En la Argentina suelen referirse a ella con distintas denominaciones. El nombre de Capital Federal es uno de los más utilizados —sobre todo para diferenciarla de la provincia homónima—, en alusión a la condición de distrito independiente que adquirió con la ley de federalización que promulgara Julio Argentino Roca. Muchas veces también se utiliza la expresión "Ciudad de Buenos Aires", o sencillamente "Buenos Aires", aunque esta último se presta a confusión con la provincia lindante.
Ciudad Autónoma de Buenos Aires es una de las denominaciones que oficialmente le dio la Constitución de la ciudad sancionada en 1996. Es por esto, que también suele utilizarse la abreviatura 'CABA' para referirse a ella. Informalmente suele denominársela Baires, apócope de la forma original, común dentro de la ciudad -especialmente entre los jóvenes- pero poco utilizada en el interior del país. Poéticamente se le han atribuido numerosos nombres, tales como la París del sur por su belleza arquitectónica y su carácter cultural, o la Cabeza de Goliat según un ensayo de Ezequiel Martínez Estrada, en alusión a su tamaño e influencia desproporcionada sobre el resto del país o, en razón de su ubicación y prestigio, la Reina del Plata.
El Río de la Plata (al este y al norte) y el Riachuelo (al sur) son los límites naturales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El resto del perímetro está rodeado por la colectora externa de la Avenida General Paz, autopista de 24 km de extensión que circunvala la ciudad de norte a oeste. Existe un pequeño tramo de no más de 2 km, comprendido entre laAvenida Intendente Cantilo y el Río de la Plata, donde el límite con la provincia de Buenos Aires en parte es la línea imaginaria de la prolongación de la Av. General Paz y otro tramo el arroyo Raggio; este sector corresponde al límite entre elParque de los Niños y el Paseo de la Costa. Esto se debe a que la Av. General Paz no finaliza en la costa del río sino en la Av. Intendente Cantilo. Esta avenida enlaza de manera rápida la ciudad con el resto del Gran Buenos Aires, una franja de alta concentración de habitantes y fuerte actividad comercial e industrial. Excepto su límite oriental con el Río de La Plata, todos los otros límites indicados de la ciudad separan su jurisdicción de la correspondiente a la provincia de Buenos Aires.
La región estaba antiguamente manchada de lagunas y atravesada por arroyos, algunos de los cuales fueron rellenados y otros entubados. Entre los arroyos de importancia están los Terceros (del Sur, del Medio y del Norte), Maldonado, Vega,Medrano, Cildáñez y White. En 1908 muchos arroyos fueron encauzados y rectificados, ya que con las crecidas causaban daños a la infraestructura de la ciudad. Fueron canalizados pero se mantenían a cielo abierto, construyéndose varios puentes para su cruce. Finalmente en 1919 se dispuso su canalización cerrada, pero los trabajos comenzaron recién en 1927, terminando algunos en 1938 y otros, como el Maldonado, en 1954
El clima de la ciudad es pampeano. Considerando el período 1961-1990, normalmente empleado para designar los promedios climáticos, la temperatura media es de 16,8 °C y la precipitación anual es de 1214,6 mm. La temperatura más alta registrada en Buenos Aires fue de 43,3 °C el 29 de enero de 1957 y la más baja fue de -5,4 °C, registrada el 9 de julio de 1918. A lo largo del siglo XX, como ha sucedido en la mayoría de las grandes ciudades del mundo a causa de la urbanización, las temperaturas de la ciudad han aumentado levemente debido a la isla de calor (desarrollo urbano), siendo actualmente entre 1 y 2 °C superior al de regiones cercanas menos urbanizadas, como el Gran Buenos Aires. Las precipitaciones también se han acrecentado desde 1973, como ya ocurrió en el anterior hemiciclo húmedo: 1870 a 1920. Si bien los días cubiertos son más frecuentes en invierno, cuando más llueve es en verano, época en que se desarrollan tormentas a veces muy intensas, por lo que enormes cantidades de agua caen en poco tiempo. En invierno son más comunes lloviznas débiles pero continuas. De todos modos no puede decirse que haya estacionalidad de lluvias. Los veranos son cálidos, con un promedio de enero de 24,4 °C. La elevada humedad puede volver en ocasiones sofocante al tiempo. La humedad relativa promedio anual es del 71,4 %. Los inviernos son fríos, con heladas frecuentes, sobre todo en el Gran Buenos Aires, y con una temperatura promedio de julio de 8,4 °C. y mínimas que en ocasiones pueden llegar por debajo de los 0 °C. Las nieblas pueden producirse de manera variable durante el año, aunque no son demasiado frecuentes.
Parámetros climáticos promedio de Buenos Aires (temperatura media 1981-2010, valores absolutos 1906-2014) | |||||||||||||
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Mes | Ene | Feb | Mar | Abr | May | Jun | Jul | Ago | Sep | Oct | Nov | Dic | Anual |
Temperatura máxima absoluta (°C) | 43.3 | 38.7 | 37.9 | 36.0 | 31.6 | 28.5 | 30.2 | 34.4 | 35.3 | 35.6 | 36.8 | 40.5 | 43.3 |
Temperatura máxima media (°C) | 30.0 | 28.6 | 26.8 | 22.9 | 19.3 | 16.0 | 15.3 | 17.6 | 19.3 | 22.6 | 25.6 | 28.4 | 22.7 |
Temperatura media (°C) | 24.9 | 23.6 | 21.9 | 17.9 | 14.6 | 11.7 | 11.0 | 12.8 | 14.6 | 17.8 | 20.6 | 23.3 | 17.9 |
Temperatura mínima media (°C) | 20.1 | 19.2 | 17.7 | 13.8 | 10.7 | 8.1 | 7.4 | 8.8 | 10.3 | 13.3 | 15.9 | 18.4 | 13.6 |
Temperatura mínima absoluta (°C) | 5.9 | 4.2 | 2.8 | -2.3 | -4.0 | -5.3 | -5.4 | -4.0 | -2.4 | -2.0 | 1.6 | 3.7 | -5.4 |
Precipitación total (mm) | 138.1 | 127.7 | 139.8 | 118.8 | 92.3 | 58.9 | 60.8 | 64.5 | 72.0 | 126.1 | 117.7 | 117.2 | 1233.9 |
Días de precipitaciones (≥ 1 mm) | 9 | 9 | 9 | 9 | 8 | 6 | 7 | 8 | 7 | 10 | 10 | 9 | 101 |
Horas de sol | 270 | 241 | 189 | 176 | 174 | 132 | 143 | 174 | 189 | 217 | 252 | 267 | 2424 |
Humedad relativa (%) | 65 | 70 | 72 | 77 | 76 | 79 | 79 | 74 | 71 | 69 | 68 | 64 | 72.0 |
Fuente nº1: Servicio Meteorológico Nacional35 | |||||||||||||
Fuente nº2: The Weather Network36 |
Obelisco
Inaugurado en 1936 para recordar el cuarto centenario de la primera fundación de Buenos Aires, es obra del arquitecto Alberto Prebisch, uno de los principales exponentes del modernismo argentino y autor también del vecino Teatro Gran Rex. Se ubica en el lugar donde fue izada por primera vez la bandera nacional en la Ciudad.
