"Los principios de la verdad son siete: el que comprende esto perfectamente, posee la clave mágica ante la cual todas las puertas del Templo se abrirán de par en par."
Mentalismo: "El todo es mente; el universo es mental"
Debes saber joven Iniciado que en el Universo hay una sola Mente y absolutamente todo lo que existe está comprendido dentro de esa Mente.
Cada uno de nosotros es un pensamiento inmerso en este gran cuerpo mental y de esta manera se explica cómo se dan los fenómenos parapsicológicos, tales como: la transmisión de pensamientos o las premoniciones acerca del futuro. En síntesis, "Todos estamos conectados por una sola Mente"; al existir una sola Mente, como consecuencia, existe una sola Ley y ésta se manifiesta a través de los siete principios.
Es necesario que comprendas el verdadero significado de la frase "El Hombre fue hecho a imagen y semejanza de su Creador" pues esto no implica que Dios, o como gustes llamar a la Mente, tenga forma humana y mucho menos sea semejante a tal o cual raza de hombres. ¿A qué refiere entonces? puede que te preguntes. La respuesta es sencilla, refiere a que el hombre es también un creador. El hombre puede crear utilizando materiales del mundo concreto, eso es cierto, sin embargo, cualquiera sea su creación, siempre comenzará en su propia Mente. El Universo es Mental y esto significa que "cada una de las cosas que se nos manifiestan dependen de nuestro pensamiento". Para algunos, la Vida será una gran oportunidad para crecer y disfrutar; para otros, en ella sólo habrá lugar para un gran sacrificio y una continua lucha. La gran diferencia entre ellos está en su propia mente, en su manera de percibir el mundo. Nuestro "Universo Personal" depende de nuestro Pensamiento. Todo lo que ocurre siempre está reflejando alguna pauta de Pensamiento que llevamos dentro.
Haras bién en deducir que si el Universo es mental y todo depende de nuestro pensamiento, entonces tu primera tarea será aprender a "Controlar el Pensamiento". Cuando lo logres comprenderas el verdadero alcance de las palabras "Universo Personal".
El Alma o su equivalente, la Mente Inconsciente, NO razona, NO elige, NO cuestiona y SIEMPRE DICÉ "SÍ". Si eliges pensar "Mi vida es miserable", entonces la Mente Inconsciente tomará este pensamiento como una orden y se encargará de ejecutar todo lo que está a su alcance para hacer que tu vida sea... miserable. Por el contrario, puedes elegir pensar: "Tengo una vida exitosa y feliz", entonces esa mente te llevará a elegir a todas las personas y las situaciones que te harán sentir exitoso y feliz.
Como Seres Creadores, podemos ir cultivando nuevas ideas en nuestra mente inconsciente, pero primero, debemos Remover lo que está allí.
Nuestro cerebro funciona sobre la base de hábitos porque de esta manera ahorra energía. Una vez que hemos aprendido a vestirnos, ya no tenemos que volver a aprender cada mañana lo mismo. Ponernos una camisa, peinarnos, comer y demás son hábitos aprendidos en la infancia que nos ayudan a desenvolvernos en forma mecánica, ya no debemos pensar más en ello.
El Hábito es como un "mapa" en el Cerebro por donde va la energía cada vez que tenemos que repetir una función ya conocida. Cuanto más repetimos una misma tarea, el hábito se vuelve más fuerte y, por lo tanto, nos resulta más fácil ejecutarla. Es difícil, sino imposible, concebir una vida donde tuviéramos que aprender todo de nuevo cada día.
Correspondencia: "Como es arriba es abajo; como es abajo, es arriba"
Por medio de este principio comprederemos que siempre hay una cierta correspondencia entre las leyes y los fenómenos de los varios estados del ser y de la vida, y la comprensión de este principio da una clave para resolver muchos de los más obscuros problemas y paradojas de los misteriosos secretos de la Naturaleza. Hay muchos planos que no conocemos, pero cuando aplicamos esta ley a ellos, mucho de lo que de otra manera nos sería incomprensible se claro a nuestra conciencia. Este principio es de aplicación universal en los diversos planos, mental, material y espiritual del Kosmos: es una ley universal.
De igual manera que el comprender los principios de la geometría habilita al hombre para medir el diámetro, órbita y movimiento de las más lejanas estrellas, mientras permanece sentado en su observatorio, así también el conocimiento del prinicpio habilita al hombre a razonar inteligentemente de lo conocido o lo desconocido; estudiando a mónada se llega a comprender al arcángel"
Vibracion: "Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra"
Este principio explica las diferencias entre las diversas manifestaciones de la materia, de la fuerza, de la mente y aún del espíritu, las que no son sino el resultado de los varios estados vibratorios
En el Universo donde vivimos no existe nada que sea totalmente firme o estable. Todo se encuentra en un continuo movimiento, una continua vibración y transformación. Cada parte del Universo tiende a transformarse en algo mejor, evoluciona hacia un nuevo nivel de existencia.
