Partida Rol por web

Miré a ambos integrantes de tan peculiar parej mientras se sentaban en nuestra mesa sin invitación previa, haciendo un gesto afirmativo a Dante para que no se pusiera nervioso, esperando a ver que nuevas traían. Sin duda lo que dejaron caer, o más bien lo que dejó caer Rusty, me hizo torcer el gesto mientras la tarada del bate soltaba todo lo que llevaba dentro. La dejé hacer, que dijera cuanto quisiera y se desfogara con el grandullón.

Cuando acabó levanté un dedo, mucho después de que la mocosa se hubiera marchado dejando el sobre.

Un momento- dije con calmada serenidad, una fría y peligrosa calma. Si aquel idiota me había metido en un nuevo lío le cortaría las pelotas - Yo no he aceptado ningún trato, al menos de momento, y me importa una mierda lo que hayas prometido o contratado. Es tu problema. Nadie habla por mí... y diría que mi amigo Dante tiene una línea de pensamiento muy parecida a la mía- permanecía con el dedo alzado, apenas un gesto, pero que denotaba más de lo que aparentaba - Primero quiero saber todo lo referente a ese trato, me trae sin cuidado que ello nos proporcione más información, suficientes problemas tenemos ya como para añadir tus tonterías. Segundo quiero saber con quién va relacionado ese trato. Tercero, si vuelves a intentar meterme en un trato, sea el que sea, por tu cuenta te mato. Así de simple. Y te aseguro que no me verás llegar, así que prepárate para vivir mirando por encima del hombro el resto de tu puta vida- dije enumerando mis condiciones

Dicho aquello, dejado claro que no era una inconsciente como aquella chica alocada que ahora nos acompañaría, bajé el dedo y acerqué mi rostro hacia adelante, en tono confidencial

- Las cloacas no van a ser un juego de niños, y mucho menos un lugar donde hacer el idiota, así que mas nos vale dejarnos de gilipolleces si queremos llegar al asunto de las granjas de una pieza, objetivo que abordaremos cuando nos incumba y con el resto... ahora mismo, siendo solo cuatro, no tiene sentido discutir esto y trazar planes.

Miré entonces a Dante y, acto seguido, a Rusty. Con la misma mirada que empleara una serpiente que mira a un ratón antes de clavarle los colmillos

¿Y bien... Rusty?

Teela observa como Isaias y Oscar dirigen su miranda en direccion  una mesa, a traves de la gente puede verse a alguno de los individuos que alli estan sentados poer poco mas, unicamente resalta una melena azul y otra rubia junto a dos maromos. Mas en cuanto intentas ver algo mas, ves por el rabillo del ojo como tus dos compañeros ya se han puesto en marcha. o que sea que tenga de interes esa mesa y seguirles. Ellos se abren paso por entre la multitud, siendo Isaias el mas bruto y contundente en esa tarea, hasta llegar a unas escaleras que suebn al siguiente piso. Un gigante negro como la noche os detiene mientras os mira, clavando sus ojos por ultimo en Isaias y levantar los dedos indicando un cuatro. Isaias le mira extrañado puesto que Pecosa ya no estaba con ellos y estaba seguro de ser tres. Mira hacia atras haciendo que Osacar haga lo mismo por simple curiosidad y alli detras de vuestra nueva mejor amiga esta un tipo pelirrojo con una cazadora de cuero y uan sonrisa que sin ninguna duda no tiene nada que envidiar a las vuestras cuando estais a punto de hacer alguna idiotez. El tipo os saluda sin perder la sonrisa y tras darle un leve tiron de orejas a la tipa dura.

- Shawn es mi nombre, me han dicho que viniera para ayudar en un trabajo. - Señala con el dedo a Teela como diciendo que es cosa suya. Esta ultima asiente mirando primero a Oscar y vocalizando un nombre que sin duda este conoce de sobra. "Sam" Oscar asiente y le da un toque a Isaias indicandole que esta bien y sin mas preambulos subis por la escaleras.