Quien visita Buenos Aires no puede dejar de fotografiar este monumento, ubicado estratégicamente en la intersección de dos de las avenidas más importantes: la 9 de Julio, entre las más anchas del mundo, y la “calle” Corrientes, uno de los principales polos culturales de la Ciudad.
Con una altura total de 67,5 metros y una base de 6,8 metros por lado, el Obelisco posee una única puerta de entrada (mirando hacia la Avenida Corrientes en dirección oeste), detrás de la cual hay una escalera marinera de 206 escalones con 7 descansos que lleva a la cúspide. Allí existe un mirador con cuatro ventanas, visibles desde la calle. Y por encima de ella, el monumento emblema de Buenos Aires culmina en un pararrayos que no logra divisarse a simple vista
Torre de los ingleses
De estilo palladiano según la tendencia imperante a fines del siglo XVI en Gran Bretaña, se halla emplazada sobre una plataforma con cuatro escaleras de acceso. Sobre la entrada principal que mira al oeste, y sobre las demás caras de la edificación, existe un friso donde se alternan triglifos y metopas ornamentadas con soles y diferentes emblemas del Imperio Británico. Entre otras, pueden reconocerse la flor del cardo, la rosa de la Casa de Tudor que es el símbolo de Inglaterra, el dragón rojo de Gales y el trébol de Irlanda.
La altura de la torre es de 75,50 m y tiene ocho pisos. A los 35 m se encuentra un reloj puesto en funcionamiento en 1910 por los relojeros argentinos Rodolfo Kopp y Nicanor Insúa, que cuenta con cuatro cuadrantes de 44 dm de diámetro cada uno de los cuales estaba realizado en opalina inglesa, pero hoy varias están reemplazadas debido a atentados sufridos durante la Guerra de las Malvinas. El funcionamiento de la maquinaria es a péndulo y pesas. Sobre los cuadrantes se hallan las cinco campanas de bronce, cuyo tañir en los cuartos de hora imita al de la Abadía de Westminster. La campana mayor pesa cerca de siete toneladas.
La torre está coronada por una cúpula de forma octogonal cubierta de láminas de cobre y cabriadas de acero sobre cuya cima gira una veleta que representa una fragata de tres mástiles de la época isabelina. El carillónque marca los cuartos de hora pesa unas 3 toneladas, e imita en su forma al de la Abadía de Westminster.
Sobre la puerta de entrada se encuentran los escudos de Argentina y Gran Bretaña, y una frase que dice «al gran pueblo argentino, los residentes británicos, salud, 25 de mayo 1810-1910».
Durante la Guerra de Malvinas en 1982 un grupo de manifestantes arremetió contra la torre, destrozando las columnas de alumbrado de su base, balaustradas, escaleras, fuentes ornamentales de granito, y produciendo incendios.
Durante la gestión en la jefatura de gobierno de la ciudad de Fernando de la Rúa se realizó una restauración general del monumento, que se hallaba en un estado de evidente deterioro y se volvió a habilitar el acceso al público. Los destrozos de 1982 no fueron reparados salvo los de la puerta principal.
Un moderno ascensor vidriado que hace uso de la maquinaria inglesa original, lleva hasta el sexto piso, en donde hay una pequeña exposición de elementos del antiguo ascensor. Desde el mirador ubicado en este piso se puede apreciar la zona de Retiro, la terminal ferroviaria y el Puerto de Buenos Aires. Desde ese lugar es posible ver también el péndulo del reloj de la torre, ubicado en el séptimo piso
Plaza San Martín
La Plaza General San Martín es el principal espacio verde en el barrio de Retiro en Buenos Aires. Inaugurada en 1862 donde antes había existido una plaza de toros, fue declarada Lugar Histórico Nacional en 1942.
Se encuentra rodeada por la Avenida Santa Fe, las calles Esmeralda, Arenales, Maipú, la Avenida del Libertador, la calle Florida y la calle San Martín
El diseño de la plaza es obra del arquitecto y paisajista argentino Carlos León Thays, hijo del gran paisajista francés Carlos Thays.
Fue casa de campo de familias acomodadas, galpones de la South Sea Company y la Compañía de la India, empresas negreras dedicadas al tráfico y comercio de esclavos. Fue también cuartel de los Dragones de la Patria y luego de los Granaderos a Caballo, se convirtió en plaza de toros y finalmente, luego de la demolición de esta fue reclamada como espacio verde por los ciudadanos y se transformó en una plaza pública. El 9 de junio de 1942 fue declarado Lugar Histórico Nacional bajo el decreto 122096, consta de un total de 5 hectáreas entre las que se encuentran, entre otras obras, el Monumento al General San Martín y a los Ejércitos de la Independencia, el Monumento a los caídos en Malvinas, el Hito de la Argentinidad y La duda.
Entre las especies que se pueden apreciar en la botánica del lugar, se cuentan ombúes, palmeras Phoenix, Syagrus y Canariensis, tilos, sauces, pinos, magnolia grandiflora, gomeros, roble sedoso, ceibos yaraucarias, así como también jacarandás traídos desde Tucumán por Carlos Thays hijo.
Pueden observarse dos sectores característicos de la plaza. Uno de ellas es la barranca cubierta decésped, desde donde se puede apreciar la Torre Monumental. El otro sector es el que da hacia el lado opuesto, con terreno llano y cubierto por arboledas, y alrededor del cual se sitúan muchos edificios históricos e importantes, como el Kavanagh o el Palacio Paz, ocupado por el Círculo Militar.
La duda
Hito a la argentinidad Nº12
Monumento a los caídos en Malvinas
Monumento al General San Martín y a los Ejércitos de la Independencia
Plaza Retiro y Plaza San Martín
Puerto Madero
Puerto Madero es uno de los 48 barrios en los que se divide legalmente la Ciudad de Buenos Aires,Argentina. Su ubicación cercana a la zona céntrica de la ciudad, lo extenso de su área y su vista al río hacen de este distrito uno de los más exclusivos de Buenos Aires.