Una perfecta comprensión de este principio habilita al estudiante hermético a controlar sus propias vibraciones mentales, así como las de los demás. "El que comprenda el principio vibratorio ha alcanzado el cetro del poder".
Polaridad: "Todo es doble, todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son los mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son medias verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse"
Este principio explica que en cada cosa hay dos polos, dos aspectos, y que los "opuestos" no son, en realidad, sino los dos extremos de la misma cosa, consistiendo la diferencia, simplemente, en diversos grados entre ambos. El calor y el frío, aunque opuestos, son realmente la misma cosa, consistiendo la diferencia, simplemente, en diversos grados de aquélla. No hay nada que sea calor absoluto en realidad, indicando simplemente ambos términos, frío y calor, diversos grados de la misma cosa.
El mismo principio opera de idéntica manera en el plano mental haciendo posible cambiar o transmutar las vibraciones de odio por amor, en la propia mente y en la mente de los demás. La perfecta comprensión de este preincipio capacita para cambiar la propia polaridad, así como la de los demás, si uno se toma el tiempo y estudia lo necesario para dominar este arte.
Ritmo: "Todo fluye y refluye; todo tiene sus períodos de avance y retroceso, todo asciende y desciende; todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento a la derecha, es la misma que la de su movimiento hacia la izquierda; el ritmo es la compensación"
Todo se manifiesta en un determinado movimiento de ida y vuelta. Esta ley rige para todo; soles, mundos, animales, mente, energía, meteria.
Esta ley lo mismo se manifiesta en la creación como en la destrucción de los mundos, en el progreso como en la decadencia de las naciones, en la vida, en las cosas todas y, finalmente, en los estados mentales del hombre. Aquellos quienes han alcanzado el grado de maestría y dominan por completo este principio han descubierto ciertos métodos para escapar a sus efectos. Emplean para ello la ley mental de neutralización. No pueden anular el principio o impeder que opere, pero han aprendido a eludir sus efectos hast un cierto grado, grado que depende del domino que se tenga del principio. Saben cómo usarlo, en lugar de ser usados por él.
Existen casos en que las personas parecen haberse quedado estancadas en uno de los extremos del péndulo; se dice que esas personas se han "polarizado". La mayoría tiende a estancarse en los polos negativos: pobreza, soledad, enfermedad, y demás. Utilizando ciertas técnicas metafísicas, la persona puede llegar a despolarizarse y mejorar su vida. Para entender mejor este concepto, puedes comparar el proceso de despolarización al de nadar en el mar. Cuando se nada en contra del movimiento de las olas se requiere mucho más esfuerzo y, a veces, ni siquiera así se puede regresar a la costa. Sin embargo, cuando aprovechamos el empuje de una ola y nadamos en la misma dirección, avanzamos con más rapidez y menor esfuerzo.
El estudio del Principio del Ritmo nos permite sintonizarnos con nuestro propio movimiento pendular para aprovechar los momentos de avance. Pero, con el tiempo, el metafísico aprende a escapar completamente a este movimiento pendular. Para lograrlo, busca situarse arriba del péndulo, donde no hay movimiento de arrastre.
Causa y efecto: "Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo sucede de acuerdo a la ley; la suerte no es más que el nombre que se le da a la ley no reconocida; hay muchos planos de casualidad, pero nada escapa a la Ley"
Este principio nos revela que nada ocurre casualmente y que todo ocurre conforme a la Ley. La suerte es una palabra vana, y si bien existen muchos planos de causas y efectos, dominando los superiores a los inferiores, aun así ninguno escapa totalmente a la Ley. Los hermetistas conocen los medios y los métodos por los cuales se puede ascender más allá del plano ordinario de causas y efectos, hasta cierto grado, y alcanzando mentalmente el plano superior se convierten en causas en vez de efectos.
Los Maestros obedecen a la causalidad de los planos superiores en que se encuentran, pero prestan su colaboración para regular y regir en su propio plano.
