Partida Rol por web

La intranquilidad que aquellas blasfemias salidas de la boca de aquella bruja que acababa de perecer entre las llamas habían traido a mi alma, se desvanecieron apenas entré en el monasterio.

Escuchaba atento las disertaciones de mis hermanos sin entrar en ellas, hasta estas últimas palabras del Hermano Guillermo.

Hermanos - susurré mirando alternativamente al hermano Jorge y al hermano Guillermo - Sinceramente creo que Dios no ver correctos ninguno de los extremos, efectivamente es amor, y efectivamente es de temer,pero no es siempre ni lo uno ni lo otro, si no que es las dos a la vez.... Por un momento me quedo en silencio intentando ordenar mis pensamientos, carraspeo un poco y prosigo - en el termino medio esta la virtud, porque cuando nos vamos hacia un extremo, sea este el que sea estaremos obviando los aspectos buenos del otro.

Debemos orar, la oración nos mantendrá alejados de pensamientos pecaminosos, pero debemos recordar qe si nuestra alma es pura El Señor nos protegerá de cualquier mal - acabo diciendo mientras me alejo a orar a mi celda

El hemano Celestino tiene razon, Dios es las dos cosas y sus palabras encierran gran sabiduria, no nos preocupemos por las palabras de una blasfema desesperada ante la justicia de Dios-dicho esto me retiro hacia una comoda silla de madera y me dedico a observar a los demas hermanos

Fray Anselmo, con su gran juventud, y a pesar de ser de Castilla, un lugar donde la inquisicion y el gran numero de dominicos estaba muy presente, le costaba asimilar todo la escena de aquella anciana mujer. Aunque siempre confio en que todo ser humano se somete a un libre albedrio, Dios siempre tendria la ultima palabra en su salvacion, por eso esa mujer, quemada, por sus propias acciones, influenciada por Satanas, no debia renunciar a que Dios, en toda su omnipotencia la perdonase, pues como dicen las sagradas escrituras, el pecado de Judas, no fue traicionar a nuestro señor Jesucristo, sino suicidarse, sin esperar el perdon del altisimo. Aun asi, y sabiendo que quizas sus palabras podrian ocasionar ciertos problemas entre padres tan ancianos,  Fray Anselmo prefirio callar, y seguir escuchando atentamente las palabras de todos aquellos hombres, que al igual que el, buscaban servir a Dios, y a las gentes con toda su alma. El rostro de Anselmo denotaba una sonrisa, estaba entre hombres santos, que podrian ayudarle en su travesia por los caminos del señor, y en verdad, eso hacia muy feliz a un hombre como el, siempre en manos del señor.

Las palabras de los demas hermanos, al menos de la mayoria de ellos me llenaban de tranquilidad... Todos parecian estar ohora de acuerdo en que no existen las supersticiones cunado se trata de brjas...

Todos estamos de acuerdo , hermanos, en que existe el maligno, y que erradicar a sus seguidopres de este mundo es un deber sagrado.. Pero tambien debemos estar de seguros que nosotros como miembros del rebaño del señor no debemos temer a las palabras y a las maldiciones de los seguidores de satan, pues si creemos en el todopoderoso, niun daño podremos sufrir.... pero si dudamos aunque sea un segundo, podemos sufrir la ira de dios...

  -Bueno hermanos ya casi son Visperas, aunque la conversación sea interesante deberiamos pensar en pasar al comedor... Pronto caera el sol.- El sonriente fraile que a duras penas puede disimular los sonido que emite su siempre inconformista estómado indica a sus compañeros el camino del comedor..

  -Hermano jorge a quie toca hoy leer las escrituras mientras cenamos?

  Mirando con severidad a Guillermo

  - Querido guillermo amenudo es tan prosaico que me parece casi irrespetuoso con el ábito que viste. Dejame que intente recordar... Hum Creo que es el hermano Salvatore quien debe alimentar nuestro espiritu con las sagradas escrituras mientras nosotros alimentamos nuestro terrenal cuerpo.

  El hermano no deja de sonreir cuando mira al prácticamento analfabeto hermano Salvatore.

-Comer y llenar asi el estomago de paz.-Dijo sonriente el hermano Küfer, levantandose de una silla que habia servido de descanso a su orondo cuerpo, desde que habia llegado a la conversacion.

-Creo hoy, podriamos cenar con un buen vino, no tiene mucha edad pero si suficiente fuerza para que todos podamos apreciar su aroma. Ire a buscarlo y algo de ayuda me vendria de maravilla. Recordar que el vino ayuda al alma y satisface la digestion, toda comida sera mas tranquila todavia, con un vaso.-Dijo antes de mirar a los presentes y marchar a las bodegas, esperando que alguno de los feligreses le ayudara.

Hermano Küfer, recuerde las sagradas escrituras: templanza. Recuerde que la gula es un pecado capital. Aunque creo que una cena nos calmaria a todos, creo que su amor por el vino es casi pecaminoso- le digo esto no en tono de reproche, sino mas bien de consejo.

Sin perder la sonrisa se detuvo a contestar al consejo.
-Vamos Hermano Lucius, hasta Jesus mojaba sus labios con vino, no es gula lo que yo queria predicar. A sido un dia distinto y todos estamos agitados, una agradable cena nos ayudara a todos a conciliar mejor el sueño y no hay buena cena sin vino. No hay pecado si no hay exceso.-Le dijo con una mano apoyada en el hombro de este.

-Venir hermano, os contare la ardua tarea del embotellado mientras me ayudais a llevar al comedor algo de calma.-Termino con su mano en la espalda del feligres, dirigiendole hacia las bodegas.

Como querais, fray Küfer- le acompaño a las bodegas para conseguir el vino, pero por el camino sigo explicandole mi punto de vista- Jesus tambien bebio vino, si, pero no le profesaba ese amor que le profesaba usted, aunque cada uno es libre de hacer lo que le plazca, dentro de unos limites, y se que usted no se dejara llevar por la gula. Ademas confieso que esta noche todos necesitaremos una pequeña ayuda para dormir.

  los ojos de Guillermo se iluminan al oir la paabra "magica" vino ...

  -Esperadme hermanos que os ayude en esta vuestra tarea de elegir y traer el vino a nuestra humilde mesa...- Mientras avanza en pos de Küfer y lucis, casi trotando de alegria.... vino vino vino...

   La noche cae sobre la abadia, los monjes de dirigen a rezar Visperas, luego en silencio se van a sus celdas a descansar hasta mañana...