Aún faltan varios días para acabar el invierno, por lo menos de manera oficial, ya veremos si meteorológicamente, pues el frio no se termina de marchar y las lluvias tampoco.
Un jinete, heraldo del señor conde Setzer de Hertford, trae un mensaje para ti. Ya te considera a todos los efectos señor de estas tierras, caballero y vasallo suyo, y te trata como tal.
Parece que el señor conde sabe perfectamente hacer llegar hasta aquí a su gente ahora, algo que en tiempo de la señora Godiva como señora no sucedió, o al menos ninguno de sus soldados la auxilió nunca de forma eficaz contra el mediodiablo Gordobuc.
Entre conmovido por ser tu primer llamado como señor, y extrañado por lo inesperado del mensaje, recibes al heraldo y por tanto a sus noticias.
En el texto, se te felicita por ser a todos los efectos señor de Malderoi, (aunque técnicamente esto aún no es cierto), y de paso se te recuerda la reunión anual en Pentecostés. En esa reunión, todos los señores del condado se dan cita, y dan y reciben las novedades del condado. Si alguien no fallará a esa reunión serás tú, puesto que esa cita servirá también para hacerte entrega de tu señorío y para firmar el vasallazgo con el conde.
No ha olvidado esto último el conde, ni tampoco tu boda unos días después.
No solo estas obviedades contiene la carta, también un par de noticias interesantes.
(Afortunadamente tu condado muy al noroeste hace difícil que padezcas estos ataques, aunque parece evidente que tendrás que colaborar en la defensa del condado.)
Con los protocolarios saludos y buenos deseos se despide el conde. No os pide respuesta inmediata, así que dejáis marchar al atareado heraldo, tras haberlo dejado descansar y reponerse.
Aún no ha terminado oficialmente el invierno.
¿Cómo se te queda el cuerpo?
¿Haces algo más, damos un salto hasta el final del invierno…?
Tras leer la misiva me doy por enterado de las nuevas y pongo en marcha los preparativos pertinentes de cara a los asuntos que plantea el conde.
Podemos avanzar hasta final del invierno y así vamos adelantando. No haré gran cosa a parte de lo pedido en la misiva (intensificar entrenamientos, estar atento al tema de los sajones, etc...).
El invierno atrasose un poco en marchar ,o tal vez no, y fueran las ansias por seguir con los arreglos y mejoras del valle las que hacían impacientar a tu espíritu.
Tras el fin de las lluvias, los campesinos , ahora metidos a obreros seguían con las mejoras. Mejoras que iban desde reparar daños en casas propias o edificios comunes ( el granero comunal andaba muy dañado), hasta replantar campos y adecentar caminos. Los de la antigua aldea de Gordobuc, andaban con más retraso con esos arreglos, pues había más labor en esas zonas.
El terreno que unia ambas zonas y parte del bosque del oeste( lo que hace el 3º señorio), andaba bastante descuidado, pues las zarzas, la maleza y la ausencia de caminos decentes imponían una labor no pequeña. No parecía esta labor grata para los campesinos de Malderoi. No se trabaja tan alegre sabiendo que el campo que andas plantando y desbrozando te dará fruto a ti, que si andas quitando maleza por senderos ajenos a tu deambular diario.
Asi pasaban las semanas tras el invierno y ya se empezaba casi con la cuaresma. De la cuaresma 80 dias a pentecostés, esto es a tu boda.
-¿ alguna cosilla que hacer, decir o postear?
Nada más de momento. Me preparo para la siguiente escena (y recibimiento) de los invitados. Entre hoy y mañana actualizo escena :).