Partida Rol por web

Despues de haber estado observando a la tribu desde su nacimiento, por fin ha llegado tu momento. Siempre has estado allí con ellos en espíritu, guiandolos a en su simple vida, pero ahora, con suficiente fuerza para poder manifestarte, consigues aparecer frente a tu gente, iniciando lo que esperas sea una época dorada para tu gente. Sabes que hay otros poderes como el tuyo ahí fuera, pero no te preocupa. Todavía no. Ahora es tiempo de construir una civilización que perdure, que resista el paso del tiempo.

Población: 400
    Recolectores: 100

Edificios disponibles: Ninguno

Recursos cercanos: Arcilla, Piedra, Madera, Caza y recolección.

Almacenes: Comida: 400 (-200 turno)

Cada recolector recoge 5 de el recurso por turno. Asigna tus recolectores a recursos como desees. 

Ahora mismo tu pueblo puede: Investigar, explorar.

Ahora mismo tu puedes: Desarrollar magia.

Investigaciones disponibles: Construcción básica.

El pueblo de Sylvania vivía sin preguntarse como habían llegado allí o porqué levantaban aquellas estructuras para refugiarse, vivían adorando un tótem de piedra, el espíritu del pueblo llamaban, aquel que hacía crecer las plantas y el que les dejaba multiplicarse. Fué una noche de luna llena en que habían encendido un gran fuego alrededor del monolito cuando el sudario negro se apareció, al prinicpio como algo informe pero pronto tomó tamaño suficiente para que de él surgiera la figura del espectro levitante en cuya mano se materializó una gigantesca guadaña.

Los aldeanos se miraron unos a otros confundidos, los bailes acabaron y tuvo que ser el Portador quien hablara con aquella voz proveniente de ultratumba- Aldeanos, hijos de mi sudario y trigo para mi guadaña, yo soy aquel a quien largo tiempo habeis esperado. Vuestros pasos son torpes y aún sois jóvenes

El portador de la noche cogió un puñado de aquella tierra mientras aún miraban estupefactos, intentó moldearla, crear vida, pero la arcilla se desmoronó en sus manos, no estaba listo. Miró de nuevo el pueblo. - Primero, creced y multiplicaos. Hareis casas para vuestros más sabios, casas para vuestros niños y casa para mí.

Una mujer gritó, en aquella noche en la que estaban celebrando la fertilidad se había puesto de parto. El portador de la noche se acercó y con cariño y solo le ayudó. - Necesito mi magia, y ésta solo puede alimentarse de una forma - Sin soltar al niño segó con su guadaña el cuerpo de la madre en dos y arrancando su corazón del frío cuerpo innerte bañó al niño en la sangre de su madre - Tú serás aquel que cumpla mi voluntad pequeño, aquel que busque sangre con la misma avidez que yo, te llamarás Manfred pequeño.

La pareja de la mujer muerta gritó rabioso, enarbolando su lanza cargó contra el portador de la noche por la atrocidad que acababa de cometer pero su lanza se partió en pedazos contra el cuerpo del inmortal. Lo intentó una vez más con su cuchillo de obsidiana pero fue inútil, cuando intentó estrangular al Portador éste lo levantó del cuello y se lo partió sin más miramientos, arrojándolo entre la sangre de su mujer.

¿Quien es vuestro lider? - Inquirió el Portador sin darle más importancia al asunto. Señalaron a un hombre fuerte cubierto de tatuajes cuya cara era envuelta por varios colmillos. El pueblo aún sin nombre de lo que se conocería como Sylvania había hecho algún sacrificio pero este ser aparecido que se inmiscuía.... ¿era un dios? Conforme el Portador se acercaba un cúmulo de pensamientos pros y contras se agolpaban en la cabeza del líder del pueblo, quien finalmente levantó su lanza y gritó - ¡Sangre en la noche! y todos repitieron a coro. Se presentó como K'Hamon y el Portador de la Noche le entregó al pequeño Manfred, y junto a él pasó la primera noche.

Tus nuevos sirvientes trabajan a destajo para conseguir todo aquello que demandas, habiendo encontrado un gran señor que les guiará a la cima del mundo en ti. Los sabios del pueblo se han juntado con los mejores artesanos, y te empiezan a presentar ideas para la construcción de un totem en tu honor, aparte de nuevas ideas para edificios. (10!)

