Partida Rol por web

Asesino: variante del hombre lobo de la versión original. Como su propio nombre indica, ellos serán los encargados de que todos acabéis en el cementerio.

Teresa

Héctor

Laura

Vidente: Es un personaje de cuento carismático y bueno, en su mente solo cabe la idea de ayudar y ayudar. Cada noche puede saber un rol.

Mario

Ladrón: Al empezar la partida podrás elegir uno de los otros compañeros y copiarle su don hasta el fin de tus días.

Guille

Cazador: Cuando el cazador perezca, no se irá solo a la tumba... andaos con ojo con este personaje.s

Vilches

Cupido: Hasta los cuentos de hadas necesitan amor... su misión será emparejar a dos tortolitos incluso en la muerte.

Guille

Niña: Joven e inocente chiquilla, pero también curiosa dónde las haya, espiará y espiará hasta que sepa quien los quiere matar o hasta que el destino la lleve a mejor vida...

Valeria

El Condenado: Sabes que morirás... algún día llegará tu fin, si los asesinos quieren acabar con tu vida, te unirás a ellos sin dilación.

Santiago

El soñador: Cada noche tus sueños son profecía, tres nombres llegarán a tu mente mientras duermes, dos inocentes, un culpable... ¿qué harás con la información que te sea confiada?

Raquel

Medium: no es ningún secreto que algunos tienen el don de hablar con los muertos. ¿Serán sus susurros suficientes para salvarle de la perdición?

Gimeno

Curandero: Gran conocedor de las artes más antiguas de protección de los suyos. Él y sólo él será el encargado de traerlos a la vida.

Alicia

El Protector se despierta todas las noches antes que los hombres lobo, y su poder consiste en proteger a un jugador. Si ese jugador es víctima elegida por los hombres lobos, esta noche sobrevive a su asalto. El Protector, puede protegerse a sí mismo, pero no puede proteger a la misma persona ni a el mismo, dos turnos consecutivos. El Protector no tiene efecto sobre la niña si es descubierta, puede proteger a un amante mientras su otro amante fue asesinado.

Maca

La Institutriz: Te encanta jugar y no conoces el miedo, razón por la cual podrás cambiar el voto del compañero que quieras cada día

Javier

En el día en el que se suponía que no volveríais al central, las puertas y ventanas estaban tapiadas, no había forma de entrar ni salir de este. Las radios, walkies, móviles... no funcionaban, estabais solos e incomunicados, para más índole, un muerto... el guardia de seguridad yacía sin vida. Mientras todos discutíais qué pasaba y buscabais la forma de salir del mismo cupido (Guille) unía a Viches (cazador) y a Valeria (niña) en amor eterno y el ladrón (Guille) copiaba el don de su padre convirtiéndose así en cazador también.

La primera noche en el hospital fue corriendo sin muchos sobresaltos, todos buscaban comida, algún medio de comunicación con el exterior que funcionara, etc, pero sin éxito; y entre la desesperación del encierro la noche fue pasando...

El primer día despuntó en el alba, todo parecía estar tranquilo hasta que el cuerpo de Gimeno (Vidente) fue descubierto, pero este no permanecería muerto por mucho tiempo ya que el curandero (Alicia) le resucitó en seguida. Entre discusiones y acusaciones, el grupo debatió hasta que decidió que la mayoría decidió que Teresa (Asesina) debía de ser ajusticiada como tal. Pero no todos quedaron conformes con esa decisión ya que la istitutriz (Javier) hizo que Gorka, quién no se había pronunciado, votara también por la caída.

La segunda noche había llegado y el grupo había decidido que Teresa (Asesina) debía ser ajusticiada y con su muerte, la noche transcurrió sin más sobresaltos entre discusión y discusión.

Con tanta discusión el segundo día despuntaba al alba, Santiago (Condenado) resultaba asesinado y esto hacía que se uniera al grupo de Asesinos. Mientras tanto Alicia (Curandero) revivía a Teresa (Asesino) confiando en la inocencia de esta. Entre discusiones y resurreciones transcurrían unas votaciones que Javier (Institutriz) aprovechaba para cambiar el voto de Alicia.

Y entre tanto sobresalto, otro día se acaba, tres noches llevaban ya de cautiverio en el hostpital y por mayoría se decidía que Alicia (Curandero) debía pagar la resurrección de Teresa con su vida, ya que se las consideró malas a ambas.

Tras una discusión seguida de unas horas de sueño, el tercer día se levantaba con la muerte de Gimeno (Medium). Día que Javier (Institutriz) aprovechaba para cambiar el voto de Valeria condenando así a Mario, quién sería el ajusticiado al llegar la cuarta noche.

Las noches y los días transcurrían entre muertes y sobresaltos, y mientras los asesinos pensaban que con Alicia (curandero) fuera de juego, no habría más sobresaltos, se equivocaban. El cuarto día les deparó una sorpresa. Maca (Protector) quien hasta esa noche había protegido a unos y a otros sin mucho que hacer ya que finalmente no habían sido el objetivo de los asesinatos, decidió protegerse a sí misma esa noche, lo que la libró de una muerte segura. Mientras Maca agradecía a su don seguir con vida, Javier (Institutriz) cambiaba el voto de Maca, lo que llevaría a Laura a una muerte segura en la quinta noche de encierro.

Y si parecía que ya no se podían suceder más sustos, el quinto día despuntaba con no uno, sino dos cuerpos. Los enamorados Vilches y Valeria llacían juntos por amor tras el ataque de los asesinos a la pareja. En silencio Javier (Institutriz) cambiaba el voto de Raquel y el grupo condenaba a Maca a una muerte, esta vez, definitiva al llegar la sexta noche.

Pero esta sexta noche iba a ser un poco agitada. Sin saber nadie porqué (*) Alicia (Curandero) vuelve a la vida y usa su don para traer a Gimeno (Médium) antes de que sea tarde. En el fondo ella sabía que sería objetivo de los asesinos y no se equivocaba, ya que su cuerpo fue hallado en el sexto día.

La última noche comenzaba con la muerte de Raquel (Soñador), las puertas del Hospital se abrieron de golpe de par en par. Los asesinos ya se sentían victoriosos. Javier, Guille, Gimeno,  Héctor, Teresa y Santiago salían con vida del hospital, ¿porqué los asesinos perdonaron la vida de tres seres? Nadie lo sabía, lo que si quedaba claro es que el secreto de lo ocurrido moriría con ellos, ya que nadie sería nunca creído por quien no estuvo allí, y ellos lo sabían.