En un futuro apocalíptico, los policías, conocidos como "controladores", se encuentra con una serie de crímenes sin resolver. No sabe que la verdad, es mucho más terrible.
La Tierra. En un futuro no muy lejano.
Tras las guerras, las enfermedades y el hambre, el mundo ha dejado de luchar entre sí. Las corporaciones son ahora quienes gobiernan con total legalidad y claridad los diferentes países. Todos los ciudadanos pasan a ser empleados de la corporación en cuanto nacen, y su vida les pertenece. Los países están divididos en ciudades-estado, dentro de cuyas fronteras sus habitantes reciben todo cuanto necesitan.
No hay sobrepoblación.
No hay hambre.
No hay pobreza.
La realidad es que de manera encubierta, las corporaciones siguieron un proceso de “exterminio controlado” en las poblaciones, liberando virus y creando las llamadas “zonas salvajes”, existentes más allá de los muros de la ciudad. En ellas no hay orden, sino caos; no hay comida, vivienda y cuidados, sino desesperación y violencia.
Simplemente, no hay civilización.
Todas las ciudades están gobernadas por un Consejo, formado por tres miembros vitalicios, escogidos de entre los diferentes grupos de influencia de la ciudad. La ciudad está formada por estamentos determinados genéticamente:
+Líderes. Son aquellos cuyo genoma indica una enorme inteligencia.
+Controladores. Son miembros de seguridad que trabajan para mantener el orden en la ciudad. Presentan habilidades físicas y también cierto grado de inteligencia.
+Diestros. Por sus características, forman parte de la masa trabajadora de la ciudad, nada brillante, pero necesaria para el desarrollo y el enriquecimiento de la ciudad.
Por otro lado, en el interior de las ciudades-corporaciones tampoco hay tanta tranquilidad como se dice. La facción Liber8 luchan por abrir las fronteras y acoger a los necesitados, además de para devolver la democracia al pueblo.
Es una lucha sin cuartel.
Tú eres un controlador. Paseas con tu compañero por la ciudad, manteniendo el control pero sobre todo, intentando localizar a los miembros de Liber8, de cuyo líder no sabe nadie nada, ni tan siquiera, su rostro.
Y mientras lo haces, procuras sobrevivir. Los controladores no estáis demasiado bien considerados por nadie. Para los líderes, sois simples marionetas. Para los diestros, el brazo ejecutor de los líderes. Nadie os quiere, nadie os respeta.
PARTIDA PRIVADA