Partida Rol por web

El dracónido se desliza a un lado del kobold mientras hace una seña al ladrón para que le rodee por el otro lado.

Tira un tajo con su espada, pero falla estrepitosamente, sin embargo parece que logra atraer su atención lo suficiente como para que se centre en él.

"Avandra Bendita, cuida de este, tu siervo..." Un rapido pensamiento cruza la aguda mente del mediano como un relampago, mientras observa con bastante aprensión como el malnacido goblin hace morder el polvo a su camarada draconido... Estupefacto ante la asombrosa resistencia de goblinoide ,no se da cuenta de que la radiante fuerza de Bahamut esta descendiendo sobre el paladin, que descarga con fiereza su abrasador halito de fuego contra el estupefacto kobold... "Virgen santisima" El mediano queda boquiabierto al comprobar como unas pequeñas agujas de luz pulsante atraviesan el pecho del Diente de hierro de parte a parte, haciendo florecer en su pecho rojos capullos ensangrentados...

"Ponte detras de él" La poderosa voz del paladin ladra una instrucción que saca de su estado a Ander, que se apresura a deslizarse tras el kobold, aprovechando que esta distraido ante el despliege de poder de Shamash... "Joder, que calor hace aqui..."

El kóbold coge aire con fuerza al notar el agudo filo de Ander en su carne, pero todavía se tiene en pie.

Caradal celebra la caida del poderoso enemigo, pero el ataque no ha terminado, todavía queda un enemigo en pie. En este caso Caradal decide cambiar el tipo de ataque, parece que este enemigo será menos fuerte que veloz, y lanza un rayo ed escarcha desde su posición segura a cierta distancia.

El escudo del dragón se tambalea ante el rayo de escarcha que le lanza Cadaral, pero aún se mantiene de pie.

Jorgael avanza y, dispuesto a acabar con el combate por la vía rápida, lanza un golpe con su atarraga, que no consigue un impacto claro, pero sí de refilón.

Sólo falta Arryen.

Arryen invoca una lanza de fe contra el kóbold, pero falla por bastante.

El kóbold, que sangra abundantemente por varias heridas, mantiene su resolución de atacar a Shamash y reúne energía para atacarle, pero falla.

Fin del asalto, asalto nuevo, orden habitual.

¡¡Joder!! La malsonante expresión brota libremente de los labios del frustrado mediano... "¡¿Es que el propio Orcus protege a este malnacido?! Nuevamente en silencio, Ander, hace amagos cortos a espaldas del acorazado kobold, mientras este treata de no dejarse sorprender y de cumplir su amenaza contra Shamash... "Sabes que no tienes ojos en la espalda... tarde o temprano bajaras la guardia... te despistaras... y seras mio..." La profunda voz de Arryen resuena en las paredes de la cueva y un proyectil de fuerza divina parte como un rayo contra la salvaje criatura reptiliana... que los esquiva con cierta solvencia, aprovechando el movimiento para lanzar una ataque relampagueante contra el paladin de Bahamut, que consigue hacer que su gruesa armadura absorba todo el golpe. Rapido como una serpiente, Ander agarra al Kobold por la cabeza, y dando un seco tirón deja expuesta la garganta... con un veloz movimiento, procede a rajarle el gaznate, mientras susurra entre dientes... "Eres mio..." Una torva sonrisa y un brillo malevolo se instalan en el pacifico rostro del muchacho, mientras degolla a su victima...

Por fin cae el último enemigo, un escudo del dragón. Se hace el silencio mientras los compañeros rematan a los durmientes esbirros para asegurarse de que ninguno vuelve a la carga. Es el momento del saqueo.

El registro de los muertos arroja, aparte de su armamento y armaduras, 12 po y 44 pp.

Diente de hierro: Diente de hierro tiene un camisote de mallas y un hacha de batalla, y porta una bolsa con una llavecita plateada y un rollo de pergamino con un mensaje. El mensaje del pergamino está escrito en común. Va dirigido a Diente de hierro y está firmado por Kalarel. Dice así: “Mi espía de Refugio invernal nos sugiere que vigilemos a los visitantes de la zona. Aunque probablemente dé igual, ya que dentro de unos cuantos días, habré abierto la grieta por completo. Entonces los habitantes de Refugio invernal servirán de alimento para aquellos a los que mi señor Orcus envíe a cumplir mis órdenes.”

Cámara del tesoro: el tesoro que han aprehendido de los viajeros se encuentra desparramado por el rincón noreste de la guarida. Diente de hierro ya ha entregado gran parte del botín más valioso a Kalarel. Sin embargo, el goblin guarda a buen recaudo varias piezas de su elección en un cofre que precisa de una prueba de Hurto CD 20, o bien la llavecita que tiene en la bolsa para poder abrirlo. Dentro del cofre hay 420 po y una cota de mallas enana +1.

Cota de mallas enana +1: esta armadura mágica (valor 520 po) otorga a su portador un bonificador +1 a CA, un bonificador +1 en pruebas de Aguante y un poder diario (como acción gratuita, se recuperan los puntos de golpe si habías gastado un esfuerzo curativo).

Cita:

- Parece que esto es más grave de lo que creíamos - dice haciendo ondear el pergamino en el aire - no suena nada bien permitir que abran esa grieta, ¡hay que salvar - poniendo énfasis en esa palabra - a los habitantes de Refugio Invernal!

- Sugiero regresar y tratar de desenmascarar al espía

- Muertos vivientes, esto se pone cada vez peor, hay que pararles los pies ya, coged lo que necesitéis y andando de vuelta al pueblo - lo veis claramente impaciente - muertos vivientes, ¡los detesto! Vamos que hacéis ahí parados ¡moveos!

El paladín pasea de un lado a otro pensativo, hasta que sacude la cabeza y se pone a hablar consigo mismo - nada bien, esto no pinta nada bien, hemos de darnos prisa.

Recogéis el botín y abandonáis la caverna de los kóbold, inquietos por la información obtenida.

Extrañamente silenciosos, apuráis el paso y acabáis llegando a Refugio invernal sin más incidentes.