Generación: "La generación existe por doquier; todo tiene su principio masculino y femenino; la generación se manifiesta en todos los planos"
Este principio encierra la verdad de que la generación se manifiesta en todo, estando siempre en acción los principios masculino y femenino. Esto es ferdad, no solamente en el plano físico, sino también en el mental y en el espiritual. En el mundo físico este principio se manifiesta como sexo, y en los planos superiores toma formas más elevadas, pero el principio subsiste siempre el mismo. ninguna creación físca, mental o espiritual, es posible sin este principio. La comprensión del mismo ilumina muchos de los problemas que tanto han confundido la mente de los hombres. Este principio creador obra siempre en el sentido de "generar", "regenerar" y "crear". Cada ser contiene en si mismo los elementos de este principio. Si deseáis conocer la filosofía de la creación, generación y regeneración mental y espiritual, debéis estudiar este principio hermético, pues él contiene la soluciòn de muchos de los misterios de la vida.
Mucho más puede decirse sobre estos siete principios inalterables y fundamentales, resulta obvio para la mente despierta que estas palabras son meramente introductorias, mas no seré yo quien rebele a ustedes los secretos herméticos, pues poco sentido tendría que lo hiciera.
El camino a la sabiduría absoluta no es uno y no puede alcanzarse sino se lo experimenta, sino se lo comprende con la trinidad que conforman el Ser, es decir con el cuerpo, la mente y el espíritu. Cada uno de ustedes, jóvenes iniciados, deberá recorrer su propia senda, afrontar sus demonios y sortear los peligros que el camino elegido les imponga. Quizás no les alcancen cien vidas para lograrlo, pero deben estar seguros que la recompensa lo vale.
Dominios
Todos lo que nos rodea, seres vivos, minerales, materia inorgánica, etc., posee energía. Cuando esta energía manifiesta voluntad es denominada espíritu, el espíritu motiva a los entes a un aprendizaje continuo, más largo, difícil y quizás traumático en algunos casos, más rápido, sencillo y divertido en otros. Esto depende a veces de las necesidades del espíritu, que no siempre son las mismas que las del ente, y de la predisposición del ser a realizar este viaje místico.
Cuando un ser logra tener la evolución suficiente como para comprender la existencia del espíritu y sus necesidades, aprende también que éste es su esencia, él mismo y es ahí cuando comienzan a aparecer los dominios.
Los dominios no son, entonces otra cosa que la interacción del ser con el espíritu. La canalización de esta energía comienza manifestándose involuntariamente y de formas muy diversas generalmente en estados mentales donde la persona se encuentra sobresaturada, estresada o irritada. Esta especie de estado de ceguera mental genera un puente o vinculo entre el espíritu y la materia y es allí cuando el ser manifiesta su verdadero poder.
De manera voluntaria puede llegar uno a lograr este vínculo mediante la meditación y la constante exploración del ser. Cuanto mas conciente es el ser de sus capacidades y limitaciones tanto físicas como mentales, mas se acerca al espíritu, porque en él residen sus verdaderas habilidades.
Esta unión voluntaria entre espíritu y materia es mucho más difícil de lograr pero al ser producida de manera consiente su control es mucho mayor y “voluntario”. Aquel que sólo toma contacto con su soplo en situaciones extremas llega a conocer una mínima porción de las capacidades de este y generalmente nunca adquiere un control consiente de las mismas.
El espíritu protege al ser ya que los dos son una misma entidad, el ser le permite al “alma” anclarse al plano para de esta manera realizar su viaje terreno. Es por eso que cuando nuestro ser se encuentra en peligro, el astro se manifiesta para defenderlo. Estas manifestaciones son generalmente destructivas ya que el único objetivo es acabar con la amenaza que pone en riego la vida del ser. Si cuando esto sucede la entelequia toma conciencia de la “sobrenaturalidad” del suceso, puede llegar a descubrir que es lo que sucede realmente y tomar control, o mejor dicho, concienciar al espíritu.
Leyes místicas
Algunas escuelas místicas u órdenes exotéricas crearon estas leyes para facilitar a sus iniciados la interpretación de los principios, muchas de estas, luego de transcurridos cientos de milenios olvidaron por completo la existencia de los principios y transformaron las leyes en escuelas, naciendo así, las primeras órdenes mágicas.
Encantamiento
El arte de encantar objetos no es otra cosa que la habilidad para transmitirle parte de la energía que un espíritu posee a la materia. Las famosas espadas mágicas como la poderosa Excalibur del rey Arturo o la mítica Tizona del Cid Campeador son un ejemplo claro de esta pericia.
Para que un objeto que está encantado manifieste su oculto poder, el usuario debe empatizar con él, ya que cuando un soplo trasmite su fuerza también comunica sus intenciones, de ahí la aparición de objetos Benditos o Malditos. Estos estados en la materia, no hacen más que manifestar los “deseos” del espíritu que magnetizó la sustancia.
