Hydraphur, la capital administrativa del Segmentum Pacificus. Un mundo forja en toda regla, un planeta dominado por densas nubes de gases tóxicos y oscuros que cubren casi en su totalidad los cielos. El Mechanicum domina más del noventa por ciento del planeta, mientras el pequeño porcentaje restante esta controlado por el Imperio y sus burócratas.
Esa pequeña ciudad alberga todas las comandancias principales del sector. La guardia imperial, un cuartel inquisitorial, el mando central de la flota imperial y el palacio del gobernador. Entre los edificios más emblemáticos se encuentran la enorme catedral del Ministrorum, que domina las vistas de la plaza de la victoria con sus enormes torres góticas que se alzan más de cien metros de altura, llegando a perderse en los peores días de contaminación, que viene a ser la amplia mayoría de ellos. Para llegar al templo, se deben recorrer más de cuatro kilómetros de camino en línea recta, el llamado paseo del penitente, donde gigantescas estatuas de héroes del Segmentum juzgan a los fieles antes de que puedan llegar a la catedral.
En la misma plaza, a su derecha según sale uno de la catedral, se encuentra la afamada academia naval. Un reguero de gente entra y sale de ahí, oficiales de la ilustre armada, con sus galones dorados y sus uniformes azules. Cientos de habitantes del sector buscan pasar las pruebas de acceso para llegar a ser un piloto y, algún día, comandar su propio crucero. Entran cientos, pero solo unos pocos afortunados logran ascender el primer peldaño, el resto, queda relegado a personal de marinería u otras pesquisas.
Los afortunados que superan las duras pruebas de acceso (exámenes, pruebas físicas, de resistencia, etc) pasan al régimen interno de la academia, pues, a partir de ese día se acabó la pseudo libertad del aspirante y se pasará los cinco años siguientes formándose para acabar saliendo con el rango de alférez y un nuevo destino bajo el brazo.
Si alguien llegará a pensar que la vida del oficial de la armada o la de cadete es fácil y cómoda, se hallará en un tremendo error; sobre todo en la de cadete.
Horas de estudio, días de pruebas y pruebas, exámenes médicos, simulaciones de torturas y supervivencia en ambientes hostiles… y así, un sinfín de pruebas internas que van cribando poco a poco la promoción hasta ir dejando a los únicos capaces de superarla.
Sin embargo, a veces, la realidad llama a la puerta de la academia…
La promoción 145.41A aún no ha superado su instrucción reglada, no han pasado cinco años de academia sino tres y un cuarto. Solo hace dos meses que se han puesto a los mandos de los aparatos de vuelo, los de instrucción, unas enormes y achaparradas naves, los Arvus Lighter y las han llevado desde orbita hasta el espacio puerto de la capital administrativa. Pequeñas maniobras de reentrada, giros y abandono atmosférico, han completado únicamente treinta horas de vuelo espacial, cuarenta orbital y veinte de atmosférico, sin duda insuficiente pues, cuando un piloto sale formado de la academia sale con esas horas multiplicadas por veinte; los cadetes están muy verdes, pero el señor de la guerra y sus mandos navales en la Cruzada de los Mundos de Santa Sabbat reclaman más personal después de las pérdidas sufridas en Balhaut.
De la 145.41A solo quedaban 125 aspirantes de un total de 300 que la empezaron se ven obligados a coger sus petates, uniformes y equipo para completar la instrucción en el frente, el Lord Admiral Cpah’t Augusto se dirigió a todos ellos, el día de la partida después del reparto de despachos.
¡Hoy! Es un gran día para todos vosotros; vais a tener la mayor de las suertes, acabaréis vuestra instrucción con fuego real, en misiones importantes y letales donde demostraréis de lo capaces que sois. Muchos de vosotros moriréis, pero que mayor gloria hay que morir por el Imperio, el Emperador y la armada, que mayor honor hay en defender a lo que os dio la vida y esta dorada oportunidad de pertenecer a la elite del Imperio, la armada; pues, ni los Astartes os podrán superar, que el Emperador los bendiga a todos ellos.
El discurso se alargó durante más de una hora, pero la tónica era esa, arengar a los cadetes, con dosis de funesta realidad y con claros intentos de contrarrestar la realidad con un intento de inflamar la moral. Si lo consiguió o no dependería de cada uno.
Los cadetes fueron, en su mayoría, distribuidos en grupos de cinco para formar alas de combate o de transporte, y solo a unos pocos se les dio un lugar entre las fuerzas de interceptores.
Cada quinteto estaría liderado por un instructor, el cual supervisaría a los cadetes, daría apoyo en caso necesario y velaría por ellos en la medida de lo posible, sin duda algo extraño, pero el Lord Admiral comprendía que sería una perdida de recursos, de tiempo y dinero, o eso quisieron pensar unos pocos.
