El vagabundo está allí, de pie... a unos diez metros de ti, apuntándote con un arma.
Sus dientes amarillos brillan bajo la luz de la luna mientras sonrie.
Hola bonita... bonita noche para pasear, ¿no? Te dice arrastrando la voz, un poco borracho.
Arquea una ceja, deja el puño allí donde está en la misma posición... sin embargo, esboza una divertida sonrisa.
Vaya, vaya... ¿no sabe que es peligroso pasearse con una arma? Podría hacer daño a cualquiera... - sin saber porque, o seguramente sí sabía porque, pero quedaba mejor decir que no lo sabía, se sentía con unas inmensas ganas de peleas y de pagar su frustración con cualquiera... - Mire... a mí no me gusta actuar de niña inocente y sensible que es atracada y después, quizás, violada... ni me gusta, ni me pega, así que... - lo mira a los ojos - ¿qué tal si coge su apestoso culo y su arma antes de que coja yo su micropene se lo arranque y se lo haga tragar?
Observa su leve tambaleo de borracho, y Megan mueve las piernas disimuladamente para preparar alguna patada o algun movimiento rápido al mínimo gesto que él haga. Es un vagabundo, ¿y qué? Él la ha atacado primero. Es fantástico que haya encontrado un entretenimiento con que desahogarse sin siquiera buscarlo.
El vagabundo no deja de sonreir... sabe que estás muy lejos para atacarlo y además, el tiene un arma en la mano.
El viejo baja un poco su arma y lo único que puedes ver es el fogonazo del disparo... aún así, no cierras los ojos. Eres dura... muy dura...
Sientes la bala rebotar contra el suelo, pero para tu sorpresa, no escuchas el ruido típico que hace un arma al dispararse.
La bala rebota contra el asfalto y un pedazo de metralla roza tu pierna, haciendo un leve corte en ella. Sientes como la sangre comienza a resbalar por tu tobillo mientras el anciano no deja de sonreir, subiendo de nuevo el arma.
¿Por qué no ha sonado el disparo?
Arquea la otra ceja. La bala no dispara y le ha rozado una pierna, lo que significa que le ha roto el pantalón... pero eso último ya le parece bien, lo mejor de todo es que o el tio tiene la puntería en la punta del nabo o es que es gilipollas o que ha pretendido asustarla...
El resumen es que no le ha gustado nada. Ni le gusta que lo esté apuntando con una arma.
Frunce el ceño al mismo tiempo que da un salto al aire, arqueándose para ir a parar justo enfrente de él - Olé, capullo, has conseguido tocarme la moral - lo cual significaba que era algo muy malo.
En otro movimiento rápido le coge el brazo y sin importarle que el tip apeste, se gira y lo levanta para estamparlo contra el suelo, luego, evidentemente, coge la pistola de su mano.
Si me he flipado dimelo xDDDD
No has flipado, eso es lo bueno de las partidas personalizadas... puedes hacer lo que quieras... xD
Ahora pasamos a otra escena...