Partida Rol por web

EL grupo de jovenes mutantes acabo con la prueba de disparos. El que mejor lo hizo James. El encargado anoto todos los datos, y una vez acabaron el resto de pruebas todos los participantes, se reunieron los encargados y empezaron a intercambiar opiniones para anunciar a los escogidos. Al cabo de 15 minutos uno de ellos cogio un microfono inhalambrico que llevaba guardado en el bolsillo, y empezo a decir hasta un total de 8 numeros. Entre ellos resultaron seleccionados James y May.

Los seleccionados debeis de volver aqui al cabo de 2 dias y se os asignará la mision concreta. Ahora ya os poderis marchar todos.

Muchos se empezaron a retirar dejando ese lado de la nave bastante mas vacio. Los ayudantes de los encargados empezaban a recoger y reordenar el lugar. Ahora de una forma u otra se tenia mejor movimiento. Para localizar a aquel encapuchado se deberian mover.

Aqui no esta pasando mucho.-digo en mis pensamientos mientras veo a mis compañeros, James parece tener habilidad como tirador, es bueno tenerlo en cuenta, Ionella parece que tuvo mucha suerte por la expresion en su cara, aunque parece que no es el fuerte de May, lo mejor sera mantenerla fuera de situaciones en las que tenga que usar armas de fuego, Jonathan parece estar enfocado en otra cosa y aun no he podido ver como se desempeña en esta area, una lastima haberme quedado fuera de la competición.-digo algo pensativo.

Parece que esto va a tardar un poco asi que mejor me movere hacia otras salas para ver si me encuentro con algo interesante.-digo mientras me movilizo entre los conductos, tal vez me encuentre con algun arma o alguno de estos guardias a solas, si puedo noquearlo y suplantarlo podria infiltrarme y asi podria reunir mejor información.

May escuchaba lo que decían los responsables del lugar, parecía que ya tenían tiempo libre, con tranquilidad se acerca a James y dice mientras le da un par de golpecitos en el hombro:

Vaya… has peleado bastante bien chicarrón… parece que no se te da nada mal esto.

Mira el lugar unos momentos y añade:

Parece que tenemos que largarnos de aquí y volver en un par de días

Hiroshi comprueba que sus amigos aun tardarán a moverse de la zona de entrenamiento. Asi que se traslada por el conducto de ventilación hasta la otra zona, oculta hasta ahora. Por las rendijas puede ver toda una zona de ocio con zonas donde la gente toca musica, un pequeño mercadillo con paradas donde la gente vende todo tipo de productos: armas, droga, comida, tecnología, etc. Una zona con pequeños cubiculos donde se puede descansar de forma individual. Una zona de comedor donde comer. Era una pequeña ciudad en miniatura llena de jovenes los cuales se divertían y pasaban su tiempo. Habia gente de diferentes estilos que marcaban sus gustos: punkys, latin skins, heavys, gente mas normal, etc. Entre ellos se movian gente con el uniforme del clan: algunos eran guardas que vigilaban no hubiera problemas, y otros sencillamente formaban parte de la comunidad.

Desde arriba era dificil ver algo raro, aunque hay algo que te llama la atencion. Por una puerta exterior entran a la nave una chica con Kimono acompañada de dos chicos, uno con gorra y otro con el uniforme del clan.

Pasado el susto con los ninjas y la policia Samuel sigue caminando por la ciudad tranquilamente. Pensaba que no le iba a pasar nada ya, pero va sintiendo alguien lo está siguiendo. Con una mirada rapida se vuelve, pero no ve a nadie. Quien sea que fuera, es bastante cauto para ser visto.

Me levanto al escuchar a May. Le sonrío, intentando fingir, pero para que sepa que me alegra que me felicite.

 -Tu tampoco lo haces mal - le hago un high five y camino hacia el exterior, no sin antes mirar a mi alrededor, disimuladamente, buscando al encapuchado entre la multitud, pero lo más seguro es que se hubiese ido.

- Al parecer sí. Vámonos para dejar espacio a los demás - y, tras esto, me dirijo a la salida.

No puedo evitar sentirme herida en mi orgullo por el echo de que no me hallan escogido, desde luego que es algo que les haré pagar a su debido tiempo.

[Ahora que estamos más libres podemos intentar perseguir al tipo sospechoso. Yo puedo intentar colarnos a Jonathan y a mi mientras May y James preguntan por si ya pueden pasar a alguna de las zonas de las instalaciones.] Sugiero por el vinculo telepático.

Decir que Alex se encontraba nerviosa durante el viaje era, en realidad, decir bastante poco acerca de su condición y estado. Jugueteaba constantemente con sus manos y miraba hacia los callejones a través de los ventanales del vehículo en busca de cualquier persona o indicio que pudiese causarle la más mínima sospecha... Y es que no era para menos pues, si normalmente se sentía un tanto paranoica, ahora que les perseguían asesinos entrenados esa sensación de estar siendo observada por todo el mundo tan solo se acrecentaba. Por lo demás, se mantuvo silente casi todo el viaje. Observaba a Kisako y a su guardaespaldas de tanto en tanto, pero su mayor preocupación se encontraba en el camino, giros y calles que tomaba el vehículo: en parte, quería estar segura de saber no solo el camino hacia el sitio al que iban, sino más bien trazar una ruta para poder volver en caso de que las cosas fuesen aún peores de lo que ya eran. 

El viaje no pudo evitar volversele horrorosamente largo gracias a las circunstancias, aunque el bajar del taxi una vez que este se detuvo tampoco resultó mucho mejor. Con la adrenalina bajada, no pudo sino sentir el cansancio que traía a cuestas luego de todo lo ocurrido... Y el sitio en el que se encontraban ahora mismo no podía evitar causarle cierta sensación de alerta y, por primera vez en su vida, se sintió agradecida de tener el poder que poseía al notar la gran cantidad de sombras y sitios oscuros que habían por allí. Si algo iba mal, siempre podría ocultarse y listo.

-¿Quién es este... Shredder del que hablan? Pareces tenerle algo de miedo...

Comentó a Kisako un tanto curiosa, permitiéndose desviar su atención hacia ella ahora que ya había analizado algo mejor la zona.

-¡Es decir! No es mi intención meterme donde no me llaman, ni en sus vidas, solo...

Torció un poco los labios, sin saber qué decir al sentir que había metido la pata. Estaba bastante bien sin que los ojos se centrasen en ella.