El barrio debe su nombre a Eduardo Madero, comerciante de la ciudad que presentó tres proyectos de puerto, el último de los cuales fue aprobado por el entonces Presidente de la Nación Julio Argentino Roca en 1882.
En 1965, Boca Juniors consiguió el permiso para iniciar un nuevo relleno costero, para instalar en Puerto Madero su nuevo complejo deportivo que iba a incluir un estadio para 150.000 personas que tenía que inaugurarse diez años después. A pesar del dinero recolectado y la inversión de todos los socios del club, el relleno fue concluido y la construcción comenzó, pero el estadio nunca fue terminado, y el predio quedó abandonado.
Ubicación Geográfica
El barrio de Puerto Madero está comprendido por las calles Brasil, Av. Ingeniero Huergo, Av. Eduardo Madero, Cecilia Grierson, y por el Río de la Plata, el Riachuelo y la Dársena Sur.
Limita con los barrios de Boca al suroeste, San Telmo, Monserrat y San Nicolás al oeste y Retiro al noroeste, con la localidad de Dock Sud al sur, y con el Río de la Plata al este.
El barrio Recoleta o simplemente La Recoleta es un barrio residencial céntrico de la ciudad de Buenos Aires, Argentina; es una zona de amplio interés histórico y arquitectónico, en especial por el Cementerio de la Recoleta ubicado allí, y un importante foco turístico y cultural dentro de la ciudad. El valor del metro cuadrado es uno de los más caros en dicha ciudad La línea D de subterráneos pasa por el barrio, así como la traza de las futuras línea F, línea G y línea H.
Su nombre proviene del Convento de los Padres Recoletos, miembros de la Orden Franciscana que se estableció en la zona a comienzos del siglo XVIII, fundando un convento y una iglesia dedicada aNuestra Señora del Pilar y adjunto a éste el cementerio. El paseo de la Recoleta es casi el centro geográfico del barrio, y uno de sus puntos más altos, por lo que a fines del siglo XIX el lugar atrajo a las familias pudientes del sur de la ciudad, que escapaban de la epidemia de fiebre amarilla. Desde entonces es uno de los barrios más elegantes y caros de Buenos Aires, alojando mansiones familiares, embajadas y hoteles de lujo.
El núcleo histórico de este barrio fue la iglesia parroquial del Pilar, cuya edificación fue concluida en 1732; por ese motivo el barrio recibía a veces el nombre de El Pilar. La iglesia estaba situada originalmente al borde de las barrancas que caían al Río de la Plata y al arroyo Manso. El arroyo, también llamado Tercero del Norte; hoy está entubado y discurre por debajo de la actual avenida Pueyrredón. Formaba una especie de delta, con brazos por las actuales calles Austria y Tagle, que desembocaban finalmente en el Río de la Plata.
Cuando Buenos Aires sufrió la gran epidemia de fiebre amarilla en la década de 1870, la población se desconcentró para evitar el contagio. Fue por ello que, mientras las clases populares se instalaron en el sur-sureste de la ciudad, las clases altas lo hicieron en la Recoleta, donde la altura del terreno disminuia la presencia de insectos transmisores de la enfermedad.
Estas familias, consideradas de alcurnia, por descender de personajes destacados durante el período independentista, construyeron en el barrio mansiones y grandes edificios de estilo francés (muchos de ellos demolidos hacia fines de los años 1950 e inicios de la década de 1960). Por ello, se ha aludido a Buenos Aires como la París de América. Hoy en día, algunas de estas edificaciones tradicionales coexisten con elegantes construcciones más modernas.
Junto con algunos sectores de los barrios vecinos de Retiro y Palermo, Recoleta forma parte de la zona conocida como Barrio Norte, tradicional lugar de vivienda de los sectores más adinerados de la sociedad donde se concentra buena parte de la vida cultural de la ciudad.
El barrio de la Recoleta se destaca por sus grandes espacios culturales. Además de los monumentos históricos, alberga el Museo Nacional de Bellas Artes, la Biblioteca Nacional, el Centro Cultural Recoleta y otros pabellones de exposiciones.
Cementerio de la Recoleta
El Cementerio de la Recoleta es un famoso cementerio ubicado en el distinguido barrio de la Recoleta de laCiudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina diseñado por Próspero Catelin y en donde se encuentran sepultadas el mayor número de personalidades del país.
Los frailes de la orden de los recoletos descalzos llegaron a esta zona, entonces en las afueras de Buenos Aires, a principios del siglo XVIII. Construyeron en el lugar un convento y una iglesia, en 1732, que colocaron bajo la advocación de la Virgen del Pilar. Actualmente la Basílica de Nuestra Señora del Pilar es un Monumento Histórico Nacional. Los lugareños terminaron denominando a la iglesia de los recoletos en simplemente la Recoleta, nombre que se extendió a toda la zona. Cuando la orden fue disuelta en 1822, el 17 de noviembre1de ese año, la huerta del convento fue convertida en el primer cementerio público de la Ciudad de Buenos Aires. Los responsables de su creación fueron el entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires Martín Rodríguez (sus restos descansan en el Cementerio) y su ministro de Gobierno, Bernardino Rivadavia.
Sus dos primeros moradores fueron el niño negro liberto Juan Benito y la joven María Dolores Maciel.
Durante la década de 1870, como consecuencia de la epidemia de fiebre amarilla que asoló la ciudad, muchos porteños de clase alta abandonaron los barrios de San Telmo y Montserrat y se mudaron a la parte norte de la ciudad, a Recoleta. Al convertirse en barrio de clase alta, el cementerio se convirtió en el último reposo de las familias de mayor prestigio y poder de Buenos Aires. Al mismo tiempo se inauguraba el Cementerio de la Chacarita o Cementerio del Oeste, por oposición al Cementerio del Norte nombre menos común que recibe la Recoleta.
En el ingreso al cementerio hay tres fechas grabadas sobre el piso: 1822 (año de su creación), 1881 (fecha de su primera remodelación) y 2003 (tercera remodelación).
El Cementerio de la Recoleta es una obra de arte en sí mismo.
La entrada principal es un pórtico formado por cuatro columnas de orden dórico griego sin base, concluido durante una de sus grandes reformas ordenada en 1881 por el entonces intendente de la Municipalidad,Torcuato de Alvear. Tanto el frontis exterior como el interior poseen inscripciones en latín. Del lado de afuera el mensaje es de los vivos a los muertos: Requiescant in pace, que significa: Descansen en Paz. Del lado de adentro el mensaje es de los muertos a los vivos: Expectamus Dominum, que significa: Esperamos al Señor.
