Después de unos cuantos minutos persiguiendo el rastro de alcohol, finalmente se dirige a una zona residencial más tranquila. Apenas hay gente por la calle y la mayor parte de los edificios son viviendas y tiendas cerradas. Finalmente, el líquido se desvía hacia una alcantarilla y cae por ahí. Justo cuando estás considerando la idea de meterte en las alcantarillas, oyes ruidos cercanos y voces, al otro lado de un callejón que está justo enfrente de donde el alcohol ha dejado de marcar el rastro.
Jadeando, me tomo un segundo para recuperar el aliento después de que el líquido desaparezca. Cuando ya puedo continuar viviendo me dirijo hacia el edificio donde se escuchan las voces. Espero que esto no sea demasiado complicado...por lo menos tengo alcohol...
Motivo: Percepción + Alerta
Dificultad: 7
Tirada (5 dados): 7, 4, 9, 7, 7
Éxitos: 4
Oyes ruidos de vidrios rotos
- ¡Venga, date prisa! ¡Si salta la alarma tendremos tres minutos escasos antes de que apareza la policía!
- Tranquilo hombre. Total, ¿que van a hacernos? ¿Encerrarnos? ¿Matarnos? Nada de eso nos importa ya
- Nos requisarán la mercancía y habremos perdido el tiempo, así que date prisa
-Oh. Uh. ¡Uuuuuh!
Recuperada de la impresión inicial, corro a refugiarme a algún sitio oscuro y lejos de la línea de visión de los ladrones. Pues que bien, ¿No? Paso de un hombre como Howard a enfrentarme a dos ladrones nerviosos y con mucha prisa. ¿Cómo coño se supone que tengo que abordarlos?
Con el corazón en un puño, saco mi bolso y meto la mano en él. Al poco, saco la bolsita de hierbas que me dio mi padre. Tampoco es que vaya a entrar ahí sola, ¿No?
Esparzo unas cuantas por el suelo y cuando mis pequeños muertos vivientes empiezan a aparecer agradezco al cielo el olor a carroña que traen...aunque luego me arrepiento.
Vale, estoy lista. Con mi ejército improvisado emprendo la marcha hacia lo que puede ser una muerte horrible y agónica. Por eso dejo que los zombies vayan primero. Ellos ya están muertos.
Al entrar uso el truco de carisma: Centro de atención.