Partida Rol por web

Escuchando la canción del Bardo me senté en el piso cerca del enano que se había sentado recientemente.

¿Confundir a tu hermano con un mono come carne? No te preocupes, seria mas fácil que te confundieran a ti, ¿no que eres mas alto?.- Le dije al enano Pep en tono burlón

Ya que estaban todos con sus chistes y bromas, yo podría intentar un poco también.- Pensé

Jajajaja! Que dices del semiorco Pep? Parece que sabe hacer bromas! jajaja!. Bueno, puesto que nos queda tanto tiempo, que les parece si conversamos un poco. - Me senté frente al paladín, con las piernas extendidas ocupando el poco espacio que ocupo, y acariciandome el bigote. - Alguno de ustedes sabe algo sobre... alguna de las ciudades que menciono nuestro amigo... Valorado? Alborotado?... Ya saben, Él. Jajaja!- Reí ligeramente. Dirigí una mirada fugaz al paladín y le comenté por lo bajo.

Tú paladín, que hay de tí, me intrigas... no tanto como saber que conjuro escribí en mi libro esa vez que Pep me convirtio en un hombre del norte por 2 horas! JAJAJA!

Pude notar como uno de los dos gnomos se sento y comenzo a charlar, decidi conversar con el.

-Parece que tu y tu hermano estan en constante competencia, no es verdad? No solo en cuanto a conocimientos magicos sino que tambien por ver quien es mas gracioso, si que saben entretenerse. Con un tono ironico-gracioso.

-No tengo idea hacia donde nos dirigimos, eso es aun mas emocionante y es lo que valdra la pena para mi en todo este viaje.

-Si que valdra la pena.

-En cuanto al resto, no es necesario preguntarlo en voz baja, pequeño amigo, solo digamos que me dedico a ser mercenario con el objetivo de incrementar mis poderes.

No dije mucho mas, senti que eso era lo unico que debia contar.

-Verdad que es tranquilo sentarse un momento a contemplar la luz del dia? Dije rapidamente para cambiar el tema un poco, tampoco queria dar esa impresion de sujeto callado y que detesta el dialogo, simplemente preferia hablar de otra cosa.

Jajaja en la vida del gnomo todo es una competencia querida mole de luz y metal. Y aún más en la vida de un mago. -Comenté en un tono que se fue volviendo eventualmente más serio.- Verás, parte de nuestra sed de conocimiento es lo que nos motiva y lo que nos permite ser aptos para distintas tareas. Si un gnomo no deseara competir por saber más que otros, no descubriría nuevos conjuros, o no traduciría nuevas lenguas. No dibujaríamos nuevos mapas, ni crearíamos nuevos artilugios, por los cuales somos mundialmente famosos. Las pociones que bebes, son resultado de quizás la competencia entre dos gnomos intentando descubrir el mejor antídoto a las borracheras. Las ballestas con las que luchas, pueden ser los esfuerzos de un gnomo intentando impresionar a una pretendiente. Comprenderás con el tiempo que mucho más de lo que piensas deriva de nuestros esfuerzos, y que NECESITAMOS competir para mantenernos vivos. Las bromas no son más que eso mismo. Si no intentáramos tomarnos el pelo constantemente con mi hermano, quién sabe? Quizás y hasta nos volveríamos poco desprecavidos, y podríamos caer víctimas de emboscadas, maldiciones o quien sabe cuanto más... 

Sentí que podía interpretar mi repentina seriedad con mal humor o enojo, pero eh! Los gnomos amamos hablar seriamente sobre los gnomos. Decidí alivianar un poco la charla- ... Entiendo que no quieras contarme mucho más sobre tu pasado, pero no pienses que eso va a evitar que eventualmente me lo cuentes eh? Jajaja! -Guiñé el ojo de manera complice y le golpeé ligeramente el pie con la punta de mi, veces, mas diminuto pie.

La explicacion del gnomo me entretenia, sentia un gran orgullo en si mismo cuando hablaba de los objetivos que deseaba lograr.

-Tu explicacion me agrada, puedo notar que ademas es una necesidad que siempre tienen de hacer algo, es una buena forma de verlo, sabes? He hablado con mucha gente y todos toman una forma de ser competitiva por otra razon, la tuya... Es un poco de todo, supervivencia, diversion, aprendizaje, comprendo tu punto.

-Sabes... mi competencia siempre es conmigo mismo, siempre pienso en hacerme mas fuerte para no permitir ser superado por mis enemigos.

Entre la charla me puse reflexivo por unos segundos

-No volvere a permitir verme superado por alguien que solo desea el caos, no lo hare.

Le volvi a dirigir la palabra al gnomo que estaba charlando conmigo.

-Parece que tambien eres de naturaleza curiosa, eh? No lo tomes a mal, no es que me agrade hablar mucho de mi mismo, eso es todo, quiza con el tiempo vayas comprendiendo mis objetivos. Dije con una leve sonrisa.
 

Me tomé unos segundos... aspiré profundo y procedí a decir -.Entiendo que no quieras contarme mucho más sobre tu pasado, pero no pienses que eso va a evitar que eventualmente me lo cuentes eh? Jajaja!- repitiendo impunemente lo mismo que le había dicho mi hermano.

Nosotros continuamente nos superamos el uno al otro- comenté con confianza -Si yo le hago una broma, el me hace una mejor. Si el apuesta, yo apuesto más, y así continuamos mejorando, nuestro límite se ve empujado con tanta fuerza que a veces siento que realmente no existe- Sabía cuando ponerme serio, tomarnos la vida con cautela y cuando simplemente bromear y molestarnos

A mucha gente le molestan los chistes y chascarrillos, pero realmente encontramos protección en esto. Por ejemplo, aprendí que no puedo enfriar una bebida con magia de manera desprevenida, porque eso puede hacer que en su lugar la jarra explote -dirigí una mirada pícara a mi hermano, y de vuelta al paladín -Uno aprende a cuidarse al tener gente pequeña encima suyo, no?-

hice unos ademanes con la mano mientras charlaba, como si solamente fuese muy expresivo, y de manera instantánea, una silueta humana de aproximadamente 10 centímetros apareció y comenzó a bailar sobre el hombro derecho de Synh

Qué es lo que tienes en el hombro?- le pregunté con falsa curiosidad, acercando mi cuello y entrecerrando los ojos para ver mejor

Tras una charla en la espera de la salida, algunos terminaban de cargar o descargar.
Ustedes subieron a la ultima carreta. Cuatro grandes ruedas de madera, tirada por cuatro fuertes caballos, toldo de tela y un cómodo espacio para varias cajas sobre las que irían sentados.

Alvarado paso rápidamente entre las carretas para dar las indicaciones a los conductores, para finalmente ir al frente de todos, a su carromato.
Tres campanadas sonaron y lentamente uno a uno carros y carretas empezaron a dar marcha para armar esta caravana que pronto estaría ya lejos de Tres Espadas.

Durante el viaje un grupo de hombres viajan a caballo a los lados de la caravana.
Uno de ellos pasaba cerca, como para vigilarlos. Este vistiendo una prenda blanca debajo de un chaleco de cuero y a su espalda cargaba un bastón metálico octogonal o algo así. Más que hombre señor, de porte sobrio mostraba experiencia montando su caballo bayo en la estepa del camino.

Unos comentarios sobre que la ciudad enana de Eartheart, en la Gran Grieta, estaría a pocas horas llego a sus oídos...

Fin de la introducción.