La decoracion cambia sin ninguna duda entre un sitio y el supuesto palco VIP de Moxxy permitiendoos ver un lugar con una mayor intimidad en cuanto a la distribucion espacial de la decoracion. Las mesas estan lo suficientemente separadas como para crear una especie de ambiente mas relajado y tranquilo. La musica esta unos cuantos decibelios mas baja y permite escuchar los murmullos de las conversaciones. Hay unos cuantos postes donde unas bellezas, una rubia de piel nivea y una morena de piel de alabastro muven sus cuerpos  aun ritmo lento y erotico sin que nadie se pegue por acariciarlas. Solo estan ahi como decoracion, como divertimento mientras las diferentes aprejas del local se dedican a lo suyo. Y al fondo en la barra hay un tio tirado en el suelo, de su boca sobresale un puro* y de su entrepierna un tacon de aguja que por la posicion de la pierna aun no ha llegado a reventar nada. Al lado de la mujer de fuerte caracter y mas negra melena hay otro, al cual reconoce rapidamente Isaias como Chris, que parece estar tomandose tranquilamente un whisky sin hacer ningun movimiento de ayuda hacia el que es su amigo.

Os deteneis un segundo mientras la belleza baja la cabeza y agarra al tipejo de la camisa para acercarlo y susurrarle algo, cosa que inmediatamente cambia la actitud del hombre que parece darse por vencido. Os dais cuenta de que aparte de eso hay un hombre en las sombras, un tipo curtido, el mismo Hark, compañero, amante y quien sabe que mas de Moxxy... solo por si esta necesita ayuda de algun tipo. Moxxy se separa de Alek tras darle una suave patada y os mira para mostraros una amplia sonrisa y señalaros la misma mesa que ocupasteis la ultima vez. Se acerca a ella, contoneandose sin ningun tipo de pudor y con una de esas sonrisas capaces de derretir a cualquiera que responda ante el calificativo de "hombre". - Asi que ya estais de vuelta. Supongo que sois los que habeis decidido no daros un chapuzon en las cloacas. - Su sonrisa no cambia y su tono en ningun momento parece ironico o sarcastico, mas bien demasiado suave y sedoso... casi como si os estuvieran envolviendo en sedas. En eso mira mas alla de vosotros tres clavando sus ojos en vuestro nuevo invitado, mostrando un gesto mas que depredador con los labios. - Vaya, vaya... asi que el irlandes ha decidido volver por aqui... esto si que es raro Shawn. Me diras que debo ese honor.

Veis como Shawn baja la mirada levemente mientras una extraña sonrisa asoma a sus labios. - Ya ves... tarde o temprano los caminos de todos en esta ciudad acaban por cruzarse. Y si estoy aqui es por ella. - Señala a Teela, dijo algo de un trabajo y aqui estoy. Nada mas.

Los labios de Moxxy se tuecen levemente como si estuviera reconsiderando algo para acto seguido dejar de mirar a Shawn y clavar sus ojos de nuevo en vosotros tres, haciendo caso omiso por ahora al menos al irlandes.- Os dire lo que creo que os vendra bien y vosotros ya me decis si teneis pensada otra cosa. Para ir alli necesitareis al menos un vehiculo pero viendo la cantidad de amigos que estais haciendo. - Señala con la cabeza en direccion a los dos de antes sin ni siquiera mirarlos. - Tal vez sea mejor con dos.

Cruza sus brazos justo por debajo de su generoso y voluptuoso pecho antes de cruzar las piernas y miraros como si no os viera, antes de volver al mundo real. En eso quien habla es Shawn. - Lo que te falta por decir es que tenemos dos opciones, pillar cualquier trasto de uno de los desguaces de la ciudad o intentar buscar al menos un buen vehiculo. Los de los desguaces no estan mal... pero dudo que aguanten toda la meirda en la que esperas que nos metamos...¿verdad? - Moxxy sonrie y asiente hacia el irlandes. - Chico listo. - Shawn recibie el pequeño insulto sin inmutarse, o mas bien sin ganas de provocar pelea y deja que Moxxy continue. Ella os mira a vosotros de nuevo. - Ya habeis oido al irlandes, teneis que elegir... pero si necesitais un buen vehiculo... tendreis que comprarselo a los Perros de Presa o robarselo... pero esto ultimo no suele ser recomendable, como estoy segura que sabeis.

