La puerta no se abre de ninguna forma, no puedes salir.
Vives en un piso, no puedes salir de él, no hay puerta de garaje en la décima planta.
Joder, esto si que era raro del todo. Acabo por aporrear la puerta.
- !Eh! !Cabrones! ¿Que mierda habéis hecho? - no le hablo a nadie y la hablo a todos. Yo que se, debía ser una puta broma ¿no?. Miro mi movil, quizá podía llamar a alguien. A Martin quizá...No se, ¿a la poli?
Era como si me hubieran aislado, cojones. Empiezo a considerar seriamente el tema de la llamada de antes....Yo que se ¿algún altercado dentro del edificio?
La puerta no cede, por mucho que la golpees. Al intentar llamar por el móvil, un pitido suena, pero no una de que el teléfono comunique, sino más bien como cuando están ajustando el sonido de unos altavoces. Es tan agudo que te hace daño a los oídos.