Partida Rol por web

A pesar de subir con relativa facilidad, el movimiento del temblor de tierra le juega una mala pasada y resbala no lograndose sujetar a la cuerda que suelta para agarrarse a otro palo, pero no acierta a cogerlo y cae. En su caida Vasco tropieza con varios palos pero cae como un fardo rompiendo 3 palos que se encontraban atravesados. Después de tropezar y caer a partes iguales Vasco da un terrible golpe en el suelo y queda inconsciente.

35, 75, 16, aunque las tiradas estan confusas, son esos los resultados de mis dados,

 mi trepar 43 +75 bonus.

Sixto emplea todas sus fuerzas y recursos para salir del pozo, a pesar que algunos palos se han roto la mayor parte de la estructura se mantiene intacta, trepa, salta, hace fuerza con piernas y brazos, todo mientras la tierra no para de temblar. El cuerpo de Vasco está en el fondo del pozo, pero Sixto se concentra en salir de allí.

Después de muchos esfuerzos Sixto toca el filo del pozo, al fín ha llegado al final. Un último esfuerzo y sale triunfante del pozo. Pero la tierra sigue temblando si sigue así un poco más el pozo no aguantará y se desplomará sobre el cuerpo de Vasco. Un rayo de lucidez te dice que es posible que aún esté con vida, aunque no le auguras que dure mucho más aún podrías intentar rescatarlo. Pero el riesgo es muy alto y puede que te juegues la vida en el rescate después de haber salido indemne del pozo. Esta es una importante decisión que has de tomar.

En todo esto estás pensando mientras miras la boca del pozo y jadeando por la escalada cuando te das la vuelta  y levantas la vista. Al menos 30 personas te miran boquiabiertas con antorchas y azadas, rastrillos, navajas, bracamante, e incluso te sorprende mucho ver alguna espada. El silencio es sepulcral, tan solo el temblor de tierra se oye en este momento. Una linea de luz ha aparecido en el horizonte, el sol está a punto de salir.

Haciendose el importante le dice a la multitud:

Traednos una soga pues hay homine con vida ahi baxo.

baja elocuencia y fracaso.

-¡Es el conde que ha salido del pozo, es un diablo, mirad como tiembla la tierra, a por él, a por él!- Clama el pueblo cuando terminas de hablar, ves a la gente enaltecida y furiosa. Miras al pozo y ves que la cuerda sigue allí, atada y colgada de la polea.

¡paisanos andais locos o qué!

acaso non sus veis que no soy conde ni nada, más al contrario acabamoslo de derribar a él et al mal suyo, et cuestonos la vida de los mis amigos.

La gente del pueblo te mira con mala cara y cada vez se les ve más cabreados, son años de aguantar maldiciones en el pueblo y están dispuestos a acabar con esto de una vez por todas. Agarran fuertes sus armas y se van acercando a tí lentamente rodeándote.

comunicacion 7. malus de -10:

53.

Ya matamos a Serpe ahin en lo baxo, no habrá más problemas ni maldiciones de ellas.

La gente no hace caso a lo que dice Sixto y lo cogen entre 5 o 6 personas del pueblo.-¡A la hoguera con él, es el conde el que habla por su boca, a la hogueraaaaa!- Lo llevan a la fuerza hasta la entrada del pueblo donde le atan las manos por la espada y lo ponen de rodillas en el suelo.-Vas a morir por todas las maldades que has hecho.- Le dicen la gente del pueblo. Sixto ve como un montón de gente del pueblo empiezan a traer ramas y comienzan a juntarlas alrededor de un poste. El pueblo entero parece que está allí.

¡Ahi baxo estan mis compañeros, xuntos matamos al señor y a su serpe gigante.!

¡Si fuera yo el señor me hubiere dexado coger tan sencillo.!

¡soy un viaxero el mi grupo et yo vinimosunos dias ha....!

tras de cir esto, calla la boca y se resigna a su suerte.

-¡Vamos ponte en pie y camina escoria! por fín libraremos a Laviana del mal que ha estado sufriendo- Te dice un lugareño acompañado de cinco o seis más. La multitud está enaltecida, incluso el joven párroco parece querer que tu destino se cumpla, ves a lo lejos como se santigua mirándote y alzando la vista al cielo.

