Partida Rol por web

Helden se acerca a Baern. Será mejor hacer caso al mago. Los cantos eligen a su portador. Ya podrás tener tu oportunidad más adelante.

Karasten le hace un ademán a su pupilo y éste comienza a conjurar tras asentir sumiso.

¡Fëawen Númenessë!

De repente, la piel de Fenestir comienza a tornarse grisácea, como si estuviera ganando una dureza sobrenatural.

Por su parte, Karasten lanza una mirada de complicidad a Helden. Acto seguido extrae un pequeño cristal de su zurrón y comienza también a conjurar:

¡Amarië Telperiën!

Un globo translúcido comienza a envolver a la batidora, pareciendo protegerla de toda magia.

Fenestir siente su cuerpo extraño , al recibir los hechizos de los magos . ¿Cuanto dura esto? es por saber si tengo que correr mucho o me puedo tomar mi tiempo .

Luego coge alguna poción de curación .. me llevare un par de estas por si las necesito

Se aproxima al pozo y se prepara para bajar a la oscuridad.

Karasten se ve medio sorprendido por la pregunta de la batidora.

Umm... Tienes más de un minuto para bajar ahí y recuperar el filo. ¡No te demores!

El anciano señala el pozo con firmeza, pero algo nervioso.

Fenestir ya sabiendo a lo que se expone se ata la cuerda y se acerca al pozo para descender ....

Ikke vær bastards og hold meg tett... dice a sus compañeros sin saber estos muy bien si es en broma o en serio .

Stumred sonrió al ver a la guerrera de cabellera rubia descender al interior del oscuro pozo. Por Moradin ! Debería haber sido él el elegido, pero el viejo Karasten afirmaba que era el filo quien elegía a su portador, y Stumred no había escuchado nada hasta el momento, ni canticos celestiales ni ningún tipo de aviso o palpito que indicara que era él. Así que no habiendo nada que rascar se afano en ayudar a su compañera sujetando la cuerda.  Muchacha! Se rápida como el viento y si te encuentras en problemas, grita que tiraremos con tanta fuerza que subirás volando! Sonriendo a la bella exploradora.

Sabrala se acercó a su compañera y le dio un beso en la frente.

- Vuelve, y vuelve entera, porque no quiero que los hombres sean mayoría, tomarían malas decisiones...

Después pronunció unas palabras cargadas de poder que afectaron a todos los presentes, incluyendo a Fennestir.

Baern sigue preocupado por la aparente necesidad de que Fenestir descienda sola pero permanece en silencio. No solo el mago ha indicado que es la única opción, sino que el líder del grupo ha refrendado la misma. Sin embargo mientras sostiene la cuerda junto con el enano no puede menos que comentar al resto de los presentes mientras trata de ignorar las palabras de la bardo

- Un minuto para que encuentre la espada y luego ascienda. Y después? Como saldremos de aquí? Deberemos subir por ese pozo? -

Tanto la loba como la osa observan con preocupación a la valiente batidora introducirse en el oscuro agujero. Luego ambas se quedan agazapadas, como escuchando, pero con aparentes ganas de saltar al interior del pozo en caso de necesidad.

Conforme Fenestir se acerca al pozo, su oscuridad parece desvanecerse. Como si estuviera siendo invitada a descender por el mismo.

La exploradora desciende con cautela y el pozo parece no ser tan profundo como debiera. Tras desaparecer su figura por completo parece alcanzar el fondo mientras al resto de vosotros se os encoge el corazón al perderla de vista.

Y allí, en el fondo, casi esperando a ser blandida, estaba esa magnífica espada. Una esbelta hoja de acero azul con una empuñadura, un pomo y un travesaño de adamantita negra rígida. Fenestir, al observarla durante un breve período de tiempo, le parece que las sombras se deslizan sobre su superficie.

El anciano vuelve a propinar una severa mirada a Baern sin dejar de atender a lo que pasaba en el pozo.

Me temo que no tengo respuesta para eso maese Barraeth - dice con tono severo -. Dudo que el pozo vuelva a ser una buena opción para salir de aquí.

El mago observa la doble puerta que da acceso a esta estancia y ésta comienza a retumbar debido probablemente a los golpes de los orcos que tratan de acceder. 

Cada golpe os provoca un respingo que os impide pensar con claridad la manera de escapar.

- Fenestir, si ahí hay escapatoria, bajaremos. De lo contrario, sube rápido, porque vamos a tener que irnos...

Fenestir acerca la mano a la espada para asirla y comprobar que no es una ilusión ... despues rápidamente mira a su alrededor por si hubiese alguan salida .

Sino ve nada tira de la cuerda para que la saquen rápidamente de allí.

Sin soltar la soga que sostiene junto con el enano, Baern menea la cabeza tras mirar la puerta y murmura - supongo que entonces deberemos salir por el camino difícil -

Whoaaaa! Exclamo el enano al ver la espada de hoja azulada. Vamos muchacha, sube! Salgamos de aquí. Mirando a Baern, exclamo: Tranquilo gigante, estas montañas no nos verán caer. Nos abriremos paso con nuestro acero. Riendo con cierta locura en sus ojos.

Fenestir emerge del pozo sin mucha dificultad, blandiendo la majestuosa espada.

Las tres espadas mágicas comienzan a vibrar y brillar. Con mayor intensidad conforme se acercan.

Otro golpe de la horda de orcos resquebraja las dobles puertas.

¡Rápido! - Grita Karasten desesperado - ¡Unámonos todos a las espadas, su magia nos salvará!

Justo en el instante en que los orcos irrumpen en la gran estancia, un torbellino aullante de fuerza mágica os envuelve y desaparecéis de ese lugar impío.

Ahora os encontráis a salvo, a unas 20 millas al sur de la entrada en la caverna. Es hora de buscar un lugar para descansar y recuperarse. Viviréis otro día más.