Partida Rol por web

La selva detectó al enjambre. 

Las abejas son polinizadoras. 

¡La selva quiere reproducirse!

Todo lo demás fue la naturaleza actuando: 

Las vainas, palmeras, enredaderas, arbustos, zarzas, toooodas las plantas que conforman a Hutan Rakasa sacaron flores, así, de repente, mágigamente.  Se abrieron, y, con la mayor delicadeza que pudieron, atrajeron a las abejas de El Enjambre.  Las atrajeron para que tomaran de su miel, y que al hacerlo se llevaran el pólen de paso entre las alforjas de quitinosa de sus patas, para irlo luego a dejar a la siguiente flor de Hutan Rakasa que visitaran.  Fue una lástima que algunas de las plantas fueran carnívoras*, ni modo, unas pocas abejas perdieran la vida en ese intento, dando nutrientes a la selva; pero bueno así es la naturaleza también. 

Todo hubiera estado normal de no ser ambas monstruos. 

¿Es polinización hará que Hutan Rakasa se pueda reproducir y crecer?  ¿Ocupará un mayor tamaño sobre la superficie de la Arena Venus?  ¿Recuperará su salud después del marchitamiento y su beber agua?  ¿Le ofrecerá una vivienda permanente para su colmena y de dos monstruos se hará uno sólo, mayor?!   No los sabemos señoras y señores espectadores.  ¡¡No lo sabemos!!

En las gradas, algunos espectadores venusinos y turistas con algo de orígen vegetal, les tapaban los ojos a sus hijos, o si venían en pareja, al contrario, estaban comenzar a entrelazar sus ramas de formas tales que quizá pronto seguridad los vendría a sacar del estadio.   -Cortinilla porque esta peli de práctica no es 18+.- 

Una vez el robot había dejado de moverse el Enjambre dirigió su atención hacia el resto de seres que había en el estadio, feromonas en el ambiente le habían atraído desde kilómetros de distancia, presagiando la presencia de una Reina a la que servir, pero no había rastro de ella.

Ahora el Enjambre se preguntaba si eran los seres que abarrotaban las gradas quienes las habían generado para atraerlo.

Pagarían por ello, claro que lo harían. En un arranque de furia billones de diminutas abejas se posaron sobre los restos metálicos de Quantonior y sincronizadamente trataron de levantarlo para lanzarlo contra los infraseres de las gradas, pero no coordinaron sus movimientos y nada sucedió.

Chemozzon vio caer al bruto mecánico antes de mirar a las gradas que los jaleaban desde las alturas, salivando su magma, puede que la selva se presentase como algo muy apetitoso peor intuía que los de allí arriba tenían que ver con su aparición en tan extraño entorno. 

Una nube de insectos se había personado en la arena y aparentemente había tenido la misma idea que ello (es difícil usar 'él' o 'ella' para referirse al marasmo burbujeante que era), peor no logró elevar al ente mecánico contra los espectadores, peor este soltó una descarga residual que le persuadió de intentarlo, Aún tras haber mordido el polvo, aquel gigante de hierro seguía siendo un fastidio.

El robot estaba muerto, o incapacitado de forma permanente, lo que a ojos del rey lagarto significaba una cosa menos de las que preocuparse.

Las abejas se arremolinaban entorno al "cadáver", lo que les resto todo interés... lo mismo que esa cosa amorfa, y apestosa, que también quería parte de los restos... pues para los carroñeros esos restos

En cuanto a la masa de plabtas con forma vagamente humanoide... estab floreciendo?? estaba arraigando allí convirtiendo aquel peculiar escenario en su hogar... pfff... decoración llamativa a ojos del reptil hiperdesarrollado

Pero algo llamó su atención

En la parte alta, sobre ellos en aquellas peculiares rocas, un sin fin de pequeños seres chillaban... algo dentro del Gran Dolgoro rugió

Tenía hambre y, dado que aquellos seres que lo rodeaban no parecían para nada apetitosos, decidió ir en busca de un piscolabis

Clavando su enormes uñas en la pared e impulsándose en su cola, la bestia escamosa se encaramó desprendiendo una buena porción del lugar en un aluvión de escombros, alzándose triunfante sobre aquel mar de seres diminutos y chillones. 

Había llegado el momento de comer!!

Se desató el caos. 

La atmósfera del estadio se saturó repentinamente de polen y el aroma de miles de flores brotando simultáneamente de Hutan Raksasa: el monstruo había empleado el agua de las tuberías para reactivar las reservas de su cuerpo y crear más tejido vegetal. Muchos de los espectadores empezaron a toser ya que sus sistemas respiratorios no estaban habituados a aquello. Hutan Raksasa atrajo sobre sí a múltiples nubes de abejas polinizadoras que, pese a todo, murieron casi al instante: ¡el agua de la arena venusiana acarreaba toxinas que sus pequeños organismos no podían tolerar!

Aquí combino el Fallo del Enjambre (consecuencia dura) con el éxito parcial de Hutan (una respuesta y causa daño). Básicamente, el enjambre pierde 1 punto de daño, gana 1 punto de furia y su siguiente movimiento inducido por la furia será Agarrar (de nuevo, es un enjambre muy sobón).

Hutan, tu respuesta es sencilla: el Enjambre puede polinizarte pero ahora mismo eres tóxico para él/ellas/lo que sea. Obviamente, para purificarte necesitarás agua pura (en gran cantidad) y luz solar en condiciones.

La muerte de miles de abejas hizo que una nube mucho más densa abandonara los restos del robot gigante justo a tiempo para evitar los pseudópodos gelatinosos de Chemozoon que fluyeron a su alrededor para asimilar lo que pudieran sacar del gladiador de acero.  Sin embargo, el Gran Dolgoro pasó a su lado como una tromba imparable empujándolo. Chemozoon se derramó sobre Quantonior y sus fluidos hicieron saltar un chispazo de una batería de armamento: la explosión resultante no provocó una gran llamarada pero chamuscaron los tejidos inconexos de la bestia mutante.

Algo similar aquí: Chemozoon ha fracasado y Gran Dolgoro ha sacado un éxito parcial. Combino ambos para que Chemozoon gane 1 punto de furia y su reacción será Zancada.

El Gran Dolgoro arremetió contra el público y empezó a devorar las pequeñas criaturas. No eran un alimento satisfactorio: sus ropas, trajes espaciales e implantes biónicos eran desagradables para su gigantesco paladar. Pero la Gran Bestia tenía hambre...

Buen uso de Zancada, por cierto, para simplemente ir a un sitio. Los Éxitos Parciales ayudan a que pasen cosas.

Me ha parecido una forma muy divertida de hacer el cafre narrando; deseando empezar. Sobre el reglamento me parece perfecto: conciso y sencillo dejando que la narración gane peso

Mejor si no os junto a todos. Esto vale para cualquier juego: cuatro jugadores atacándose unos a otros y con un sistema narrativo es COMPLICADO de gestionar.

Siempre puedes poner "pasadizos secretos" entre películas.  De esa manera, por ejemplo, sin nosotros saberlo, en el momento en que el monstruo se mete al túnel del Chunnel, eso lo transporta al Seikan, donde sale y está otro monstruo destruyendo.  Y cómo el algorítmo fílmico no puede tener más de dos monstruos por película, pues eso teletransporta a uno de los existentes a otra peli nueva, y así...

(Ah, que mal que no fui guionista en los 60s-70s...)