En el frente, sobre las columnas, se inscriben los primeros símbolos de la vida y de la muerte, representados en once alegorías: El huso y las tijeras: el hilo de la vida que se puede cortar en cualquier momento. La cruz y la letra P: la paz de Cristo en los cementerios. La corona: voto de recuerdo permanente. La esfera y las alas: el proceso de la vida y de la muerte que gira incesantemente como la esfera. La cruz y la corona: la muerte y el recuerdo. La abeja: la laboriosidad. La serpiente mordiéndose la cola: el principio y el fin. El manto sobre la urna: el abandono y la muerte. Las antorchas con llamas hacia abajo: la muerte. El búho: el vigilador, y según algunas creencias, anuncia la muerte. El reloj de agua o Clepsidra: el transcurrir del tiempo o el paso de la vida.
El predio tiene 4780 bóvedas distribuidas en 54 843 metros cuadrados, 80 de las cuales fueron declaradas Monumento Histórico Nacional. El cementerio alberga varios mausoleos de mármol, decorados con estatuas, en una amplia variedad de estilos arquitectónicos. Se halla organizado en manzanas, con amplias avenidas arboladas que dan a callejones laterales donde se alinean los mausoleos y bóvedas. Existe una amplia rotonda central de donde parten las avenidas principales, con una escultura de Cristo realizada por el escultor Pedro Zonza Briano, en 1914.
Cada mausoleo presenta el nombre de la familia labrado en la fachada; generalmente se agregan al frente placas de bronce para los miembros individuales
Plaza Francia
La Plaza Francia es un espacio público verde en el barrio de Recoleta, ciudad de Buenos Aires. Popularmente, la gente le ha trasladado su nombre a la cercana Plaza Intendente Alvear, lo cual puede llevar a confusiones.
Fue creada por Ordenanza Municipal el 19 de octubre de 1909, como parte de los cambios introducidos en el paisaje urbano en ocasión del Centenario de la Revolución de Mayo (1910). Diseñada por el paisajista francés Charles Thays, forma parte de un conjunto amplio de plazas, como la Intendente Alvear (ya diseñada por Thays hacia 1895), la San Martín de Tours, la Juan XXIII, la Ramón Carcano, la Dante, laRubén Darío, la Mitre, la República de Brasil, y otras menores.
Está dominada por el Monumento de Francia a la Argentina, obra del francés Émile Peynot e inaugurada en 1910 por el Centenario. Esta escultura de mármol y granito, además del motivo central, tiene laterales alegóricos a Francia, con escenas de la Revolución Francesa: la Toma de la Bastilla; y de la Argentina, representando la Primera Junta de Gobierno surgida el 25 de Mayo de 1810 y el Cruce de los Andes por el Ejército Libertador de San Martín, y también cuatro vértices, simbolizando la Industria, las Artes, la Agricultura y la Ciencia como pilares del progreso.
La Biela
El histórico bar del elegante barrio de La Recoleta mantiene intacto su prestigio y prosapia como centro de reunión de una clientela regular que se nutre también de los visitantes ocasionales que al pasar por Buenos Aires tienen una cita obligada con La Biela, uno de los reductos que otorgan a la ciudad su inconfundible aire elegante y cosmopolita.
La Biela es el típico café porteño. No solo por su historia, que comienza hace más de 150 años, sino también por la decoración, las comodidades, la ubicación, los servicios que brinda y la cálida atención dispensada por su calificado personal.
En su amplio salón, con capacidad para 400 personas cómodamente sentadas, se puede disfrutar de una amena conversación degustando un clásico café o alguna de las exquisiteces de su cocina. Los cómodos sillones hacen agradable la estancia en el lugar y las mesas, bien distanciadas entre sí, invitan al diálogo distendido.
El frente aún conserva la estructura de hace más de 100 años, pese a la última remodelación realizada en 1994.
La amplia terraza que se forma aquí, donde se pueden ubicar 300 personas, a la vista de la Iglesia Nuestra Señora del Pilar y del Cementerio de los Monjes Recoletos, permite disfrutar de los mismos servicios y calidad que en el interior del local, ya sea que nos ubiquemos de forma que podamos tomar sol, o bien a la sombra que nos regala el centenario gomero hindú que se yergue allí.
Dentro, la sobria decoración da un toque de distinción al ambiente. Las cortinas sobre los ventanales y la combinación con la madera hacen un lugar cálido y acogedor. En sus paredes se pueden ver los clásicos radiadores Hispano Suiza, bielas, antiguos faroles y bocinas de viejos automóviles. Debido a la inclinación "tuerca" del lugar, podemos encontrar fotografías de los grandes del automovilismo, como Juan Manuel Fangio, cinco veces campeón mundial de la Fórmula Uno, José Froilán González y Clay Reggazzoni entre otros.
Una mensión especial merecen las fotografías ubicadas sobre la ampliabarra. Todas ellas fueron tomadas por un grande de la literatura argentina: Adolfo Bioy Casares, quien tomó las fotos a fin de ilustrar con ellas un libro de Jorge Luis Borges. Ambos eran habitué de La Biela, y estas fotos atestiguan el paso del tiempo en el barrio de La Recoleta, mostrando además una faceta quizás poco conocida de este gran escritor: la de fotógrafo.
Biblioteca Nacional
El edificio de la Biblioteca Nacional es un gran ejemplo a nivel internacional de diseño brutalista, un estilo surgido en los años '50 que se caracteriza por privilegiar las estructuras de hormigón armado dejadas a la vista y tratadas de manera escultórica, y principalmente se aprecia el lugar del parque dejado en el nivel de suelo y la sala de lectura como mirador sobre el puerto y el Río de la Plata.
La idea principal, según lo relata el arquitecto Testa, fue ubicar los depósitos del establecimiento bajo tierra, aprovechando que el Estado decidió expropiar la totalidad de la manzana para crear una plaza pública. Esto protegería a los libros del efecto nocivo de la luz y a su vez, permitiría en un futuro expandir el espacio de los depósitos, de ser necesario sin interrumpir el funcionamiento del establecimiento. Una vez liberada la estructura del edificio del enorme peso de los depósitos de libros, se eligió elevarla sobre pilotes para permitir la vista libre, dejando una plataforma de acceso abierta de forma permanente, como una continuación del parque "por debajo" de la biblioteca. De esta forma, resultó un edificio sostenido por cuatro grandes columnas, que Testa caracteriza como un cuadrúpedo, como si se tratase de un ser vivo.4
En una de las etapas de la extensa construcción se decidió —por razones presupuestarias —eliminar de la fachada los parasoles metálicos que protegerían los sectores de lectura de la luz exterior, un hecho que actualmente da un aspecto inconcluso al edificio, y perjudica a los lectores en determinados horarios del día. Ya en la etapa final de la obra, el Estado removió a los arquitectos Testa y Bullrich de la dirección, dejándola a cargo de la Dirección General de Arquitectura Educacional (DGAI), que modificó otros detalles como los revestimientos del auditorio (eligiendo materiales más económicos), los materiales para los pisos y el mobiliario nuevo, diseñado ad hoc para las salas de lectura y hemeroteca. De todas formas, el antiguo mobiliario original de la vieja Biblioteca fue conservado y trasladado al nuevo edificio, y se lo puede apreciar en la sala de lectura pública.
