- Joder el chisme este - exclamó cuando el puñal se le clavó en el brazo. Lo agitó, tampoco era para tanto. Lo que vino después si que lo fue, vaya si lo fue.
En cuanto el cadaver se levantó, Tobías abrió mucho los ojos y no pudo evitar disparar varias veces hacia él. Cuando Paloma sugirió Tobías entendió que con las balas no iban a poder hacer nada pero estaba en aquel momento sólo quería descargar su pistola contra lo que fuera aquello.
- Mátalo, mátalo - dijo casi gritando.
Motivo: Cordura
Tirada: 1d100
Dificultad: 43-
Resultado: 64 (Fracaso) [64]
Ni una tirada de cordura para mi! XD
Le hubiera gustado gritar y maldecir todos los dioses antiguos que conocía por los libros pero cuando su vida peligraba no tenía tiempo siquiera de tomar aire. La tabla había parado una puñalada que no dudaba podía haber sido mortal, pero el cuchillo se debatía para salir del madero y seguir su camino, queriendo cercenarlos.
¡Paloma usa lo que sea que hagas para controlar esta mierda! – Ya se había convertido en costumbre de que todo lo que no entendía se lo achacara a conocimiento de la mujer aunque pudiera ser que fuera nuevo para ella. Iba a añadir algo más cuando el cadáver, sin previo aviso, se levantó y gritó, helándole la sangre por completo y creyendo estar viviendo en una verdadera pesadilla.
Tuvo medio, más bien estaba aterrado, de esas veces que te quedabas clavado en el sitio sin poder responder, simplemente observando y dejando que tu mente se encargara de hilar todo sin éxito. Tardó en responder, y si no fuera por el grito de Paloma hubiera estado más tiempo en shock sin poder apartar la mirada del cadáver.
Hank gritó como último recurso mientras llevaba una mano al puñal, aprovechando que todavía seguía preso en su tablón. Si lograba hacerlo, sin pensarlo, iría directo a apuñalar a esa cosa.
Motivo: Cordura
Tirada: 1d100
Dificultad: 57-
Resultado: 59 (Fracaso) [59]
Motivo: Cordura
Tirada: 1d8
Resultado: 6 [6]
Casi!
Motivo: Pérdida de CORDURA de Tobías
Tirada: 1d8
Resultado: 1 [1]
Hank, debes hacer una tirada de INTeligencia. Cuando se pierden 5 o más puntos de CORDURA de golpe, se hace esta tirada para ver si el personaje racionaliza lo que está sucediendo. Si lo hace, la locura empeora, ya que es más consciente del horror que observa. Por eso en este caso es mejor fallar la tirada.
Si superas la tirada de INTeligencia, sufrirás una locura temporal que yo te especificaré.
Tobías, haz una tirada de Armas de fuego (arma corta). Si tienes éxito, tira daño (1D10).
He tirado por ti la pérdida de CORDURA. Un puntito sólo.
Motivo: Int
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 56 (Exito) [56]
Hank, debes hacer una tirada de INTeligencia. Cuando se pierden 5 o más puntos de CORDURA de golpe, se hace esta tirada para ver si el personaje racionaliza lo que está sucediendo. Si lo hace, la locura empeora, ya que es más consciente del horror que observa. Por eso en este caso es mejor fallar la tirada.
Si superas la tirada de INTeligencia, sufrirás una locura temporal que yo te especificaré.
Perdón, no lo sabía. Ahí tienes la tirada :)
Perdón, no lo sabía. Ahí tienes la tirada :)
Nada que perdonar. He preferido ir pidiendo las tiradas poco poco en lugar de todas de golpe como la otra vez, porque si no igual se armaba el lío de nuevo XDDD
- Los disparos no le hacen nada - dijo tratando de desviar la atención sobre el hecho de que había fallado bastante - El puñal, clavadle el puñal - dijo y volvió a disparar. Esta vez si acertó.
