Te despiertas en un lugar de lo mas tenebroso, y pronto recuerdas que es el bosque de Telko. En tu andar si rumbo o razon, te viste obligado a descansar en un lugar como este, rodeado de bichos y monstruos extraños....
Alrededor tienes varios arboles que se ven muertos y vivos al mismo tiempo, escuchas ruidos que te ponen los pelos de punta moviendose a tu alrededor y quiza, lo unico que los mantenga alejados, es la pequeña fogata que armaste en la noche y que aun sigue ardiendo levemente.
Tu tambien has oido los rumores, los cientos de catastrofes ocurriendo por todo el contienente, los dos ejercitos del bien y el mal embarcandose en un viaje por la destruccion o salvacion del mundo. Quiza no te interese, quiza si, pero ¿Acaso piensas quedarte de brazos cruzados? Sabes que uno de los batallones del ejercito de Draenir esta en los alrededores, los viste saqueando un pueblo antes de internarte en el bosque. Quiza debas ir con ellos, de todas formas, seguir solo por este camino solo te llevara a la muerte.
Kamu había llevado varios días ocupado con diversos asuntos, pero hacía ya tiempo que no encontraba ningún trabajo ni ningún pueblo en condiciones en el que poder "infiltrarse" y conseguir algo de dinero con el que poder comer. Los bandidos y mercaderes tampoco eran demasiado comunes por aquél bosque, el cual parecía más poblado de bestias salvajes esperando una oportunidad para abalanzarse contra él que de campesinos es busca de hierbas, frutos o raíces para poder atracarles. La vida estaba difícil, y más con esa estúpida guerra que no provocaba más que muertes.
La verdad es que aquellos asuntos no eran de su agrado, pero era lo que tocaba en aquellos tiempos y habría que hacer uso de ello si deseaba seguir en el negocio en el que había invertido toda su corta vida. Recordó entonces un batallón que saqueó un pequeño pueblo cerca de su localización. Posiblemente se encontrarían en los alrededores y tal vez podría aprovecharse de ello. Apagó la hoguera echando tierra por encima, y decidió salir del bosque escondido entre la penumbra, con la intención de pasar desapercibido si encontraba a los soldados. Cualquier segundo demás con aquellos bárbaros tenía más valor que cualquier tesoro guardado por un dragón.
Empiezas a divagar por el bosque con la esperanza de encontrar a aquellos soldados que habias visto enteriormente.Seria una larga y aburrida caminata si no fuera por el curioso lugar en que te encuentras, por lo cual usas tus habilidades de picaro para ir escondiendote en cada lugar que veas, y al poco tiempo aquellos extraños sonidos que te rodeaban desaparecen. Mientras eso, pudiste hechar un mejor vistazo a los arboles que tenias a tu alrededor, aquellos que parecian muertos...pero ahora sabes muy bien que siguen 'vivos', por alguna razon han tomado un color apagado y oscuro, como si estubieran corrompidos.
Luego de estar un rato pensando en eso un extraño sonido, parecido al de un gruñido de perro, te devuelve a la realidad. Pronto comienzas a escuchar como algo o alguien se acerca hacia ti velozmente, pero por la expesura del bosque, necesitaras esforzarte un poco para poder verlo...
Si no se entendio, necesito que hagas una tirada de avistar, dificultad 14.
El joven pícaro no veía otra cosa que árboles a su alrededor, y se impacientaba un poco por llegar a la salida. No había imaginado que había caminado tanto bosque adentro, pero de todas maneras eso no le molestaba. La densidad del bosque era considerable, y el avance a través de él se convirtió en un ejercicio para mejorar sus dotes para esconderse. No tardó en distraerse, cuando de pronto unos gruñidos provenientes de entre la maleza advirtieron al pícaro de la presencia de peligro. No dudo en darse la vuelta e intentar encontrar a aquello que posiblemente le acechaba. Entrecerró los ojos, y con gran esfuerzo miraba de un lugar a otro intentando distinguir algo diferente entre tanta oscuridad y vegetación, pero sus esfuerzos fueron inútiles.
- Maldición... - susurraba para sí Kamu, al sentir el avance veloz y sin pausa de aquello.
Tirada: 1d20
Motivo: Avistar
Dificultad: 14+
Resultado: 8 (Fracaso)
Avistar como atributo ¿verdad? Ah, y se entendio perfectamente XD. Por cierto, muy buen metodo de juego, es semejante a d&d.