Luego de dos niveles subterráneos de depósitos de revistas y libros, sigue un nivel semi-enterrado donde se alojan oficinas y la hemeroteca, cuya sala está iluminadas por una lucerna que asoma del piso de la terraza de acceso en el nivel superior como una cúpula piramidal. La entrada al hall principal es por esta terraza elevadas con respecto a la plaza circundante, a la cual se accede por una serie de rampas, escalinatas y escaleras caracol, al espacio protegido por el edificio y rodeado por las cuatro columnas que lo elevan, permitiendo vistas de la avenida Las Heras, el barrio La Isla y el Puerto de Retiro. Este nivel también se conecta con la Escuela de Bibliotecarios, que funciona en un edificio independiente cuya terraza es de acceso libre y tiene una serie de lucarnas de hormigón con forma de hongos, y maceteros alargados que también funcionan como bancos. El hall de entrada tiene una pequeña sala de exposiciones, y da acceso a las dos escaleras y batería de dos ascensores que conducen a todos los niveles del edificio: en el primer piso está el auditorio y una sala de exposiciones, y tiene un entrepiso donde funciona la dirección y otras oficinas, en el tercer y cuarto piso están las salas de consulta especializadas, y el quinto piso es la sala de lectura general en doble altura, con la sala de recepción y entrega de libros, y una rampa en zig-zag conduce al sexto piso, donde hay salas de consulta especializadas.
Se denomina Microcentro a una zona de la Ciudad de Buenos Aires caracterizada por la concentración de edificios administrativos y de oficinas, coincidente a groso modo con el área alrededor del centro histórico de la Plaza de Mayo. El Microcentro no forma parte de los 48 barrios porteños reconocidos oficialmente y por lo tanto no tiene límites establecidos; su ubicación se superpone aproximadamente con el barrio de San Nicolás y parte del de Monserrat. La zona del Microcentro al norte de Plaza de Mayo, característico centro financiero de la Argentina donde se ubican las casas matrices de los principales bancos y la Bolsa de Comercio, es llamada tradicionalmente la City.
El microcentro posee un área de aproximadamente 60 manzanas cuyos límites son la Avenida Córdoba y la Avenida de Mayo (cortando estas en sentido norte-sur) y entre la Avenida 9 de Julio, Avenida Leandro N. Alemy la Avenida de la Rábida (cortando estas últimas en sentido oeste-este).
El Microcentro posee aproximadamente un 90% de su superficie dentro del barrio de San Nicolás y el restante dentro del barrio de Monserrat, en este último caso solo se encuentra dentro un pequeño sector comprendido por el cuadrante de la Avenida de Mayo, la Avenida 9 de Julio, la Avenida Rivadavia y calle Balcarce.
A pesar de ser el barrio más céntrico y transitado de la ciudad, el microcentro carece casi de población, siendo utilizados la mayor parte de sus edificios para oficinas
Casa Rosada
La Casa Rosada es la sede del Poder Ejecutivo de la República Argentina. Dentro de la misma se encuentra el despacho del Presidente de la Nación Argentina.
Este edificio se localiza en la calle Balcarce 50, en el barrio de Monserrat en la Ciudad de Buenos Aires, frente a la histórica Plaza de Mayo. Su color característico es rosado y es considerado uno de los edificios más emblemáticos de Buenos Aires. Alberga además el Museo de la Casa de Gobierno, con objetos relacionados con los presidentes del país. En 1942 fue declarada Monumento Histórico Nacional.
La Casa Rosada es una pieza ecléctica, que combina elementos de diversos orígenes, como las mansardas de origen francés, las logias italianas y las ventanas de los proyectos de los arquitectos Aberg y Kihlberg, con la expresión clasicista típica de Tamburini.
El conjunto se desarrolla en tres plantas sobre el oeste (calle Balcarce) y cuatro niveles más subsuelo sobre el este, gracias a la pendiente del terreno desde la Plaza de Mayo hacia el Parque Colón, originada por el Río de la Plata, que naturalmente llegaba hasta este lugar, y se fue alejando hacia el este mediante sucesivos rellenos para ganar tierras.
La fachada principal presenta un eje de simetría marcado sobre el arco monumental diseñado por Tamburini, pero la simetría está desvirtuada por la demolición del ala sur en 1938. Además, la famosa loggia en el primer piso del ala norte se diferencia claramente de las ventanas apareadas de estilo florentino del ala sur. Hay una combinación ecléctica de ornamentos, pero predomina la influencia del Renacimiento italiano, a pesar de la mansarda que originalmente estaba revestida en pizarra, y fue cambiada por una cubierta de bronce en la década de 1960. Varios ornamentos y molduras desaparecieron a lo largo de los últimos cien años, particularmente la crestería de hierro que adornaba la mansarda, y unas molduras con el Escudo Nacional, que fueron reemplazadas por copones, en la cornisa.
La fachada norte, diseñada completamente por el arquitecto Tamburini, se destaca por la entrada de carruajes que sobresale del volumen macizo del edificio, destacándose con una galería para la circulación de vehículos y una escalinata que salva el desnivel de la calle que marca una plataforma que originalmente estaba destacada con dos estatuas de bronce de ángeles tocando trompetas de la victoria, luego removidas. En esta fachada se hace notable la difícil unión del edificio original diseñado por el ingeniero Aberg con la ampliación realizada por Tamburini, ya que el primero está rematado por la mencionada mansarda de bronce, y el segundo tiene una losa plana. Una de las ventanas del edificio de Aberg fue directamente seccionada a la mitad por la ampliación, y es un detalle de la desprolijidad con la cual fue ejecutada la obra.
La fachada este, que mira a Puerto Madero y al río, está precedida por el Parque Colón —aunque originalmente la separaba del mismo la Avenida Paseo Colón— que permite jerarquizar el edificio y genera un de acceso que recientemente fue enrejado para transformarse de facto en los jardines del palacio presidencial. Esta fachada también pertenece al diseño de Tamburini, aunque originalmente tenía dos retiros simétricos que posteriormente fueron eliminados, construyendo ampliaciones que dejaron una fachada lisa. La cornisa del edificio está adornada con un conjunto escultórico.