Sin que ninguno de ellos se de cuenta y mientras aun esta presentandose en la escalera, Shawn pasa descaradamente su mano por tu nalga derecha, acariciandola y permitiendose regodearse en ello. Mas sin dejar de mirar a tus nuevos compañeros por supuesto, como si no estuviera haciendo nada de nada, mas eres capaz de advertir ese brillo en su mirada y ese leve toque en su sonrisa que le delatan para alguien como tu, tan cercana a el.

Notas como el irlandes mueve su brazo por detras de la figura de Teela, mas no tienes claro que esta haciendo. El movimiento es tan lento y tan imperceptible que realmente no estas seguro de si has visto algo o solo ha sido cosa de las luces y el movimiento de gente a vuestro alrededor.

Un nuevo tipo se sube al carro. Con solo una ojeada ya se lo que es; otro elemento como nosotros al que le va el movimiento y ganas de follarse a la puta de la muerte. Se está metiendo gente que no conozco de nada, amigos de amigos. Lo normal en estos asuntos, de acuerdo, pero cada uno con sus intereses debajo del sudor y la mugre de su piel.

Mierda. A saber qué le habrá dicho Alek. Nunca escarmentará. Tiene un par de cojones y eso mola, pero el cerebro derretido en alcohol. No se, tío, quizá algún día se la tire; las mujeres son así. Alek me ofrece una sonrisa chupando su puro desde el suelo y Chris se encoge de hombros y levanta el vaso a modo de saludo.

Escuché las propuestas. Joder, no tenemos chapas para comprar vehículos, Moxxy lo sabe. Miré directamente a la zorra a los ojos, mientras preguntaba a Óscar.

-¿Qué hay de los trastos con los que habéis regresado? ¿Material del Mutante? * No podemos comprar una mierda. Uno de mis colegas es un buen conductor, puede hacer que un cacharro de desguace aguante.

Sonreí ante la tierna relación que empezaban a trabar mi viejo amigo y la chica nueva. Aquello prometía una cosa…problemas!!! Isaías tenía esa rara cualidad de caer bien siempre, de llamar la atención, pero su lengua a veces era más rápida que su cerebro. Pero que le íbamos a hacer!!! A pesar de ello y de sus veladas amenazas era un tipo al que podías confiarle tu espalda…al menos de momento.

La joven camarera apareció nerviosa para decirnos que nuestra querida Moxxy’s nos esperaba. Asentí mientras decía:

- Vamos tortolitos!!! Dejad de deciros bobadas y vamos a ver a nuestra anfitriona!!!

Y sin más preámbulos apuré la copa y comencé a caminar hacia donde nos habían dicho, reparando vagamente en que el resto del grupo estaba por allí, pero decidido a no decir nada en vistas de las estupideces que solían decir. Isaías no tardó en ponerse por delante haciendo gala de sus modales… Siempre era divertido ver las caras de la gente, mirando con odio a Isaias, pero que luego se cagaban en los pantalones ante su gesto amenazador, por no hablar que yo y Teela eran un nuevo aliciente para dejar de lado cualquier conato de pelea…

El tipo negro que vigilaba la entrada levantó cuatro dedos lo que nos dejó un poco confusos… Casi por inercia miramos a nuestro alrededor, solo para encontrarnos con un tipo pelirrojo, sonriente que sin mediar palabra se presenta, dejando claro que conoce a nuestra nueva amiga, cosa que no me acaba de convencer. Pero al parecr viene de parte de Samantha, lo que supuestamente me ha de dar ciertas garantías.

