Partida Rol por web

En el exterior de la cueva hace una mañana soleada y no hay ni una nube en el horizonte. No sabríais calcular cuanto tiempo habéis estado dentro de la cueva, pues algo mágico la rodea. Camináis en sentido de vuelta a la villa charlando animadamente, cuando un grupo de jinetes se aproxima desde lo alto de una loma.
A la cabeza podéis reconocer al encapuchado y a varios de sus hombres armados hasta los dientes.

Saludos amigos!!! No lo podéis creer, amigos?? . Veo que habéis triunfado sobre vuestros enemigos, aunque a un alto precio señala las heridas de Adrián Ah y no os preocupéis por la niña, mis hombres y yo la esperábamos fuera de la caverna hace un gesto con la mano y uno de sus hombres levanta una bolsa de cuero grande en la que lleva algo redondo y sonrie, no queréis ni pensar lo que es.

Lo que Keira sugiere se me antoja absurdo, la verdad. Examino con más cuidado sus heridas, a ver si hay algo que haya hecho enloquecer sus sentidos.

-Pero Keira... Esas criaturas no son inocentes. Mataron a unos padres y cambiaron la hija que tenían por la suya. Da lo mismo que unos humanos les dañasen, esa no es una actitud decente. Al fin y al cabo, son los individuos y no las comunidades los que pecan o toman decisiones...

Al encontrar afuera al hombre encapuchado, no puedo evitar temblar ligeramente. No digo nada, pero me aterroriza ese hombre... Y que Dios le maldiga. ¿Cómo puede alguien disfrutar matando? En cualquier caso, debemos haber terminado... Si, toda esta pesadilla debe haber terminado...

Miro al encapuchado con una mirada desafiante.

Creo que nuestra relación "laboral" acaba de quedar concluida, ¿no es así? .

- No estoy loca Isabel, piensa con más detenimiento lo que te digo. No digo que eso justifique su inocencia, siguen siendo culpables de las muertes y además un peligro, pero creo que si ellos no las hubiesen tratado como demonios no hubiesen actuado como tales. Es solo una opinión, yo respeto la tuya porque sé que no cederás - bromeó.

El día era soleado de eso no cabía duda, pero algo oscuro se alzaba ante ellos montados a caballo. Ante el saludo Keira no puede contener sus palabras.

- Nosotros no somos tus amigos. ¿Tengo que recordarte que nos obligaste a llegar hasta aquí? - dice con sarcasmo - Y como bien a dicho el alquimista, quedamos libres ¿no?

Luego se acerca a Isabel y le susurra:

- ¿Ves? Ellas no son las únicas salvajes en este lugar - dice mirando discretamente la bolsa para que su compañera repita el gesto - Habría bastado con una muerte rápida, sin embargo fíjate como no se han conformado con eso...

Efectivamente, quedáis exonerados de toda responsabilidad. Sois libres y podéis marchar en paz. Aquí está vuestra recompensa. os lanza una bolsa de cuero a cada uno.

Bien os deseo suerte en vuestro camino, quizás volvamos a encontrarnos algún día... inclina la cabeza en señal de respeto, hace un gesto a sus hombres y se alejan acabalgando.

Camináis rumbo a la aldea más cercana todavía sin tener claro hacia donde os dirigís, o sin saber hacia donde os llevarán vuestras aventuras. Ni siquiera sabéis con certeza si permaneceréis juntos, puede que el destino os guie a lugares tan diferentes... a Keira a cualquier lugar donde precisen de sus " artes" , a Isabel allá donde haya necesitados, a Adrián donde haya un enemigo que combatir, y a Ander donde haya algo que aprender.
Sino fuese por la marca que ya siempre llevaréis en la mano, y por la bolsa de cuero con 20 monedas de plata pensaríais que todo ha sido un sueño...

FIN