La fachada sur es la más pobre del edificio, ya que la original diseñada por Tamburini fue demolida en la década de 1930, y luego de ello no fue reconstruida, sino que apenas se ejecutó un muro sin ornamentar que contrasta por su falta de molduras con el resto del edificio. Adempas, la presencia del Palacio de Hacienda, enfrentado directamente con la Casa Rosada, impide la jerarquización del edificio que se da en los otros frentes, debido a la poca distancia que se puede tomar de la fachada
Plaza de Mayo
La Plaza de Mayo, sitio fundacional de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina, nació de la unión de las plazas de la Victoria y del Fuerte, al demoler en 1884, una construcción llamada Recova Vieja que las separaba.
Se encuentra en el denominado microcentro porteño, rodeada por las calles Hipólito Yrigoyen, Balcarce, Avenida Rivadavia y Bolívar del barrio de Monserrat. Nacen desde su lado oeste tres importantes avenidas:Presidente Julio A. Roca, Presidente Roque Sáenz Peña y Avenida de Mayo. En su entorno se encuentran varios de los principales monumentos y puntos de interés: el Cabildo histórico, la Casa Rosada (donde reside el Poder Ejecutivo de la Nación), la Catedral Metropolitana, el edificio del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la casa central del Banco Nación.
Debajo de su terreno, de aproximadamente dos hectáreas, alberga a las estaciones de subte Plaza de Mayo (línea A), Catedral (línea D) y Bolívar (línea E) que, junto con numerosas líneas de colectivos, brindan una fácil comunicación a todos los rincones de la ciudad.
Caja de resonancia de las grandes manifestaciones populares del país, puede decirse que, salvo la Declaración de la Independencia y las batallas que se libraron para conquistarla, ha sido el escenario de todos los acontecimientos trascendentales a nivel nacional.
El 25 de mayo de 1941 la Comisión Nacional de Museos y Monumentos Históricos hizo colocar una placa de bronce sobre el borde del cantero donde se encuentra la Pirámide de Mayo con una leyenda que sintetiza su historia:
En esta Plaza Histórica el fundador Juan de Garay plantó el símbolo de la justicia el 11 de junio de 1580. La Plaza Mayor fue desde entonces el centro de la vida ciudadana donde el pueblo celebró sus actos más solemnes como sus fiestas y expansiones colectivas. La Reconquista y la Defensa de la ciudad culminaron en la Plaza Mayor que se denominó Plaza de la Victoria. En 1810 fue el glorioso escenario de la Revolución de Mayo y en 1811 levantose en ella la Pirámide conmemorativa de la fecha patria: hechos trascendentales de la Historia Argentina se sucedieron en la Plaza de la Victoria. Aquí el pueblo de Buenos Aires juró la Independencia de la patria el 13 de septiembre de 1816 y la Constitución Nacional el 21 de octubre de 1860. El edificio de la Recova Vieja, demolida en 1884 fue un rasgo característico en los tiempos de la Independencia y de la Organización Nacional.
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Catedral de Buenos Aires
La Catedral Metropolitana de Buenos Aires es el principal templo católico de Argentina. Se encuentra ubicada en la intersección de la calle San Martín y la avenida Rivadavia, del barrio porteño de San Nicolás, en frente a la Plaza de Mayo.
En el suelo del atrio, frente a la puerta central, se halla una estrella de ocho puntas, que indicaba el punto de apoyo para la nivelación de la ciudad. En efecto, cuando se efectuó la nivelación de las calles se tomó la altura delperistilo de la Catedral como "Cota 0". Hay que tener en cuenta que a fines del siglo XIX el peristilo de la Catedral estaba al ras de la calzada y la altitud de la calle Rivadavia como la de Plaza de Mayo fue rebajada. Esta rebaja ha quedado evidenciada por las cinco gradas de la escalinata que fue necesario agregar al umbral del templo. Por decreto del 13 de agosto de 1899 se tomó como nueva cota 0 el nivel del Riachuelo en su desembocadura, y así el antiguo nivel de la Catedral quedó a 19,0081 m arriba del nuevo cero
Una de las cosas que sorprende a quien visita la Iglesia catedral es la diversidad de estilos que es posible observar en su interior. No olvidemos que su construcción (la de la actual) fue iniciada en el siglo XVIII y recién pudo ser concluida a principios del siglo XX, pasando por muy diferentes manos, de arquitectos y constructores, quienes, según la oportunidad o momento, fueron cambiando o agregando algo, desde elementos un tanto barrocos, hasta su estilo fundamentalmente románico. Es uno de los templos que impresionan por su volumen y grandiosidad: recordemos que su nave central está próxima a los cien metros de largo; su piso, de especial belleza de mosaicos diminutos, tiene una superficie que se aproxima a los tres mil metros cuadrados.
Es uno de los pocos edificios catedralicios de la Argentina que posee una nártex. Este consiste en un pórtico de entrada, cerrado, con lo que podríamos "llamar doble pórtico", como si fuera un gran vestíbulo, anexo a las naves de templo. Se le ve separado, antes de ingresar a las naves propiamente dichas, por sendas puertas que coinciden en posición, estilo y volumen con las que, en frente, comunican con el exterior. En los primeros siglos de la Iglesia este lugar, el nártex, se reservaba para los catecúmenos, quienes seguían desde allí las ceremonias y predicación, pero al iniciarse el Ofertorio de la Santa Misa, se retiraban, por no encontrarse autorizados a permanecer durante la liturgia eucarística.
Contra lo que muchos piensan, por último, la catedral no es de tres naves, sino que tiene cinco. La principal, cubierta de una bóveda de cañón corrido y un crucero cubierto por una cúpula que, sobre un tambor circular, alcanza los 41 metros de altura.
Desde la nave lateral derecha se accede al mausoleo que guarda los restos del General San Martín, ubicado en su cuarta casilla, que está allí desde 1880, y que fue obra del escultor francésCarrier Belleuse (inspirado en el eclecticismo francés, que imperaba en Europa en ese momento).
En el interior, la cúpula, el presbiterio, los brazos del transepto y la nave central, fueron decorados por el italiano Francesco Paolo Parisi con unos frescos renacentistas, pero se perdieron a causa de la humedad.
En la capilla San Martín de Tours (ubicada en el ala izquierda) está el monumento al Arzobispo León Federico Aneiros, una obra del escultor Víctor de Pol, que es un mausoleo en mármol de Carrara y piedra, con la figura del prelado arrodillado en su centro. Las catorce pinturas del Vía Crucis son obra de Francesco Domenighini, otro italiano, y originalmente se encontraban en la Iglesia del Pilar.