Tu presencia física en este mundo todavía te causa demasiado esfuerzo como para poder empezar a canalizar tus poderes. Tendrás que esperar y esforzarte un poco mas para poder desbloquear los secretos de esta nueva forma tuya. (1)

El pueblo se mostró curioso con el Portador de la noche, quien tuvo que enfrentarse a algún intento de asesinato, habían más escépticos y auténticos devotos pero algo quedó indudablemente demostrado, que era inmortal. Al menos ninguno de ellos tenía el poder para matarle. Se mostraban respetuosos hasta donde sus salvajes modos de cortesía alcanzaban y temerosos de su purpúrea mirada.

El Portador asignó tareas y trabajos, mandó alzar más las paredes de los edificios y reforzarlas con más madera, paja y arcilla. Las chozas tomaron mayor robustez y estaban considerablemente aptas para vivir. Lo que le ocupaba principalmente ahora era fortalecerse a sí mismo. Durante veinte días y veinte noches tomó cuarenta mujeres, yació con ellas y les procuró el placer que solo alguien de vida ilimitada ha podido aprender, el pueblo al principio las miró recelosos, como si estuvieran contaminadas por el inmortal. Pero un par de encuentros privados con ellas, y lo que habían aprendido con el Portador las alzaron a un estatus chamánico, pudiendo aliviar las penas de cualquier hombre o mujer de la aldea.

Fueron unos años en los que la creciente aldea se desbordó y sucumbió a los vicios de la carne, al no haber tenido jamás un código de moral antes, no fué cuestionada la innegable idea de que el Portador de la noche había traído con él una era de prosperidad para el pueblo, en la que sin duda ningún hombre o mujer volvería a sentirse solo.

(NUEVO EVENTO MUNDIAL - POR FAVOR LEED)

Tus artesanos comienzan a producir nuevas herramientas de piedra, hueso y madera, mejorando con creces las anteriores y dando acceso a tu gente a cantidades de recursos que antes solo podrían haber imaginado. (5)

Aunque tus aventuras carnales son apreciadas por algunos (y no tanto por otros) no consiguen traer ningun fruto real, todavía. En uno de tus descansos entre aventura y aventura, notas que, aparentemente, estas recuperando tu vigor y poder. Haciendo una prueba, coges una roca del suelo, y concentrandote ligeramente, notas que la roca empieza a agietarse y enfriarse poco a poco, hasta que se convierte en una montaña de polvo frío y gris. Puede que no sea un poder de gran utilidad en la paz, pero es un comienzo. (8)

La madera talada fue esculpida, tótems al Portador de la noche fueron esculpidos en cada casa, junto a tallas de hombres y mujeres desnudos en posiciones retorcidas. Yeppett demostró ser excepcionalmente habilidoso, y su nombre se popularizó por la aldea por su increíble habilidad para tallar la madera con una herramienta que había inventado: El cincel. Junto al martillo esculpía figuras con tremenda precisión y pronto colas de gente del pueblo aguardaban a las puertas de su choza para pedir su totem.

Yeppet esculpió de un gigantesco tronco el gran tótem del Portador de la noche, rodeado de hombres y mujeres desnudos colgando y gritando de placer por la hoja de su guadaña, éste tótem fue colocado frente a la enorme choza de una sola habitación que se había convertido en el hogar del portador de la noche.

Hubo una gran fiesta cuando Yeppet sentenció que había concluido su trabajo, un hombre que había matado a otro por una mujer fué sacrificado desde lo alto del gran tótem y la madera fue regada con su sangre, el cuerpo quedaría a los pies del tótem, como recuerdo de que aquél que les ayudaba exigía un pago de fe, en sangre.

Los hombres habían dejado de lado la recolección, y cazaron con afán los animales de la isla: Palomas, lagartos grandes, gigantescas tortugas y cocodrilos eran los platos principales. Algunos cazadores aún rendían culto a los antiguos espíritus a lo que el Portador no se oponía - Espíritu cocodrilo, pedimos tu carne y tu misericordia en el río, sigue vigilando en la noche que los espíritus de los muertos no crucen

Tras bailes y ceremonias el Portador se reunió con los más astutos y bravos de la tribu. - La tribu crece, y eso me alegra. Pero la caza y la comida escasea, quiero que un grupo de cien de vosotros tome herramientas y camine río arriba, hasta donde río nace. Allí construirán sus casas y cazarán, allí levantarán un tótem y a la sexta luna enviarán mensaje aquí, para saber que siguen vivos en esta isla

El Portador no estaba seguro de la posibilidad de supervivencia de un segundo asentamiento, pero valía la pena intentarlo, pronto no habría comida suficiente para mantenerles aquí.

Desde que llegara sentía una incómoda presencia, poderosa, inmortal. Con toda seguridad no era el único dios que había puesto los ojos en este mundo.... las noches de luna nueva, el portador tomaba el cadáver de algún anciano o hombre que hubiera muerto por enfermedad, y en su enorme choza lo bañaba y lo adecentaba, susurrándole - debess estar preparado, para volverse a levantar si tu pueblo te necesita. Y te necesitará.... no te acomodes en el más allá pues aquí aún tienes cosas que hacer...