Cuando te diste cuenta de que era lo que en verdad sucedia, ya era demaciado tarde.De repente sentiste como algo te embistio con gran fuerza, hasta el punto de hacerte golpear contra un arbol directamente...Velozmente volviste a ponerte de pie, aunque algo resentido por el golpe, y buscaste con la mirada a tu agresor que se encontraba justamente delante de ti.
Se trataba de una especie de lobo negro...aunque habia algo fuera de lo comun en el, sus ojos brillaban intensamente con un color rojizo y de su boca salia un extraño humo gris.Pronto te diste cuenta de que este se estaba preparando para atacarte y que si no hacias algo para defenderte, terminarias siendo su cena.
Tirada: 1d20(+3)
Motivo: Iniciativa
Resultado: 2(+3)=5
Estas entrando en combate, tienes que tirar iniciativa y si sacas mas que el lobo, podras atacar en el mismo turno.
Si, seria como el D&D pero mucho mas simple xD
Apenas dándole tiempo a a reaccionar, la criatura apareció como una sombra que se movía a gran velocidad entre la espesura, empotrándole directamente contra un árbol. Al percatarse de que era un lobo la situación comenzó a cambiar bastante, y no solo por su comportamiento, si no por el brillo de sus ojos y ese vapor o humo que exhalaba, propio más del fuego de una hoguera que del aliento producido por la baja temperatura de la noche.
- Que interesante... -pensaba para sí el joven ante la situación, pero tampoco había tiempo para pensar, rápidamente echó mano a la vieja daga que portaba, la cual no solía utilizar salvo que se dieran estas ocasiones, y la cual ya estaba un poco tocada y vieja. Se precipitó contra la bestia, y le asestó una certera puñalada en la pata derecha, intentando alejarse todo lo posible de la boca del animal, para que este no se girase y le asestase un mordisco que le pudiera dejar sin mano.
Tirada: 1d20(+3)
Motivo: Iniciativa
Resultado: 18(+3)=21
Tirada: 1d20(+3)
Motivo: Atasque con dagas
Resultado: 18(+3)=21
Tirada: 1d4
Motivo: Daga vieja
Resultado: 3
Empiezo de sobra yo XD. Una pregunta, ¿cuando suba de nivel tendré acceso a otras habilidades?, es que estuve pensando y me di cuenta de que tendría más posibilidades con la dote sutileza con armas que me permite usar los bonos de destreza en combate cuerpo a cuerpo que los de fuerza. Por cierto, la CA del lobo no la has puesto, pero imagino que no tendra más de un 21 XD.
El animal no pudo nisiquiera estar cerca de esquivar aquel ataque y gracias a ti inteligencia tambien adivinaste que intentaria morderte, por lo tanto pudiste esquivarlo a tiempo.
La pata del lobo parecia sangran abudantemente, y cuando le hiciste la herida pudiste escuchar un ahogado alarido de dolor, pero ahora el animal apoyaba esa misma pata en el suelo y continuaba gruñendote como si no le afectara en lo absoluto...
Despejas todas tus dudas, este no es un lobo comun.
Tirada: 1d20(+4)
Motivo: Ataque lobo
Dificultad: 14+
Resultado: 2(+4)=6 (Fracaso)
Si, cuando te hagas mas fuerte ganaras mas habildades y ataques especiales.
La cosa es que primero tienes que encontrar cual es tu manera de hacerte mas fuerte, esto no es igual al D&D, cada uno tiene una manera diferente.
Igual no esperes que eso suceda muy pronto xD
La CA de tus oponentes nunca la pondre por que, primero no es necesario saberla y segundo puede calcularse sola (contando con que la standard es 10 en casi todos, no creas que este muy lejos de eso xD)
Como ya dije en el post de sistema de combate y juego, si la tirada de ataque es mayor de 10 siempre acompañala con la tirada de daño por las dudas.
Con un poco de suerte, Kamu logró esquivar el ataque de aquél lobo. Pese a la profundidad de la herida, este seguía en pie, gruñendo y dispuesto a arrancarle la cara de un bocado. Los conocimientos que poseía el joven sobre bestias eran bastante escasos y no llegaba a adivinar cual sería la resistencia del animal, así que quiso intentar cortar por lo sano terminando de una vez el combate. Con un movimiento rápido saltó hacia su retaguardia, se apoyó un árbol cercano y se impulsó para finalmente acabar a las espaldas del lobo, asestándole dos cortes en las patas traseras con la esperanza de que perdiera el equilibrio, o simplemente pillar alguna vena importante para provocarle una hemorragia.