Motivo: Disparar
Tirada: 1d100
Dificultad: 60-
Resultado: 72 (Fracaso) [72]
Motivo: Disparar
Tirada: 1d100
Dificultad: 60-
Resultado: 18 (Exito) [18]
Motivo: Disparar
Tirada: 1d10
Resultado: 9 [9]
XDDDDDDDD Este sistema me la tiene jurada....
El péndulo de Paloma se mueve como nunca lo había hecho, en todas direcciones y a una velocidad alarmante.
Marie, que se había quedado más retrasada en la otra habitación, comienza a caminar lenta y temblorosamente hasta la mesa de trabajo mientras susurra palabras incomprensibles. Cuando llega a ella, toma uno de los destornilladores y se lo clava en un ojo hasta la empuñadura. Su cuerpo se derrumba como un muñeco de trapo.
Mientras tanto, Hank saca el puñal de la tabla y se dirige decidido a ensartarlo sobre aquel monstruo. Sin embargo, cuando está a escasos metros de él, no puede evitar cruzar la mirada con la suya. Una fuerza sobrenatural hace detenerse al anticuario, y su cabeza se llena de un pavor y una desesperanza inconmensurables. Sólo hay espacio para el dolor, y la única paz es la muerte.
La mano con la que empuña el cuchillo comienza a ascender hacia su propio cuello. El filo ya roza la garganta. Entonces...
¡BLAM, BLAM!
Tobías dispara dos veces. El primero da contra la pared, pero el segundo impacta en la cabeza de su objetivo, que cae de espaldas al suelo.
En ese momento, Hank recupera de nuevo el control sobre sus actos. Baja la mano rápidamente, separando la hoja de su cuello, y se abalanza sobre el demoníaco ser para intentar otra vez clavárselo.
A pesar del balazo que ha recibido en la cabeza, el monstruo sigue con vida. Intenta levantarse, pero sus movimientos son muy lentos. En tales condiciones el anticuario lo tiene fácil para hincarle la daga, y así lo hace, empalando la misma en su pecho.
La malsana criatura pega otro chillido, pero este no es como el anterior. Este es un grito de dolor que se va apagando poco a poco. Tras el mismo, se contorsiona violentamente durante unos segundos y comienza a resquebrajarse. Como una flor marchita, su cuerpo se reseca y se deshace hasta acabar convertido en un montón de cenizas sobre las que reposa la daga.
El péndulo de Paloma cae por su propio peso. Todo está ahora en silencio. Un silencio sólo roto por la agitada respiración de los investigadores.
Tobías, como llevas pistola automática, puedes disparar dos veces en un asalto, así que el primero falla y el segundo acierta.
Marie ha muerto.
Ella también se hace uno con el silencio. Todo lo contemplado había sido tan horrible...que no podía expresarse ni con el mayor de los gritos. El silencio ya era lo bastante aterrador.
Paloma retrocede hasta apoyarse en una pared.
-Ahora lo comprendo...todo...--musita en un tono bajo casi imperceptible- el Mal ha abandonado esta casa...por ahora...
Le tiemblan las piernas y termina caminando hacia la mesa pasando junto al cuerpo de Marie. No sabe cómo tiene fuerzas pero necesita ver esos papeles.
¿Qué vio el anticuario en los ojos de aquella bestia? La nada, el abismo más oscuro y profundo, un mundo desolado, cadáveres por los suelos de rostros desfigurados, los gritos que opacaban sus oídos, lamentos de los desamparados que le llamaban, el frío de la muerte acechando… Sus ojos lloraban del puro terror mientras el filo se dirigía a su cuello, la única salida que encontraba para no caer en esa desesperación. ¿Era eso lo correcto? ¿Ahí terminaba su pequeña aventura?
Notaba cómo unas gotas de sangre descendiendo por su cuello al apretar un poco, una minúscula herida de lo que vendría antes de que despertara por los dos disparos.
¿Pero qué cojones? – Tenía la visión nublada por las lágrimas y sus manos temblaban mientras las bajaba de su cuello, no llegando a poder ser consciente de lo que había intentado. Puede que fuera esa rabia que llevaba mostrando desde el principio o la impotencia de no haber podido controlar sus impulsos, pero nada más tuvo control de su cuerpo fue directo a acabar con cualquier amenaza.
