Partida Rol por web

Agatha, que estaba preparada, vió salir a los asaltantes y, rápidamente, agarró un puñado de manteca, canturreó unas palabras, gesticuló con la mano y una película de grasa apareció bajo los pies de los combatientes cuerpo a cuerpo.

Kublai se mueve hacia el espadachín pasando por detrás de Ungrim mientras saca su cimitarra, y cuando lo tiene a alcance, le lanza un ataque centelleante.

Jonathan no se esperaba el ataque por sorpresa de aquellos tipos, que la emprendieron a golpes contra la pobre bárbara del grupo. El más fuerte, a juzgar por su corpulencia, se enfrentó al enano del grupo. El traductor, mientras sacaba su ballesta para tenerla a buen recaudo, puso sus ojos en aquel enemigo, lanzándole una suerte de maldición para que le resultase más fácil a sus compañeros acabar con el.

Annis avanzó por detrás de sus compañeros para enfrentar al arquero en cuerpo a cuerpo. De camino, la magus usó su poder para imbuir a su estoque de su energía mágica y atacó al arquero con ferocidad, con la intención de enterrar un palmo de acero en su cuerpo.

El barbaro trata de ponerse en pie al haber resbalado con la grasa, nerea coge su varita y sana a Alahna. Annis le asesta un estocazo. Asimismo recono ce que el clerigo se ha echado a si mismo un conjuro de entropc shield.

El tipo que tiene pinta de sacerdote ataca a Annis pero no es capaz de atravesar su armadura.

Viendo que el grupo conseguía poco a poco librarse de sus agresores, el traductor no lo dudó y dió unos pasos al frente armado con su ballesta entre las manos. Dejó una mano libre unos segundos para lanzar otra suerte de maldición contra el arquero que les atacaba.
 

Kubali se mueve hacia el clérigo, que tantos quebraderos de cabeza estaba dando y le intenta golpear con su cimitarra, pero falla estrepitosamente.

La arquera realiza una maniobra acrobatica y se libra del golpe de la barbara disparando una flecha pero esta rebota en la pared.

Kublai da un paso para quedarse a un lateral del clérigo y vuelve a intentar darle con su cimitarra, pero nuevamente falla estrepitosamente.

El misterioso enano se aproxima a la arquera y le suelta un golpe kinetico que la parte en dos

Annis vió al clérigo que se ocultaba tras la columna y decidió pagar con él toda su ira. La magus canalizó su conjuro más agresivo a través del filo de su estoque y se lanzó en una estocada a fondo, buscando lanzar una descara eléctrica al impactar.