Cuando el ser toma contacto con un objeto encantado experimenta sensaciones, puede sentirse tremendamente cómodo con él, como si le hubiese pertenecido por siempre y hasta utilizarlo con una maestría increíble desde el primer momento. También puede suceder que sienta rechazo, que la cosa le incomode y moleste hasta el punto de querer evitarlo completamente o que al intentar utilizarlo la torpeza lo invada y le impida hacerlo, otra de las sensaciones que puede sentirse es la de indiferencia, ni se siente atraído ni repulsado por el objeto, simplemente es algo que existe.
Toda esta gama de sensaciones están dadas por la empatía entre el espíritu de quien desea usar el objeto y el de quien lo imbuyó, en el primer caso las energías de ambos entes son afines brindándose entones los poderes, en el segundo las intenciones son completamente opuestas produciendo un rechazo desde el ser hacia el objeto y viceversa. Aquí el ser comprende que el objeto esconde algún poder, pero es incapaz de usarlo y en el tercer caso no existe afinidad pero tampoco oposición por lo cual el ser no identifica al objeto como encantado.
Debe tenerse cuidado en el trato con cosas que mantengan esta cualidad ya que si las energías que lo encantaron son o fueron poderosas pueden llegar a imponer su voluntad al ser, sobre todo si este no posee un vinculo fuerte con su propio espíritu, en situaciones como estas, mientras el ser posee el objeto presenta cambios en su personalidad y en lo que los espíritus de otros seres perciben, aunque esto no quiere decir que se pueda identificar fácilmente la causa de estos cambios o sensaciones. Si el poder escondido es importante, puede incluso que una vez realizado el primer contacto con el objeto, el ser no pueda o le resulte muy difícil liberarse de la voluntad del soplo que le confiriese la energía, inclusive si se alejó del objeto. Esto llega a ser tan grave en determinadas situaciones que el ser es esclavizado por la voluntad de la cosa intentando inclusive evitar separase de ella sin importar las consecuencias.
Estas energías que esclavizan voluntades son llamadas muchas veces vampíricas y son extremadamente difíciles de combatir.
Destrucción
El espíritu es, como todas las cosas, energía vibrante y como tal es capaz de afectar a otras energías (materiales o inmateriales) de manera constructiva o destructiva. De esta última forma se ocupa la Ley de Destrucción permitiendo a quien la comprenda provocar alteraciones energéticas o magnéticas que dañen a la cosa afectada.
Al ser la materia energía en un grado de condensación elevada no queda fuera del alcance de estas transformaciones, de hecho resultan mucho más sencillas de afectar aquellas sustancias o entidades cuyo nivel vibratorio es bajo en frecuencia pues es menor la resistencia que pueden ofrecer, es también oportuno aclarar que cuanto mayor sea el nivel vibratorio de aquel que utilice la ley, mayores serán también los resultados de su accionar. De lo dicho anteriormente se deduce que aquellos espíritus bajos se concentrarán más en afectar la materia densa, pues esta es más fácil de perturbar, mientras que aquellos con un poder mayor podrán ser capaces de “atacar” sustancias más sutiles como por ejemplo el periespíritu.
Esta capacidad de afectar materia tan sutil, llevó en el pasado a caer en el error de suponer que tanto espíritu como materia podían ser afectados por esta ley, sin embargo ahora sabemos que cuando el Ser es atacado energéticamente sufre sólo su materia puesto que el alma, al ser inmortal no puede ser dañada en forma alguna.
Cabe aclarar que todo lo que existe tiene una resistencia básica natural ante este tipo de magnetización que puede aumentar o disminuir de acuerdo a la voluntad del ser y al vínculo que este tenga con su espíritu.
Alteración
Es cualidad del espíritu alterar las energías que conforman la materia y por ende a esta. Con esta habilidad magnética aquel que domine la ley de la alteración, no sólo controlará la estructura molecular de los objetos en los que se focalice, sino que podrá desplazarlos a través del espacio, acelerarlos y desacelerarlos.
Mucho es el poder que confiere esta ley, dado que aquellos que dominándola hacen uso de ella pueden llegar a realizar proezas increíbles que harían palidecer incluso al gran rey Midas, uno de los primeros y más perversos maestros de la ley de alteración cuya obsesión por el oro lo llevó a cometer terribles atrocidades.
Quizás resulte obvio pero no esta de más aclarar que cuanto mas densa sea la materia que se quiera magnetizar y mas alta sea la frecuencia vibratoria del espíritu que realice la tarea, mayores serán las posibilidades de que la fascinación resulte exitosa. Es por esto que resultará más sencillo modificar la estructura de un trozo de hierro o roca que la de un pedazo de madera viva y por supuesto mucho más difícil será modificar la estructura de un animal o ser humano.
