Partida Rol por web

Los últimos segundos han sido frenéticos, y ahora que tu sistema nervioso está volviendo a la normalidad, una leve sensación de mareo y náuseas de dificulta las acciones.

Rebuscar en cadáveres nunca es agradable, ni siquiera siendo nazis: hace sentirse a uno como un saqueador de los que antaño recorrían los campos de batalla de Europa, despojando a los muertos de cuanto fuese de valor para sacar unas monedas por ello; pero estamos en guerra, y el sentido de lo practico debe primar sobre otras consideraciones.

-Gerald, ¿llevas un revolver? Si es así, deberías quedarte un Mauser y un cargador, y yo lo mismo; solo con armas cortas no iremos demasiado lejos. Alguno de vosotros, si es especialmente bueno con primeros auxilios, debería quedarse con las Vendas y la Morfina; la granada, para uno que lleve Sten. Lo demás... yo cojo una cantimplora y el tabaco. El resto de cosas, no dejéis nada útil, que necesitamos de todo.

...rebusco y algo no cuadra: todos los soldados deben llevar una chapa de aluminio al cuello, con su identificación.., además de sus documentos, lo que sería la cartilla militar. Pero estos no llevan nada que les identifique, ni siquiera a que tipo de unidad pertenecen.. es muy extraño.

-Bien, ahora que estamos juntos y parece que los alemanes tendrán la cortesía de dejarnos un poco tranquilos, podemos hablar un momento...

.... saco del bolsillo superior derecho de mi camisola Denison el mapa plegado de la zona; no es muy detallado ni tampoco contiene información que pueda servir al enemigo, pero vale para ponernos en situación en estos momentos...

... señalo la que parece que es nuestra ubicación; arriba, en los tres círculos que marcan las zonas de asalto de la División, justo al oeste de Arnhem.

-Tenemos tres opciones: podemos intentar ir directos al este, a Arnhem, a buscar nuestra Unidad. Podemos ir al norte, donde cayó el avión y ver si hay supervivientes, e intentar recuperar equipo que sea útil, para nosotros y para el Batallón. Y tercero, tampoco podemos olvidarnos de estos tipos, tienen que venir de un sitio cercano hacia el sur-sureste.

-..Es raro, porque solo dos llevaban armas, así que los otros dos llevaban entonces los perros... No se a vosotros, pero a mí me parecen guardianes de algo. Tal vez esté equivocado, pero me parece que con la cagada que han tenido los de Inteligencia, que decían que por aquí no habría resistencia organizada (señalo con la cabeza la zona de donde proviene el "fondo musical" de la batalla), debe haber más unidades alemanas de las que parecía, y habría que identificar que hay por allí para informar y que el mando esté avisado de si es un riesgo para la División.

... les miro a la cara esperando opiniones; aunque hay un novato, a todos nos han entrenado en una forma de pensar distinta al del resto de unidades, a excepción de los Commandos: Iniciativa y autonomía, capacidad de pensar por nosotros mismos y tomar decisiones en bien de la Misión; son señas propias de las tropas aerotransportadas, y en ese sentido, espero puntos de vista antes de tomar una decisión.

-Muy bien, chicos. Ya oyeron a Carradhie, me quedo con la granada de mano y una cantimplora- Comenté mientras tomaba el par de objetos -Descuiden, si necesitaran agua, me la piden. Con respecto a las vendas y la morfina, considero que el Cabo aquí debería hacerse cargo, a menos que Tays tenga algo de conocimiento. Lo haría yo, pero desearían estar muertos antes que yo los atienda- Un chiste algo crudo, pero no dejaba de ser verdad, al fin y al cabo, lo poco de primeros auxilios que sabía era de la instrucción básica antes de la guerra y nunca presté realmente atención, como ninguno de mis compañeros.

-Por cierto, David; sigo creyendo que es nuestro deber al menos corroborar que no hayan sobrevivientes en nuestro avión derribado. De paso podríamos encontrar más cargadores para las Sten antes de realmente dirigirnos a buscar esa base que dices-

Todo paso a paso, en el momento justo, recordaba las palabras de mi abuela en mi mente. Al fin y al cabo el diagnóstico del sargento era certero, había algo raro en esta patrulla. Sumado al temblor que había sentido pero que ni me atrevía a preguntarle al resto porque no me creyeran loco, pues algo había omitido Inteligencia sobre este sector, o algo nos quisieron ocultar. Finalmente, tampoco evitaría un enfrentamiento contra los alemanes, sea en el avión, en el bosque o en Arnhem, estábamos allí para liberar a Europa.