Palmeo la espalda de Isaías, dándole a entender que está todo en orden y esperando que no diga nada fuera de lugar. Necesito salir de aquel ambiente bullicioso. El yermo es más peligroso, pero uno puede pensar con mayor claridad.

Aquel nuevo lugar era mejor que el ajetreado interior del local. Aquel sitio está reservado solo para gente que viene a hacer negocios o que está muy bien posicionada. Nosotros no somos ni de uno ni del otro grupo. Somos los desgraciados que recogemos la mierda. Pero aún así estamos vivos y eso es algo que de momento hay que agradecer. Moxxy sigue igual de atractiva que siempre. Bajo su sonrisa embaucadora se esconde un animal peligroso, pero eso no quita que uno tenga que quitarse el sombrero ante aquella belleza exótica y exuberante. El planteamiento es sencillo aunque se nos ha unido este nuevo individuo que al parecer también conoce a Moxxy.

Ahora el plan es tan sencillo como conseguir un vehículo… Lo cual no será fácil pues nuestros fondos son cuando menos cero. Para colmo estab el tal Shawn… No me gustaba!!! En un momento dado pareció que hacía una especie de gesto, fue algo casi imperceptible pero muy difícil de interpretar. ¿A quien hacia señas? ¿Acaso nos la estaba intentando jugar?

Se barajaron propuestas… Isaías habló… Preguntaba por los vehículos con los que habíamos llegado…

- Me parece buena idea aunque dudo que podamos recuperarlos. Se quedaron en las instalaciones de Hannibal y… para que nos vamos a engañar… no estoy entre las personas mejor vistas allí dentro. Olvídate de esos coches. Tal vez deberíamos de mirar esa alternativa que comentas. – le dije mirándolo, mientras que con las manos le hacía unas señas que ya conocíamos y que venían a decir algo así como…”Esto huele mal!!! Tenemos que hablar!!!”.

Suspire dejando escapar una leve cantidad de aire que trasmitia mucho mas de lo que realmente aparentaba y era hastio en grado sumo. El dedo levantado de Andriel no me hacia sentirme intimidado ni lo mas minimo, ni eso, ni las referencias a su nuevo mejor amigo. - Mira guapa, el trato es solo cosa mia. No he incluido a nadie mas... por eso solo hay informacion sobre las granjas, si quereis mas info entonces habra que hablar con mi contacto y afianzar un trato que nos incluya a todos. - Clave mis ojos en los suyos, dejando a las claras lo mismo que ella habia dicho con palabras, pero concentrado en una sola mirada. Ninguno es una puta oveja, ninguno es un jodido corderito y mas le valia darse cuenta de eso. Estamos en la misma mierda todos juntos, pero como te flipes demasiado igual eres tu quien acaba con un tiro en la nuca.

Desvie la mirada hacia Dante, el cual seguia ahi sentado sin decir palabra. Me la sudaba de canto que tuviera a su amigo de su parte. - Y me parece que ya hemos perdido bastante el tiempo con tus gilipolleces. Asi que pongamonos en marcha.

En eso veis aparecer al tipo albinod e la entrada, el que parece que esta en los huesos pero aun asi no necesita hacer mucho para que le abran camino en la sala. La gente se aparta de el sin dudarlo aunque el parece no darse cuenta de ello. Se para frente a la mesa y os mira detenidamente antes de clavar sus ojos en Andriel. Hay un leve reconocimiento, de haberte visto antes por aqui, asiente lentamente antes de abrir la boca mostrando unos dientes enegrecidos por el consumo de algun tipo de droga.

