Tirada: 1d20(+12)
Motivo: arcano
Resultado: 12(+12)=24
'La Caja de los Diablos' es un poderoso artefacto creado por unos shamanes kóbold hace mucho tiempo. Este tribal objeto está encantado con un poderoso encantamiento de contención, el cual solo puede ejecutarse contra demonios tales como Zorith y su consorte. Detectas otro encantamiento en él lo cual fue diseñado para restringir el uso solo a su creador y a todos aquellos kóbolds de su linaje.
Aún así estos encantamientos no son perfectos, e incluso con algo de esfuerzo podrías emular el linaje kóbold, puesto que aún conservas parte del cadáver y la sangre del último descendiente: Lumbie.
se me fue la olla y no lo marque con destinatarios.
Entonces,si puedo ,agarro un poco de la sangre de lumbie,o algún miembro de Lumbie para intentar hacer que funcione el artefacto.
Es decir si existe alguna manera de hacer que funcione,la intento realizar...si tengo que hacer algún tipo de tirada la realizo.
La situación es desesperada, y aunque ambos estáis combatiendo espalda con espalda, en este momento ya habéis descubierto como será imposible vencer a este demonio. Una sensación, un pensamiento se formula en vuestras cabezas, aquel demonio esta jugando con vosotros. Vuestros cuerpos están llenos de heridas y quemazones y apenas os podéis mantener en pie.
Cuando todo parecía perdido, oísteis una leve letanía, alguien estaba hablando, musitando algo en voz baja. Mirasteis de reojo y pudisteis ver como Quarion, tenía la Caja de los Diablos en el regazo y una daga manchada de sangre en una de sus manos, mientras parecía realizar una serie de intrincados gestos en el aire. Sabíais que estaba preparando un conjuro, algo os decía que era importante, así que necesitabais darle tiempo. Os lanzasteis de nuevo a por aquel demonio, en lo que seguramente iba a ser vuestra última embestida, pues las energías se estaban acabando.
...
De repente una gran corriente de aire frío empezó a recorrer la zona, se arremolinaba en varios sitios, creando pequeños vórtices de ceniza y escombros. Aquel demonio que hasta ahora había tenido una actitud amenazadora, ahora miraba confundido hacía todos lados. Hasta que sus ojos se cruzaron con los del eladrín mago.
Un círculo de runas apareció en el suelo debajo de Zorith, unas cadenas se materializaron y ataron a sus brazos. El fuego de su cuerpo se apago y aquella criatura soltó un aterrador grito de rabia e impotencia.
- ¡¡ Nooooooooooooooooooo !! - el grito os puso los pelos de punta.
De repente, el demonio parecía hacerse mas pequeño a cada momento que pasaba y fue absorbido de repente, tras una gran ráfaga de aire mágico, de nuevo en La Caja de los Diablos.
Con la caja en mis manos y,en teoría,con el demonio en su interior,me quedo quieto y observándola.SIn dejar de pestañear,miro a mis amigos y les digo,con una sonrisa:
¡Lo conseguimos!.Ahora,si creo que deberíamos ir al poblado de los Kobolds.Me arrodillo ante el carbonizado kobold y averiguo si todavía sigue vivo.
Caigo de rodillas cansado por el esfuerzo, mis ojos abiertos sin creer lo que acaban de ver. Giro la cabeza en dirección de Quarion que está ahí pasmado con la caja. Espero un poco para retomar fuerzas.
Has logrado encerrarlo y en el momento oportuno. Quarion, nos has salvado la vida. Y la aldea.
Me quedo mirando los restos de Raspit preguntándome si aún vive, atento a sus posibles movimientos.
¿Crees que vive Quarion? Es una pena si ninguno de los kobolds sobrevive, pero tienes razón hay que llevar la caja al poblado.