Partida Rol por web

El historial de Fin despierta cierto interés en Tanya, que ve en él un posible aliado. Si tan fuerte es su lealtad, deseará tanto como ella o más encontrar a una rata traidora como Adelyne. Sin embargo, es muy consciente de que el Gangrel puede ser un arma de doble filo...

- Quizá sería mejor dejar su visita como plan B si se diera el caso de necesitar ayuda... De momento, en cuanto se oculte el sol, iré a hacer un par de visitas o tres, empezando por el principio de la lista. Y estaría bien encontrar a ese hombre de tez pálida con anillo en forma de Cruz.

Impaciente pero sin perder la calma, mira el reloj del portátil. No se siente cansada, pero no puede hacer nada más hasta que se oculte el Sol.

El portatil vuelve a pitar y sale un mensaje de un mail que te ha llegado. El remitente es desconocido, pero dentro hay una nota con un dossier con informacion interesante. 

Toda ella implica al propio Arzobispo en una conspiracion para acabar con el resto de miembros prominentes del Sabbath en todo el mundo usando fragmetnos del libro de nod.

Tanya frunce el ceño. Parecía que esta misión era mucho más de lo que en principio había pensado... Y de lo que en principio había sido informada. Tenía la sensación de que todo esto le iba grande. Pero ella no había sido entrenada para pensar. Ella debía actuar. Obedecer y matar.

Cerrando el portátil y dejándolo donde lo encontró, la rubia se tumba en la cama, bocarriba, preparada para descansar... Aunque no deja de darle vueltas al asunto.

Fragmentos del libro de Nod. El mismo del que Adelyne se había llevado un fragmento. Usados para destruir al Sabbath. Aquello no tenía sentido, pero... ¿No era mucha casualidad?

Enseguida el cansancio hace mella en sus extremidades y termina rindiéndose al descanso. Mañana seguiría con su misión y se olvidaría de tonterías. No podía fiarse de ningún mensaje anónimo.

l sopor te envuelve y te lleva al sueño pero no es un sueño normal desde luego.  Tus ojos se abren pero hay luz, el sol ilumina la estancia, roza las cortinas carmesis y llega hasta el lecho cubierto de sabanas de seda.
La puerta se abre y entra una criada con dos soldados y un hombre que parece un sacerdote.

Levantate bruja, es la hora de que pagues por tus crimenes.