Eso, o quizás siga siendo bruto e ingenuo.

-Coincido en que deberíamos registrar primero el avión- digo mientras me guardo la cantimplora que queda y una ración de comida. -Primero porque podría haber más supervivientes y segundo por la munición. Con un par de “encuentros” como el anterior, yo al menos me quedaré sin balas, y por lo que veo Harris también. Y visto lo visto, seguramente tengamos más que un par de “encuentros”.

-En cuanto al equipo de primeros auxilios… preferiría no ser yo quien lo llevase, la verdad. Si es cuestión de vida o muerte supongo que me las apañaría para poner un vendaje, pero con la morfina definitivamente no me atrevo, no sé calcular la dosis exacta y seguramente haga mejor trabajo que las balas de los alemanes.

-Trae acá, Dwain, yo me encargaré de ese botiquín, aunque no tenga ni idea de qué hacer con él -dijo el cabo Gerald con una sonrisa forzada. Parecía intentar un tono desenfadado, pero estaba pálido y no tenía buena cara.* También se echó al hombro el máuser y cargó la poca munición disponible.

Cuando el sargento lo miró buscando su opinión, asintió débilmente. Respaldaba la opinión de Harris y Tays: localizar el avión y encontarse con su unidad, o lo que quedara de ella, parecía lo más sensato. Se quedó mirando el paquete de tabaco que Carradhie se había agenciado, pero no era momento de fumar, así que de nada servía pedir un cigarrillo.

Se irguió con aire fatigado y se santiguó, sin grandes aspavientos pero sin ocultarlo. Casi todos sus compañeros sabían que era católico, algo poco frecuente entre sus compatriotas, pero menos mal visto que algunas dácadas atrás. Aguardó órdenes precisas de marcha del sargento apoyado ligeramente en su nuevo rifle.

Asiento al oir las palabras del resto; todos opinamos en el mismo sentido; primero hay que ver si hay supervivientes del avión estrellado (ojalá el piloto haya podido hacerse con los mandos y no nos encontremos con el peor escenario posible). En cuanto a los alemanes que dejamos al sur... no me cuadra algo en como van uniformados, pero habrá que dejarlo en segundo plano, dependiendo siempre de lo que nos encontremos al llegar al lugar del accidente.

Tengo otro factor en cuenta: estamos separados de nuestra unidad: nuestra misión primaria es el puente de Arnhem: tomar ambos extremos y esperar a que lleguen los chicos del XXX Cuerpo de Ejército, de modo que lo atraviesen, y creen una cabeza de puente en el Rhin, para poder, a partir de ahí, pensar en entrar en el corazón de Alemania y acabar con esta condenada guerra. Pero, al estar lejos del puente, nuestra misión cambia sensiblemente: si no podemos participar en la toma y defensa del mismo, al menos tenemos que consegir que los alemanes no se dirijan a él para interferir con las operaciones de la División. En ese sentido, cuanto hagamos, que haga daño a los jerries, ayudará a los nuestros de una u otra manera.

- Bien, muchachos; entonces, recogemos y nos movemos hacia el norte; en una hora o menos deberíamos estar allí. Dejamos el paracaídas ahí mismo, que nos podrá servir de referencia si volvemos a ver de donde venían estos cuatro y sus perros. En cuanto a ellos... los tapamos con hojarrasca para que no sean demasiado visibles; afortunadamente, material para ello no falta.

-... Avanzamos en fila: Harris, delante, sin prisa, que no queremos más sorpresas; Tays, la segunda Sten, detrás suyo; yo tercero con el primer Máuser, con ojo a los flancos; cierra Gerald, con el otro Máuser y el "botiquín". No importa que tardemos, importa que lleguemos sin sustos. Cinco metros entre cada hombre y en silencio.

Compruebo que el peine con 5 balas está bien insertado en el fusil, y que la primera bala está lista para salir cuando lo necesite; no es un Enfield, pero peor es nada; al menos, aunque en los bosques los combates son a corta distancia, tengo un arma más precisa que la pistola, sin olvidar que en caso de llegar al cuerpo a cuerpo, la culata es un arma formidable.