El piso fue diseñado en 1907, por el también italiano Carlo Morra, y fabricado en Inglaterra en mosaico veneciano.
El 17 de agosto de 1947 se descubrió sobre la derecha del frente una lámpara votiva con una leyenda que dice "Aquí descansan los restos del Capitán General Don José de San Martín y del soldado desconocido de la Independencia. ¡Salúdalo!"
El altar mayor (dorado y de grandes proporciones) se impone en el medio como el punto más destacado del centro, y sus formas sinuosas y espiralazas, junto a su ornamentación de flores y rocalia (piedra), delatan su estiloChurrigueresco.
En el brazo izquierdo hay un altar con una imagen llamada “Santo Cristo de Buenos Aires” (una escultura de madera de algarrobo policromada que representa al Cristo crucificado antes de su muerte, en tamaño natural). Al final de la nave izquierda se llega a un altar dedicado a la Virgen de los Dolores (una de las primeras traídas al país).
Otra imagen más moderna es la del Cristo del Gran Amor (Luis Álvarez Duarte, 1981), con la que todos los años, el viernes santo, se celebra un vía crucis.
Teatro Colón
El Teatro Colón es un teatro de ópera de la ciudad de Buenos Aires. Por su tamaño, acústica y trayectoria, está considerado uno de los cinco mejores del mundo.
Comparable a La Scala de Milán, a la Ópera Estatal de Viena, a la Ópera Semper de Dresde y la Ópera de París, es índice inequívoco de consagración para quienes se presentan en él y lugar ineludible para los amantes de la música. El Colón ha sido desde siempre un teatro venerado por el público y por los artistas más renombrados. A su vez, es sede del Ballet, Coro y Orquesta Estable del Teatro Colón y de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires.
El edificio ocupa 8200 metros cuadrados –con una superficie total de 58.000 m²– en el predio delimitado por las calles Tucumán, Libertad, el pasaje Arturo Toscanini y la calle Cerrito (Av. 9 de Julio).
La sala principal -una de las mayores del mundo- tiene 32 metros de diámetro, 75 de profundidad y 28 de altura en un entorno de estilo ecléctico, que combina el neorrenacentismo italiano y el barroco francés, con una rica decoración en dorado y escarlata. Dividida en siete niveles, tiene capacidad para 2487 espectadores sentados y alcanza los 3000 si se incluyen los parados. El escenario tiene 35 metros de profundidad por 34 de ancho y la boca de escena es una de las más grandes en los teatros con forma de herradura a la italiana.
La cúpula original de Marcel Jambon donde también colaboró el pintor argentino Casimiro Mella, se dañó con filtraciones de humedad después de un baile de carnaval en los años 30 y fue pintada nuevamente en 1966 por Raúl Soldi. El diseño con motivos musicales rodea la araña central, de 7 metros de diámetro con 700 bombitas eléctricas.
Rodean la sala el gran hall de entrada (Foyer), el Salón Dorado, el Salón de los Bustos, el Salón Blanco y el Museo que alberga los trajes utilizados por algunas de las figuras que pasaron por el teatro.
El Instituto Superior de Arte, la biblioteca, el Centro de Experimentación Musical y los talleres conforman dependencias extraordinarias que diferencian al Teatro Colón de otros teatros del mundo ya que la mayoría de los telones, elementos escenográficos, vestuario y todo lo necesario para una puesta en escena completa se construyen en el mismo edificio. Tanto el instituto como los talleres y los cuerpos estables de coro, orquesta y ballet son un semillero de talentos que han dado prueba de la capacidad profesional y artística de sus egresados y empleados.
La entrada principal se encuentra sobre la calle Libertad, bajo una marquesina de hierro forjado, y conduce a un gran foyer adornado por columnas con basamento de mármol rojo de Verona, recubiertas de estuco para imitar el mármol botticino y con aplicaciones de estuco dorado.
El hall, de 14 metros por 28, está coronado por un luminoso vitral en forma de cúpula a 25 metros del suelo, realizado por la casa Gaudin de París. El piso, con diseño de guardas y motivos decorativos, está cubierto por teselas de gres de forma irregular.
La escalinata de entrada, construida en mármol de Carrara, está flanqueda por dos cabezas de león talladas en piezas únicas. Mármoles amarillos y rosados de Siena y Portugal dan distintos matices de color y textura a la balaustrada. Sucesivas escalinatas, enmarcadas en vitrales de Gaudin, llevan a los niveles superiores.
Coordenadas: 34°34′57.5″S 58°25′2.5″O (mapa)
Entrada al jardín por la Avenida Santa Fe.
El Jardín Botánico de Buenos Aires, llamado desde 1937 "Carlos Thays" en honor al paisajista Carlos Thays que lo concibió, y llamado oficialmente desde 2009 "Dirección Operativa Jardín Botánico Carlos Thays", se encuentra próximo a los bosques del barrio de Palermo de la mencionada ciudad.
Su extensión es de 69.772 m², en los que se encuentran más de 5.500 especies vegetales. Cuenta además con numerosas esculturas como "La Primavera" u "Ondina de Plata", "Loba Romana", "Mercurio", "Venus"; y grupos magníficos como "Saturnalia", estatuas de mármol que simbolizan los movimientos de la VI sinfonía de Beethoven ("La Pastoral"), y el grupo escultórico "El Despertar de la Naturaleza".
Posee además un invernáculo, una biblioteca, el museo Botánico, y la Escuela Municipal de Jardinería, todo rodeado de serenos senderos para caminar y contemplar la variada vegetación.
Fue inaugurado el 7 de septiembre de 1898 y su mantenimiento depende del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Desde 1996 es Monumento Histórico Nacional.
El 22 de febrero de 1892 el paisajista Carlos Thays elevó a la Intendencia Municipal, a cargo de Francisco Bollini, un proyecto exponiendo la necesidad de crear un jardín botánico de aclimatación para objetivos científicos, recreativos y paisajísticos, aconsejando hacerlo en el lugar que ocupa actualmente y en el que funcionaban en ese entonces el Departamento Nacional de Agricultura y el Museo Histórico Nacional. Se le dio visto bueno al proyecto y se entregaron dichos terrenos (unas 7 ha) el 2 de septiembre de 1892.
