Todos se encontraban en el barco pequeño, apretando los dientes expectantes cuando un ligero temblor ocurrió justo antes del sonido de una enorme explosión; antes siquiera de poder hacer nada, una ráfaga de fuego y tierra los alcanzó, sin dañarles pues estaban dentro del compartimento mientras, a su vez, el aire caliente, propulsaba aquel navío pequeño hacia la cascada, superándola con creces y haciendo que el barco levitara por los aires.
En un abrir y cerrar de ojos ya habían perdido de vista el suelo, el agua y absolutamente todo, agarrándose como podían al barco pudieron ver a muchos pies de altura hacia abajo, el pequeño poblado, la jungla, la playa (con Gumshoe boca abajo aún pegado a la palmera), unos corales y finalmente, con un estruendoso golpe y chapoteo, ambos llegaron al océano, continuando con el impulso hasta alejarse de la isla.
Por desgracia para ambos, el hecho de tener tanta tensión, sumado a haber sobrevivido a una terrible explosión que hizo temblar a la montaña entera, fue superior a sus fuerzas, haciendo que ambos cayeran inconscientes... y a la deriva... hacia aquella tormenta...