Así fue como el grupo de cinco, liderados por la instructora Domochevsky partían en un pesado transporte de tropas directos hacía la 5º flota, concretamente al crucero de la clase Dictador conocido por “Tenebrae Venandi”
Nave: Tenebrae Venandi
Clase: Crucero
Modelo: Dictator
Velocidad: 5
Detección: +18
Armadura: 20
Capacidad de armas: 1 en proa, 1 a babor, 1 a estribor
Maniobrabilidad: +8
Integridad del casco: 70
Ratio de torretas: 2
Tripulación: Crack (40)
Dimensiones: 5.1 km de eslora, 0.8km de manga
Tripulación: +/- 85.000 almas + 15.000 personal de vuelo + 2000 marinos armados
Aceleración: 2.5 gravitones sostenidos
Masa: +/- 29 megatones
Equipo estándar:
Motor:
Jovian, clase 3
Motor disforme:
Strelov 2
Campo Geller:
Campo Geller
Escudos de vacío:
Multi-generador de escudo de vacío [Genera 2 escudos]
Puente de la nave:
Puente de mando y Estrategium
Sistema vital:
Modelo Vitae de soporte vital
Cuarteles de la tripulación:
Cuarteles para "gente del vacío"
Matriz augur:
R-50 Auspex multi-banda
Componentes suplementarios:
Flotilla:
Marinos:
Sección 1º
500 hombres [1 Comandante al mando, 5 capitanes, 10 tenientes, 1 sargento mayor, 20 sargentos, 50 cabos, 413 infantes]
Equipo: Rifles y pistolas láser, armadura de caparazón. Traje de vacío.
Sección 2º
500 hombres [1 Comandante al mando, 5 capitanes, 10 tenientes, 1 sargento mayor, 20 sargentos, 50 cabos, 413 infantes]
Equipo: Rifles y pistolas láser, armadura de caparazón. Traje de vacío.
Sección 3º
500 hombres [1 Comandante al mando, 5 capitanes, 10 tenientes, 1 sargento mayor, 20 sargentos, 50 cabos, 413 infantes]
Equipo: Rifles y pistolas láser, armadura de caparazón.
Sección 4º
500 hombres [1 Comandante al mando, 5 capitanes, 10 tenientes, 1 sargento mayor, 20 sargentos, 50 cabos, 413 infantes]
Equipo: Rifles y pistolas láser, armadura de caparazón.
Emblema:
La Cruzada de los mundos de Sabbat
Los mundos de Sabbat, una serie de sistemas en lo más extremo del Segmentum Pacificus, una serie de mundos que vieron nacer a una de las mayores y más veneradas santas del sector, Sabbat. Hace siglos se perdió toda esta región por las fuerzas heréticas, pero fue en el 755. M41 cuando los altos señores de Terra, en su sabiduría, destinaron recursos para lanzar la cruzada tras la influencia de un popular general llamado Slaydo.
Slaydo inició la cruzada con el titulo de señor de la guerra con un objetivo claro, una estrategia definida y unos pasos sangrientos a seguir que lo llevarían hasta Balhaut, el mundo que consideraba que sería la piedra de toque para obtener la victoria total en los mundos de Sabbat. La sucesión de campañas y misiones se fue dando, se podían contar por docenas de operaciones de todo tipo. Asaltos, rescates, abastecimientos, conquistas y repliegues, una miriada de objetivos que cumplir y unas fechas previstas que se veían obligadas a dilatarse a unos niveles que Slaydo no estaba dispuesto a aceptar.
De sistema en sistema, Slaydo, liderando en persona la primera linea de batalla de la fuerza principal, se granjeó el número suficiente de victorias donde las operaciones que más destacaron fueron:
Y fue en esta, en la ultima gran batalla, en la capital, a las puertas, donde Slaydo murió a manos de uno de sus mayores rivales, el arconte Nadzybar. Slaydo lideró la carga final contra las puertas del palacio de la oligarquía, y fue ahí donde se dio el tremendo duelo a muerte, en el que el general imperial, logró reponerse a dos heridas letales para poder asestarle el golpe definitivo y mortal a Nadzybar.
Slaydo fue llorado por todos, y el sucesor al puesto del señor de la guerra estaba claro para los señores de Terra, pero estos no previeron que Slaydo, sabedor de que podría perecer en cualquier momento, había declarado a su sucesor. Mientras todos esperaban que fuera el Lord General Echtor Dravere, Slaydo había elegido a Macaroth.
Tras esa costosa batalla, la cruzada continuó bajo el liderazgo de su nuevo líder, Macaroth. Los refuerzos llegaron y se refundaron nuevos regimientos, otros mundos mandaron más y la guerra eterna continuó hacía delante.
Ahora corre el el 768.M41 y las fuerzas avanzan al frente, concretamente a Fortis Binary.