Entre empujones te suben a una tarima de madera y te atan al poste, ves como la gente en un momento reunen un montón de leña y la colocan bajo tus pies. Una mujer se acerca con un cántaro y derrama algo viscoso que parece ser aceite en la madera, al menos será rapido y el sufrimiento menor.

El cura se dirige a la multitud, y en ese momento el temblor de tierra cesa. Aprovecha el momento el pater para hablar -¡esto es una señal divina! quemadlo en la hoguera y todo se purificará.

Unas tres antorchas prenden la leña, al principio un montón de humo blanco sube hasta tí y casi te axfisia pero una suave brisa lo aparta por un momento y puedes ver como las llamas comienzan a tomar fuerza. Lo que al principio era un pequeño foco de calor se convierte en un dolor insoportable que sube por tus piernas calcinadas, crees que vas a perder el conocimiento....

Pero algo sucede en ese momento, una luz resplandeciente aparece justo en el medio de la multitud que se aparta asombrada aunque ninguno huye, pués la luz al mismo tiempo de brillante es relajante y fresca a la vista y un soplo de vitalidad parece recorrer a todos los presentes. Dos figuras destancan en el interior de esa inmensa luminosidad que poco a poco va apagándose. Una de las figuras, una mujer joven que reconoces al instante pués se trata de la ayalga que visteis en el sueño, y en la cueva avisándoos de los peligros que tuvisteis que enfrentar. La ayalga mira a su acompañante, un joven alto, rubio y totalmente desnudo con dos grandes alas en su espalda, girándose aletea sus alas y con solo dos sacudidas apaga el fuego de la pira.

-Este es el arcangel Anael que ha accedido a venir conmigo como recompensa por haber sido ayalga del conde durante tanto tiempo, combatiendo contra él desde dentro arriesgando mi propia inmortalidad. Ha venido para liberar a este joven pués iba a ser quemado en la hoguera injustamente, pués él no es el conde. El os libró del conde, junto con la ayuda de sus amigos que perdieron la vida en el intento. Dos de ellos han quedado en el fondo, y es vuestra obligación el coger sus cuerpos y darles santa sepultura en el mejor lugar que les corresponda. Y que sus nombres que fueron: Vasco Peres y Diego López sean recordados por siempre jamás en esta aldea y sus alrededores. Al igual que Mu´tamid Badawa que aunque lo considereis infiel merece su lugar en el reino de Dios y tambíen habreis de incluirlo en vuestras historias.- A esas alturas todo el pueblo estaba de rodillas con las manos en actitud de rezo.

El arcangel Anael se dirige hasta Sixto, con los pies flotando sobre el suelo, se eleva hasta donde está él y lo mira con sus grandes ojos azules y con voz sonriente, alegre le habla. -Sixto, has demostrado tu valía y has de ser recompensado- Sixto nota como se deshacen los nudos con los que estaba atado y se desploma a las maderas carbonizadas pués sus piernas quemadas no logran sostenerle. Anael acaricia sus piernas y arrastra en su caricia todo lo carbonizado dejando la piel totalmente limpia y sana. Después pone una mano sobre el cuello de Sixto, donde tiene las señales del malino. Al principio le duele pero al cabo de unos segundos Anael separa la mano y con ella una sustancia viscosa y negra que queda colgando en ella. La recoje con la ayuda de su otra mano y la encierra entra ambas. Una luz muy luminosa sale del hueco de sus dos manos y al separarlas no queda nada de la sustancia negra.

-Estás curado Sixto, ve con Dios y cuenta al mundo esto que has visto. Que la esperanza llegue a los corazones de los hombres, que sepan que se puede vencer al mal-. Dicho esto Anael coge a la muchacha en sus brazos y con un sólo aleteo asciende al menos a 30 varas de altura, al segundo aleteo todo el pueblo lo perdió de vista.

Sixto cruzó por la multitud en silencio después miró hacia atrás viendo como todo el mundo seguía de rodillas y lo poco que le faltó para morir. Se alejó en silencio pensando en las últimas palabras que el angel cruzó con él.