Partida Rol por web

Mudosele la cara al pater al ver los desatinos, más bien improperios, que recitaba con anormal soltura Cimrud. Tampoco estuvo de un cristianismo subido  Walter.

Asi que el pater por prudencia cristiana, y achacando dichas torpezas a la ingestión excesiva de bebedizos y a las imprudencias de la edad, optó por dejar la mesa sin mediar palabra, y aposentose de nuevo en el lugar presidencial.

Walter por unos segundos no sabe si echarse a reír o si echarse a un lado para no caer fulminado por la mirada que el Pater lanza sobre Cimrud. No habría pensado en un millón de años que su siempre correcto primo soltara un comentario como aquél. Lo hubiese esperado de él mismo, que acostumbraba a meter la pata en asuntos de cortesía. Pero de Cimrud... era algo insospechado, a no ser que hubiese bebido en el banquete más de lo que Walter había pensado hasta este momento.

Por suerte el Pater fue benevolente con ambos. O no escuchó bien entre el jaleo de la boda, o no quiso escuchar. Pero lo cierto es que ambos habían aceptado el velar las armas como se les había aconsejado por el propio sacerdote. Visto que había optado por hacer mutis por el foro Walter supuso que no habría consecuencias por sus desacertados comentarios. Con el ánimo de nuevo subido no pudo evitar comentar a su primo:

Primo Cimrud, espero que nos dejen velar las armas esta noche a ambos juntos. Porque entre lo que he comido y lo que he bebido puede ser que se me presente el mismísimo Cristo y me sorprenda roncando. Si al menos compartimos la vigilia podréis ayudarme a no desfallecer de sueño y salvaréis mi carrera en la caballería siquiera antes de empezar. Creo que tomaré un último trago e iré a lavarme con agua fresca antes de presentarme para la susodicha vigilia... Pensándolo bien, que sea agua helada...y un cubo para echarla sobre mi cabeza. Nos vemos luego en la capilla del Pater.

Antes de dejar la sala para ir a prepararse Walter se detiene un minuto a contemplar a la feliz pareja. Su propia boda parece algo impensable para él en estos mometos, pero observando el rostro de su primo no tiene duda que si tal evento llega será difícil que sea un marido tan feliz como él lo parece. Sir Gwilherm no ha tenido para con ellos dos sino gestos de generosidad, así que Walter está contento de la dicha de su reciente señor. Lady Godiva luce radiante entre todas las damas.

La mirada de Walter se nubla al cruzarse con la figura de sir Porculius rodeada de sus camaradas. Siente que su espíritu cristiano no es precisamente su mejor virtud esta noche, aquel hombre no le agrada ni un ápice. Presiente que el asunto no está zanjado, y lo más grave es que siente deseos de zanjarlo de forma poco piadosa. Suspira y toma el camino de sus aposentos en busca de ese cubo de agua fría que le despeje algo la mente. Va a ser una larga noche.

Cimrud no entiende bien que le ha pasado al Pater... realmente aquello era aburrido y no había ni mujeres ni cantos ni cuentos ni nada. Había libros al menos, pero ya está.

-Creo que se ha enfadado con algo que he dicho... -le dijo a su primo con cara de confusión, todavía no se daba cuenta de su error, ni se daría cuenta en unos días.

El escudero del norte se retiró un poco más tarde de la boda, por suerte habían podido evitar un problema con Sir Porculius, con suerte, la próxima vez que se vieran ambos serían caballeros y ya veríamos entonces.

walter:

+10+6 gloria.= 16

marcas en intrigar y oratoria.

Cimrud.

+3+10+1 gloria= 14

marcas en fugal, modesto, oratoria y mundano.