Partida Rol por web

Ya no hay peligro. Además de liberar a los esclavos que han subido, hemos encontrado un alijo, y también el cadáver de Zargon, pero podría ser que regenerara, así que hay que llamar a los líderes de los cynidiceanos y traer rápidamente material combustible: madera, aceite, etc. ¡Que reúnan a su gente y organicemos una cadena humana!, informa Nyll tan rápido como puede.

Pese a que en un principio Hitmol pensaba que el "principito" quería hacer una cadena humana para empezar a subir el tesoro, luego resulta que no, que sólo quiere empezar a traer madera. Mientras tanto el mago no puede evitar fijarse en que si se acumulara demasiado humo podrían acabar intoxicados como cierta ocasión en que su maestro quemó una gran cantidad de papeles en una fogata en el interior de la academia.

- Si iniciamos un fuego grande será mejor que nos preparemos ante un posible ataque de los zargonitas que quedan con vida- comenta-. No creo que les haga mucha gracia que quememos a su dios...

Cita:

Por eso es mejor que bajen los demás y nos preparemos para lo que pueda pasar, responde Thelonius. Es lo que tienen las teomaquias.

Urik no puede evitar pensar en la cantidad de humo que se va a generar al prender a la mala bestia esa y el apestoso hedor que va a despedir . Sin duda eso va a enfurecer a los de dentro , y saldrán sin duda a defender a su Dios ... bueno Htimol lo ha intentado así que si desean morir , acompañaran a su dios en el camino a donde sea que van .

Id preparando todo , yo vigilo este pasillo , no me fio de los mansos corderos de ahí dentro . Dice escondiendose en la entrada al camino que lleva a la caverna del agua .

Jathor ,Tancred , bajemos , si la bestia esa de verdad se regenera , lo mejor sería seguir cortandola en pedacitos , y así evitarlo . Dice Reshark preparandose para bajar .

Si, será mejor trocearlo mientras buscan algo para quemarlo.

Jathor se gira hacia Tayyip, que es el que mejor puede entenderle.
Necesitamos quemar el cuerpo de Zargon. Quemar- repite para que el cynidiceano le entienda- Buscar cosas para quemar. Nosotros de mientras bajamos y lo troceamos- Jathor acompaña sus palabras con gestos.

Una vez se hace entender, o eso al menos cree, se dispone a bajar al agujero donde descansa el cuerpo de zargon.

Asintió escueto y siguió a Jathor - vayamos... esto parece que no a acabado aún

Nyll acompaña la última* marcha hacia el peligro con los versos de una antigua canción de gesta en un dialecto élfico olvidado:

Hark when the night is falling
Hear! Hear the pipes are calling,
Loudly and proudly calling,
Down thro' the glen.
There where the hills are sleeping,
Now feel the blood a-leaping,
High as the spirits of the old Cynidiceans.

El resto de cynidiceanos que quedaban allí con vosotros logran entender trtas unos minutos el mensaje de Jathor y se marchan en dirección a las demás plantas o a encontrarse con los refuerzos, mientras bajáis hacia la gruta donde deberían estar vuestros compañeros.

Uno por uno, los compañeros que espraban en la planta de arriba comienzan a bajar hasta la caverna, encontrándose allí con Hitmol y Thelonius junto al enorme cadáver del monstruo. No se ve a Urik por allí. En un extremo de la habitación hay una serie de cadenas con grilletes, todos abiertos. En la otra, un agujero en el suelo en el que brillan monedas, joyas y otros objetos amontonados. Al final de la sala, hay una gran entrada a un pasillo que desciende, oculto parcialmente por las sombras.

Urik sale de las sombras para que el resto de sus compañeros vean que se encuentra bien , pero mantiene su vigilancia y vuelve a las sombras .

Jathor iba a preguntar por Urik, cuando este sale de las sombras, para ocultarse de nuevo. El bárbaro alza el hacha por encima de su cabeza, dispuesto a comenzar a trocear a Zargon, mientras los cynidiceanos buscan algo para quemarlo. El hacha de Jathor cae con fuerza sobre el cuerpo del monstruo, para acto seguido repetir el movimiento.

¿Y bien? ¿Habéis…hummm… habéis encontrado algo más de interés?- comenta Jathor a los que bajaron anteriormente, mientras continua descargando hachazos sobre el cuerpo de zargon.

- Dinero, mucho dinero- responde Hitmol por si no fuera obvio el tesoro que han encontrado-. Ah, y nos hemos enterado de que tal vez Zargón pudiera resucitar por sí sólo. Es muy posible que sean simples leyendas pues no era más que un monstruo que fue tenido por deidad durante mucho tiempo, pero mejor no arriesgarnos a tener que combatir contra un muerto viviente de tamaña fuerza.

- Vamos a quemar su cadáver- explica finalmente el mago,- así que se agradecería cualquiera ayuda para buscar maderos y para vigilar el pasadizo. Al fondo, junto a una gran fuente que será muy bien recibida por los de ahí arriba, hay una veintena de zargonitas desarmados, pero una turba enfurecida podría ser demoledora.

Ya se están encargando los cynidiceanos de conseguir material para quemar a Zargon- responde Jathor sin dejar de lanzar hachazos contra el cuerpo del monstruo, descuartizándolo poco a poco.

En cuanto a los zargonitas… Si no tienen armas no serán un problema. Si se ponen tontos, un par de cabezas cercenadas, y seguro que se lo piensan dos veces.

Agua dices , eso seguro que es el mayor tesoro de esta piramide , los cynadeceos estaran deseosos de tomar posesión de este lago . Dice Reshark sonriendo .

Poco a poco y sin mucha ayuda de sus compañeros, el bárbaro consigue ir haciendo trozos el cadáver de Zargón. Es maloliente y repugnante la masa viscosa que sale de él, pero esto no parece importar al bárbaro. Cuando termina, sudoroso y apestando a grasa de monstruo, algo cae del techo, con un sonoro golpe. ¡Una mesa! A continuación, algunos objetos más de madera comienzan a ser arrojados desde lo alto, desde el agujero que da a la Gran Sala.

Ahí llega el combustible- comenta el bárbaro, terminando de trocear a Zargon. Coge los maderos, y ayuda a colocarlos para la quema del monstruo.