Esta es la distribucion de los 50 metros cuadrados en los que vives.
En camiseta y calzoncillos, Guzmán pasa la tarde tirado de mala manera en el sofá de la sala, sin hacer mucho caso de la tele, que permanece encendida a bajo volumen en segundo plano.
Su mala conciencia le hace servirse solo dos dedos más de Southern Confort en su aportillado y rara vez lavado vaso de duralex, en cuyo fondo hay restos resecos de Bourbon y de vino tinto Don Simón que forman un curioso cocktail que no puede apreciar dado su estado de soñolienta embriaguez. Siente la cabeza como acorchada, el sudor reseco de su camiseta le mantiene casi pegado al respaldo de poliplásticpiel del sofá, pero pasa de levantarse. No tiene ánimo ni para intentarlo.
Probablemente hoy también se quedará a dormir en la sala (y mañana despertará con el cuello hecho polvo por la mala postura).
Por la mesa ves cruzar una cucaracha. Te empiezas a preguntar de donde salen tantas ultimamente. Tu gefe te manda un mensaje al movil.- Esta semana no hace falta que vengas, hay pocos transportes.
Este mes has tenido muy poco trabajo, echas cuentas por encima y tiemblas al pensar que una niña de 16 años en un burguer king cobrar mas que tu.
La cucaracha y el mensaje del jefe se cruzan en mi embotada mente, entremezclándose cual repugnante cocktail. Farfullo un lastimoso juramento incomprensible y me acomodo en el sofá.
La inconsciencia terminará por alcanzarme antes o después.
Al menos eso espero.
Quedas adormilado. Se hace de noche y comienza a llover.
El sonido de la lluvia es relajante hasta que notas algo humedo en tu cara. Te despiertas y descubres una gotera enorme sobre tu cabeza.
Algo de la escayola del techo se desprende dejando un bonito escorchon....
Hago el mínimo esfuerzo necesario para que deje de caerme agua en la cabeza (girarme, cambiar de lado, ponerme a dormir en el suelo, ...), y sigo durmiendo tan ricamente.