Tirada: 1d20(+3)
Motivo: Atacar
Resultado: 12(+3)=15
Tirada: 2d4
Motivo: Atacar
Resultados: 2, 4
Eso había imaginado respecto a la CA, pero claro, al no ser un lobo común no se si llegará a 14 o por ahí por el encantamiento ese que le tiene poseido o porque simplemente no es una bestia normal y es una mágica.
He sacado un 15, no se si he acertado, de todas maneras lo pongo como si lo hubiese hecho, y si no es así no se cuenta el ataque. Utilizo mi habilidad rodear, para situarme detrás del lobo y realizar una tirada doble de daño asestándole 6 PG.
Con tu ultimo golpe, creiste que todo ya habia terminado, el animal habia quedado en el suelo desangrandose lentamente....pero no era asi, en el momento menos esperado sentiste como su mandibula se clavaba en tu brazo, aunque obviamente por falta de fuerzas no pudo causar mas daño que una leve mordedura.
Sin mas, aquel moribundo animal quedo tendido frente a ti, esperando el golpe final entre gruñidos.
Tirada: 1d20(+4)
Motivo: Ataque lobo
Dificultad: 14+
Resultado: 10(+4)=14 (Exito)
Tirada: 1d4
Motivo: Daño lobo
Resultado: 1
Pese a las cuchilladas asestadas en las patas traseras, el animal seguía en pie, y con un rápido movimiento se giró asestando un pequeño pero efectivo mordisco en el brazo al joven que evitó su siguiente ataque. No fue mucho lo que le hizo pero tuvo efecto. Seguidamente el lobo se quedó tendido en el suelo, moribundo y gruñendo, intentando luchar con las últimas fuerzas que le quedaban.
Aquella situación se estaba alargando demasiado y el animal estaba empezando a sufrir. Si fuera un enemigo a considerar posiblemente Kamu habría disfrutado cada segundo de ese momento, pero no se trataba más que de un simple animal, poseído si, pero que seguramente atacaba por miedo, hambre o por una mente situada detrás de él. Rápidamente se situó a un lado, colocó su mano sobre su cabeza, intentando taparle los ojos y presionando para que no la pudiera mover y evitar otro mordisco. Colocó su daga en la nuca del lobo con la diestra, e intentó asestarle el golpe final con el que acabar con su sufrimiento.
Tirada: 1d20(+3)
Motivo: Atacar
Resultado: 6(+3)=9
Tirada: 1d20(+3)
Motivo: Estocada final
Resultado: 3(+3)=6
Entiendo que cuando dices que el lobo se queda tendido frente a mi es que esta sin fuerzas, tirado en el suelo y que con un solo golpe le mataría, pero esto ya roza lo absurdo ¿como he podido fallar eso? XD
Luego de aquel ataque, el cuerpo del lobo quedo inmovil...frio...pero de repente una especie de humo negro comienza a salir del cuerpo del lobo, y luego ves un rostro horripilante saliendo de el, que desaparece en cuestion de segundos.En ese mismo momento, los ojos del lobo dejan de tener ese brillo rojizo.
Te levantas y te quedas pensando, ¿Que demonios fue eso?
Tirada: 1d6
Motivo: Bonificacion al ataque
Resultado: 5
Tirada: 1d4
Motivo: Daño
Resultado: 2
Bonificacion: 9+5= 14, exito en el ataque.
Finalmente el combate había acabado sin sufrir mayores daños que unos pequeños arañazos en el brazo producidos por el mordisco del animal. Tendido en el suelo e inmóvil parecía que ya todo había acabado, cuan grande fue la sorpresa del joven cuando aquel macabro espectáculo comenzó, haciendo aparecer antes sus ojos un espectro que salía del cuerpo inanimado del lobo. No duro mucho, pero lo suficiente como para distinguirlo a la perfección.
-Vaya..., creo que he encontrado algo que hacer hoy.-hablaba para sí el ladrón tras el acontecimiento, el cual había despertado por completo su curiosidad, quedándose totalmente ensimismado observando el cuerpo de la criatura. Reaccionó a los pocos segundos, y con su daga comenzó a rasgar la piel del lobo con el propósito de llevársela para comerciarla o lo que se prestase, todo era útil dados los tiempos. Tras esto, reanudó la marcha, en busca de aquel pueblo en el que había pensado unos momentos atrás, antes del combate.