- Venid os llevare con vuestro contacto. - Sin mas se da la vuelta y desaparece entre la gente sin ni siquiera mirar atras. Le seguis a toda prisa puesto que el no parece estar pendiente de vosotros. Atrravesar el gentio no es dificil incluso creeis ver al resto de vuestro grupo subiendo de nuevo a donde Moxxy, a su sala privada. Aun asi no teneis tiempo de mas porque el albino sale del local con direccion a la calle y alli camina sin sentido adentrandose en los callejones. El sol esta decayendo, provocando un miriada de colores anaranjados y rojizos que chocan con las superficies reflectantes de la ciudad, dandole un tono sanguinolento y surrealista. Los callejones se vuelven mas deteriorados, mas oscuros y mas peligrosos. Sois capaces de notar como alguien os vigila pero no parece interesado en atacaros, al menos no mientras esteis con el albino. Todos sabeis que es este sitio, es donde estan los abandonados, los yonkies y cosas peores que han sufrido cambios debido a la radiacion... pero eso no explica porque estais internandoos tanto en este lugar. Las calles parecen mas sucias de lo normal  y la escasa luz que llega le da un tono mas que sombrio al lugar. Pintadas, casas rotas que simulan los cascarones con vida que atraviesan vuestro camino de vez en cuando. Despojos humanos que no tienen su sitio ni siquiera en esta sociedad de muerte y sangre, veis sus ojos, sus huesos marcandose a traves de la piel y lo mas impactante su olor. Un olor que parece haberse pegado al lugar, suciedad, excrementos, drogas y desesperacion... por vez primera pareceis ser capaces de oler un sentimiento tan extraño pero que aqui, en este lugar es facilmente reconocible.

En un momento dado uno de vosotros se lo pregunta al albino. Este se detiene y os mira sin veros antes de responder. - Nadie se atreveria a entrar aqui, por eso estamos aqui. - Sin mas se da la vuelta y continua hasta llegar a un sitio que esta despejado, pero eso no es lo mas sorprendente. Alli hay algo de electricidad, muy poca pero la hay y ahora entendeis donde estais. Este sitio es un escondite de Moxxy en un lugar donde pocos, muy pocos se atreven a entrar pues es un sitio solo de entrada. El albino se acerca a una puerta y da un par de golpes. Esta se abre mostrando a un hombre con una capucha, su sexo es reconocible por la voz y por la barba que tiene. Veis como intercambian unas palabras rapidas y el albino os mira antes de irse.

Abro la puerta ante los extraños que nos ha traido Silver, ese hombre tiene muchos rasgos negativos en su vida pero sin duda la lealtad es uno de sus mejores. Les miro detenidamente mientras Silver desaparece de nuevo entre las callejuelas del lugar, la explanada podria suponer un cierto nivel de seguridad para la mayoria pero no para los que tengo delante, estoy seguro de que ya estan buscando posibles lugares desde donde puedan meterles una bala en la cabeza. Sonrio levemente antes de abrir del todo la puerta. - Me llamo Abraham y no hace falta que me digais que haceis aqui. Eso es obvio, seguidme.

Espera a que entreis todos y cierra la puerta sin molestarse en mirar si hay alguien mas ahi fuera. Atravesais la desvencijada casa hasta llegar a otra puerta. El lugar huele diferente, se siente diferente ahi fuera en cientos de maneras que no podeis expresar pero sobretodo es ese sentimiento que antes os arropaba el que ha desaparecido y que en cierta manera supone un alivio. Al abrirla os dais cuenta de porque tanto secretismo, el lugar es grande, probablemente del tamaño de un pequeño almacen. Las paredes, telas y otros materiales han sido utilizados para dividirla y convertirla en un centro de clasificacion y almacenamiento... lo que significa que tambien distribuye. En uno de los lados veis lo que es una enorme puerta metalica, el lugar por donde deben entrar los camiones o lo que sea que utilice esta gente.

Me giro para miraros. - Moxxy debe tener mucha fe en vosotros, de eso no cabe duda. - Levanto una mano y señalo en la direccion opuesta a una trampilla enorme en el suelo. - No cabe duda de que es la entrada a las alcantarillas. - Hemos tenido problemas ultimamente. Muchos de nuestros correos no consiguen pasar con vida pero supongo que por eso mismo estais aqui. Si necesitais preguntar algo es el momento, tengo cosas que hacer y la puerta debe ser cerrada una vez la atraveseis. - No miento, tengo mucho trabajo y aunque su ayuda es bievenida no es cosa mia, es cosa de Moxxy. Asi que cuanto antes se pongan a ello mejor para todos... lo que no puedo evitar es fijarme en que todos ellos parecen chaperos, hombres y mujeres del Yermo... y pelear en las alcantarillas es algo diferente a lo que estan acostumbrados.

