En 1919, la Expedición Carlyle, liderada por el notorio millonario neoyorkino Roger Carlyle, partió hacia las pirámides de Egipto. Tras un silencio mediático de varios meses, la expedición sufrió un terrible desenlace. Desde entonces, la misión se encuentra envuelta en un halo de misterio.
El 3 de enero de 1925, vuestro gran amigo y escritor de lo oculto Jackson Elías, os contacta porque ha dado con nueva información clave relativa a la Expedición Carlyle.
Partida de introducción al sistema de juego de "Star Wars: Al filo del imperio" con la campaña "Rescate en la cima de la montaña" de la caja de inicio de Star Wars: La Fuerza y el Destino.
Verano de 1939. La Alemania nazi ha ocupado Checoslovaquia bajo el nombre de Protectorado de Bohemia y Moravia. Europa está al borde de otra guerra mundial y el gobierno en el exilio checoslovaco ha formado una resistencia en el país ocupado desde la seguridad de Londres.
Debido a información reportada acerca de experimentos de investigación médica y científica llevados a cabo por los alemanes con sujetos capturados, el Servicio Secreto de Inteligencia británico (SIS o MI6) considera necesario investigar las actividades del ejército alemán en el Castillo de Karlstein y contactar con el grupo de resistencia llamado Tres Reyes. Se autoriza el saboteo de la actividad alemana en el castillo si el líder de Tres Reyes lo considera necesario.
Has hecho un gran trabajo en llegar aquí. Durante años entrenaste en el Garden en las artes del combate, la magia, y diversos talentos. Finalmente todo ese esfuerzo ha dado sus frutos y obtuviste tu licencia como SeeD, mercenarios que trabajan bajo las órdenes de los Garden.
Deberás encargarte de misiones que los aventureros normales no se animarían a intentar, manteniendo la alta calidad y el profesionalismo que destaca a la fuerza especial SeeD. ¿Crees estar a la altura del desafío?
¡Él cabalga sobre la montaña, al igual que cabalga sobre el mundo! ¡Nyar shthan, Nyar gashanna!
Aunque ya ha quedado atrás, más de diez años de ley seca no han hecho nada bueno por la delincuencia en los Estados Unidos. En 1934, el hijo de los Cornelisz -una adinerada familia de Nueva York- ha sido secuestrado y el país todavía no lo sabe. En las manos de la Oficina de Investigación se encuentra la responsabilidad de que siga siendo así.
La misión es clara: recuperar al niño con vida y detener a todos los criminales involucrados en el secuestro sin permitir que el escándalo se filtre a la prensa y que éste no se convierta en un nuevo caso Lindbergh.
Sois aspirantes a heros (amazonas, bárbaros, centauros, hoplitas o nobles). Sobresalientes en vuestras comunidades de origen (no es difícil sobresalir entre tres campesinos desdentados), en torno al mediterráneo de aquella época (¿Pero había centuaros? ¡Claro! Se han encontrado restos de asentamientos en la Sierra de Grazalema y la Costa Brava...)
Cuervonegro por fin salió de su cabaña de pieles de león, completamente irreconocible. Por ninguna parte podían verse en ella las pinturas negras con las que se contorneaba los ojos. Tampoco el collar de alas de cuervo que siempre lucía en su cuello ni las pieles de tigre con las que vestía. Cubierta de sudor, con unas enormes ojeras, sus pechos desnudos y su azabache melena hecha una maraña, avanzó a duras penas hacia Milo, quien casualmente se encontraba por allí debido a su afición por tallar flechas a la sombra del roble.
—¡Necesito hablar con el Jefe Garrahueso! —exigió secamente la chamana, apoyándose en su cachava—. Es urgente.
—¡Joder, pues claro, en el Festival del Vino Sátiro! —farfulló el hombre, apenas entendible tras toda la tarde en la taberna—. ¿Dónde va a ser, muchacho? ¿De qué guindo te has caído? Que sí, que hasta los centauros van borrachos, te digo! ¡Ja, ja, ja!—comenzó a toser, atragantado de su propia risa—. Eso sí que es vino, y no esta mierda —¡dijo agitando su copa hacia el tabernero y salpicándose toda la toga-. Hasta a los salvajes esos de Hiperbórea se les olvidan sus dioses paganos durante el Festival!
—Conversaciones de taberna en algún lugar de Olympia
* * * * *
«Lo que pasa en el Festival del Vino Sátiro se queda en el Festival del Vino Sátiro».
—Jóvenes hoplitas justificando su estupidez en cualquier cuartel de cualquier Polis
* * * * *
La primera luna nueva de cada lustro, los sátiros de la Isla de Satinia celebran su famoso Gran Festival del Vino Sátiro, un merecido festival de la cosecha en el que dan a conocer a toda Olympia su maravillosa añada. Y no es para menos, puesto que la variedad de vid que cultivan tarda mucho en madurar, pero su intenso sabor adulzado deja un retrogusto palatal -como dicen los más borrachos cuando se hacen los expertos- difícil de olvidar.
Para celebrarlo, cada cinco años gente de lo largo y ancho de Olympia, de cualquier raza y clase social, se acerca a la Isla de Satinia para compartir comida y bebida, muchísima bebida, al ritmo de baile, música y descontrol. Es la oportunidad de conocer a gente de otras partes de Olympia y, sobre todo, de medir habilidades en decenas de actividades.
Pero este año es la vigésima edición del festival, o lo que es lo mismo, el centenario del Vino Sátiro. Tras cien años, Angus Patarroja, el Príncipe Vitícola y anfitrión del Gran Festival, ha anunciado que su Gran Reserva alcanza su punto máximo de fermentación y promete que «quien lo beba podrá hacer realidad cualquier deseo». ¡Hasta el mismísimo Dionisio va a acudir a la fiesta!
Cuando el duro invierno acechaba,
cuando la comida escaseaba,
entonces y solo entonces...
apareció aquella criatura en la playa.
Un ser indomable,
extraño e inconmensurable.
Y aquellos pescadores le dieron caza,
prometieron que con su muerte
la hambruna quedaría desterrada.
Pero no contaron con la venganza,
con la ira indomable
de la naturaleza desbocada.
Que nadie en la Galaxia conozca el origen ni la historia de la Joya de Yavin no impide a ésta ser una de las más grandes y bellas gemas coruscanas de la Galaxia.
Ciudad Nube —la metrópolis flotante dirigida sorprendentemente bien por el Barón Administrador Lando Calrissian— se prepara para recibir a algunas de las más poderosas y adineradas personalidades de la Galaxia, quienes participarán en una subasta a puerta cerrada de la joya en el marco del Gran Premio anual que se celebra en la capital.
Hasta ahora, nadie ha conseguido robar tan codiciada joya, pero una misteriosa pantorana ha contactado con los mejores especialistas para llevar a cabo su plan maestro y lograr semejante hazaña. ¿La recompensa? Suficientes créditos como para comprar un planeta privado en el que retirarse para siempre.