Gritó cuando la daga se incrustó en la piel de aquella bestia, apretando para asegurarse que, si no la mataba, al menos causarle el mayor daño posible. El chillido de la criatura le hizo ver que había acertado, pero sólo logró que siguiera apretando la daga… hasta que la carne se convirtiera en polvo.
Hank respiró mientras se retiraba de la mesa, todavía sin soltar el arma.
Empezaba a darse cuenta que se habían enfrentado a un caso de una secta, un mal que ninguno llegaría a conocer en realidad, muertes, sacrificios, fantasmas y muebles animados. Todo había sido real.
Paloma…- Sentía que le debía una disculpa a la parapsicóloga, aunque fuera a su manera.- Entiendo que estés loca.- Teniendo en cuenta de que se trataba del escéptico anticuario, aquello era un halago que esperaba que la mujer supiera apreciar.- Necesito una copa bien cargada.
-Quizás la próxima vez empieces a hacerme caso antes...vamos por esa copa...y luego habrá que llamar al señor Knoot.
Dice mientras hace un bulto con los papeles encontrados y los mete al bolso. Ya tendrá tiempo de averiguar que era todo eso.
-Vayámonos de aquí cuanto antes y...¿deberíamos llamar a alguien? Por la pobre Marie...el ultimo suicidio cometido en la casa Corbitt. Ojalá que sea el último.
Todo sucede muy deprisa. Por suerte Hank es más hábil que él y puede dominar bien la madera. Tobías apenas pudo pensar. Y apareció Marie. Se clavó el destornillador.
Pero lo aterrador fue cuando vio aquel puñal hacer su magia y a Hank tratando de suicidarse. No. Eso no. Otro no. Vació el cargador en la momia aquella intentando que sirviera de algo y al menos lo consiguieron.
Respiró aliviado cuando todo pasó. Se acercó a Hank y puso una mano en su hombro.
- Vamos a por esa copa. De camino llamaremos a Knott. Nos lo merecemos.
Sacó un cigarro y se lo encendió. Fumaba con algo de ansiedad por todo lo que había sucedido. Intentaba terminar de calmarse. Al pasar al lado de Marie resopló y se santiguó. Luego salieron de aquella casa.
Cuando Paloma intenta coger los papeles, estos de deshacen en polvo nada más tocarlos. Sin embargo, debajo de los mismos hay un pequeño libro, que ahora deja ver su silueta claramente entre los restos de los papiros. La parapsicóloga lo toma y se lo guarda para estudiarlo más tarde.
Acto seguido, los investigadores deciden salir del infernal caserón. Al volver al jardín exterior, observan que la tormenta ha remitido. Todavía quedan nubes oscuras en el cielo, pero los rayos de sol comienzan a filtrarse entre ellas. Parece una alegoría de lo que acaba de suceder en la casa. Han hecho más de lo que cualquier persona normal y corriente hubiese hecho, y ya planean celebrarlo tomando una merecida copa en algún speakeasy.
¿Le contarán a su contratista todo lo sucedido?, ¿o sólo parte de lo decubierto?, ¿lo revelarán a otros? Quizá su historia será recordada, o puede que olvidada, pero lo que no deja lugar a dudas es que este día un grupo de valientes investigadores han librado al mundo de un mal inimaginable.
Bueno, aquí acaba la aventura :)
Si a alguien le apetece añadir algo más como epílogo para su personaje puede hacerlo en un último post. Al fin y al cabo, todavía queda un día hasta llegar al final del mes ;)
El pequeño libro que ha cogido Paloma es un diario de Walter Corbitt. En él queda reflejado su desquiciada mente, y sus horrendas prácticas como miembro de la Capilla de la Contemplación. Su último ritual fue uno con el que preservaría su vida después de morir. Pidió a su congregación que le enterrasen en el sótano de la casa.
Su lectura provoca otra tirada de CORDURA (para variar XD), pero como ya hemos terminado por supuesto que no tenéis que hacerla. Lo comento sólo como curiosidad.