Una sonrisa sádica y ladeada se dibuja en los labios de Teela al ver a la preadolescente acercarse a su mesa, mordiéndose con un colmillo el labio inferior como si intentase reprimir las ganas de decir algo. Pero ese día se sentía buena persona y le daría un descanso a la pobre niña que no sabía en lo que se metía. Ya había pasado suficiente miedo solo entregando el mensaje, por lo blanca y tiritona que se veía.

Los sigue a través del local de mala muerte, donde dicho sea de paso de seguro volvería a ver si encontraba algún contacto útil. Se detiene para observar lo que ellos miran. A un costado, capturando la atención de sus acompañantes, había un grupo curioso en una mesa. ¿Amigos? ¿Enemigos? Sería bueno saberlo, pero ya vería en el momento si algo pasaba. Cuando se da cuenta, los otros dos ya se han ido, y tiene que acelerar el paso para alcanzarlos. Al menos seguirlos tenía sus ventajas, porque Isaías se abría camino como un puto tanque entre la gente.

La seña de cuatro personas hace a Teela reaccionar girándose para dar un puñetazo, pero Shawn lo detiene y antes que el resto se voltee, le está tirando la oreja en represalia. Ella solo sonríe divertida mientras él se presenta, asintiendo cuando corresponde y dándoles a entender quién había contratado al pelirrojo. Por un segundo, lo mira a los ojos con una sonrisa pícara y mirada reprobatoria.

Suben las escaleras, encontrándose con un salón bastante peculiar. Para ser un prostíbulo, era más elegante de lo que se esperaba. Quizás quién sería esta tal Moxxy. Tras poco menos de un minuto mirando en lo que internamente era una preciada eternidad a las dos bailarinas, sus ojos se fijaron en una mujer con pintas de dominatrix. Seguro amiga de la puta de Sam. Y tanto abajo como al lado de la misma, dos hombres con ganas de ser dominado. Bah, quien podría culparlos. Era cosa de mirar a esa chica para derretirse. Sinceramente, hasta ella se dejaría someter por la mujer.

Cuando es invitada por Moxxy, y tras Óscar e Isaías, se sienta a la mesa. El tono de la mujer era relajante, aunque sus palabras no fueran precisamente amables. Pero esa sonrisa lobuna a Shawn, la manera familiar en que se refería a él… Teela alzó una ceja, mirándolo de reojo – “¿Algo que necesites decirme?” – pero su expresión se suavizó tan pronto la nombró y vio el rostro de la preciosa putita deformarse. Esta era la primera vez que sentía algo similar a celos por el irlandés, pero sabía que no lo eran. El último hombre que la había puesto celosa había terminado con un balazo en el estómago y eso había sido hacía una vida atrás.

Sonríe ante la mención despectiva del aumento de número en el grupo. ¿Shawn la ponía en su lugar y ahora lo repudiaba? Tarde, muy tarde. Ahora cualquiera vería que era por despecho, y su autoridad había quedado en el suelo. Exactamente lo mismo con el insulto luego del comentario del irlandés.

Ustedes conocen mejor a su gente, los sigo en lo que decidan. – dice tranquila. No sabía nada de nadie, era difícil tomar decisiones así. Y hasta que no lo evaluara por su cuenta… no iba a aceptar el riesgo de tomar decisiones o hacer sugerencias. 

Luego del "Y si estoy aquí es por ella", Teela desliza su mano disimuladamente por debajo de la mesa para acariciar el interior del muslo de Shawn, subiendo suavemente hasta su entrepierna. Una leve sonrisa coqueta y tentadora se dibuja en sus labios, como un desafío susurrado a tu oído, una recompensa por un trabajo bien hecho. 