Ilusión
El espíritu puede afectar la percepción de las energías en el ser. Si un espíritu es lo suficientemente fuerte y tiene los conocimientos necesarios podrá alterar la percepción del ser, al tal punto que este se convenza verdaderamente de que lo que el espíritu esta proyectando existe realmente.
El dominio de esta escuela centra las capacidades del espíritu en la alteración de sensaciones, se invaden los sentidos del ser con el poder del soplo haciendo que el primero perciba lo que el segundo desea.
El maestro de la ley de ilusión resulta un excelente manipulador ya que con sus habilidades es capaz de torcer voluntades y hacer que los más poderosos enemigos hinquen su rodilla aterrados por sus miedos más intestinos.
Los maestros de esta ley suelen centrar sus esfuerzos en fortalecer su voluntad, pues será esta la que les permita imponer sus ilusiones sobre otros y son estos maestros quienes comprenden que finalmente todo se reducirá a un duelo de voluntades donde, como si de una batalla de gladiadores se tratase, saldrá victorioso aquel que mejor uso haga de ella.
Conjuración
A simple vista podría confundirse con la escuela de Alteración ya que de la “nada” permite a quien la utilice convocar criaturas tanto planares como extraplanares. Lo que diferencia a la Conjuración de la Alteración es que la primera además de crear físicamente al Ser, también lo dota de vida y por ende de espíritu.
Las criaturas creadas se encontrarán bajo los efectos de la fascinación (salvo que el conjurador exprese lo contrario) y permanecerán leales y al servicio de quien las convoque.
Misticismo
Esta escuela conecta al espíritu con un poder superior a él, pudiendo este ser una divinidad. El uso de estos dominios requieren que el ser medite y contacte con dicho ente, además el gasto de energía que le produce este contacto es elevado. Con este dominio el espíritu podrá invocar la “ayuda divina” pero esto no quiere decir que esta siempre intervenga, ya que la divinidad tendrá la ultima palabra en cuanto a si su ayuda es realmente necesaria.
Alquimia
Al utilizarse la energía del espíritu en los preparados alquímicos, se logran efectos potenciados y no perecederos, así como también otorga la habilidad de combinar dichas mezclas con otras escuelas logrando así pócimas con efectos múltiples. El alquimista avanzado podrá también elaborar artilugios que le permitan alterar metales, recordando la famosa transformación del plomo en oro. Este dominio requiere generalmente el uso de diversos materiales para realizar los preparados.
Elemental
Cinco son los elementos que rigen nuestro plano, siete en realidad, pero cinco aquellos a los que tenemos acceso. Luz, Agua, Fuego, Aire y Tierra son sus nombres. La escuela o ley elemental se subdivide a si misma generando una nueva escuela o ley por cada uno de los elementos. Esta división otorga al estudiante la ventaja de poder especializarse en aquel o aquellos elementos más afines con su propio espíritu.
“Aquel que posea el control de los elementos dominará también parte de la Tierra misma” reza el grabado sobre la puerta de la vieja escuela de magia perdida en algún punto de los montes Urales dentro del Reino Síbaro.
Hay quienes dicen que esta es una de las escuelas más poderosas ya que posee un increíble potencial tanto ofensivo como defensivo, por ejemplo, combinándola con la escuela alquímica permitiría generar pócimas de resistencia a cada uno de los elementos.
Animación
Para comprender el verdadero uso de esta escuela o ley, debemos entender el significado de la palabra animar. Animar quiere decir dotar de ánima, es decir, otorgarle a un ser, criatura u objeto un alma. Fue así y no de otra forma como se crearon las famosas estatuas vivientes que protegían el palacio de Nantik en el Reino de Jord fra Is o los poderosos golems de guerra utilizados por las tropas del Kaiserreich Glückselig en la valerosa gesta que sirvió para recuperar la ciudad capital del imperio.
Rige la ley de animación entonces, las bases que permiten dotar de alma a un cuerpo, sea este hecho de materia orgánica como inorgánica, se encuentre vivo o muerto. Explica esta escuela también los peligros de llevar a cabo esta práctica de manera inconsciente pues mucho es el daño que puede hacerse, sobre todo si se dota de alma a un cuerpo ya muerto. La escuela de animación explica también que los recipientes deben ser bien preparados ya que, por ejemplo, el mero hecho de animarlos no les otorgará la facultad del movimiento, para esto, el recipiente deberá poseerla con anterioridad. Es por esto que muchas veces el animador posee o debe poseer conocimientos en otras áreas más mundanas que le permitan crear recipientes adecuados a sus deseos.