William corrió lo mas que pudo hasta que el agua le alcanzo violentamente derribandolo y arrastrandolo sin darle siquiera una posibilidad, solo unas burbujas del aire escapando de sus pulmones emergieron brevemente hasta que pudo volver a situarse pero si situación no era de las mejores en las que había estado.
Motivo: Nadar
Tirada: 2d6
Dificultad: 15+
Resultado: 4(+6)=10 (Fracaso)
Motivo: Aire
Tirada: 2d6
Dificultad: 17+
Resultado: 7(+5)=12 (Fracaso)
En desesperada situación los héroes de esta historia bogan por controlar sus movimientos en las aguas crecientes. Mueven brazos y piernas en un intento de superar la fuerza de la corriente y encaminar sus pasos hacia la salida. Cogen aire y aguantan, lo mantienen en los pulmones hasta el final, cuando las burbujas de oxígeno escapan de enter sus labios. Algunos son buenos en eso que llaman nadar y otro solo logran contener el aire aún cuando no controlan la dirección.
Arrastrados, el agua los empuja contras la paredes del tunel, amenazando con terminar con sus vidas...
Cuando el sonido rasposo de algo acercándose inunda sus oidos taponados por el líquido. Distorsionado y conocido solo para dos, únicamente el Doctor y Rory comprenden lo que ocurre.
Alrededor del grupo, surgen intermitentes los contornos de un gran objeto azul. Va ganando consistencia hasta solidificarse, eliminando el agua y permitiendoles ver el interior oscuro y curioso de algo lleno de consolas.
La TARDIS acaba de entrar en escena en el último momento, salvadora e imprevista.
Una cosa era nadar por placer en la piscina de la TARDIS, y otra era nadar para salvar la vida en esos túneles. Todo empapado, golpeado, y escupiendo parte del agua que había tragado, el Doctor escuchó el sonido con alegría. Su amiga, una vez más, no le había fallado, y estaba allí dispuesta a rescatarlos.
_¿Qué te parece, Rory? ¡Justo a tiempo!
El Doctor salió disparado contra los controles, había que salir de allí cuanto antes. Solo se volteó para asegurarse de que todos aún estuvieran vivos.
_Rory, tú explícales -se refería, como siempre que había alguien nuevo, a las características de la TARDIS-. ¿Quién quiere una buena hamburguesa? -preguntó al tiempo que marcaba en los controles el regreso al restaurant-.
No entendía qué estaba pasando. Los túneles, el agua gélida atenazándole los pulmones. la cacofonía silenciosa del caos bajo el agua. Y de pronto... ¡una cabina policial! o_0
¡Pero que cojo... cof cof ...nes!
No cabía en mi de asombro. Me encontraba en el interior de ¿una cabina? Por todos los dioses era una especie de nave sacada de una serie mala de los años setenta. El agua formaba un muro ante la entrada. Como si una barrera invisible la retuviese fuera.
Lo peor de todo era que toda su ropa se había empapado y echado a perder.
Hamburguesa ¿eh? -sonrío levemente al comentario del Doctor. Me apunto a una completa.
Me pongo en pie intentando secar la escasa ropa que se pega a mi cuerpo. Sonrio al Doctor. ¿Doctor... este cacharro no tendrá un vestidor apropiado por ahi?
Este "viaje" le estaba enseñando a no sorprenderse por casi nada.
Rory que ha estado a punto de ahogarse reacciona rapido a las palabras del Doctor y explica rapidamente.
Esta preciosidad que ha acudido al rescate es una maquina que viaja por el espacio y el tiempo. Tiene como nombre Tardis y aunque externamente tiene el aspecto de una cabina de telefonos de la policia, por dentro es mucho mayor y tiene multitud de dependencias.
Y por supuesto tiene algun sitio donde puedes cambiarte y seguro que algo de ropa, te acompaño y me quedo esperandote fuera...prometo no mirar...asi luego te acompaño de regreso aqui para que no te pierdas.
A esto ultimo guiña un ojo a su compañera, esta contento de salir con vida de esta situacion y eso le ha hecho recuperar el humor.