Entonces los vehículos eran de Óscar y su gente. Bien. A cada uno lo que es suyo. No hay que mezclar las cosas. Transporte gratis. Bueno, ya veríamos el precio con la gente de Hannibal. Me jodía que te quiten lo que es tuyo. Me jodía mucho. Antes de que te lo roben, muerde y arranca la piel al tipo que lo intente.

-Esos coches son vuestros. No debes renunciar tan pronto a ellos. Propongo darnos una vuelta por esas instalaciones y recuperarlos. Al menos intentarlo. Se puede hablar, ¿no? Si no sale bien, probemos la otra posibilidad, el desguace. Alek conoce gente.

Después me fijé en su aviso. Um. Sí, ya, Eagle había estado atento, por una vez. El escote y las tetas de Moxxy no le enturbiaron la percepción de su entorno. Un punto para mi colega. ¿Un trío entre estos tres, las dos mujeres y el hombre? No se. Teela parecía perdida, o es lo que quería aparentar. Bebí un trago y me lancé a preguntar a la reina del lugar.

-¿Alguna cosa más que deberíamos saber? –sonriendo, claro.

Veo como el hombre que responde a Isaias, el mismo que parece estar "saliendo" con West me pregunta. Puedo notar sus ojos, su astucia mientras estudia las diferentes opciones, aqui tenemos uno que sobrevivira mucho tiempo si sigue ese camino... aunque claro tras juntarse con los demas, sus mierdas se han vuelto las suyas y no es que esten en la mejor letrina de este maldito sitio. Me encojo de hombros, un movimiento que realza mis ya de por si peligrosas curvas. - Por mi parte no, lo de siempre. Hagais lo que hagais, estais a vuestro aire, no espereis que os saque del apuro... al menos no hasta recibir lo mio. - Si eran lo suficientemente duros como para conseguirme mis camiones de droga entonces tal vez mereciera jugarmela un poco por ellos. Hay tipos duros en estos dias pero duros y listos muy pocos.

Miro a Isaias mientras noto su gesto, cojonudo el cabronazo tambien se ha dado cuenta. Entonces habla sobre el tema del todoterreno... es un tema espinoso. - La verdad es que aunque trajimos el puto vehiculo hasta aqui. Bueno, no era exactamente nuestro. Se lo robamos a uno de los cabrones de Hannibal alli en la ciudad. Asi que ir a reclamar algo que hemos robado de las frias manos de sus hombres. - Por el tono queda claro que los cadaveres no fueron cosa del destino. - No creo que sea una buena idea viendo del buen humor que esta con nosotros.

Me rio con ganas al escuchar a Oscar comentar lo ocurrido con el vehiculo de Hannibal. Si, sin duda son del tipo de locos que quieres de tu lado. No se cuantas sorpresas mas me deparan en nuestras conversaciones pero sin duda saben como mantenerme entretenida. Me muerdo el labio mientras no puedo dejar de sonreir.- Lo mejor tras esos "pequeños" detalles, es que busqueis en los desguaces o intenteis hacer algun loco trato con los Perros... dudo que eso me pudiera sorprender mas. - Dejo de morder mi labio para acercar mi vaso y vaciarlo de una. - Si eso es todo, tengo cosas que hacer. - Miro a Isaias y despues a mis dos nuevos cabronazos. - Acompañadles.

Alek y Chris asienten acercandose a vosotros. Alek sigue cojeando aun un poco pero no parece que eso le siente de especial malhumor.

Rusty era un gallito, y tenía que demostrar de un modo u otro que era el que más lejos meaba, aunque fuera de canto. Puse los ojos en blanco con su bravata, repantingándome en la silla mientras lo miraba aburrida de su siempre idéntico juego. Realmente había algunos que estaban cortados por el mismo patrón y que se veía a la legua de que pie cojeaban. El calvorotas era uno de ellos, y además de los bobos porque se dejaba picar; tanto mejor, todo era útil llegado el momento.