Los esfuerzos de construcción de tu pueblo se ven altamente acelerados por la gran competencia y el ánimo de tus escultores, produciendo pequeños totems para casi todos los hogares de tu tribu, y erigiendo un gran totem en tu honor a una velocidad pasmosa, y con un empeño increible. Este gran éxito ha hecho que se pueda construir todo esto con la mitad de los materiales inicialmente pensados necesarios. (11!)

El júbilo y el empeño de tu pueblo te inspiran, devolviendote mucho de el poder perdido en el tránsito del mundo de los espíritus al físico. (11!)

El primero de estos hechizos permite dejar temporalmente el cuerpo de alguien totalmente seco, tomando así una apariencia cadavérica, sin afectar en absoluto a su salud ni su fuerza. Este desecamiento artificial torna su piel dura como el cuero, y sus músculos como una roca, aunque pierden bastante en el departamento estético y suelen perder su cabello. Un guerrero encantado con esto es una vision aterradora.

Otro de tus nuevos hechizos te permite reanimar y comandar un pequeño número de cadáveres para que te sirvan. No son capaces de realizar ninguna labor manual de manera adecuada, pero su comportamiento animal podría ser adecuado para una batalla. Uno de los problemas es que, de momento, no puedes tener a muchos levantados al mismo tiempo, y necesita de tu concentración plena mantenerles animados.

El último de estos poderes es el de levantar un gran guerrero de la tumba. Esta persona necesita haber sido famosa en vida y que su recuerdo siga en la mente de la gente para que se pueda realizar el ritual. Este guerrero es autónomo e inteligente, no necesita de tu magia para mantenerse animado, y la muerte le ha traido una resistencia sobrehumana. Podrían ser unos generales o guardaespaldas extraordinarios, pero como soldados son demasiado costosos, pues el ritual este es muy laborioso tanto en tiempo como en energía.

Rituales de la Noche

El pueblo ululaba y gritaba a la luz de la luna menguante. El portador de la noche estaba complacido y se levantó haciendo detenerse el sonido frenético y arrítmico de los tambores - Enhorabuena, sois el futuro de este mundo. Esta tierra Pantang es rica y vosotros, el pueblo de Sylvania, sereis prósperos

Un grito de júbilo acompañó sus últimas palabras per continuó hablando - Vosotros habeis sido bendecidos con el ojo de la luna. La oscuridad no tiene secretos para vosotros. Pero más allá de Pantang hay otros, seres que temen a la noche. Yo les ocultaré el sol, y sus casas serán vuestras. Lo prometo por la sangre que hoy vierto.

Tomó a la única mujer que pertenecía al consejo de líderes del pueblo, ésta asintió sonriente frente a él, para nada temerosa de lo que el portador de la noche le deparase, y éste, con cariño y suavidad rebanó su garganta y virtió su sangre sobre el vino mal fermentado que había en un gigantesco cuenco.  - Vuestra líder Nefertari, será vuestra primera guía. Una sierva de la noche a la que muchos seguireis y que ella velará por vosotros

Nefertari se alzó entonces, sus ojos se habían tornado purpúreos y su cara sonrió de forma antinatural. El grito de júbilo del pueblo de Pantang se debió escuchar más allá de los mundos, pues su señor de la noche era todopoderoso. Los mejores cazadores trajeron sus ofrendas, las mejores piezas de caza de los mejores cazadores de Pantang, y el Portador les besó una vez más a todos y a cada uno de ellos, revolviendo la lengua y absorbiendo su júbilo y juventud. - Estos son vuestros mejores guerreros, y llevarán mi marca por hoy y por siempre, hasta el día de su muerte. Los cazadores se giraron hacia la mutlitud. Su piel se había marchitado y sus movimientos eran más firmes y fuertes, se sentían poderosos pero poseían una mueca de amenazante violencia en sus rostros. Aunque fueran desagradables a la vista, no cupo duda que era una bendición del Portador, y el pueblo aclamó estas bendiciones mientras algunos cazadores ya empezaban a soñar con tener semejante poder.

Las ofrendas se sucedieron durante Veinte noches, veinte hombres y mujeres fueron sacrificados para regar con su sangre los alimentos que el resto del pueblo comerían. Era una época de abundancia y el pueblo aceptó que el Portador de la Noche era su nuevo Jefe, un líder inmortal de conocimiento sobrenatural que conducía a sus hijos hacia un futuro mejor.