

 Thomas. Si hay alguien capaz de caerle peor que Cass ese este tipo, Thomas. Si bien al principio parecía el típico gañán encantador (para qué negarlo, hasta Jack había fantaseado con ser su chica) no tardó en darse cuenta de cuan reprobable era como persona. No sin motivo estaba con Cass, eran tal para cual. Aun qué no podía evitar sentir cierta pena por la que una vez fue su mejor amiga. Lleno de vicios, mujeriego, infiel, mentiroso, aprovechado… Solo de pensar en él se ponía de mala hostia. ¿Lo peor? Estaban en la misma casa… Tocaba aguantar sus movidas todos los días. La estrategia de Jack consistía en ignorarlo todo lo posible. Excepto cuando se tomaba demasiadas libertades o confianzas para con ella. En esas ocasiones… Uno siempre acababa en la enfermería. La ventaja fue, que a partir de cuarto curso. Thomas dejó de interactuar con Jack. Tal vez, por miedo a que Roger tomara represalias.

 Alex. La relación con esta chica es peculiar. Siempre va a la suya. No se relaciona mucho, ni con Jack ni con nadie. Jack sabe que entre ellas no hay problema, pero por la naturaleza de la Alex, no ha intentado acercarse a ella. La relación en si no es mala. El trato es cordial, hay respeto mutuo y las pocas veces que hablan, la conversación suele tener un tono neutro. Lo que más le fascina a Jack sobre Alex, es que, a pesar de ser descendiente del mismo Salazar Slytherin, la muchacha va a la suya, sin pavonearse, cuando hay quien por ser el sobrino del primo de tal va dándose golpes de orgullo en el pecho.

 Carl. Alguien casi o más solitario que la propia Alex. Casi ni interactúa con sus compañeros de casa, por lo que Jack sabe más bien poco del joven.

 Roger. Un tío enorme, bien dotado, y simple como él solo. Su inteligencia da para poco más que saber jugar al quidditch. Su personalidad no compensa esa carencia. Fanfarrón a más no poder, se pavonea siempre que puede de su portentoso físico. En los primeros años, no llamó en nada la atención de Jaqueline, tal vez solo en el mal sentido. Eso sí, siempre tuvo, y aun tiene, curiosidad sobre como semejante mendrugo conseguía pasar de curso. A partir de cuarto curso su relación cambió: Roger se volvió el perfecto compañero con el que darse un buen escarceo. Ya fuera por desestresarse de los exámenes, por salir de la rutina, o, simplemente, darse el placer, ambos disfrutaban de sus encuentros en el baño de prefectos del tercer piso. Menos mal que en el castillo había fantasmas, pues si no, sus ruidos no habrían pasado desapercibidos. Sin embargo, su relación se limita a eso, escarceos. Ninguno quiso una relación seria con el otro, cada cual por sus motivos.

 Katherine. Sin duda la otra cara de la moneda. Si coges todas las virtudes de Jack, y las intercambias por sus opuestas, obtendrás una Kat como resultado. Sin saber ni cómo ni por qué, congeniaron muy bien desde un primer momento. Al igual que Will, fue de los pocos que no le dio la espalda. Se hicieron muy buenas amigas, tanto, que muchos se extrañaban al ver a una Gryffindor y una Slytherin llevarse tan bien. A pesar de no poseer el talento innato de Jack, Katherin siempre estaba a la par en cuanto a habilidades, pues, si algo había que reconocerle, es que se esforzaba más que nadie en la escuela. Fue gracias a su mediación, que Jack entabló esa relación con Roger. Aunque no salió gratis. Aguantar todas las rayadas de la muchacha suponían un precio desmesurado. Pero le daba igual, le ayudaría siempre que pudiese. Y se alegró bastante al ver que empezaba su relación con Lilly, aunque esto supusiera más rayadas a aguantar.

 Lilly. Durante gran parte de la vida escolar, fueron ajenas la una a la otra. Aun así, había cierta semejanza entre ellas, pues eran las "raritas", una con el pelo teñido y homosexual, mientras la otra vestía como le daba la real gana el uniforme y no se molestaba en fingir respeto o interés por cómo era la sociedad mágica. Ambas coincidieron en castigos por mala conducta. Sin embargo, no fue hasta que empezó su relación con Kat hasta que entablaron una relación propiamente dicha. Ambas comparten una tarea de vital importancia: Ayudar a Kat con los estudios, para lo que es necesario una gran paciencia. Por suerte pueden turnarse. Nunca lo ha dicho, pero a Jack siempre le llamó la atención Lilly, por su forma de vestir y su pelo teñido. Suele bromear con Kat diciéndoles que si algún día cortan puede estar tranquila, que ella la cuidaría muy bien.