Antes de aceptar entrar en tus jueguecitos quiero saber quien es y que quiere, sino olvidate de verme arrastrándome por el fango junto a ti. Bastante tengo con lo que llevamos como para añadir otro clavo a mi ataúd- en aquello no iba a ceder un ápice; quería que colaborara con él pese a no soportarme, sabía que le era necesaria, y él hasta cierto punto también lo era para mí, pero no tenía intención de meterme en nuevos líos. Al menos no a ciegas

Pero su lengua parecía igual de hipertrofiada que su cuerpo, y se empeñó en seguir parloteando

Si claro, ahora voy monada... en cuanto acabe la bebida- añadí con una sonrisa traviesa en la mirada... y ese brillo. El cachitas picha floja no me intimidaba lo más mínimo, ni ahora ni después de cien mil discursitos como aquel. Y si encima podía enojarlo un poco más mejor que mejor

...

El blanquito vuelve a hacer acto de presencia, dejando claro que sigue como siempre y su reputación (y seguramente su habilidad) no había mermado lo más mínimo. Allí nadie se andaba con chiquilladas y el larguirucho menos aún. Asentí ante su mudo saludo, apenas perceptible, y me levanté mirando a Rusty.

Ves zoquete, así se piden las cosas... en silencio o por favor. Tú parece que ni una cosa ni otra sabes entender- y con la sonrisa nuevamente marcada en el rostro seguí al albino con un sensual contoneo de caderas que no hacían más que enfatizar mi pulla al calvete.

El trayecto hasta el exterior es corto aunque aun nos permite ver de reojo como el resto de la cuadrilla sube nuevamente a la sala de Moxxy para tener nuevas conversaciones con la regente del antro, lo que levanta mi curiosidad pese a no tener tiempo de saber que traman (Lástima; joder un poco a Oscar y a Valkiria no habría sido tampoco mal pasatiempo, pienso divertida) El exterior nos recibe como un padre a su hijo perdido y olvidado: con aliento a mugre, alcohol, tabaco y quien sabe que centenar de inmundicias más; realmente no sentaba nada mal sentirse en algo parecido a un hogar conocido, aunque ese hogar tuviera dientes y garras.

Nos dirigimos directamente a los suburbios más tétricos y peligrosos, dónde la escoria de entre la escoria se arraciman en asquerosos nidos de drogas, sexo y desesperación. En especial esto último. Recuerdo como yo misma no estuve lejos de acabar en un sitio así o incluso peor de manos de los esclavistas... me evado de esas sensaciones pasadas y reparo que nada ni nadie nos sigue, incluso hay quien rehuye ser visto por el albino. Sin duda no es la primera vez que pasa por aquí y ya ha dejado huella para que lo recuerden.

Me relajo ligeramente, en especial cuando nuestro particular guía llega hasta lo que parece nuestro destino y se nos franquea la entrada hasta lo que es, sin duda, el escondrijo mejor defendido de toda la ciudad... no por sus hombres acuartelados, sino por su ubicación. Nadie en su sano juicio buscaría allí y sin embargo se nos permite pasar sin mas presentación que ser acompañados por Silver... y nuestro anfitrión no parece mucho más hablador e incluso más enigmático

Un almacén aquí, a la vista de todos y oculto a su vez. Brillante... ¿tienes planos de las cloacas y los puntos por donde se han producido más ataques?¿Algún arma de área para ese laberinto... como un buen lanzallamas?- empecé a preguntar sin tapujos, dado que parecía que se nos daba cierta libertad ¿Aparte de esa escoria que vamos a despachar, hay algo más de lo que preocuparnos? Ya me he metido antes en un agujero así y lo que encontré distaba mucho de ser "una pequeña amenaza"- dije recordando los comehombres y la bestia hiperdesarrollada de la última vez Sé que no hay garantías pero ¿no cuesta nada afinar un poco, verdad?