Yerba mate en el Jardín Botánico. Aquí Thays ensayó el método científico para suproducción industrial
El solar se encontraba en un un lugar alto (desde él se divisaban los bañados de Palermo y la costa del Río de la Plata) y había sido hasta los finales de la época colonial un "almacén de la pólvora" o "polvorín de Cueli”, por el nombre de una familia que tenía residencia en el lugar. Primeramente se rellenó el sitio con tierra más fértil de otras regiones.
Finalmente se lo inauguró el 7 de septiembre de 1898.
Fue además en el ámbito del Jardín Botánico y gracias a Carlos Thays que se pudo redescubrir el sistema de germinación industrial de la yerba mate, que desde la expulsión de los jesuitas se había perdido. Thays investigó los métodos de germinación de las semillas. Esto ya había sido enunciado por el naturalista Aimé Bonpland, quien había vivido en las misiones jesuitas, pero sus estudios se habían perdido. En 1895 recibió las primeras semillas de yerba mate y gajos de plantas. Los gajos no prosperaban pero logró hacer germinar las semillas al someterlas a una prolongada inmersión en agua a elevada temperatura.3 Así se refería el paisajista a su descubrimiento:
(...)después de haber realizado una cierta cantidad de experiencias, utilicé con éxito en el Jardín Botánico el modo bien simple de preparar los granos mediante una inmersión especial cuya receta ha sido publicada. Obtuve así un gran número de ejemplares que se pueden denominar domésticos que producen granos que germinan, aunque un poco lentamente, sin ninguna preparación.5
Debido al éxito obtenido, la Dirección de Agricultura y Ganadería de la Nación Argentina confirmó la eficacia del sistema Thays y lo divulgó en la región Noroeste del país.4
En la gestión siguiente a la de Thays, la de Benito Carrasco (entre 1914 y 1916), se incorporó la Escuela de Jardineros, la Bibliotecas especializada en temas botánicos y el gabinete de Fotografía.
En 1937 se le dio el nombre de su fundador, "Carlos Thays" y en abril de 1996 se lo declaró Monumento Histórico Nacional (Decreto n° 366).2 El 30 de noviembre de 2009 pasó a denominarse "Dirección Operativa Jardín Botánico Carlos Thays" (Decreto 1079/09 del B.O. 3303).
El criterio de Thays siempre había apuntado hacia lo instructivo, de manera que concibió el lugar con seis sectores fitogeográficos (cinco contienen especies de cada continente y uno dedicado sólo a lo autóctono de la Argentina). En cada sector los especímenes vegetales se ordenan sistemáticamente, según la clasificación taxonómica.
Aquí se encuentran los tres estilos principales de la jardinería paisajista: el simétrico, el mixto y el pintoresco, recreados en los jardines romano, el francés y el oriental.
Aquí se han reunido las especies vegetales que el botánico romano del siglo I de nuestra era Plinio el Joven tenía en su villa de los Apeninos, tales como cipreses, álamos, y laureles.
También cuenta con zonas donde las plantas se ordenan de acuerdo a su origen; de Asia se aprecian ejemplaresginkgo biloba de hojas amarillas en otoño y bellas japónicas (Eriobotrya japonica, Cryptomeria japonica, Sophora japonica etc.) de hojas coloradas; de Oceanía, con acacias, eucaliptus y casuarinas; de Europa, con robles, avellanasy olmos; y del África, con helechos, palmeras, y gomeros. Además, de Estados Unidos provienen las sequoias, pero sobre todo, haciendo especial hincapié en la flora argentina.
Existe también un "Jardín de los Sentidos", donde conviven especies aromáticas y algunas texturadas. La idea base de este jardín es que sea útil para personas ciegas.1
De estilo inglés, con ladrillos rojizos a la vista, fue proyectado en enero de 1881 por el Ingeniero Militar de origen polaco, Jordán Wysocki y construido por Pedro Serechetti entre abril y diciembre de ese año. Había sido sede del Museo Histórico Nacional y Carlos Thays lo habitó mientras fue el director de Parques y Paseos (1892-1898).
Actualmente es sede de la Administración del Jardín Botánico.
Su Biblioteca Botánica cuenta con 1.000 libros y 10.000 publicaciones de todo el mundo, libremente disponibles por los visitantes, y el Museo Botánico.
Cabe destacar la gran ayuda que brindó el Ingeniero Agrónomo Benito Carrasco en la concreción de varias de éstas obras; y que hoy pueden disfrutarse en el Jardín.6
Uno de los atractivos del Jardín Botánico son sus cinco invernaderos. El mayor de ellos, de estilo art nouveau, fue premiado en la Exposición de París de 1900, tiene 35 m de largo y 8 de ancho y por su diseño. En él se resguardan especies diversas regiones cálidas, como los helechos (cerca de mil ejemplares), orquídeas o palmeras, como la arecavestiaria llegada desde Nueva Guinea. En abril de 1996 fue declarado Monumento Histórico Nacional.7
Los primeros fríos deMiguel Blay.
Dentro del perímetro del Jardín se encuentra la Escuela Municipal de Jardinería Cristóbal María Hicken dependiente del Ministerio de Educación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El lugar cuenta con 33 obras de arte entre esculturas, bustos y monumentos. Son de destacar: Los primeros Fríos , del catalánMiguel Blay y Fábregas; Sagunto, de Querol y Subirats; Figura de mujer, Saturnalia, en bronce patinado, por Ernesto Biondi, una réplica de la célebre Luperca (o Loba Capitolina), una réplica de la Diana de Versalles -el original corresponde al artista griego antiguo Leocares-, una bella escultura en mármol de una muchacha desnuda llamada Ondina del Plata obra de Lucio Correa Morales que se encuentra en medio de un estanque (o pequeña fuente-laguna) llamado La Primavera en el acceso norte del Jardín Botánico porteño; y El mensaje de Mercurio obra neoclásica debida a Ricardo Celma y Eduardo Lloreda que substituye a una destruida representación escultórica de tal deidad. También se destacan una escultura que representa a la diosa Venus -réplica de la Afrodita de Cnido- ; así como también una pequeña escultura en bronce patinado que representa a Flora.
Un conjunto haciendo un círculo de esculturas en mármol blanco representa a los movimientos 2°, 4° y 5° de la célebre sinfonía Pastoral de Ludwig van Beethoven, estas esculturas debidas a Leone Tommasi se llaman respectivamente como los nombres de los citados movimientos de la ya dicha sinfonía: Escena por la orilla del río, La tempestad y Canción de los pastores , tal conjunto se completa con una escultura llamada El despertar de la naturaleza obra de Juan de Pari.
En el Jardín se halla además un monumento donado para el Centenario de Argentina (1910) por el Imperio Austrohúngaroconsistente en una especie de obelisco rematado por una esfera armilar.
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Fuente Wikipedia.